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Listen to Agradecimiento by Joel Colon MP3 song. Agradecimiento song from Joel Colon is available on Audio.com. The duration of song is 08:36. This high-quality MP3 track has 2116.8 kbps bitrate and was uploaded on 7 Jan 2023. Stream and download Agradecimiento by Joel Colon for free on Audio.com ā your ultimate destination for MP3 music.
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Joel Colón from Puerto Rico shares his gratitude for the prayers and support he received when his mother fell ill. He recounts the events, including her high blood sugar and confusion, and how she was eventually hospitalized. He credits the power of prayer for her slow recovery. Joel emphasizes the importance of praying for those who have not heard the Gospel, as a significant portion of the world's population remains unreached. He urges unity and prayer for the "1040 Window," an area where many people have limited access to Christianity. Joel mentions the persecution faced by Christians in North Africa and encourages continued prayer and support. He concludes by expressing his belief in God's ability to save the lost and encourages others to join in prayer for this cause. Joel thanks various individuals and ministries for their support and concludes with a greeting from San Juan, Puerto Rico. Dios te bendiga, mi nombre es Joel Colón, vivo en Puerto Rico y tambiĆ©n soy parte del grupo Unidos en la Distancia. Quiero expresar mi mĆ”s profundo agradecimiento por el apoyo en oración que me han mostrado esta semana tras la enfermedad de mi madre. Les relato que me la encontrĆ© deambulando a las 5 de la maƱana en la sala de la casa y me dijo que sentĆa que su azĆŗcar estaba alta porque estaba orinando mucho y me reclamó que yo no le habĆa puesto la insulina, asĆ que procedĆ inmediatamente a aplicarle la insulina y darle sus pastillas habituales a esa hora. Ya a las 9 y media de la maƱana escuchĆ© el grito de mi papĆ” pidiĆ©ndome ayuda y cuando fui me encontrĆ© a mi mamĆ” parada firmemente como una estatua de sal agarrando unos cables elĆ©ctricos y su mirada demostraba que ella ya no estaba presente. Se cayó al piso como una gelatina cuando la soltamos haciendo fuerzas y yo pensĆ© que ella botaba sangre por un ojo y pensĆ© que ya era el fin, que se iba a desangrar. Luego en la oscuridad me fijĆ© que lo que parecĆa sangre era en realidad una uva que se habĆa estado comiendo y la habĆa aplastado con sus pies cuando se le cayó de la boca. Mi mamĆ” se levantó con nuestra ayuda y se sentó en el sofĆ”, cruzó las piernas y me dijo, Āæte acuerdas Joel que yo te dije que tenĆa la azĆŗcar alta y que me pusieran lo malo? Esa frase me la dijo repetidamente una detrĆ”s de otra como si fuera un disco rayado y me asustĆ© cuando no podĆa pronunciar bien la palabra malo que es el nombre del medicamento para la azĆŗcar. Cuando llegó la ambulancia ya mami estaba sin responder con su mirada perdida como sonĆ”mbula, como un zombi apocalĆptico y no entendĆa ni acataba lo que le decĆan los paramĆ©dicos. En los primeros auxilios dentro de la ambulancia mami convulsó. En el hospital ya nunca mĆ”s me respondió ni me miró, ella simplemente estaba ausente y asĆ ha sido desde las navidades hasta hoy 7 de enero. Mami nunca supo que pasamos el aƱo 2023. Los fuegos artificiales de este aƱo solo fueron un espectĆ”culo descolorido y silencioso que alumbraba las nubes sin ningĆŗn Ć©xito en sacarnos una sonrisa de alegrĆa. Luego de 10 dĆas de un dormir profundo ya estĆ” moviendo la cabeza y abriendo los ojos poco a poco, pero eso no lo acredito al uso del medicamento ni al peritaje de los mĆ©dicos expertos en la sala de intensivo, yo lo acredito a la intercesión. Y doy gracias al grupo unidos en la distancia porque gente de toda LatinoamĆ©rica me ha acompaƱado en mi dolor sin conocerme, pero sucede que la Biblia ya lo habĆa dicho, que cuando un miembro del cuerpo se duele entonces todo el cuerpo se duele con Ć©l y cuando un miembro se alegra todo el cuerpo se alegra con Ć©l porque somos un mismo cuerpo y nuestra cabeza es Cristo y por eso repito ese verso que reza, somos uno, en Cristo somos uno. Si esto hicimos por una persona, ĀæcuĆ”nto mĆ”s podrĆamos lograr si unimos nuestras fuerzas para orar por los que no han escuchado el Evangelio de JesĆŗs? ĀæSabĆas que el 42% de la humanidad se considera no alcanzada? Ese 42% es aproximadamente un 3.1 billón de personas de los cuales se dice que nunca han conocido a una persona que se considere cristiana, nunca han visto una iglesia, no tienen acceso a una Biblia aunque quisieran y si pudieran serĆan encarcelados o muertos. SegĆŗn las estadĆsticas, 250.000 personas mueren diariamente en promedio. ĀæCuĆ”ntas de esas personas murieron aprovechando la oportunidad de escuchar la oferta de JesĆŗs? Pero cómo lo pudieron saber si no hubo quien les dijera y cómo puede alguien ir si primero no es enviado. JesĆŗs dijo en el Via Crucis, mujeres de JerusalĆ©n, no llorĆ©is por mĆ sino por vosotras y por vuestros hijos. Y con esto quiero decir gracias por sus oraciones por mi madre, pero ahora que tengo su atención aprovechemos este empuje para apuntar al objetivo que realmente tiene implicaciones eternas, la ventana 1040. Con tan solo las naciones India y China podemos tener un contenido de mĆ”s de la quinta parte de la población mundial. Es cierto que muchos de ellos morirĆ”n, irĆ”n al infierno por no conocer a JesĆŗs, pero tambiĆ©n es cierto que si nosotros oramos podemos hacer la diferencia para alguna persona. Cuando oramos los enfermos son sanados y JesĆŗs dijo que nosotros harĆamos cosas mayores que Ćl. AsĆ que aprovechemos esa delegación de poder, afirmemos nuestras rodillas y sostengamos el rostro en beneficio de los no alcanzados en la ventana 1040. Del norte de Ćfrica nos llegan noticias muy tristes de iglesias quemadas con sus miembros adentro, de secuestros y violaciones almanas y de hermanos que a esta hora sufren dentro de una cĆ”rcel simplemente por ser cristianos. ĀæPero acaso nuestros hermanos estĆ”n solos? De ninguna manera. Unidos en la distancia podemos hacer la diferencia orando para romper las cadenas que nos atan. Orando podemos hacer mover las murallas de la cĆ”rcel. Cuando oramos la mano de Dios se mueve y nos sorprende. ĀæSe acuerdan de cómo Pedro fue librado? Nada de eso fue casualidad o porque Pedro era mĆ”s amado por JesĆŗs. Todo eso sucedió porque los discĆpulos oraban en el aposento alto para que Dios interviniera y hasta el mismo Pedro les reclamó cuando lo confundieron con un fantasma. Les dijo Pedro, Dios envió a su Ć”ngel y se cayeron las cadenas y pasamos frente a los guardias dormidos y caminamos hasta aquĆ escoltados por el Ć”ngel. ĀæAcaso no oraban por eso? La Biblia dice que en aquel gran dĆa habrĆ” una representación de toda tribu, lengua y nación, y yo quiero ser partĆcipe de lograr que una de esas personas vino a los pies de Cristo a causa del poder de mi oración. Cuando oramos podemos impedir que toda esa gente se muera sin salvación. Algunos de ellos podrĆ”n ser rescatados, incluso los mismos maleantes que los asesinan vendrĆ”n a los pies de Cristo. Porque cuando el centurión atravesó el corazón de JesĆŗs, de seguro esa misma sangre y agua que brotó lo roció, lo redimió, lo perdonó, y ahora ese centurión tambiĆ©n fue testigo fiel del amor de JesĆŗs. Dios vino a salvar lo que se habĆa perdido y es un abogado que nunca pierde un caso. Hermanos, mantengamos nuestras manos unidas en la distancia en favor de los perdidos, en esa pequeƱa franja llamada la ventana 1040, y evitemos que mĆ”s gente se pierda para siempre. Podemos detener esa tragedia cuando oramos. Les exhorto a unir a toda LatinoamĆ©rica en una sola voz y que nuestro Padre nos escuche alto y claro diciendo, Ā”Salva al perdido! Ā”Salva al perdido! Ā”Salva al perdido! Yo creo que Dios estĆ” mĆ”s interesado que nosotros en salvar al perdido y lo puede articular mejor de lo que yo lo estoy expresando. La oración del justo puede mucho y asĆ queda demostrado cuando oramos por un enfermo y este se sana, pero tambiĆ©n nosotros podemos resultar muertos y quĆ© mejor si podemos aĆŗn evitar que se mueran en sus delitos y pecados. Estemos alerta y cubramos el uno al otro la espalda porque el enemigo nos va a atacar como grupo porque somos mĆ”s que vencedores en Cristo JesĆŗs. Doy la bienvenida a la hermana Diana de Paraguay. Ella y su esposo Pedro viven en un ministerio poderoso de evangelismo para los moribundos y los mĆ”s pobres de su región. Les recomiendo que hagan alianza con ese ministerio llamado Proyecto Nogal, tanto en oración como en finanzas, porque esto traerĆ” recompensas y gloria que disfrutaremos por la eternidad. Gracias al hermano Edgar Cruz de Colombia por darme el consuelo en la llamada telefónica y a la hermana Francisca Iguana Rojas de RepĆŗblica Dominicana y la pastora Vidalina en PerĆŗ por su apoyo, y ya son tantos nombres que se me confunden los paĆses. Bienvenida a la hermana JĆ©ssica Mariana de Brasil y su gestión evangelĆstica. Y bien especial un agradecimiento y elogio al hermano Orlando Acosta de Cuba, el cual ha logrado movilizar a gran cantidad de pastores e intercesores de orar los unos por los otros y por las misiones globales. Les saludo en el nombre del SeƱor Jesucristo desde el Ministerio Internacional Capro en alianza con Unidos en las Instancias y el Proyecto Nogal y la hermana Nelly de Oración por las Naciones. Sigamos creciendo en gracia para que cuando JesĆŗs venga nos encuentre haciendo asĆ. Este fue su hermano Joel Colón saludĆ”ndoles desde San Juan, Puerto Rico. AmĆ©n.
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