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Maguiel Sáenz Ramírez welcomes listeners to the first episode of a series titled "How to Defend the Faith." He introduces his guest, Benjamín Palacios, and they discuss the importance of faith and its definition. They mention that faith involves trust in God and Jesus as the Savior, and it goes beyond simply believing in God's existence. They also talk about the role of hope in faith and the need to defend it with arguments and reasons. They emphasize the importance of defending the faith with gentleness and reverence. They conclude by discussing the purpose and identity that faith provides and the importance of believing in Jesus. Saludos cordiales a todos los que nos escuchan y bienvenidos a este primer episodio de esta serie interesante titulada ¿Cómo Defender la Fe? Mi nombre es Maguiel Sáenz Ramírez y sean bienvenidos. Y el día de hoy tendremos un invitado especial para hablar sobre este tema. Le damos la bienvenida a mi amigo y hermano Benjamín Palacios. Un gusto tenerte en este podcast y gracias por aceptarnos la invitación. No, al contrario Mag, muchas gracias por invitarme. Pues realmente para mí es un honor estar aquí en tu podcast, poder compartir un poco de ese tema tan interesante que es ¿Cómo Defender la Fe? Realmente para mí ese tema es muy importante. Claro, es un tema interesante y creo que en nuestra generación como jóvenes es muy difícil a veces entenderlo y comprenderlo. Pero para poder entrar más en el tema y adentrarnos en lo que queremos saber que cómo es defenderla, tenemos que tener el concepto clave de qué es la fe. Entonces yo traje unos puntos interesantes que me gustaría compartir de qué es la fe. Yo creo y considero que para los cristianos la fe es la confianza total y la creencia en Dios, pero también en Jesucristo como el Salvador y es la verdad revelada en la Biblia. Es más que simplemente creer en la existencia de Dios, implica una relación personal y una entrega completa a Dios. Y para mí la fe cristiana incluye confiar en la obra redentora de Jesucristo en la cruz para el perdón de los pecados y la vida eterna, así como confiar en la guía del Espíritu Santo en la vida diaria. Ese sería hasta cierto punto mi opinión, pero me gustaría saber qué opinas tú sobre la fe. Bueno, pues realmente para mí la fe puede abarcar muchos temas diferentes, porque también se puede ver desde un punto de vista de cada quien, con su creencia, con la religión que tenga, con la creencia personal que tenga. Incluso yo podría alegar y decir que hay incluso hasta los castellanos sin la fe. ¿Por qué? Porque confía en cosas que también incluso no han visto. Pero, digamos, trayendo la fe al ámbito cristiano, podríamos comentar que la fe realmente implica confiar en la existencia, el poder, la bondad y la sabiduría de Dios, incluso en ausencia de pruebas tangibles o evidencia objetiva. ¿Por qué? Porque como dice la palabra, la fe es la certeza de lo que nos prevé. Es confiar en Dios, ¿verdad? Como acabo de mencionar, incluso en ausencia de pruebas tangibles o evidencia objetiva. Pero, esto es lo interesante, que nuestra fe no es una fe ciega, y más adelante lo vamos a ver. Claro, yo creo que considero igual que es un tema interesante, ¿no? Porque, pues, incluso a mí me ha pasado que a veces hemos dudado quizás de nuestra fe. Pero, pues, ahí es donde tenemos que reconfortarnos y creer en Jesucristo, ¿no? Como cristiano, pues, confiar y creer que lo que no se ve puede hacer y puede suceder. Y para eso me gustaría saber qué significado tiene en tu vida o cómo consideras que es defender la fe, ¿no? O qué puntos de vista tú nos darías en cómo defenderla. Ok, claro que sí. Mira, para mí, la fe, nuestra fe no es una fe ciega realmente. No es una fe que nos tenga razones de ser. Es una fe que realmente tiene muchos fundamentos y muchas razones por las cuales creer en Dios, ¿no? Ahora, quiero comenzar comentando lo siguiente. Para mí, pues, muchos cristianos a lo largo de la vida han escuchado que la fe no debe ser defendida o que Dios no debe ser defendido o no necesita ser defendido. Pero para mí realmente es todo lo contrario porque incluso la Biblia nos anima a defender la fe. Es simplemente dar argumentos y razones de nuestra fe porque realmente nuestra fe, como te comento, no es una fe ciega. Tenemos razones para nuestra fe. En Primera de Pedro 3.15, y te lo voy a leer en la versión de traducción en lenguaje actual, dice, honren a Cristo como Señor y estén siempre dispuestos a explicarle a la gente por qué ustedes confían en Cristo y sus promesas. Ahora, si lo comparamos con la versión de Renato Vega en 1860, dice lo siguiente. Están siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que demande razón de la esperanza que hay en ustedes. Aquí menciona dos palabras muy claras. Defender no significa discutir la fe. No significa ponerte a pelear con otra persona, entrar en conflicto, en agresión. Aquí el apóstol Pedro realmente nos anima a defender la fe, pero con mansedumbre y con reverencia, o sea, con alegría, con tenacidad. A las personas que demanden razón de la esperanza que hay en nosotros. Y unos podrán decir, pero ahí está hablando de la esperanza, de la fe, pero la esperanza realmente requiere fe. Porque tú estás esperando algo, o sea, esperas en Dios. Esperas que Dios realmente cumpla sus promesas, ¿no? Eso es fe, esperar. Y pues realmente para mí, eso significa defender la fe, dar razón de nuestra creencia en Dios, de nuestra esperanza en Dios. Eso para mí es defender la fe. Pero como comento, no es entrar realmente en discusión, no es entrar en polémica, sino más bien tratar de hacerlo con reverencia y mansedumbre. Mansedumbre significa hacerlo de una forma tranquila, de una forma ordenada para que las personas no... o sea, que no se genere conflicto más que nada. Eso para mí es el punto que quiero tener. Sí, claro. De hecho, en el libro de Pedro nos abarca algo importante, ¿no? En este capítulo nos aborda la esperanza de vivir a través de la resurrección de Jesucristo. ¿Y cómo es esto? Y como esperanza nos permite regocijarnos e incluso en medio de las pruebas, Pedro habla sobre la fe genuina que resulta en la alabanza y gloria y honra en la revelación de Jesucristo. Esto es un punto muy importante porque él nos invita y nos invita a creer en la resurrección de Jesucristo, a creer que a través de eso nosotros tenemos esperanza y mantener nuestra fe para poder ir hacia un mundo mejor y creer, ¿no?, que Él vendrá al día. Eso sería una fe grande, ¿no? Tener una fe grande de creer que Él va a resucitar y Él vendrá por nosotros. Pero siempre y cuando, viviendo bajo su voluntad, viviendo bajo sus principios y reflejando el amor de Dios a través de ello. ¿Por qué no? Igual me gustaría conocer al público cuáles son tus principales creencias y por qué son importantes para ti en esta etapa de tu vida, ¿no? Sí, claro. Pues, bueno, mi principal creencia realmente es que Dios existe. Hay un Creador que fue el que formó todo lo que hay, lo que vemos, lo que tocamos, que Jesús es su Hijo y que murió por nuestros pecados. Es importante para mí porque si Dios me creó, Él puede generar la identidad de mi propósito. Nosotros tenemos la esperanza en esta vida eterna. Realmente, pues con Dios en mi vida no tengo necesidad de faltar mi vida entera buscando quién soy y cuál es mi propósito en este mundo. Porque Dios ya tengo eso. Por eso es muy importante para mí. Sí, de hecho creo yo y considero que muchas gentes sus creencias son muy diferentes. Y quizás el que nos está escuchando su creencia es diferente. A veces podemos decir que creemos en otro Dios, podemos tener la confianza en otro Dios, tener la confianza incluso en los materiales, ¿no? Que esa podría ser una creencia que nosotros tenemos. Pero como cristianos debemos entender que nuestra creencia debe ser en Jesucristo, creer en que Él va a venir y tener nuestra confianza puesta en Él. Así es. Es exactamente lo que tú estás comentando. A lo largo de toda la historia de la humanidad, el humano ha estado buscándolo en la respuesta a diversos preguntas. Como por ejemplo, ¿cuál es el propósito por el que estamos aquí? ¿Por qué existimos? Pero jamás en la vida va a encontrar la respuesta en la ciencia ni en ellos mismos, o sea, buscada en su interior. ¿Por qué? Porque la única forma en que uno pueda tener un propósito existente en la vida es con Dios. Si Dios existe y Dios los creó, ¿en qué nos da el propósito? Es como por ejemplo, un celular. Existe porque alguien lo creó, alguien lo diseñó, alguien se lo imaginó en su mente y lo fabricó. ¿Quién le dio el uso, o sea, la utilidad de ese celular? ¿O quién le dio el propósito por el cual funciona el celular? Es el que creó el celular, su creador. El celular por sí mismo no puede darse su propósito o su identidad. Así, igual, de igual forma sucede con nosotros. Realmente, nuestro creador, Dios, es el que nos da propósito e identidad. Es por eso que yo ya no tengo que seguir buscando cuál es mi propósito, a diferencia de muchas personas que todavía no lo encuentran. Así es. Algo muy importante que podamos mencionar en Segunda de Pedro, uno, Pedro nos exhorta a los creyentes a hacer creer su fe mediante el conocimiento de Dios en vez de una vida piadosa que refleje la gracia de Dios y habla sobre la importancia de mantenerse firme en la verdad del Evangelio y sobre la confianza en las profecías de las Escrituras. Es algo importante, no? Porque nosotros no podemos dar ese valor, porque si creemos en Dios, él ya nos dio el valor desde que él vino a la cruz del Calvario y nos ha purificado y nos ha cambiado. Pero también sobre esto tienen que haber argumentos, tienen que haber una base principal para nuestra fe y para eso nos gustaría saber cuáles son tus argumentos principales a favor de tu fe. Ok, ¿cuáles son los principales argumentos a favor de mi fe? Bueno, realmente argumentos a favor de la fe hay muchos y realmente si los usamos punto por punto sería un podcast completo para esos temas. Ahorita solamente voy a comentar las superficies, por ejemplo hay una pregunta que todo filósofo comienza, la pregunta es ¿por qué hay algo en lugar de nada? Si realmente pensamos en esa pregunta desde el inicio de todo, ¿por qué existe algo en lugar de no existir nada? ¿por qué tenía que haber algo? Ahora, aquí comenzamos con tres argumentos. El primer argumento sería el argumento cosmológico. ¿De qué se trata este argumento? Este argumento se basa en la observación más que nada de que el universo tiene un principio y por lo tanto debe haber una causa que lo haya imaginado y esa causa se entiende como Dios. Simplemente no materia lo tangible que no apareció de la nada, porque de la nada, nada aparece. Entonces podemos intuir, podemos deducir que hubo un ángel, un creador que formó todo lo que vemos. Porque de hecho incluso hay observaciones científicas que llegan a creer que el universo tiene un inicio más que nada. Ahora, también está el argumento teológico, que es también conocido como el argumento del diseño. Este argumento realmente sostiene que la complejidad del orden observados en el universo, desde el nivel superfómico hasta el nivel cosmológico, sufrió la misma consecuencia que un diseñador inteligente, es decir, Dios. ¿De qué se refiere esto realmente? Veamos realmente que en el universo hay una complejidad tanto a la gran escala como a una escala microscópica y todo está conectado, todo tiene una función, todo tiene una exactitud impresionante. Se cree también que para que haya vida incluso aquí en la Tierra, se deben cumplir 200 factores totalmente diferentes para que pueda existir la vida en la Tierra. E incluso si llega a variar uno o desequilibrarse uno, falla todo. ¿Cuál es la probabilidad de que 200 de esos factores se cumplan según propósito, según creador o según una manipulación de datos? Claro, es muy complicado. También tenemos el argumento moral. Esto argumenta que la existencia de un sentido innato de moralidad en los seres humanos, así como la existencia de normas morales objetivas, requiere una base trascendental que algunos consideran que es Dios. En la moral que sentimos nosotros, lo que crece es la creencia que tenemos del bien y del mal. ¿De dónde la sentimos nosotros? Porque la moralidad no es un ser fenomenal, es así. No es un ser que podamos tocar o que se pueda crear. Por ejemplo, el bien existe y el mal existe. No existe. El bien y el mal se eligen. Aquí podemos tocar muchos temas, ¿no? Del bien y el mal, de por qué existe el bien y por qué existe el mal. Pero realmente, no es que hayan sido creados. Más bien, son una elección. Y así podemos tocar muchos argumentos que realmente estaríamos interesados en tocar incluso en otro episodio, profundizar mucho más en estos temas para que también el público y los oyentes sepan cuáles son los argumentos que hay a favor de nuestra fe. Que abarcan desde argumentos teológicos, filosóficos, incluso hasta científicos e históricos. O sea, tenemos diferentes ramas de la cual tomar argumentos y comprobar realmente la razón de nuestra fe. Sí, de hecho, todo lo que tú nos has dicho ha sido importante. Incluso esa última pregunta que contestamos nos conlleva a otra pregunta, ¿no? Porque creo que a muchos jóvenes o a muchas personas cristianas nos ha tocado que nos preguntemos o nos critican sobre nuestra fe, ¿no? Entonces creo que sería también una buena forma de responder hacia críticas, hacia preguntas difíciles que a veces nos cuesta responder. Pero hagamos un ejercicio, ¿no? Pongamos que yo te haga una pregunta difícil o una crítica sobre tu fe. ¿Cómo nos responderías tú a esa crítica, no? ¿Cuál sería una respuesta que creas tú que sea considerable para responder? Ok, mira. Para poder responder preguntas o críticas difíciles acerca de la fe, lleva un trabajo previo, ¿no? Porque, ¿cómo te puedo decir? Si te hacen una pregunta y tú no conoces realmente nada sobre tu fe, pues ni siquiera vas a poder responder. Entonces, para poder responder o dar razón de tu fe, hay un trabajo previo que hay que realizar. Primero, la más básica de todas, es conocer bien en lo que crees. Es conocer bien en lo que crees. Antes que nada es importante tener un buen entendimiento de tus propias creencias, ¿no? O sea, realmente tenemos una convicción. No basta solamente con ir a la iglesia y escuchar las predicas, realmente, sino realmente ponerse a tratar de comprender tanto los aspectos básicos como los más profundos de nuestra fe, incluyendo las enseñanzas, doctrinas y principios fundamentales. Y para eso realmente tenemos que estudiar. Y estudiar realmente es dedicar tiempo a las escrituras y a otros textos, incluso libros, investigaciones relacionadas a nuestra fe, ¿no? Relacionadas a la vida cristiana. Además, pues podemos familiarizarnos con las interpretaciones y enseñanzas de nuestros líderes, nuestros pastores o eruditos, pues digamos, en el área cristiana, ¿no? O sea, eruditos en enteología y en diferentes ramas que abarcan nuestra fe. Ahora, una vez habiendo estudiado todo esto, ¿no? Ya empapando temas del tema, cuando estás platicando con otra persona, hay que practicar algo que es muy importante. Le escucha activo. Esto es importante porque cuando te enfrentas a preguntas difíciles, acerca de la fe, es importante escuchar atentamente lo que la otra persona está diciendo para no responder o responder, ¿no? Tienes que tratar de comprender sus preocupaciones y puntos de vista antes de responder. Sí, de hecho es algo muy importante e interesante. La verdad que es un tema extenso, ¿no? Que podemos sacar infinidad de cosas y conceptos, incluso, ¿por qué no una práctica? Se puede sacar de esto, ¿ok? Pero también nos gustaría llegar hasta la conclusión, ¿no? Porque pues ya el tiempo lo tenemos encima, ¿ok? Pero algo importante y algo que me gustaría preguntarte para dejar una respuesta clara es en conclusión de todo lo que hablamos. ¿Qué papel importante crees que juega la experiencia personal que tú has tenido con tu fe y qué le compatirías a los chicos, ¿no? ¿Cuál sería esa experiencia personal que tú tienes? Y con eso vamos a ir cerrando este primer episodio de nuestro podcast. Ah, claro que sí. Bueno, mira, mi experiencia personal realmente tuvo un papel fundamental en mi vida. Yo nací realmente en un hogar, en un hogar donde no había nadie. Yo nací realmente en un hogar con padres cristianos y toda mi vida me han enseñado la palabra de Dios. Sin embargo, pues yo realmente he puesto a prueba mi profesión investigando, leyendo, y propóndome diferentes temas. Pero también a lo largo de mi vida he experimentado cosas totalmente sorprendentes que solo podrían suceder con la existencia de un Dios. Como por ejemplo, ver a un enfermo de sida. Eso fue hace no sé quince años realmente. Cuando todavía no había ni siquiera ningún tratamiento para... O sea, en ese tiempo ni siquiera aunque lo expectaran a tiempo había tratamiento para eso. Y aparte de eso también fue súper genial. O sea, ya realmente era fiel compuesto prácticamente. Y ver un lebrazad de gracia en el oración realmente es sorprendente. Es sorprendente. Es una evidencia de la fe en Dios, ¿no? Ahora, también yo mismo soy protagonista de un milagro, por decirlo así. A los seis años de edad me iban a apoyar voluntariamente. De igual forma, gracias a la oración yo también. Y ahora tuve que pasar realmente por una cirugía. Y también me he visto en la vida de muchas personas sentir transformadas cuando llegan a Cristo, ¿no? Cuando llegan a Jesús, conocen a Dios. Sus vidas son transformadas. Y pues yo realmente les puedo decir a nuestra audiencia que se atrevan realmente a conocer de verdad a Jesús. Conocer a Jesús realmente es una experiencia transformadora y liberadora. Les va a dar un giro a unos 180 grados de su vida. A su forma de ver las cosas. Así que yo les animo y vamos a seguir hablando en otros episodios acerca de esto. Profundizándonos, porque como dices tú, el tiempo es corto. Y tantas cosas hay que compartir, ¿verdad? Pero realmente esta es parte de mi experiencia. Y podría decir más cosas, pero como dices tú, así que nos puede ir el tiempo. Y uno acabar realmente Dios ha sido un bueno en mi vida. Y le invito a las personas que lo comprueben a Dios. Yo creo y considero que como cristianos todos hemos vivido experiencias. Hemos vivido esa etapa de nuestra vida en cómo recomportar nuestra fe. En cómo mantener nuestra fe. Y creo que más de nosotros hemos sido testigos de lo que Dios ha hecho a través de nuestras vidas, ¿no? Que ha sido clave para mantener. Pero sin más que decir, sin más que aportar, me gustaría agradecerte nuevamente. Y gracias. Y esperamos poder más adelante tenerte otra vez aquí. Y poder seguir compartiendo contigo este hermoso tiempo. Muchísimas gracias. Claro que sí, con mucho gusto. En cuanto tú me digas, yo vengo a tu programa y platicamos acerca de ese tema. Muchísimas gracias. Subtítulos realizados por la comunidad de Amara.org ¡Suscríbete al canal!