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The speaker discusses the spiritual day and reads passages from 1 Kings chapter 8 and 2 Chronicles chapter 5. They highlight verses that talk about praising and praying to the Lord, asking for His presence and forgiveness, and following His commandments. They emphasize the importance of singing together to worship the Lord. The speaker concludes with a prayer asking the Lord to fulfill His promises and thanking Him for listening. Día 164, Día espiritual del miércoles 12 de junio del año 2024, basado en 1 Reyes capítulo 8 y 2 Crónicas capítulo 5. Los pasajes que llaman la atención son los siguientes. 1 Reyes capítulo 8, 15, 23, 29, 30, 57 y 58 que dicen así. 15 Y dijo, Bendito sea el Señor Dios de Israel, que con su mano ha cumplido ahora lo que con su boca había prometido a mi padre David. 23 Y dijo, Señor Dios de Israel, no hay Dios como tú arriba en el cielo ni abajo en la tierra, pues tú cumples tu pacto de amor con quienes te sirven, y te siguen de todo corazón. 29 Y 30 Que tus ojos estén abiertos día y noche sobre este templo, el lugar donde decidiste poner tu nombre, para que oigas la oración que tu siervo eleva hacia ese lugar. 31 Oye la súplica de tu siervo y de tu pueblo Israel cuando ore en este lugar, oye desde el cielo donde habitas, escucha y perdona. 52 Que el Señor nuestro Dios esté con nosotros, como estuvo con nuestros antepasados, que nunca nos deje ni nos abandone. 53 Que incline nuestro corazón hacia Él, para que sigamos todos sus caminos, y cumplamos los mandamientos, estatutos y leyes que Él les dio a nuestros antepasados. 5 Y cuando tocaron y cantaron al unísono, Él es bueno, su gran amor perdura para siempre, una nube cubrió el templo del Señor. Meditando en primera vez capítulo 8 y 15-23, bendigamos a nuestro Señor y Dios y pidámosle que cumpla con su mano lo que su boca ha prometido. Porque Él es nuestro Señor y Dios, y no hay Dios como Él arriba en el cielo ni abajo en la tierra, pues Él cumple su pacto de amor con quienes le sirven, y le siguen de todo corazón. Meditando en primera vez capítulo 8 y 15-23, Dios el Señor dice y quiere que le pidamos que sus ojos estén abiertos día y noche sobre su templo, el lugar donde decidió poner su nombre, para que oiga las oraciones que sus siervos elevan hacia ese lugar. Además, que oiga la súplica de sus siervos y de su pueblo cuando oren en este lugar, que oiga desde el cielo donde habita, que escuche y perdone. También dice y quiere que le pidamos que Él, nuestro Señor y Dios, esté con nosotros como estuvo con nuestros antepasados, que nunca nos deje ni nos abandone. También dice y quiere que le pidamos que incline nuestros corazones hacia Él para que sigamos todos sus caminos y cumplamos los mandamientos, estatutos y leyes que Él les dio a nuestros antepasados. Meditando en segunda vez capítulo 5-13, Dios el Señor dice y quiere que cantemos al unísono el canto que dice, Él es bueno, su gran amor perdura para siempre, para que la nube de su presencia cubra su templo, a nosotros que somos el templo del Señor. Padre nuestro que estás en los cielos, hoy te bendecimos Señor y Dios nuestro, y te pedimos que cumplas con tu mano lo que tu boca nos ha prometido, porque tú eres nuestro Señor y Dios, y no hay Dios como tú arriba en el cielo ni abajo en la tierra, pues tú cumples tu pacto de amor con quienes te sirven y te siguen de todo corazón. Por tanto, ayúdanos Padre a siempre servirte y seguirte de todo corazón. Padre Santo hoy te pedimos que tus ojos estén abiertos día y noche sobre tu templo, el lugar donde tú decidiste exponer tu santo nombre, para que oigas la oración que tus siervos elevan en ese lugar. Padre escucha las súplicas de tus siervos y de tu pueblo cuando oremos en este lugar, escucha desde el cielo donde tú habitas, escucha y perdona. Padre Señor y Dios nuestro, hoy te pedimos que tú estés con nosotros como estuviste con nuestros antepasados, nunca nos dejes ni nos abandones. Padre hoy te pedimos que inclines nuestros corazones hacia ti para que sigamos todos tus caminos y cumplamos los mandamientos, estatutos y leyes que tú le distes a nuestros antepasados. Padre grandioso hoy nos disponemos y ayúdanos cuando estemos juntos adorándote a cantarte al unísono el canto que dice Él es bueno, su gran amor perdura para siempre, para que la nube de tu presencia cubra tu templo, nos cubra a nosotros que somos tu templo Señor. Todo esto te lo pido Padre amado, quieras tú hacerlo, te lo pido conforme a tu palabra, te lo pido porque creo que tienes el poder para hacer lo que te pido, y te lo pido en el maravilloso nombre de tu amado Hijo Cristo Jesús, mi Señor, mi Rey, mi Salvador y mi Dios. Gracias por escucharme, y gracias porque creo que he recibido lo que te he pedido, y gracias porque sé que me vendrá. Amén y Amén.