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The speaker is starting a radio program and greets the listeners. They mention the radio station and provide a number for text messages. They greet a colleague and express how much they missed them. They discuss the topic of the program, which is politics. They mention the fluctuations in the exchange rate of the dollar and its impact on inflation. They talk about the importance of controlling prices and criticize the lack of control and the influence of supermarkets on prices. They also discuss the role of interest rates in inflation. They mention the need for better regulation and distribution of products to prevent price manipulation. They criticize the concentration of production in certain companies and the negative impact it has on the market. Buenos días, mendocinas y mendocinos. Estamos comenzando el programa número 38 de HDP. Hablemos de política. En LV8, Radio Libertador Nacional. Los que quieran mandar mensajes, solo mensajes y no audio, pueden mandarlo al 261-333-556. Espero que lo hayan anotado. ¿Cómo va, compañero? Han llegado unos compañeros a ayudarme a la radio. ¿Cómo le va, señor Kawasaki? ¿Cómo están? La verdad es que los extrañaba muchísimo. Los he venido escuchando permanentemente, pero bueno, antes que nada, quería también saludar a Patricia. Nos encontró hace mucho que tampoco andaba por acá por el programa. Los he extrañado bastante. Así es que... Es una genia, es una genia. Es una manera también felicitarlo acá al compañero Elizondo, que también está tan elocuente. Porque la verdad es que ustedes dos han logrado lo que yo no pude lograr. ¿Qué? El yin y el yang, acá, ¿veo? La elocuencia contra la irreverencia, las cosas mega extrañas. ¡Ah, mi amigo! Las reverencias, cosas mega extrañas. Yo tendría que hacer el yin, así que... Bueno, es un sitio... ¿El yin es un té? ¿Eh? ¿Es un té? No, es una bebida. Ah, es una bebida. ¡Ah! Bueno, comenzamos... Comenzamos. Esto lo hemos creado... por iniciativa de los Kawasaki a Fedo Arias. Ya le digo Kawasaki porque no tiene onda. Hemos creado... Pasaron cosas. A ver. Pasaron cosas. Esta semana... ¿Qué pasaron esta semana? Tenemos varias que vamos a comentar. Les voy a dejar a... ¿Lisandro? Señor, ¿puede dejar un poquito el celular? Estoy compartiendo el link porque me lo piden. ¡Ah, bueno! Pero estoy atento, por favor. Bueno, pasaron cosas. Están analizando la cotización del dólar. Ahí está. Vamos a hablar primero del dólar. A ver, ¿qué opinión tienen ustedes? Porque me duele un poco la garganta y los voy a dejar hablar ustedes. Está muy bien. Se le agradece, entonces, en todo caso, al dolor de garganta. Porque, sí, el tema del dólar es algo que está completamente previsible. Es difícil plantear un dólar a menos de mil pesos. Y la explicación, por ahí, bueno, no sé si compartirá Alfredo, es el tema de la impresionante emisión monetaria. Hasta el año 2016 se había alcanzado, por primera vez, digamos, duplicar la emisión monetaria. A partir de 2018 hasta ahora llevamos siete veces ese número de la primera emisión monetaria. O sea que podríamos hablar de un dólar, para sincerar, tampoco para andar con falsas expectativas, porque el único aspecto que podemos marcar como positivo es, en la realidad argentina, fenómenos como las paritarias o las actualizaciones, o el músculo de saber pelear contra la inflación, no reduciéndola sino adaptándonos a ella. Y en ese punto es muy interesante algo que yo me acuerdo, después del año 89, cuando distintos países de Europa del Este empezaban a tener problemas, contrataban economistas argentinos, inclusive algunos empresarios, para asesorarse de cómo manejar la inflación, un fenómeno que para ellos era, o en números tan grandes, era completamente desconocida. Cuando nosotros tenemos el músculo, y es que en las escuelas de economía, con algunos economistas muy importantes con los que he podido tener contacto, ellos hablan de que en nuestras economías, o en la economía en general, se usan vectoriales concretas, números cerrados, y tratan de adaptar la realidad a esos números. Cuando en realidad, la ciencia económica no es matemática. Entonces, no estoy haciendo ninguna ponderación de la inflación ni cosas por el estilo, pero estoy diciendo que el impacto que tiene la inflación, que es grande, que va a seguir siendo, que en realidad el dólar está completamente contenido, el dólar oficial está al 10% de lo que pudiera llegar a estar, o menos, porque cuando hablan de dolarizar, no van a poder dolarizar, van a querer dolarizar a números absurdos. Digamos que en esta disparada del dólar, que es completamente previsible, que no hay nada más miedoso que el dinero, o sea que inmediatamente se retrae, se refugia, bueno, es un panorama esperable, pero no nos olvidemos que en ese caos, siempre, en Argentina por lo menos, tratamos de adecuar las variables económicas a la realidad económica y no al revés. Bueno, yo comparto plenamente. Es un análisis que inclusive ya no es ajeno ni al común de la gente este análisis, porque a veces, bueno, quizás como lo ha explicado prácticamente, como siempre digo, más claro que agua de manantial, pero digo, ya no es una cuestión compleja para que la gente entienda qué es lo que significa el tema de cuando hay una disparada del dólar. Lo que hay que analizar también es que la disparada del dólar es una de las tantas variables que generan o propulsan o impulsan la inflación en la Argentina. Digo en la Argentina, porque es, bueno, ya todos lo conocemos, ya es prácticamente una consecuencia de una situación, porque digamos que es primero el huevo o la gallina, ¿no? Yo siempre he insistido en este programa y en todos los ámbitos donde yo me puedo explayar sobre estos temas, digo que uno de los problemas básicos que hay es el tema de controles. El dólar es una variable más, pero aún así, cuando el dólar ha estado planchado, quieto, ha seguido generando inflación en el impacto de precios o a veces por distintas medidas que se han ido tomando, el dólar no ha sido la única variable de los impactos inflacionarios. La falta de control evidentemente es una, porque uno de los grandes carmas que padecemos acá en la Argentina es justamente que esa falta de control genera especulación y la falta de control favorece o favorecita de alguna manera ese tipo de variable que impacta en los bolsillos de la gente a pie. Hemos visto muchos artículos, muchas notas, inclusive algunas cuestiones que circulan por internet, no digo curiosamente, pero normalmente algunas manifestaciones, algunos pequeños y medianos comerciantes, donde tienen ofertas que están casi al 50 o al 60% menos de los productos de los hipermercados. Esto es producto de que la manera de comprar que tienen los hipermercados, ellos de alguna manera manejan los costos y son referencias de los minoristas muchas veces. Formadores de precios, aunque le corran la cola a la jeringa, los supermercados son formadores de precios. Así como la tasa que paga el Banco Central genera inflación. La tasa que paga el Banco Central, porque si te está dando el 100%, que vos tenés 10 millones de pesos y te dan el 100% anual. 118. 118, vamos a poner, yo digo para hacer una cuenta redonda, pero es el 118 y es un dato valiosísimo porque estábamos en 92, no mentira, pero estábamos hace poquito en 92 y ya estamos en 118. Entonces vos tenés una expectativa de ganancia del 100% sobre tus pesos anual. Entonces si vos tenés un kiosco que te está dando el 70, aunque tenga 100 millones de pesos, vas a ganar 70 millones de pesos, podés alimentar de todo, pero no podés ganar menos de lo que te fija la tasa. Entonces la tasa es la formadora de precios. Entonces vos vas a un supermercado y el kilo de pan está a 1700. Bueno, con venderlo a 500, más o menos la dibujás. Bueno, no, pero ¿cómo voy a hacer yo eso? Y realmente es así. Entonces sí, el otro día estuvo Ramón, de protectora, y realmente creo que la palabra es que hoy nos sentimos indefensos. No hay nadie que articule eso y no hay nadie dirigiendo que esté en la parada del colectivo. Allá está, o sea, termine de dirigir y se vaya a la parada del colectivo. Entonces ese contacto con la realidad queda completamente disuelto, digamos, por esa situación de... Nosotros tuvimos acá, hicimos varias, ya le mostré varias notas a Guillermo Moreno, y en una de ellas él hizo hincapié que los controles de precios, que muchas veces pensamos, yo por lo menos soy uno que pensaba así, tal vez en algunos momentos lo sigo sosteniendo, que los controles hay que hacerlos en uno, él decía que no. Los controles en realidad hay que hacerlos en el origen. En realidad el Ministerio de Economía y por intermedio de la Secretaría de Industria y de Comercio, tienen tabulado prácticamente todos los valores, cómo se conforma un precio determinado para un producto específico. Vamos a decir la leche o la harina y todo lo demás. Para decir, saben cuáles productos para poderlos llevar a góndola, todos los procesos que tienen que ver, inclusive los de la misma elaboración del producto, aquellos productos que son importados, aquellos que son valor dólar, a qué dólar, inclusive lo tienen también tabulado, si es a un dólar oficial o es a un dólar paralelo, tienen absolutamente todo tabulado. Vale decir que no hay sorpresas en un precio final. Sin embargo, si uno hace ese control desde el precio final llevado a góndola, hay una plusvalía de ese producto que realmente es sorprendente por donde uno mire. Esto no es un secreto, es un secreto a voces. Hay un fenómeno, y hay un cuestionamiento muy grande a Moreno, que surge solo nomás de su política. El fenómeno que uno casi podría decir, bueno, lo condenamos a Moreno, porque en realidad si cometió un gravísimo error fue negociar con cinco personas, poner acuerdo de precios con cinco personas. Entonces llevaste y concentraste mucho más, y eso te vuelve infinitamente más vulnerable, porque ellos se llaman por teléfono, hacen un contacto, de hecho eso es lo que sucede, entonces dejas vulnerable a la sociedad. Entonces vos tendrías que haber atomizado, y eso yo sí se lo diría, por supuesto, de reclamarle, tendría que haber atomizado la producción. No puede haber una gran productora de leche, tendría que haber en cada pueblo, si la demanda de leche es real, bueno, en cada pueblo tendría que haber un tambo. Entonces aquel gran concentrador, bueno, porque no puede ser que la leche... Pero está especificado por ley de que cada hipermercado tiene que tener un porcentaje que no lo cumple. Y ahí está el fenómeno, porque ¿cómo lo vas a cumplir? Dices, yo lo cumplo, ponele, te dice así, lo cumplo, lo mando bajo el algodón, lo que sea, pero lo cumplo. Bueno, si no tenés otros tambos, porque vos ya los destruiste. ¿Por qué? Ese es el fenómeno que se da, que nosotros lo vemos ahora, ponerle con la producción de pollo. Nosotros hace 50 años, yo nacía en ese momento, pero digo, en ese momento... ¿Qué cruce esto? No, no... Bueno, a mí me parece que te sacaste unos años encima, vos. No, no, no, no. Para mí que vos naciste con los pollos. Claro, bueno, pero mira, vos fíjate. En aquellos años, la basura que producía una casa se podía quemar. ¿Viste? Se cometió un error, y lo que nosotros llamamos inteligencia, que es algo que en algún momento tenemos que discutir, no puede ser inteligente, no puedo ser yo inteligente si se arma una bomba atómica. No estoy haciendo una apología de la ignorancia, pero quizás yo soy más valioso por lo que ignoro que por lo que sé, probablemente. Porque sé consumir, ¿viste? Pero lo más valioso... Esa película famosa, Forrest Gump, que muestra eso, justamente. El valor... Hago un paréntesis. ¿Cómo terminamos del dólar? Es que ahora vamos... No, no, pero quería decirme, porque acababa de decir algo que es muy interesante, y me imagino que todo el mundo lo ha visto, la película Forrest Gump, que era justamente la, digamos, la... Esta tesis de, digamos, de ignorar y ser el tipo más feliz del mundo, ¿no? Y lograr cosas de acuerdo a su ignorancia. O sea, prácticamente todas sus cosas que llegaron en su vida fue producto de ser una persona prácticamente autista general, y no tenía ningún tipo de... Pero él corría mucho, yo prefiero que me pise la camioneta, ¿viste? Pero hay un gran filósofo, creo que fue Sócrates, que dijo, si yo fuera ignorante sería más feliz que ahora que sé mucho. Claro, pero ahí Sócrates pone que es una gran virtud del conocimiento, pero en aquel conocimiento, ¿no? Entonces, en aquel universo del conocimiento, y hay un gran error en la ignorancia. Hoy realmente hemos comprobado que es precisamente... Acá los que están destruyendo el país y el mundo son las universidades, o sea, me refiero, es el conocimiento lo que está destruyendo. No encontrás gente en Alpargata, no encontrás al albañil dirigiendo al mundo. Encontrás gente con muchos estudios, o sea que los que están destrozando todo y que arman una guerra han salido de Harvard, han salido de las universidades más prestigiosas. O sea que ese conocimiento es poco inteligente. ¿Por qué? Porque no permite la supervivencia de la especie. Ahora yo quiero contar algo sobre el dólar. Alfredo, ¿me escuchó un poquito? No, no mire la computadora. Te tengo que mirar los ojos. Ayer fui a pagar, escuchen bien oyentes, porque esto es gravísimo lo que le voy a comentar. Fui a pagar un impuesto a Montemar. Había 50, 60 personas haciendo cola. Como yo iba a pagar un impuesto, no iba a comprar dólares. Entonces me llamó la atención que había mucha gente haciendo cola para comprar dólares. Entonces me pongo, había dos personas delante mío para pagar el impuesto. Y le pregunto a un guardia, le digo, esa cola que está afuera, ¿para qué es? No, dice, vienen a comprar dólares. Finalmente en la otra cola vi un muchacho y le digo, ¿vos venís a comprar dólares? Escuche lo que me dijo. Toda la gente que estaba ahí están pagadas por los arbolitos, las cuevas. Porque Montemar vende el dólar a 6.40. Entonces, ¿qué hace? Te paga entre 7.000 y 10.000 pesos diario para que vos pongas tu documento, tu nombre, una caja de ahorro en dólares. El Montemar vaya, compra dólares y los guarda en la caja de ahorro. Todos los días, esta gente, o día por medio, van a comprar dólar a 6.40, se lo llevan a los arbolitos y los arbolitos los venden en 8.40. Fíjese la corrupción que hay ahí, pero ahí no la denuncia nadie. Eso no la denuncia nadie. El fenómeno, por ahí, para analizar, es este. En realidad, soy yo el que debe velar en un universo individualista, ¿no? Por supuesto que yo tengo que velar por la comunidad. Pero, o tienen que haber verdaderos controles, o tienen que haber verdadera transparencia. Y a veces, otro fenómeno que se da, que tampoco lo analizamos, es el fenómeno de permitir que ciertas cosas sucedan como liberadores de tensión en sectores que son tremendamente demandantes. Fíjate vos qué cosa, 200 pesos menos cada dólar. Ahí en Montemar. Bueno, me alegro de la propaganda que le ha hecho a Montemar. Me imagino que le habrá pasado algún dinerillo el señor pagano. No, lo estoy denunciando, lo estoy denunciando. Montemar, ustedes son unos delincuentes. No diga eso, que después viene... Bueno, yo se lo digo. Está muy bien. Estamos a tiempo para una pausa, Patricia.