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The speaker discusses the importance of reading and how it allows one to enter the mind of the writer. They mention the concept of a global reset and how it has evolved from simply restarting a computer to a potential technological apocalypse. This could be caused by solar explosions or nuclear events, leading to a complete loss of communication and technology. The reset also extends to social issues, such as poverty and lack of technological development in certain regions. The speaker suggests that the reset involves not just a technological blackout, but also social and economic restructuring. Hola, ¿qué tal? Nuevamente acá con un tema de interés, de mi interés por supuesto, de cosas que he visto, de cosas que he escuchado y también he leído, que es lo importante de pronto. La lectura es muy importante porque te pone en contacto directo con el escritor. Cuando tú lees un texto, cuento, novela o un simple documento de tu interés, al momento de comenzar a leerlo, estás prácticamente ingresando a la mente y a la lógica de quien lo escribió. Por lo tanto es muy bueno leer, escuchar, ver, es importante, pero leer es lo fundamental. Además aprendes ortografía, que es lo importante, redacción, ortografía y caligrafía posteriormente cuando quieres tú transcribir a mano algún párrafo o algún texto en ausencia de la tecnología actual, como esta, un computador, un teléfono celular, etc. No descuidemos esas cosas, son importantes y es lo que va a quedar en el momento de algún apocalipsis tecnológico. Mucho se ha hablado del receteo mundial y mucha gente inmediatamente lo asocia básicamente a lo que nosotros entendemos por receteo. Como migrantes digitales, indudablemente tenemos en memoria el botoncito que aparecía en la torre de los computadores antiguos en donde decía reset, entonces uno apretaba ahí y el computador apagaba todo su sistema y se reiniciaba y listo, era un receteo y volvía a funcionar bien. En aquellos tiempos cuando los computadores saturados por infinidad de cosas, viendo internet, escuchando tal vez un programa radial o jugando y a la vez escuchando música o con muchas ventanas abiertas, procesador de texto, planilla de cálculo, escuchando la radio, viendo fotografías, haciendo todo eso la memoria se satura y se quedaba pegado. Entonces cuando pasaba un buen rato y este no funcionaba, apretábamos el botón reset y listo, terminaba todo. Y era fantástico porque el botoncito solucionaba todo el caos existencial respecto a la ausencia de cualquier tipo de información audiovisual que estábamos en ese momento observando, mirando, recibiendo. Pero de cierta fecha a la actualidad el concepto ha ido cambiando y se habla de receteo ya en otros términos, en cosas ya globales. Y es realmente un concepto que para algunos es intrascendente. Lo relacionamos, como les explicaba, con reiniciar el sistema para poder seguir haciendo lo que estábamos haciendo frente a una pantalla. Pero de cierta fecha a la actualidad el concepto se ha ido ampliando mucho más y para algunos implica una especie de apocalipsis tecnológico. Desde una perspectiva tecnológica. Es decir, se especuló en su momento mucho sobre las explosiones solares, por ejemplo, que de producirse generarían realmente un impacto en todo lo que es la tecnología actual relacionada con la electricidad. Generaría cortes, caídas de sistema y, bueno, quedaría un caos. Imaginemos los días posteriores, no, las horas posteriores al terremoto del 27F, por ejemplo, o del año 1985, en donde por algunas horas hubo una incomunicación terrible, ni radio, ni televisión, y algunas radios de onda corta transmitían e iban actualizando. Imaginen eso, pero ahora ya a nivel mundial. Es decir, implicando sin internet, sin el TV cable, sin satélites, sin radios, sin electricidad básicamente, total. De ahí se habla de un apocalipsis tecnológico, que no va a implicar el apocalipsis bíblico en donde toda la humanidad va a desaparecer y va a morir, no. Más bien es un estado de incomunicación tecnológica, en donde ésta quedaría obsoleta, quedaría tal vez eliminada, salvo tal vez cierto tipo de organizaciones o países o potencias que previendo una situación similar tengan ya una tecnología desarrollada y que no sea afectada directamente, como por ejemplo alguna explosión solar, imaginemos lo que dicen los científicos, o tal vez alguna explosión de tipo nuclear, producto de una acción terrorista o de una guerra nuclear, más todavía como están las cosas en el Medio Oriente y también entre Rusia y Ucrania, uno no sabe, pero el concepto de reseteo básicamente está pensado desde esa perspectiva. Pero también hay otras dimensiones de este llamado reseteo y tiene que ver ya precisamente con las grandes cantidades de población a nivel mundial. Hace décadas atrás se hablaba del hambre de muchas regiones en África, hoy en día eso sigue existiendo igual, no se ha remediado en nada, se crearon organizaciones para paliar todo eso, pero los dineros indudablemente al final terminan solventando lo que son estas organizaciones, pero sin dar una ayuda real para poder ir mermando un poco esos dramas relacionados con el hambre. Pasa lo mismo con la salud, los países tercermundistas incluyéndonos, indudablemente estamos carentes de tecnología y es porque realmente no nos involucramos realmente en ello y no porque no queramos, sino porque hay grandes intereses que básicamente exigen que nosotros nos mantengamos siempre en la línea de flotación mínima para no desaparecer, pero sí mantenerlos a ellos en materias primas, por ejemplo, pero sin desarrollar una tecnología que nos permita generar autosustentación tecnológica y no depender de ellos. Pero este asunto de la idea del reseteo va mucho más allá de lo tecnológico, apunta ya a un asunto de índole social, ir tal vez acomodando grandes poblaciones en determinadas partes para que sean en realidad mano de obra inmediata y poder seguir produciendo, extrayendo todo aquello que estas potencias ya están avanzadas en décadas. Si miramos el adelanto de los países desarrollados frente a nosotros, tecnológicamente, en conocimientos, en educación, es decir, estamos hablando a lo menos de unos 100 años mínimo, especialmente en educación y en comportamiento social, es decir, el reseteo involucra mucho más que un apagón tecnológico, va más allá.