entrevista Pepe

Pepe, a retired worker for an NGO, discusses his work with children refugees from Jaragüez. For 20 years, he has been involved in a program called "Vacaciones en Paz," which brings children to Spain for the summer. Pepe also mentions the challenges faced by refugees in the camps, such as extreme temperatures and lack of basic amenities. He emphasizes the importance of the program in providing these children with medical care and a chance to experience a different way of life. Pepe encourages people to get involved by hosting a child during the summer. ¡Hola! Somos los niños del CISAREN de Tejada, de Cuarto y nos llamamos Sara, Noelia, Basma y Catalín, y estamos aquí con un invitado muy especial, que se llama Pepe, y trabaja en una ONG. ¿Nos puedes contar a qué te dedicar? ¡Hola! Encantado de estar con vosotros. En estos momentos en mi vida laboral ha pasado una mejor alternativa y estoy jubilado, pero desde hace 20 años trabajo en una ONG que funciona a base de... ...lo que nos ocupamos es de trabajar con personas, sobre todo niños refugiados a Jaragüez. Desde hace 20 años empezamos a acoger en un programa que se llama Vacaciones en Paz a niños y niñas de vuestra edad, más o menos, y durante la acogida era durante los dos meses de verano. Y desde hace unos 10-12 años me encargo también de la organización y la gestión de este programa y en estos momentos, desde hace 5-6 años, soy el presidente de la Asociación Riojana de Amigos del Sahara. ¿Por qué empezaste a trabajar ahí? Bueno, la cosa es muy simple. Un día vimos un cartel en el cual anunciaban que se necesitaban familias para acoger a los niños que os he referido y nos informamos, nos apuntamos y empezamos a acoger durante el verano. El primer año acogimos a un niño, después, posteriormente, a otra niña que vino cuatro veranos, luego a otro chico y después también a otra chica. Actualmente llevamos dos veranos acogiendo a un hijo de las primeras que estuvieron con nosotros. Entonces, bueno, es una cosa en la que empiezas, te pica el gusanillo y te vas adentrando más en los problemas de estos niños hasta que te implicas de esta manera. ¿Y te gusta trabajar ahí? Claro, evidente, si no, no estaría en estos momentos al frente de la asociación. ¿Y qué haces con los refugiados? ¿Cuándo vienen? Bueno, a ver, nosotros, nuestra asociación trabaja en diferentes aspectos con los refugiados. Tenemos, por una parte, hacemos proyectos de cooperación al desarrollo, participamos en las convocatorias a proyectos que salen desde diferentes ayuntamientos o desde el propio gobierno de la reja. Y si tenemos la suerte de que algún proyecto sanitario o de infraestructura o de elementos para que puedan tener agua en sus casas, pues los llevamos a cabo allí en los campamentos de refugiados. Por otra parte, pues tenemos también el programa de vacaciones en paz, que supone el acoger a niños saharauis durante el verano, como os he comentado, y vienen los meses de vacaciones, llegan a España y, en este caso, en la reja, pues son acogidos por familias. Últimamente, creo que es importante y me apetece mucho decirlo, desde hace varias ediciones de este programa hemos ampliado el aspecto de los niños que acogemos a niños con discapacidad. Algunos de ellos van a familias y otros los acogemos con monitores en un centro, en este caso en el CRMF de Lardero. Otros años han estado en un colegio de Santo Domingo de la Calzada. Este es un proyecto en el que nos sentimos bastante identificados y gratificados también porque tenemos mucha colaboración de las entidades riojanas que trabajan con estos niños. Quiero destacar a Aspace, que trabaja con parálisis cerebral, Arpa, que trabaja con autismo, Igualatí, que es una asociación de niños que trabaja con niños y personas con discapacidad, y también con la ONCE y demás. Esta parte del programa también nos anima a continuar porque es un tema interesante para desarrollar. ¿Cómo suelen estar cuando vienen contentos, tristes, enfadados? Hay que decir que la vida de los refugiados en los campamentos es muy dura. Soportan temperaturas muy extremas, en verano rondan 50-55 grados, las condiciones de vida no tienen agua corriente, hasta hace bien poco no tenían luz eléctrica, y tampoco tienen unas pequeñas estructuras sanitarias, pero no se pueden ni comparar con las que tenemos aquí, ni con los colegios que tenemos aquí, ni con las condiciones de vida que tenemos aquí. Por lo tanto, el que exista este programa para las familias que viven allí supone un elemento importante, dar la oportunidad a sus hijos de que puedan salir durante el verano, se les pueda hacer unos reconocimientos médicos en condiciones, y disfruten también de lo que es la vida aquí, en este caso en La Rioja, y cuando vienen por primera vez ellos no conocen, ni han visto nunca una piscina, ni se han bañado, ni tienen un grifo que abren y sale el agua, etc. Las familias en realidad están deseosas de que sus hijos participen en este programa. Evidentemente, en principio, sobre todo la primera vez, están un poco expectantes a ver cómo están sus niños aquí en España, pero en general lo hacen con ilusión y están contentos. ¿Cuánta gente quiere acoger a niños? Bueno, menos de la que nos gustaría a todos. Nosotros aquí en La Rioja siempre nos proponemos traer cada verano, sobre todo en los últimos años, a unos 40 niños. Entonces, hay familias que han acogido un año y repiten al siguiente verano, pero sí es difícil encontrar familias de acogida. Nosotros a partir de estas fechas, del mes de marzo, comenzamos a hacer campaña para conseguir familias que puedan acoger, a través de entrevistas en medios de comunicación o carteles que ponemos por toda la comunidad, dando charlas también en colegios con las asociaciones de padres y madres. Entonces, bueno, es difícil, pero casi siempre conseguimos el objetivo. ¿Cómo os organizáis? Bueno, pues en principio, hay que decir que eso es importante también, que la financiación de este programa, pues contamos con la colaboración de diferentes instituciones y administraciones de La Rioja. Básicamente, y como más importante, el Ayuntamiento de Logroño y el Gobierno de La Rioja. Y entonces, bueno, pues como os he dicho, por estas fechas comenzamos la campaña para conseguir familias de acogida. Tienen que aportar diferente documentación. La vamos haciendo en este trabajo burocrático. Entregamos toda esta documentación primero en el Departamento de Menores de la Consejería, porque es importante que todo esté controlado y que todas las autoridades den el visto bueno. Porque no se trata aquí de traer niños por traer sin ningún tipo de control. Ya sabéis que hay que hacer las cosas bien y que los niños, sobre todo, tengan seguridad y no ocurra ningún problema. Entonces, bueno, a partir de ahí, cuando conseguimos las familias, cuando hacemos toda la documentación y la presentamos a las administraciones y nos dan el visto bueno, pues entonces ya gestionamos el que les den visado a sus pasaportes y puedan venir. Y una vez que vienen, pues los ya previamente hemos adjudicado a las familias, los entregamos a las familias y pasan el verano. La asociación, en este caso, lo que hace, entre otras cosas, es hacer seguimiento de cómo va la estancia de los niños en las familias, sobre todo en el periodo de adaptación, las primeras dos semanas es importante. Imaginaos que vosotros, pues os manda vuestros padres a Inglaterra o a Irlanda o a estudiar un poco de inglés 20 días, pues lógicamente vuestros padres estarán ahí haciendo seguimiento a ver cómo estáis. Y habrá una organización, en este caso somos nosotros con estos niños, las que estamos detrás para resolver cualquier tipo de problema que pueda surgir. ¿Qué haces cuando terminas el trabajo? Bueno, el trabajo no termina ningún día. Esto es estar pensando en cómo mejorar la situación de estas personas, de estos niños refugiados. Entonces, bueno, no es un trabajo de, digamos, de cumplir unas horas al día, sino de estar permanentemente pensando cómo solucionar los problemas y cómo hacer mejor o llevar a cabo los proyectos que tenemos. Pero bueno, tampoco es una dedicación de que hay que estar las 24 horas, como en sí no se corresponde con una jornada laboral de X horas. Ahora la gente que está viendo esto, ¿cómo puede ayudarnos? Pues muy sencillo, solicitando información de este proyecto que os he comentado de Vacaciones en Paz y estudiar la posibilidad de poder acoger en el verano a un niño o una niña como vosotros, Saharawi. Yo creo que, no sé si lo hemos comentado o lo tenéis previsto en alguna pregunta, pero en todo caso os digo que estas personas, estos niños, pues hace como 48 años eran españoles. No ellos, porque los niños ya somos los primeros, pero sus padres y sus abuelos vivían en una colonia española que se llama Sahara Occidental y que en algún momento de la historia fue también una provincia más, como puede ser La Rioja, Santander, Guadalajara, etc. Entonces hace unos 48 años ahora tuvieron un problema, un país vecino les invadió y hubo un conflicto bélico y gran parte de la población saharaui, pues digamos que tuvo que salir y refugiarse en una zona desértica de Argelia. El hecho de que, como os digo, fueran en su momento españoles y colonia española, pues sí que tiene una vinculación muy especial, sobre todo con el pueblo español y por eso este es un programa que se hace en toda España, no solamente en La Rioja. Ha habido años en que han venido durante el verano hasta 8.000 niños. Imaginaros que había 8.000 familias que acogían a niños. Entonces esa especial vinculación por motivos históricos y demás, pues se sigue manteniendo, aunque actualmente es más complicado por muchas cuestiones el poder acoger a un niño, pero continuamos haciendo el programa. Muchas gracias por habernos atendido, te agradecemos mucho y bueno, esperamos verte por el pueblo, ¿vale? Adiós. Adiós. Adiós y muchas gracias y nada, pues a ver si nos vemos por ahí y a ver si habláis en casa con vuestros padres y estudiéis la posibilidad de acoger a un niño o una niña, que sería un compañero de vacaciones estupendo. Nada, pues muchas gracias por esta oportunidad y muy contentos de que estéis trabajando estos problemas humanos de cómo puede ser la vida de los refugiados, en este caso saharauis.