In this podcast episode, the speaker discusses the significance of the resurrection of Jesus Christ and how it should impact our daily lives. They explore the doubts and struggles that arise after Easter and emphasize that our thoughts and ways are not the same as God's. The speaker also highlights the events following Jesus' resurrection, including his appearances to the disciples and the doubts they faced. They draw parallels between the experiences of Peter and Martha and our own tendencies to doubt and question God's plans. The speaker concludes by emphasizing the importance of recognizing Christ's resurrection and surrendering our lives to Him.
Bendiciones familia, muy buenos días, hoy en Desayunando con Jesús vamos a dar un tema que creo que vale la pena tomarlo en cuenta luego de los sucesos que hemos recordado a la semana anterior de la vida, pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo. De hecho, estoy seguro de que muchos de ustedes oyeron sendos, sermones, sendas, exposiciones de pastores que guiados por el poder del Espíritu Santo entregaron la palabra de Dios hacia sus vidas. Pero no obstante todo esto, ¿qué pasa ahora que volvemos al día a día? ¿Cómo es que nuestras historias vuelven a ser las mismas después de recordar un evento que definitivamente cada año que lo recordemos debería remarcar lo que en principio fue lo que nos llevó a los pies de Cristo Jesús? Saber que nosotros no tenemos una idea certera de ni siquiera sobre nuestra existencia, peor aún de lo que son los pensamientos de Dios para nuestras vidas.
Es por esto que hoy día quiero empezar este podcast haciendo algo que creo que es interesante y que de hecho nos va a introducir al tema. Leeremos Isaías 55, el verso 6 al verso 9, donde dice, Buscad a Jehová mientras pueda ser hallado, llamadle en tanto que esté cercano. Deje limpio su camino, y el hombre iniquo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.
Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. ¿Por qué empiezo con esta parte de la Biblia? Bueno, para hablar de un tema que creo que es necesario resaltarlo, y que nos va a encaminar, y que ojalá sea un pensamiento que domine nuestra existencia, nuestro pensamiento, todos los días de nuestra vida.
Porque para empezar, vamos a ver, la resurrección de Cristo Jesús, es el evento extraordinario que es sólo en Cristo Jesús, y que por medio de esta fe, nosotros declaramos en la victoria, sobre todo lo que representa el pecado, el mundo, nuestra manera de vivir, la manera de vivir del mundo, etcétera, etcétera. Este es el evento único en Cristo Jesús. Ni Mahoma, ni Buda, ni ningún profeta, ningún ser humano, ha llegado a la estatura de Cristo Jesús.
Bien, vamos a ver un poquito qué había pasado durante este tiempo que Cristo resucitó. Y para esto vamos a ver lo que dice Lucas en Hechos, cuando él narra y dice, en el primer trateado o teófilo, hablé acerca de todas las cosas que Jesús comenzó a hacer y enseñar, hasta el día en que fue recibido arriba, después de haber dado mandamientos por el Espíritu Santo a los apóstoles que había escogido, a quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo, con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles durante 40 días, y hablándoles acerca del reino de Dios.
Esto quería enfatizar. Cristo no sólo se apareció una vez, ni dos, ni tres, se apareció durante 40 días a todos ellos. Y de esto vamos a hablar, porque definitivamente el impacto de la muerte de Cristo Jesús en sus testigos, es algo que nos lo llevó a tener dudas, a tener momentos difíciles, e incluso a sentirse como abandonados, tristes, solos, y de hecho es algo que a nosotros en el día de hoy también nos pasa. Han pasado 1990 años, y nos seguimos preguntando, ¿cuándo volverá? ¿por qué no vuelve? ¿qué pasó? ¿soy salvo? ¿no soy salvo? ¿Cristo funciona? ¿no funciona? Y tenemos pensamientos que van en este contexto, y creo que esta enseñanza nos va a ayudar a mirar lo que en principio citamos en Isaías 55, donde Dios nos dice que nuestros pensamientos no son los pensamientos de Él.
Bien, cuando van a las mujeres al sepulcro, encuentran que el sepulcro está vacío, que no hay nadie, y que todo había pasado, y no lo creían, y no sabían dónde estaba, no lo reconocen, regresan, buscan a los apóstoles, van, miran los apóstoles, ellos ven que no hay nada, y luego se presentan los ángeles a las mujeres, y les dicen por qué buscan entre los muertos al que está vivo. Luego Cristo Jesús se aparece a los que están en el camino de Maús, pero antes de esto se le aparece en el sepulcro mismo a María Magdalena, y hay un hecho que se repite, María Magdalena no lo reconoce, se les presenta al camino de Maús, y no lo reconocen, se presenta delante de los discípulos, y porque hay una aparición, pero fuerte, recién se dan cuenta de que es Cristo Jesús, y luego de esto hay algo que quiero narrar, que está en un segmento de la Biblia, que quiero hacer un hincapié, porque este personaje, que es Pedro, nos muestra todas las cosas que nosotros dentro de nuestro carácter tenemos como vaivenes, y que son un hecho para mirarlo y aprender, porque Pedro es un personaje del que debemos aprender todos, porque así somos en la vida cotidiana.
Miren bien, Pedro, el famoso Pedro, me encanta, yo me identifico mucho con él, dice en el en el libro de Mateo, en el capítulo 26, en el versículo 33 dice, entonces Pedro respondiendo le dijo, aunque todos se aparten, por causa de ti yo nunca me apartaré. Ok, primera pausa, pensamiento humano, Pedro le dice, yo nunca me apartaré, pensamiento divino, Jesús le dijo, en verdad te digo que esta misma noche antes de que el gallo cante me negarás tres veces, pensamiento humano, Pedro le dijo, aunque tenga que morir contigo jamás te negaré, todos los discípulos dijeron también lo mismo, pensamiento humano.
Pasa un poquito de tiempo, horas, digamos así, por poner un espacio de tiempo, Jesús llegó con ellos al lugar en el que se llama Getsemaní, dijo a sus discípulos, siéntense aquí, yo voy allá y oro, y tomando consigo a Pedro y a los hijos de Cebedeo, comenzó a entristecerse y angustiarse, entonces les dijo, mi alma está muy afligida hasta el punto de la muerte, quedaos aquí y velad conmigo, Jesús se fue y oró, y estando orando, regresa, vino a ellos, a los discípulos y los halló durmiendo, y dijo a Pedro, con que no pudisteis velar una hora conmigo, velad ahora para que no entréis en tentación, el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil, pensamiento divino, espíritu dispuesto, carne débil, pensamiento humano, yo voy a morir por ti y no aguanto ni una hora despierto, entonces luego apartándose nuevamente, oró por segunda vez diciendo, padre mío, si esto no puede pasar sin que yo lo beba, hágase tu voluntad, y vino otra vez y los halló otra vez dormidos, y luego por tercera vez a sí mismo, tres veces, tres veces Pedro, que dijo que iba a morir por él, en esto ya tres veces se durmió, se levantó, se durmió, y claro, llegó el momento del arresto de Jesús, y ahí sí todos estaban despiertos, pero bueno, nuevamente resalto, pensamiento humano, voy a dar la vida por ti, pasaron una hora, y en una hora estaban, no podían ni siquiera velar con Cristo, luego de esto, pasa el arresto, y claro, ya Cristo está siendo golpeado, está siendo flagelado, y dice, Pedro estaba sentado afuera en el patio, y una sirvienta se le acercó, y dijo, tú también estabas con Jesús el Galileo, pero él lo negó, delante de todos ellos, diciendo, no sé de qué hablas, cuando salió al portar, lo vio a otra sirviente, y dijo, a los que estaban allí, éste estaba con Jesús Nazareno, y otra vez él lo negó con juramento, yo no conozco a ese hombre, y un poco después se acercaron los que estaban allí, y le dijeron a Pedro, seguro que también eres uno de ellos, porque aún tu manera de hablar te descubre, entonces él comenzó a maldecir, y a jurar, yo no conozco a ese hombre, y al instante el gallo cantó, y Pedro se acordó de lo que Jesús había dicho, antes de que el gallo cante, me negarás tres veces, miren bien, en esta partecita, Pedro se enfrenta a lo que todos nos enfrentamos muchas veces, muchas veces, dentro de nuestro convivir diario, la gente nos reconoce como seguidores de Cristo, pero como no queremos pasar como radicales, aburridos, o temáticos, o fanáticos, pues muchas veces negamos, o no queremos perder nuestros ambientes, o no queremos, como quien dice, dar la vida por Cristo Jesús, y nos pasa, porque así somos devolubles, porque Cristo Jesús conocía el carácter de Pedro, le dice, mira, mejor no digas nada, porque sé que no va a ser así, Cristo sabía que Pedro se iba a dormir, pero le dijo, tú ni siquiera te voy a tomar en cuenta eso, me vas a negar tres veces, antes de que el canto del gallo se haga una vez, imaginen todas esas historias, bien, sigamos, porque esto no se va a detener hasta llegar a algo, donde es muy interesante, lo que ya había pasado, pero bien, hay un evento anterior, con los amigos de Cristo Jesús, con Lázaro, hay un evento que nos lleva a pensar, y nos lleva a reflexionar en los pensamientos humanos, y los pensamientos de Cristo Jesús, Dios, ¿cómo se desenvuelve? Bueno, vamos a ver la resurrección de Lázaro, y sabemos todos que Lázaro era hermano de Marta y María, amigos íntimos de Jesús, su mejor amigo, ¿no? Y llega la noticia de que Lázaro está enfermo, y las hermanas de Lázaro, le mandan a decir, Señor, tu querido amigo está muy enfermo, Jesús oye la noticia, la enfermedad de Lázaro no acabará en muerte, dice, al contrario, sucedió para la gloria de Dios, a fin de que el Hijo de Dios reciba gloria como resultado.
Aunque Jesús amaba a Marta, a María y a Lázaro, se quedó donde estaba dos días más, pasado ese tiempo les dijo a sus discípulos, vamos a Judea. Ojo, ¿cómo puede ser tan cruel? Su amigo, si resucitó a la suegra de Pedro, ¿cómo no va a resucitar a su amigo? En fin, o sea, levantó de la muerte a una niña que estaba muerta, y después dijo, no, déjenla que sólo está dormida y la resucitó, ¿cómo no va a hacer eso por su amigo? Pensamiento humano, pensamiento humano, pensamiento divino, la enfermedad de Lázaro no acabará en muerte, al contrario, sucedió para la gloria de Dios, a fin de que el Hijo de Dios reciba gloria como resultado.
¿Cuántas veces pensamos que no es, que por qué Dios no actúa como las maneras que nosotros pensamos que debe actuar? ¿Cómo un Dios tan bueno permite que los niños no tengan esto, y los humanos no vivan así, o no acepta al grupo LGBTI por cómo son y pobrecitos, y no acepta que las mujeres sean dueñas de su propio cuerpo? Pero todo esto sucede para la gloria de Dios. Bien, vamos a Judea, dice Cristo, les manifiesta a ellos que esto sucede para la gloria de Dios, vamos a Judea, y los discípulos se ponen diciendo, señor, Rabí, hace sólo unos días la gente de Judea trató de apedrearte, ¿irás allí de nuevo? Pensamiento humano, es decir, no seas malito, casi nos sacan a pedrados de ahí, nos van a matar, no seas así, ¿por qué otra vez? Si ya te libraste de ese problema, ¿por qué otra vez? Jesús contesta, pensamiento divino, cada día tiene 12 horas de luz, durante el día la gente puede andar segura, la gente puede ver por qué tiene la luz de este mundo, pero de noche se corre peligro de tropezar porque no hay luz, y agrega, nuestro amigo Lázaro se ha dormido, pero ahora iré a despertarlo, pensamiento divino, pensamiento humano, señor, dijeron los discípulos, si se ha dormido, pronto se pondrá mejor, no entendían, así como nosotros, Cristo dice, está dormido, esta muerte no va a ser, esto sucede para la gloria de Dios, y los apóstoles, y los que estaban con Él, entienden todo al nivel nuestro, al nivel humano, racionamiento humano, lógico, muy ínfimo, delante de lo que es la sabiduría eterna de Dios, ellos pensaron que Jesús había querido decir que Lázaro sólo estaba dormido, pero Jesús se refería a que Lázaro había muerto, entonces va y les dice claramente, Lázaro está muerto, y por el bien de ustedes, me alegro de no haber estado allí, porque ahora ustedes van a creer de verdad, vamos a verlo, ahí entienden, y aquí hay una parte donde posiblemente muchos dirán, cómo es que se alegró de que se murió su amigo, o sea, primero no lo va a salvar, segundo, se niega a curarlo, tercero, cuando va a regresar, pone en riesgo a sus amigos, porque va a regresar a un lugar donde ya los quisieron matar, y en fin, y aquí, todo el tiempo repite, me alegro por ustedes de que no hayan estado allí, porque ahora ustedes van a creer de verdad, se alegra porque va a suceder algo extraordinario, que nadie tiene en los planes, y ahí sí dicen, Tomás, el que decían el gemelo, odísimo, como en griego, les dijo a los otros, vamos nosotros y moriremos con Jesús, o sea, como quien dice, sabemos a lo que vamos, ahora sí agarremos viaje, y aquí viene el tema, nuevamente, del pensamiento humano y pensamiento divino, cuando Marta se enteró que Jesús estaba por llegar, salió a su encuentro, pero María se quedó en la casa, Marta le dijo a Jesús, para mí Marta es la versión de Pedro en mujer, Señor, si tan solo hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto, pero aún ahora, yo sé que Dios te dará todo lo que pidas, miren bien, pensamiento humano, si hubieras estado aquí, si hubieras venido, si hubieras hecho lo que yo te pedí, si hubieras atendido a mis llamados, si me hubieras atendido a mi oración, si me hubieras bendecido en ese tiempo, si hubiera pasado las cosas como yo te dije que las hicieras, si hubiéramos estado bien, cuántas veces hemos estado en esa posición, lo mismo que Pedro, no, no, tranquilo, yo voy a estar contigo hasta la muerte, horas más tarde se durmió, lo negó, los otros ni siquiera lo reconocieron, estaban tan metidos en su dolor que no lo habían visto, se les presenta nuevamente alguien con quien habían convivido, muchos de ellos, mínimo tres años, no lo reconocieron, pensamientos humanos, bueno, entonces Cristo le dice, tu hermano resucitará, pensamiento divino, pensamiento humano, es cierto, respondió Marta, resucitará cuando resuciten todos en el día final, y esto sigue, y el diálogo continúa, llega Jesús, dice, cuando Jesús los vio llorando y vio a la gente lamentándose con ella, se enojó en su interior y se conmovió profundamente, es decir, ya va, ve donde está Lázaro, pero Cristo estaba molesto, no estaba conforme, no podía creer que ninguno de ellos hasta ese nivel no haya visto, habían visto prodigios y milagros, cosas extraordinarias, pero su fe no estaba conforme a lo que era el propósito de lo que vino Cristo a hacer, entonces, uniendo todos estos hechos, vivieron con Él, convivieron con Él, cómo iban a creer que resucitó, si ni siquiera viendo lo que hacía todos los días, no vieron, y nosotros volvemos a insistir en nuestras formas de pensar, de que podemos tener una comunicación con Dios en la cual nosotros tenemos mejores ideas que Él, nosotros tenemos mejores pensamientos que Él, o por último, si queremos hacernos un poquito los humildes, decir que entendemos el propósito de Dios para nuestras vidas, no tenemos ni la más pálida idea, esa es la verdad, esto es el día a día que llevamos por dentro, y esto es de lo que debemos estar felices, porque Cristo, Jesús, Dios, el Espíritu Santo tienen el control, que no lo entendamos no es relevante para el propósito de Cristo Jesús, porque Él sabía que Pedro lo iba a traicionar, que se iba a dormir, que Marta le iba a reclamar por Lázaro, que los discípulos ni siquiera entendieron de lo que era la propuesta de regresar a resucitar a Lázaro, y en fin, no lo reconocieron cuando resucitó, pero hay una parte hermosa cuando sucede, y que creo que es muy muy linda de verla, en el momento en que Cristo Jesús se aparece a sus discípulos, a siete de ellos, y creo que esta es la parte más bonita que me ha tocado ver, porque creo que es interesante mirar cómo Jesús, a pesar de todas estas cosas, nos sigue amando, nos sigue aceptando, nos sigue reorgullendo, porque el propósito es salvarnos, esto es dado por gracia, pero hay algo que es importantísimo, si nosotros, como ellos, podemos convivir con Cristo a diario, podemos mirar cómo es Cristo Jesús de maravilloso, podemos interactuar con Él, pero si no lo vemos como lo que es Él hoy, Cristo vivo, resucitado, no servirá de nada, porque ese hecho, ese hecho, es el que marca toda la diferencia, es donde Dios muestra quién es Cristo Jesús, quién venció a la muerte, quién es dueño de todo, a quién le debemos la vida.
El hecho de la resurrección marca que sin Él, la vida es simplemente un código moral vacío, que nos envanece, haciéndonos pensar que somos justos delante de Dios, y que nos hace sentir buenos y mejores que otros, que no son como nosotros. Nos hace sentir que cumplimos con todo para ser calificados como buenos. Con esto estoy diciendo que la moral no es buena, claro que es buena, pero la moral sin Cristo, sin ver a un Cristo vivo, no significa nada.
El amor sin tener a Cristo vivo, no significa nada. La justicia, sin tener a Cristo vivo, no vale nada. La misericordia, sin tener a Cristo vivo, no pueden hacer nada en nosotros. Esta es la diferencia. Cristo preparó a todos, para que conforme vayan viendo, vayan creyendo, porque lo principal que deben creer, es su resurrección. Y es ahí donde podemos entender cómo es que ellos pudieron lograr entender este valioso acto de resurrección, cuando miraron a Cristo cada cara, y de ahí en adelante, ya nada tenía el mismo valor.
Lo único que podían hacer, es entregar su vida entera, para servir a aquel que los amó hasta la muerte, y muerte de cruz. Esto es lo que quería hablar el día de hoy. Mañana tocaremos un tema muy lindo, que es el desayuno con Jesús. Y es de ahí donde nace este programa, el nombre de este programa, Desayunando con Jesús. Mañana veremos cómo nació y a qué nos referimos. Bendiciones, hasta el día de mañana. Subtítulos realizados por la comunidad de Amara.org