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Parte 1 / Solo entre los demás.

Parte 1 / Solo entre los demás.

javier lopezjavier lopez

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Siempre e creído que mi vida es extraña, pero jamás e pedido un punto de vista ajeno, acompáñame a descubrirlo, si te gusto y te interesa continuar escuchando ponlo en los comentarios.

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Javier is starting a podcast where he will talk about his life and strange experiences. He talks about feeling different and not fitting in with other kids. He shares incidents where he was rejected and mistreated by his peers. Despite this, he still wanted to be accepted. He also mentions a bittersweet memory of his first kiss with a girl, which ended in rejection. He recalls instances of being excluded and even physically hurt by other kids. Javier reflects on his experiences and the impact they had on him. ¿Qué onda mis amigos? ¿Cómo están? Yo soy Javier y pues nada, vamos a comenzar un pequeño podcast dedicado al cien por ciento lo que viene siendo parte de mi parte de mi de mi vida y algunos otros pequeños detalles que por ahí me resultaron un poco extraños a lo largo de ella. Esa va a ser la primera parte no sé cuántos vayamos a vaya a necesitar. Una disculpa los voy a subir así sin ningún tipo de edición solamente subido desde audiocity hablando lo más claro que se pueda. Obviamente es mucha edición entonces voy a intentar contar esta historia lo más claro posible. Yo tenía alrededor de seis años cuando me di cuenta que algo literalmente andaba mal conmigo. Por un lado tenía la fortuna de que nací siendo un poco agraciado en las palabras sinceras decían que era carita y modestia aparte eso lo descubrí desde muy temprana edad las niñas precoces, obviamente yo también ya teníamos algunos pensamientos un poquito inclinados hacia hacia la atracción. No atracción sexual más que nada la atracción y la curiosidad por el sexo opuesto. Qué pasa que fue algo muy natural hacia mi persona durante toda mi vida o sea siempre tuve una bendición de ser lo suficientemente atractivo como para saber que si una chica me hablaba era algo normal y cotidiano y eso me pasó toda la vida. Pero también me di cuenta de que estaba la otra cara de la moneda estaba la la parte en donde no podía encajar en lo que vienen siendo los los estándares normales de un muchacho o de un niño o de un grupo de muchachos en donde hay siete muchachos y todos son amigos sin ningún problema sin ninguna distensión pero hay uno que siempre es distinto o sea no sé si esto sólo me pasó a mí yo quiero pensar que no pero era un rechazo absoluto un rechazo inmediato cuando yo me acercaba a alguien no sé si era mi fisionomía mi forma de hablar o no sé pero había un rechazo por parte de la comunidad que me siguió para toda la vida aunado a eso también hubo un tipo de protección que yo desde muy chiquito alcancé a crearme una protección llamémosle una prevención ante los sucesos que acontecían en el transcurso de mi vida yo ya sabía cuando algo estaba mal yo ya sabía cuando algo era peligroso para mi persona entonces lo que yo hacía era medir la magnitud de lo que los otros jóvenes querían hacerme y yo decidía si iba a aguantar esa broma de niños porque era mi decisión ir o no ir entonces al final de cuentas siempre iba porque al final yo quería ser aceptado pero llegó un momento en el que me di cuenta de que yo era distinto y no distinto bueno yo sentí siempre que era distinto malo o sea como que era raro o diferente yo no le voy a dar más vueltas a esto yo siempre creí que que los demás eran superiores por algún tipo de déficit mental o no sé yo de hecho no me siento ni a gusto contando esto me gustaría parar y y dejar de platicar de estas cosas porque no es algo que me va a sentir bien de hecho se siento vergüenza estoy hablando lo más bajo que puedo no sé no me siento cómodo en una ocasión yo estaba sentado jugando y cuando recién empezamos cuando recién llegamos creo a vivir a la casa esa los primeros recuerdos era la pobreza los niños de alrededor me buscaban porque había llegado otro niño no no sé si yo tenía tres años o cuatro años la verdad no lo recuerdo bien pero iban y me buscaban pero luego llegaron más niños y hubo una construcción nuestras casas la casa que yo rentaba que fue la primera en la colonia y luego hubo otras dos o tres casas todo lo demás era monte y los albañiles se agarraron tierra de un terreno para construir una casa increíblemente en un hoyo gigantesco para nosotros y decidimos hacer un fuerte como una una una casa de nuestro escondite no nuestro fuerte y ese fue el primer conflicto que tuve yo uno versus varios ellos no querían que yo que yo entrara a la a la casa por alguna razón me empezaron a correr desconozco por completo por qué me empezaron a correr y yo les dije así pues van a ver no que no estén voy a destruir todo y me fui y al otro día regresé y y vi que todo estaba destruido la casa que habían hecho todo y entonces todos estaban ahí y empezaron a culparme de que yo había destruido la casa y yo les dije pero yo no puedo ni cargar esas maderas no que tú fuiste que no sé qué y yo estoy seguro de que ellos habían sido pues que destruyeron la casa pero lo hicieron para que yo me sintiera mal fue muy doloroso y lloré y ahí fue cuando me rechazaron en otra ocasión estaban jugando fútbol y bueno en méxico tirar penales es como práctica no para disparar y del manchón penal a la portería y el portero pues práctica pararlos no? o sea los penales lo clásico pues resulta que yo tenía como cinco años creo y me paran directamente en la portería me paran directamente en la portería y un peladito más grande empieza a tirar penales y yo no sabía ni siquiera lo que era jugar fútbol yo sólo estaba parado ahí y y como un animalito supe que me iban a hacer daño cuando recibí el primer pelotazo en la cara me dieron en la mera nariz yo sentí en ese momento que de la fuerza que me había dado tan fuerte yo había girado por completo pero ahora de adulto me doy cuenta que no solamente fue el golpe en la cara me tiró caí desmayado y me desperté a los pocos segundos y yo aguanté aguanté ese pelotazo y no le dije nada a nadie sólo me fui llorando y les dije que ya no quería jugar después estaba yo triste porque al otro día o tiempo después no recuerdo yo regresé y todos estaban jugando y eran pues eran niños acomodados no gente gente de dinero que tenían si como mínimo un papá trabajando en pmex o en plataformas o cosas en donde pues encima bien mi padre desafortunadamente no nos dejó nada él murió y pues ya se acabó al otro día o tiempo después les digo fui y pregunté qué estaban haciendo y estaban jugando y me rechazaron me dijeron no no no no no vete vete vete y me rechazaron y entonces yo fui y me senté por ahí en una banqueta y en eso veo que todos se van en sus bicicletas y en ese momento sale una de las hermanitas de un tipo de ellos una niña igual que yo unos seis años siete años muy bonita y me dice ¿quieres jugar a escondidas? y le digo sí y me dice vamos y le digo sí pero ¿quién busca? hombre dice ven nos lo imaginamos y fuimos atrás de nos escondimos atrás de un de un motorralito y le dije ¿y ahora qué? y ella me dio mi primer beso ahí y para mi mala y buena suerte uno de los amigos de de su hermano nos vio que estábamos ahí y llegó y la niña se fue corriendo nunca jamás la volví a ver nunca nunca nunca nunca y te digo que uno ni siquiera pensaba en el amor ni nada de eso ni siquiera me importó se siente más nostalgia ahorita de no haberla visto en esa época que lo que sentí cuando estaba yo chiquito o sea no existía eso nada llegó y me dijo ¿qué estás con mi hermana? y me empezó a decir si te vuelves a ver con ella te voy a y yo le dije que estábamos subiendo a escondidas y ella me dijo no la verga que no sé qué y se fue y esa fue nací de las pocas veces en otra ocasión los papás habían comprado globos muchos globos los papás de ellos y habían habían llenado sus globos con agua y entre varios muchachos pues estaban jugando a reventar los globos y a mojarse ahí en la en los patios y yo me acerqué y hasta eso me permitieron jugar me dijeron sí y empecé a jugar con ellos y y en una de esas yo me asomé por un lugar y estaban aventando como globos de agua pero me di cuenta que había un chiquillo que a mí no me estaba aventando globos me estaba aventando piedras y una de las piedras me dio en un ojo y ya ahí me pusieron ahí no pasa nada tranquilo fue un accidente que no sé qué me confundí creí que era un globo y te pegué y yo por dentro yo sabía que no mames o sea ¿quién confunde un pinche globo con una piedra? y no pues resulta que que me había dejado una herida en el ojo en el párpado por fuera y ya fui y le dije a mi mamá, mi mamá me lo vio y yo tenía mucho miedo porque no por mí ¿no? ¿y qué pasó? y le dije a mi mamá no yo me caí y me pegué así en la en la cara así en el piso una piedrita y ya desde chico nunca fui chivatón jamás fui chivatón yo siempre tuve muchos huevos de niño para no decirle nada a nadie y yo tenía muchos hermanos mayores y nunca le dije nada a nadie y era una en una ocasión estábamos estaba sentado yo mi mamá me me bañó afuera yo me acababa de bañar y llegan todos y me dicen oye ¿qué hacían a la vuelta? eran como cuatro bicicletas y había uno por niño y en una bicicleta eran dos así y yo ya sabía que me iban a hacer algo y y me dice y le digo no pues va que vamos a hacer subete vamos a ir a ver un lugar acá que según está embrujado y en eso pues yo agarro y me subo ¿no? pero pero yo me subí y desde que me subí yo presentí lo que acá en el sentido anágnido y yo sentí que había algo raro ¿no? porque a mí nunca me invitaban a jugar me tenían como rechazado como un mugroso ¿no? y en esa ocasión me dijeron súbete y me subí a los diablos así se llamaban a los fierritos donde se paraban atrás en la bicicleta los niños y me fui fijando bien cuadra tras cuadra por dónde iba pero aún que yo sabía que me iban a hacer yo me sentí parte del grupo y fue un sentimiento que hasta la fecha yo me sentí muy feliz cuando iba con ellos yo agarrado de los hombros del amigo el niño llevamos a una aventura ¿no? contentos y la bicicleta así, éramos un grupo de niños y llegamos a un río de agua que al parecer era como una poza pero muy grande y hay una muñeca y en medio así ¿no? pues resulta que me dicen mira súbete a ver la muñeca no pero para eso ya habían pasado como unas cuatro o cinco cuadras más o menos o sea estábamos bien lejos estábamos súper lejos y no pues me bajo y en ese momento arrancan arrancan todos y se van y me dejan ahí como a cinco o seis cuadras de mi casa que para cualquier niño inocente que no es observador hubiera sido lo peor porque te hubieras perdido pero yo siempre tuve ese pequeño ese pequeño esa forma de ser de fijarme más allá de lo que de lo que mis ojos veían y logré regresar a mi casa me tardé pero logré regresar nunca le dije nada a nadie pero al final de cuentas eso me persiguió toda la vida esa mala leche o esa mala fortuna de batallar con los muchachos me persiguió toda la vida y es algo con lo que lidié pero también también tuve algo raro y era como como si algo me cuidara pero bueno vamos a terminar el primer capítulo hasta aquí voy a subirlo a la audiocity a la web si les gusta el contenido bueno pues dejen un comentario y si quieren seguir escuchando yo voy a seguir subiendo partes de estos episodios no necesito mil comentarios no necesito mil reproducciones con una sola persona que publique parte 2 yo se la subo mientras no haya un comentario que diga parte 2 pues no tiene caso porque pues a quién le voy a leer a quién le voy a a contar mi vida si no le interesa a nadie así que por ahí pongan en los comentarios parte 2 y cuando de gusto aunque sea uno yo a ese comentario le cuento la siguiente parte yo soy Javier y pues por aquí vamos a estar subiendo podcast de vez en cuando un gusto que tengan ustedes una muy muy buena tarde noche o día

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