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The conversation revolves around various topics, including personal experiences, appearances, hair changes, aging, communication, empathy, and forgiving. The speakers discuss their thoughts and feelings about these subjects, sharing anecdotes and opinions. They touch on issues such as dealing with frustrations, understanding others' perspectives, and the importance of forgiveness for personal growth. Bueno, vamos a tener que arrancar. ¿Vas con la música? Sí, ya puse. Ah, supuestamente de viento. No sé qué dice. ¡Ah, qué rico! ¡Hemos vuelto! ¡Hola! ¡Hola! ¿Cómo estás, perra? Estamos muy bien. Hace mucho que no nos vemos. Esa es verdad. Te cambiaste el look. No, no me peiné. Tenías los pelos parados. Sí, sí. A mí me gusta armar los pelos parados. Me da más onda. Hoy igual fui a las 10 de la mañana al MAM. Dije, ay, quiero desayunar algo rico. Y fui a comprarme ahí, que venden un modín de naranja, creo que es. Súper rico. Y fui directamente a comprar así. Pero como me levanté, me lavé la cara y fui. Después, sentado en casa desayunando, me di cuenta que tenía los pelos hecho un nido de carancho. Me gusta, me gusta ese look. Cada tanto hay que cambiar. Hay que cambiar, sí. Me voy a hacer rubia yo también. Oxigenate un poco, amiga. Sí, siempre lo pensé. Oxigenarme, oxigenarme y la cabeza. Claro, así se tiran más las ideas también. No, no. Porque es todo un mito, es todo al revés. Eso de que la rubia teñida es más tonta. Y bueno, los químicos te pueden apurar. Pero te oxigenan también. ¿También te oxigenan? Claro. A través del agua oxigenada. Mira, lo voy a tomar en cuenta. Tomalo en cuenta. Lo que hice fue oxigenar mi cerebro. Ponete ahí. Agua oxigenada. Quemate un poco la cabeza, el cuero cabelludo. La única vez que me cambié, que quería tener el pelo platinado cuando arrancó la moda, casi me desmayé. Conozco varias personas que se han platinado el pelo. Sí, Pablito. Amarillo. Amarillo como un patito. Sí, obvio. Si me hiciste ponerme la cara en el show de los tubi-tubis. Ah, no me acordaba de eso. Sí, obvio, yo sí. Sí, obvio. Claro, cuando me dice recuerdo de un año y está pobre, así todo amarillo, pobre. Ay, tío, la locura que hacía. Las cosas que hacía la gente en la pandemia, ¿no? Yo, por suerte, no hice nada. No me dio el tiempo. Estaba totalmente estresada. No, no, a mí no sé. Yo hice cosas, pero... La gente agarraba y hacía cursos, adelantaba la facultad, se tenía el pelo. Ah, no, nunca me pasó. Hacía gimnasio. Yo, meta, laburar, laburar, laburar. Estaba como... Sí, sí, trabajar siempre. Llegué al punto de llevarme el trabajo a casa y es lo peor. Bueno, imaginate yo que ahí empecé a trabajar en casa. Pero bueno, está. Pasado pisado. Contame, amiga, ¿en qué andás? Bueno, tratando de mejorar el estilo de vida. A ver si me hago más longeva. ¿Mirá? ¿Cómo? No sé, me re-transformo hoy porque trabajamos mal. Sí, vos pareces de mi edad. Más o menos. No, entre que yo parezco a 10 años menos. Y yo que parezco unos años más, no 10 años más. Yo otra vez dije... 10 años más. No, 10 años no. Me han dicho que tengo 30, 32. Y yo otra vez estoy pisando. ¿Cómo? ¿Cuántos años tenés? 25. Yo era 27 recién. Ay, ¿sabes lo que yo daría por tener 27 años? Estabas en otra época sociocultural muy distinta. Yo era una pelotuda a los 27. No como vos. Yo vivía en una nube de pedos a esa edad. Trabajaba, pero igual. Partiendo de la base, de las circunstancias de la sociedad... ¡Ah! ¡Amo eso! ¿A cuánto es difícil? ¡Amo eso de Lizy! Que inventa... Dice un montón de cosas y no yo nada. Yo voy a... Me gustaría implementarlo. Sí, yo necesito unas clases para cuando hago esas exposiciones. Cuando tengo... Tienes que exponer que... Yo no lo tengo que decir en 10 minutos, como mucho. Hay gente que se esplaya y se va de ti. Creo que hay un poco de oratoria en esas cosas. Igual creo que hay que decir lo que hay que decir. Porque el que dice demasiado y no dice nada... Y no dice nada. No tiene nada. Es porque no tiene nada para decir. Pero cómo te compra. Y cuando la gente... Cuando haces preguntas... Mirá, porque estoy con un tema acá. Cuando haces preguntas importantes de la vida... Y te responden... Como un caracol. Que te das vuelta... Y vuelta... Yo pensé que iba a un palo con mi gallinero que coñó a jugar con el teléfono. Y bueno, es lo que yo te dije. Bueno, bueno. Pero yo estaba preparada por otra cosa. Yo, vos sabés que yo... Admito mis errores, pero... Sí, sí, sí. Cuando se dan vueltas... Ay, la calecita. Sí, la calecita, la calecita. Y que se van de tema y... Ay, no. Le sacaré un arma y pá. ¿Qué hizo? Es que no, no. No tienen responsabilidad afectiva. No quieren asumir su error. Yo conozco mucha gente que le cuesta asumir su error. ¿Error o asumir cosas? No, error. Es un error. Y te dan vuelta y siempre te buscan la excusa para decir por qué no hicieron tal cosa o por qué pasó tal otra. Ay, casi... Arocena, escúchame. Ligeraste mal los vehículos, Arocena. Por favor. Responsabilidad afectiva. Y puede ser... No, o puede ser tal. No... No sé, no me siento capaz de responder. Y entonces me voy de tema. No sé si no me siento capaz. Yo creo que lo que siempre nubla la verdad o el decir realmente lo que siento, lo que pienso, es el miedo a decir lo que pienso y perder. Perder, perder no, perderte. O perder tu punto de vista o tu afecto o tu... Perder al otro. Claro, perder. Es como, si yo te digo, yo que sé, te queda horrible tal cosa o vos me decís, ¿por qué no me amás? Y bueno, no te amo por eso y eso y eso. Y capaz ese afecto que vos tenés no lo querés perder. Pero no estás cómodo tampoco. Pero no estás cómodo tampoco. Entonces como que siempre cuesta... No lo querés perder. No lo querés perder, pero porque capaz... Querés todo. Querés todo. Pero querés seguir cómodo en la situación que estás. Claro, sí, sí, sí. Que es poco comprometida. Claro. Exactamente, sí. En una situación poco comprometida... ¿Cómo te sentís al respecto? Para repetir lo que... ¿Cómo te sentís al respecto? ¿Cómo te sentís al respecto? Para, pero no sé si es porque hace poco que estoy yendo, mi psicóloga no anota nada. La mía sí. Si lo que pasa es que vos le llevabas un millón de problemas. No, perdón. En lugar de tocarlo, de los problemas. ¡Ay, perdón! ¡Los tuyos, por favor! No, pero los míos siempre terminan siendo, terminan... A ver, acá estamos validando problemas. A ver quién tiene los problemas más importantes. Bueno, yo soy más grande, así que tengo problemas más importantes. Problemas importantes no. Siempre los míos, me he dado cuenta últimamente... Confluyen hacia el mismo lugar. Siempre van al mismo lugar. Ah, los míos también. La facultad o mi vieja. Entonces, como no hay otra persona culpable de nada más que mi vieja y la facultad. No, la facultad no es culpable. Bueno, o sea, pero siempre llego al punto de que... Tu madre, sí. Los padres son los culpables de todo. La gente va a comunicarle a los que tienen hijos que van a ser culpables de la desgracia de... Muchos tratan de no... Es imposible evitarlo. Es imposible, sí. Es imposible. Por más que hayas sido un excelente padre, madre, siempre vas a generar algo. O porque diste mucho, o porque diste poco, o que le diste mucha libertad, o le diste poca, o... Y el tema es como uno, lo que uno hace con eso. Como uno resuelve. Yo creo que lo ideal es generar confianza con el otro par. ¿Con tu padre? No. Par. Ah. En el caso, sí. O sea, yo recién, con 27 años, vengo un poco a entender a mi viejo. En realidad lo que vos querés decir no es confianza, es empatizar. Algo que hemos hablado nosotros. Voy a buscar mis apuntes acá. La falta de empatía. Yo tengo empatía. Muy poca, amiga. Yo tengo empatía. Lo que pasa es que, bueno, a veces la gente colma mi paciencia. Yo soy muy buena. Empatíocrita. No, soy... ¿Soy buena o no significa...? Porque tal... O capaz tengo totalmente desasociada la definición de empatía, pero... ¿Qué considerás que es la empatía, amiga? O sea, empatía. O sea, tampoco es que ponerse en los zapatos del otro, sino entender o tratar de entender qué es lo que le pasa y acompañar. ¡Ay, qué madura es esa chica! ¡Por favor! O sea, nunca hay que ponerse en los zapatos de nadie, porque es imposible. No, pero parte de entender al otro es ponerse un poco en los zapatos de él. Sí. O ella. Porque yo tenía entendido que sí, hasta que mi psicóloga me dijo que no es ponerse los zapatos, sino es tratar de entender o no tomárselo tan... Bueno, pero por eso, la frase ponerse en los zapatos del otro significa, bueno, yo qué sé, mi viejo tuvo estos recursos, entonces con esto hizo lo que pudo, o yo qué sé, hizo esto, esto, y no me dio tal y tal cosa porque no podía, o no lo entendía, o no sé qué. Y eso es medio como ponerse en los zapatos del otro, en la situación del otro. Claro, es entender la situación del otro. Bueno, a ver, no me voy a escribir, gente, yo lo he dicho millones de veces. Claro, yo ahí, me encanta el tema que tratás, porque bueno, la verdad que tengo gente alrededor que está viviendo situaciones... Lo que pasa es que estamos en una edad complicada, ¿no? Lo siento. Está viviendo situaciones complejas con los viejos, y desde distintas personas, ¿no? Que han construido, y eso también me da a pensar, ¿no? Porque uno a veces termina rodeado de gente más o menos con los mismos temas, es como uno también, ¿no? ¿Vincula? Por algo vinculás. Como que tuvo las mismas vivencias, o tiene los mismos pensamientos. O algo en común, algo que te conecta, exacto. Y mucha gente alrededor que le ha pasado eso de tener que convivir con la frustración o con enojos con los viejos, porque no se portaron muy bien en muchas situaciones, o no hicieron cosas que tenían que hacer, pero bueno, tratando de, bueno, tengo que entender qué le pasaba, o bueno, por qué no me dio tal cosa, o por qué hacía tal cosa, y cómo perdonarlo y seguir adelante, ¿no? Con eso. Y mismo a mí también me pasa, ¿no? Ah, no estaría pasando la parte de perdonar. Y eso es lo más complicado. El cierre. El cierre de la cuestión es eso. Es perdonar. Perdonar. Se tiene que perdonar. ¿Por qué se tiene que perdonar? Y es para vos mismo. Yo no sé, yo no sé. ¿Por qué se tiene que perdonar? Dicen que así se suelta. Así se suelta. Pero también es, o sea, vos pasas perdonando. Claro, yo perdono a todo el mundo, pero como que en el fondo sigo sintiendo lo mismo. Claro. Entonces capaz que no es un perdón cien por cien auténtico, ¿no? No, esto si no es como un algo, una mentirita. Una mentirita piadosa. Una engaña pichanga que no me salía. Es una autoengaña. Sí, es una autoengaña. No te autoengañes, hay que hacerlo de verdad. Yo soy consciente de que somos lo que vivimos. Totalmente. Entonces yo no puedo, o sea... ¿Y cómo desde distintos lugares, como vos con la edad que tenés, el recorrido que tuviste, que viniste de otro lugar, podés tener el mismo, haber conectado con las mismas situaciones con una persona que nada que ver, ¿no? Es que es obvio, o sea, uno busca el afecto o sentirse cómodo con alguien en base a lo que uno es. O sea, yo, por ejemplo, no podría... O sea, yo me llevo bien con todo el mundo, pero hay algunas cosas que es como, bueno, no, esto no. Para mí esto no va. O a veces con las mismas personas que uno se conecta es como, bueno, fingir la muerte de alguien. Ah, ya sé de qué estamos hablando. A mí me atravesó saladísimo, porque es saladísimo. Yo, ¿y de cuándo puedo pensar? Yo a mi vieja es como que está muerta, ¿me entendés? Pero realmente decir que alguien... es como que, no, pero yo no puedo decir que alguien falleció cuando realmente no pasó. Claro, tenés un límite, ¿no? Creo que todos tenemos un límite, nunca pensé que la muerte iba a ser mi límite. Bueno, pero lo conociste, ese es tu límite, jugar con eso es tu... No, no, porque vos no sabés cómo va a reaccionar la otra persona. Si se entera de eso. Claro, no la persona que mataste, sino la persona a la que se le está diciendo. Ah, no entendía eso. Claro, claro. Para, vamos a poner en contexto, porque... Yo dije que no iba a hablar de esto, pero me salió de coño, como siempre. Yo creo que cuando esto salga, las aguas ya habrán pasado, ya el canto ya se rompió. Ahí va, poné en contexto porque si no no se entiende. La persona se sentía mal emocionalmente por una ruptura y dijo que el papá había fallecido, ha fallecido. A la jefa, la jefa con delorio, creo que hasta cerró la clínica. No, no. Y como loca, llamándola a mí por insta. O sea, le salió una mentira como el culo. No, para, lo más gracioso de todo esto, que la jefa de la comisaría del pueblo de Florida es la hermana. ¡No! Sí, y la llamó para decir, ¿vos qué hiciste? ¿Cómo me mandaron a pasar papá? Claro, pero también me pongo un poco a entender la situación. No sé hasta dónde te lleva la ruptura amorosa. Pero la ruptura amorosa acá, ¿en qué encaja? ¿En que ella se sentía mal? Se sentía mal porque se separaron. Y no querían el trabajo. Y se sentía tan mal que no quería trabajar ese sábado. Entonces hubiese, no sé, dijo que tenía, le iba a decir, dijo que tenía esto, ¿cómo se llama? Que te salen manchitas blancas, no, ¿roja? ¿Escarlatina? No, esto, que por lo general le da a los niños... ¿Varicela? Varicela, y se fue de alegría a Cancún. No, ahí hay otros problemas mayores y más complejos que la ruptura amorosa, ¿viste? No, en ese caso sí, pero bueno, uno de los factores de hoy era... Hay como un tema de responsabilidad con el trabajo, ¿no? Sí, sí, sí. A mí me pasó que cuando, en un momento, cuando me separé, yo el otro día estaba laburando, me sentía mal. Hablé con mis compañeros ese día, lloré un rato, pero ya el otro día ya estaba. La anestesia, la anestesia. Lo que pasa es que muchas veces... Sí, la anestesia, el trabajo es... El que deja al otro, el que es dejado, le cuesta asumirlo. No, pero yo me sentía mal ese día o al otro día. Pero jamás se me ocurrió, no sé, digo, mi responsabilidad, mi trabajo, ¿tengo que cumplir con esto? Como sea, ¿viste? No, no, no, o sea, yo te entiendo... Está, no, no. Y nadie me... no tenía como atrás alguien... Imaginate pandemia, teletrabajo, me podría haber hecho la pelotuda. No me da... No, claro, lo que quería decir es eso, que por lo general te refugias en el trabajo para... Bueno, está, sí. Es como una anestesia, pero también lo que yo quería decir es que por lo general el que deja a la otra persona ya lo procesó, no es que me levanté hoy y dije, está, no quiero más esto. Lo venís procesando de un tiempo, de un momento a otro. Sí. No es automático, no es como te levantaste y dices, no quiero más esto, me voy. No, obvio, aunque a veces se viene hablando hace tiempo, en realidad. Claro, sí, tanto de los dos lados, pero por lo general siempre uno es el que tiene la iniciativa. Sí, puede ser. Sí, hay de todo. Hay de todo. Bien, y entonces, está, se peleó con el... Se peleó con el novio por diecisiete, octava vez en lo que va del año, justo también cerca del aniversario. Entonces creo que fue todo un combo, un cocktail de emociones que explotó. Fácil. Y yo medio que estuve un poco alejado de esa situación porque es como otra vez lo mismo. Me sentí un poco mal. Hablé con la psicóloga, le dije, mirá, me sentí mal por esto y esto. Le dije, sí, está bien, vos tenés un límite. Y es como también un poco lo mismo, o sea, estructuras amorosas se pelean. Mi vieja siempre se peleaba con el amor de su vida y que no sé qué, no sé cuánto. Claro, ya lo viviste eso mil veces, lo veías y... Sí, es como ya está, ya se pudrió. Claro. La quiero un montón, estoy en todo, pero me alejé un poco más esta vez por eso de tener que mentir. Escribíle, escribíle vos. A mí me escribió por Instagram, me dije, ay no, se siente re mal. Te pido disculpas por las molestias ocasionadas. Le di a entender, es como que está re mal, pero no le di a entender que se había muerto el padre ni nada. Me mentí porque yo me sentía mal. A la jefa. Claro. Me escribió por Instagram preguntándome que no sabía qué pasaba, que le habían dicho que había fallecido el padre, que no sé qué, no sé cuánto. Y yo como... ¿Qué hiciste? ¿Qué dije yo, Angelita? ¡Ay! ¡Pipipi! No produció, no produció. Pongo el pipip que lo tengo guardado para las cagadas que me manden. Sí, sí. Y te pongo agonizando. Anonimato. Que después editas todo como el culo. Bueno, sí. Pero sí, es como... Fuerte, sí. Está fuerte el asunto. Y por eso también, capaz de mi subconsciente... Creo que fingir una enfermedad era mejor. Claro, sí. Yo qué sé, la más común, diarrea. ¡Claro! Sí, o sea, re feo. O sea, es que estoy rodeado de rupturas amorosas. Porque estábamos hablando con diarrea. Sí, sí, sí, sí. ¿Qué es lo que está desconocido? Es muy gracioso. Un compañero de trabajo adquirió los servicios de un gatito. ¿Cómo? Sí. De una dama de la noche. Y no sabemos todo del gossip. Pero al parecer la mina lo robó. ¡No! No se qué. No fue a trabajar el muchacho porque estaba muy asustado. Él quería que lo entendiéramos. Nosotros nos cagamos de la risa. Le pusimos en su computadora, a fondo de pantalla, un gatito. ¡No, no, no! No se lo habrán dado cuenta. Pero sí, o sea, hasta lo extorsionaron. Entonces, claro, nosotras queríamos más. Sí, le exigían plata. ¿Y a cambio de qué? A cambio de no denunciarlo. Entonces asumió que le movió el esqueleto. Entonces nosotros haciendo todas las teorías y todo. Pero también estábamos hablando de cómo él lo contaba como si nada en el trabajo. Sí, tremenda experiencia traumática. Yo siempre digo lo mismo. Hay gente linda, siempre hay un roto pero no es cosido. Pero hay gente que tiene que pagar por sexo. ¿Y qué? Pero... ¿Qué tiene que ver eso? Pasó la misma semana. Es súper gracioso porque al final el tipo estaba tan asustado que quería irse con los viejos. Miralo, miralo. No, me fingió que tenía gastroenteritis, colitis, todo eso. Se iba por el caño. ¿Y es tan feo? Sí. ¡Pobre! Yo voy a lo mismo. Hay un porcentaje de la belleza física y un porcentaje de la... Vos no podés hablar porque sos muy estereotípico. Tenés la cara alineada. ¡Muchas gracias por venir, gente! Duró lo que tenía que durar. Nos vemos. Besitos. Hay un porcentaje también... A menos, yo me he comido cada bicho físicamente, pero me gusta la persona. Te gusta la persona. Claro. Entonces... No, yo también he estado con feo. ¿Por qué salimos de un tema tan profundo? ¿Por qué salimos de un tema tan profundo? No, no, porque quería contar algo gracioso. Yo estuve con feo. No, la personalidad es muy importante. Puede pasarle por arriba a todo lo demás. Eso es verdad. Una personalidad magnética. Volviendo a lo que estábamos desplazando, es eso. Fingir una enfermedad más normal, que te puede venir de un día para otro. Y no mentir con la muerte de tu viejo. No, ahí había un tema... Bueno, pobre amiga Isabel, estamos acá psicoanalizando. ¿Cómo nos sentís al respecto? En el fondo había un tema ahí, capaz que... Pero bueno, yo creo que con todo esto es también un poco como yo me siento, y por eso estuve toda la semana cuando dijimos que íbamos a grabar, de hablar del amor. Hablar del amor. El amor. Ay, me gusta ese video del Louis Thornton, que es de John Macho. El amor. Y empieza como a filosofar del amor. No, no sé si lo tenés listo. No, yo no consumo. No, pero bueno. Eh, sí, sí. Qué complejo es el amor. Qué complejo, sí. ¿Cómo te sentís? ¿Cómo te sentís Isabel? Yo, mi principio... ¿Cómo te sentís Isabel? ¡Sácale el libro! Ya voy a ir a recordar mi título. Aodelar. Yo quiero saber lo siguiente. ¿Alguna vez te estuviste enamorada? ¿Y cuáles fueron los indicios que tu cerebro como captó para decir estoy enamorada? Te están matando. No, es más como eso. ¿Qué es el amor para vos? Es como... No, yo no voy a hablar de mí en sí. No, sí, obvio. Bueno, ¿qué es el amor? Claro, ¿cuándo estás enamorada? ¿Qué es lo que te enamora? Ay, es que yo no me doy cuenta. Ese sería un problema que tengo. ¿No te das cuenta? ¿O no te querés dar cuenta? Lo dejo a tu criterio. Tienes que reconocer que estás enamorada. Lo dejo a tu criterio. Yo no sé... Yo soy muy del auto boicot. Bueno... No, me doy cuenta cuando es... ¿Te puedo decir cuándo no estoy? O cuando no estoy. Sí, tengo un defecto. Ya está, ya está. Todo el mundo lo sabe. Bueno... No, este no porque... Encuentro defectos. ...el ambiente 3D y a mí me gusta que se lo ve en 4. Algo no me cierra en el fondo. O sea, no. Sí, he estado enamorada y algo no me cierra también. Pero cuando hay una voz que me dice... Esto no es. No es lo que yo quiero para mi vida. ¿Ah, sí? No. Es como que te hace ruido. En cambio cuando... Lo hablo desde algo tan vago porque no sé describirlo, sinceramente. Pero bueno, cuando hay... No sé. Es una conexión particular. Es una conexión. Vos te sentís conectado pero... Pero aparte que perdura. Que no sé. Hay algo que el otro te genera que... Que no te lo genera nadie más. Eso sí. Ah, va. Yo reconozco que estando emparejado, ¿sí? Yo tampoco es como que te das cuenta... Yo no me di cuenta fácilmente. Después, estando fuera de la relación, me di cuenta de que sí que estaba enamorado y que permití un montón de cosas. Ah, sí. Me estás sorprendiendo. Fuertes declaraciones. A mí me pasó medio al revés. Hoy día es como... La puta madre. ¿Por qué dejé que pasaran esas cosas? Ah, bueno. Porque estabas enamorado. Por eso. Pero es como hay que... Yo tengo ese problema que es bastante tóxico. Cuando estoy enamorada le dejo que me pasen por arriba. ¿Cuando no? Cuando no, soy una tigra. Cuando no, sí. Ahí sí, el amor. Pero no hacia arriba. Pero si no... Ay, escuché un chiste. ¿Sabés cómo te dicen a vos? Ese es mi gran desafío. ¿Sabés cómo te dicen a vos? Pero... El sapo... Rutoso. ¿Por qué? Porque te pasan por arriba, te hacen mierda y se van. El sapo ruposo... Ruposo, no. Ay, no me sale ahora. Rutoso. No, no, no. La buena está. Ah... La buena no está por la ruta. Ah, ahora sí, entonces. Viste, a mí me ha aburrido tener que explicar los chistes. ¿Te pasa qué? El sapo rutoso. ¿Qué es eso? ¿Sabés cómo te dicen a vos? El sapo rutoso. Rutoso. Rutoso. ¿Y a vos cómo te dicen? Ah, ¿yo qué? Eh... Rola. Un montón de cosas. Eh... Pero bueno, creo que te me apagaste un poquito al empezar a hablar realmente del amor. ¿Cómo te sentís? ¡Explicame! ¿Pero qué es eso? ¡Explicame! ¡Explicame! ¿Cómo te sientes? No sé cómo me siento. Te me encerraste allí... Estoy en un momento complicado. Estamos... ¡Oh! Bueno, eh... Estoy descubriendo qué es. ¿Estás descubriendo? No, estoy descubriendo qué es. Tratando de que esto no sea algo autodestructivo. El amor autodestructivo. ¿Vos decís qué para...? No, no siempre. No siempre. Pero en tu... No debería ser, ¿no? No debería ser. Yo siento últimamente que... Debería ser constructivo, en realidad. Claro, es que hay que construir un vínculo sano. ¡Oh! ¿Qué? ¿Y ya? Es inmolada en psicóloga. ¿Hay un vínculo más sano? ¿Yo? Sí, vos. ¡Ya sé! Es el único. Mi chuva. Así que sí, no. En fin, yo por momentos es como si quiero tener un novio. ¡Ah! Fuertes palabras, Claudio. Quiero tener un compañero. Un compañero de la vida. No, pero... Un rutoso. Un rutoso. Pero que no sea ruto. Quiero un rutoso. No, no, no. Un tanto rutoso. No. Me encantó, me encantó. Estamos dando... Ideas. Ideas para la gente. Pero sí, siento que me está costando un poquito el abrirme a conocer gente. Lo que pasa es que el problema es cuando... El problema está en uno. Claro, sí. Ese es el tema. No es que vos... Que yo soy el que estoy rutoso, ¿me entendés? Exacto. Y a mí me pasa lo mismo. Porque uno no puede poner afuera todos los problemas. No, no, yo sé que soy yo, por ejemplo. Y yo también. O sea, yo tengo... ¿Sabés qué pasa? Y ahí vienen los padres. Que a uno se marcó en la cabeza ciertas cosas. Ciertos patrones, ciertos miedos. Y después como que inconscientemente vas repitiendo. Por oposición o por imitación. Ahí va. Y eso no lo quiero. O esto aún me miento. Repito. ¿Me entendés? Yo siento eso también. Que sufrimos tanto. O en mi caso yo sufrí tanto. El ver una relación. Y después de grande darme cuenta. O empezar a entender todo lo que había pasado. Y es como yo, si veo un gramo. Un poquito. De eso. De eso. Es como no, ya está. Pum. Dirigir a una compañera hago Windows. O sea, cierro Windows, cierro ventana. Y es como no. Acá no. Sí. Yo creo que de la última persona como que me quedé un poquito apelada. O la que salió. De color... ¿De color humilde? Oscuro era ese. Ah, de color humilde. Yo lo dije oscuro. No del abuelo. No entiendo. De una que salía hace poco que íbamos a la plaza a chupar. Es como siempre está... Platónico, totalmente platónico. Bueno, no voy a dar más datos. Vamos a cuidar la intimidad. No, pero no tengo intimidad yo. Soy un libro abierto. Sobre todo abierto. Open mind. Sí, sí, sí. No, pero es eso. Yo a veces es como que me levanto. Es como, no tengo a nadie para abrazar más que a mi hija. Y ella está en modo adolescente, que ya no quiere dormir conmigo. Entonces... Uy, te voy a tirar de vuelta para afuera, mirá. Uno los cría, les da todo. Todos están en modo adolescente. Yo creo que es porque le guste la capita. Ya no te necesita. Pero claro, la verdad está calentita. Para que le des calor. Bueno, yo a partir del viaje aquel que hice el año pasado... Bueno, pasa que yo salí corriendo. ¿Ese viaje? Vos saliste. Es como, se me agotan, se me venden estos días, me los tomo de licencia y me voy. Claro, yo salí corriendo. Entonces, pero estuvo bueno. Y ahí como de que dije, ay, me faltan... Hay cosas que me faltan. Más allá de que te tengo a vos amiga, pero... No sé. Hay cosas que uno necesita. Sí, no sabría ponerlas en palabras, pero... Sí, yo... No sé si en palabras, pero sí como tener a alguien... Hay días que necesito abrazar a alguien, ¿entendés? Que no sea la pobre. Que no sea Cuincha. Si es a Quincha le digo, pobrecita, me tiene... Ay, todavía que me aguanta a mí. Dispensado. ¿De cuándo se va a conseguir un novio? Que me deje en paz. Por favor. Claro, si después le digo, yo ya siempre... Ella está en modo adolescente. Sí. Ah, pero uno... Pero ves, ¿para qué querés un novio? Para abrazarlo. Para llenar mis vacíos. ¿Llenar mis vacíos? Yo hace poco le pregunté a alguien... No sé si decir esto. Pero bueno... ¿A quién le preguntaste? No, no lo voy a decir. Esto lo corté. No. Esto es un... Ay, no me salió el nombre. Esto es sin cortes. Se graba y se graba. Bueno, le pregunté para qué estaba conmigo, ¿no? A alguien. Una persona. Sexo afectivo. Más sexo que afectivo. Cállate. Yo no quiero conservar mi intimidad. Por favor. No seas violenta. Un poco de intimidad. Y claro, no me gustó lo que me dijo, pero en realidad no estuvo mal. El tema es que como que yo sentí que lo que me decía era muy centrado en él. Para sentirme bien, para... Qué horrible estoy diciendo esto acá. Para... Olvidar, me olvido de los problemas, me olvido de las cosas. Ahí va a lo que hablábamos hoy al principio que muchas veces no decimos las cosas por miedo a perderlas. Y ta, él se animó a decir las cosas y creo que ahí te afectó a vos un poco su relación. Pero yo sentí como que era horrible lo que me dijo. Claro, obvio. Porque no era lo que vos querías escuchar. Vos querías escuchar, no sé, que te amaba, que le gustaba estar con vos, que eres una... Me agrada mi persona. Y no, y fue todo un... Me siento bien conmigo mismo, son anestesia que necesito para el día a día. Me hacéis olvidar de no sé qué, de lo mal que pasé en el trabajo. Conclusión, sos un sujeto sexual. Cortá esto, perrito. Yo no voy a poner esto en el podcast. Pero no, no revelamos la identidad de nadie. Sí, la mía. No, perrito, eso... No, pero no, no, esto no lo pongas. Cortalo, no, no, cortalo, porque es demasiado, demasiado. Lo cortamos, sí, obvio. Bueno, sí, yo sentí... ¿Cómo te das cuenta? Y él no se da cuenta. Y no, obvio que no. No lo entiende. Para él es bárbaro todo lo que me dijo. Necesidades, son totalmente distintas a las tuyas. Vos tenías, no sé si un ideal, no sé si se puede decir así, un ideal de lo que era su relación. No, no, no tenía un ideal, porque por algo pregunté. O, claro, capaz estaba como definida. Claro, no se trata, no es un ideal, yo hace rato que no tengo un ideal. Por eso pregunté, porque necesito saber dónde estoy parada. Sí, sí, sí, sí, obvio. Entonces le pregunté no por qué estaba conmigo, para qué. Porque en ese curso que yo estoy haciendo. Ah, claro. Aprendí algunas cosas. Vamos a sacar esto. No. Y bueno, que hay una sutil y muy importante diferencia entre preguntar por qué y para qué, porque vos cuando preguntás para qué estabas también hablando para el futuro. Claro. ¿Por qué estás mirando al pasado, a causa? No, no, hay que vivir el hoy. ¿En cambio para qué? ¿Para qué? Hay que vivir el hoy. Me encantó lo que me dijiste, claro, o sea, no sé si buscaba que me dijera que me amaba, pero bueno, algo respecto a mí, que yo estoy también, ¿no? Era todo yo, yo, mi necesidad. Siempre fue yo, yo, yo, visto desde afuera. Sí. Vos ibas corriendo a la dirección izquierda y él iba a la puesta, a la derecha. No sé cómo decirlo. Que dejo de hacer cosas para estar con vos. Pero uno deja de hacer cosas para estar con la persona que... Porque yo, no sé, podría estar en casa con Quinn, mirando tele, y en sí no, decido estar acá, pero porque me gusta, yo disfruto estar el tiempo contigo. Pero él, lo que asumo yo que él veía, es que él necesitaba autosatisfacer su necesidad de macho para salir a la feminista de adentro. Pero sí, es un poco de autocompasión. Llenar ese vacío que él siente, que no sabemos por qué, y bueno, lo llena contigo. Pero me entendés que ese juego palabras... Sí, está bien o está mal? ¿Qué es lo que está mal? Ay, a mí algo me hizo ruido, no sé qué. ¿Me entendés? Porque tampoco era tan malo lo que dijo. No, yo no... Pero no me gustó. Lo que pasa es que yo creo que no te gustó. ¿Qué es lo que no me... no me doy cuenta ni siquiera. Pero no me gustó. No te gustó porque no te contestó. No me doy cuenta ni siquiera, pero no me gustó. No te gustó porque no te contestó lo que vos tenés internamente. O sea, vos tenés una respuesta. Vos al mandar un mensaje o pedir una explicación de algo, tenés en tu subconsciente la respuesta. Vos querés una respuesta, por lo general positiva. Y esta respuesta lo que te generó es todo lo contrario. Una respuesta donde vos no estás incluida, donde vos no sos el centro. No es por un tema de ego de que yo quiero ser el centro de atención, sino que no estás incluida. Porque no es lo mismo decir, lo hago por mí o lo hago para pasar un rato juntos. Porque quiero verte, porque tengo la necesidad de estar con vos. Eso, eso. Eso era lo que yo quería. Claro. Yo sabía ponerlo en palabras. El tema es ese, vos la respuesta que querías, o asumo yo, es eso. Que la respuesta sea en conjunto. Claro. Pero ahí es donde se construyen las relaciones, creo. Cuando sabes que vas a pensar en vos y pensás en un conjunto. Es como, bueno, yo qué sé, hoy porque sé que te gusta caminar a la rambla, vamos a caminar a la rambla para disfrutar juntos. Yo disfruto estando con vos y vos disfrutá ir a la rambla a caminar. Tengo que anotarme porque se me van las palabras. Eso, hacer cosas que a mí me gustan también. Claro, es como, pero ahí va, es un 50-50. Las relaciones se construyen y... Ya lo metí, es un chiste. Me siento así, me falta hacer... Y me cae el pare de la psicología. Lo que me sentía, me sentí como que no sé qué quiero escuchar, pero esto no es lo que quiero escuchar. ¿Me entendés? Me hizo ruido, me hizo yo, yo, yo. Y después cuando hablé con él, que hablé poco igual, pero le mandé ese... Tampoco, él no entendía y me da cuenta las frases y como que no entiende qué es lo que quiero escuchar. Yo tampoco, y yo tampoco sé qué quiero escuchar porque me enredo tanto, pero es esto lo que quiero escuchar. Es que me consideran también. Pero eso es literalmente en lo que se basan las relaciones. Es dejar de pensar en uno y en su beneficio mutuo al pensar en el beneficio en conjunto. El estar incluido en la vida de alguien. También pasa de que bueno, sí, es eso, dejar de ser uno para ser dos, pero en uno. Funcionarse. Sí. Ay, qué profunda, mi amiga. Hermosa palabra. Porque claro, yo no... Esto no lo pongas. No sé, corta. No, esto está re bueno. Sí, pero buscaré la vuelta, no sé. Pero él habla mucho de... No, no, pensar. Es que sí. O sea... Claro, sí. No, esto no es lo que yo quiero escuchar. Pero no es que diga, ay, quiero escuchar que está enamorado de mí. No, pero algo que me considere a mí. Todo lo que me considero a mí. Todo lo que me considero a mí. Todo lo que me considero a mí. Todo lo que me considero a mí. Todo lo que me considero a mí. Todo lo que me considero a mí. Todo lo que me considero a mí. Todo lo que me considero a mí. Todo lo que me considero a mí. Algo que me considere a mí. Todo sentirme bien yo. Para olvidarme de los problemas. No sé qué. Claro, es una necesidad. Yo creo que yo... O sea, si vos me ponés a pensar a mí, yo no busco tampoco que haya porque estoy enamorado, soy enamorada de mi vida. No, es eso. Es estar incluido en la vida de alguien. Eso es lo que uno quiere escuchar. Es como que, sí, esto es importante para mí. No es que sos una distracción pasajera. Eso es. Exactamente. Por eso nosotros estamos siempre... Por eso yo venía... O sea, a mí me gusta todo esto. Y como que veníamos... Y está bueno exteriorizarse porque sentirme bien yo me estorbe bien de lado a lado y por eso digo así, no, borra, borra, borra. No, yo también, pero tampoco... Bueno, buscaré la vuelta buena. ¿Tampoco puedo exponerme de tal manera? Por favor. Mira, mira, estamos en ese plan de grabar toda esta temporada y después publicarlo. Al ritmo que damos, vamos a estar cinco meses grabando. Ya vamos a estar más que superados con ese tema, ya vamos a estar más que olvidados. No, pero la cara que expone siempre soy yo. No, siempre no. Empezamos en el momento de la pelea. Claro. Pero creo que eso está bueno porque en sí me gustaba la respuesta de lo que vos querías. Porque viste cuando no las tenés en tu mente. Como generamos, como todos los planteos los hacemos antes de grabar y luego nos ponemos a grabar y es como, o sea, esto es también un poco de lo que me capaz y lo mismo que le puede pasar a otra persona que está escuchando. No me vengas a hacer las psicológicas. Me estás manipulando para convencerme. ¡Ay! ¡Sobaniela! ¡Sobaniela! A pesar de la manipuladora. ¡Cállate! Un rasgo de mi mamá, manipular. Bueno, pará, dijiste unas palabras. Eso igual, eso sí lo podés poner, la parte de... No, no, no, además ahora como que volví a ser yo la graciosa es como que, o sea, me bajó el pie de la boca. ¡El pie de la boca! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie! ¡Me faltó el pie!