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Today's podcast discusses satanic habits and the importance of implementing good habits in our daily lives. We often struggle with maintaining habits because we don't adapt to the correct routines. It's important to focus on the person we want to become rather than the end goal. Small actions and rewards can help us in creating and maintaining good habits. Motivation is key, and we can find it through visual reminders, videos, and surrounding ourselves with supportive content. It takes time and effort, but the satisfaction of achieving our goals is worth it. Bueno, buenas tardes. Hoy vamos a hacer nuestro podcast, en el cual hablaremos sobre hábitos satánicos, junto con mi compañera Iki Anji. Este es el cuarto podcast y espero les guste. Bueno, pues buenas tardes. Hoy estaremos hablando sobre nuestros hábitos que tenemos día a día. Hay veces en las que, por ejemplo, nosotros a veces queremos bajar de peso o hacer ejercicio y no lo podemos hacer porque no nos acostumbramos a la rutina que debemos hacer. Muchos de estos hábitos se repiten una y otra vez y no porque nosotros queramos cambiarlo, sino porque nuestro sistema está mal. Tenemos los hábitos incorrectos en nuestra vida o no los implementamos de la manera correcta. Nuestros hábitos siempre pasan porque nosotros queremos superarnos de alguna forma, o queremos ser como alguien, o nosotros queremos vernos mejor, o queremos tener algún beneficio, pero no siempre nos adaptamos a los hábitos que nosotros debemos tener. ¿No crees, Raquel? Sí, de hecho sí. Bueno, también por lo que estuve leyendo, dicen que los hábitos satánicos, bueno el tema, da como principal a los pequeños hábitos que tienes y que esos pequeños hábitos poco a poco van a ser algo más grande, por eso les digo que tendrán un mejor beneficio después. Sí, sí. De hecho, bueno, la manera más efectiva para nosotros poder cambiar nuestros hábitos no es concentrarnos en lo que nosotros queremos lograr, sino más bien en la persona que nosotros deseamos convertirnos. Muchos de estos hábitos, nosotros siempre nos desviamos a, por ejemplo, si yo quiero bajar de peso, por ejemplo, que es un hábito muy común que nosotros queremos lograr, es que por ejemplo, nosotros siempre a cada rato estamos queriendo ver un resultado, pero y nos concentramos tanto en eso que luego de repente no vemos resultados y lo dejamos. Y en vez de eso, nosotros debemos concentrarnos en lo que queremos lograr. Muchas de estas veces es que siempre tengamos, por ejemplo, que si nosotros tenemos un cierto objetivo, nos enfoquemos en eso, pero no tanto. O sea, ver los beneficios que me va a traer, concentrarme en otro tipo de mentalidad, tener otro tipo de mentalidad para nosotros poder mejorar. Y bueno, esa es alguna de las ideas que tienen los hábitos atómicos. Sí, de hecho, hay varios ejemplos. Por ejemplo, uno que si quieres formar un hábito es de leer libros. Por ejemplo, coloca un libro en un lugar que lo veas constantemente, como no sé, en tu mesa o en tu comedor, y esto te recordará. O bueno, lo verás el libro y vas a decir, ah, yo tengo que leer el libro. Y así poco a poco vas a empezar a leer, a leer y te va a llamar más la atención la lectura y por eso ya vas a empezar a leer más libros. O también como lo de hacer ejercicio, o sea, hacer poco a poco, no sé, primero unos diez minutos diario o una hora a la semana o dos horas a la semana. Y a lo mejor te va gustando más y más y ya le vas incrementando las horas y a lo mejor ya lo terminas haciendo a lo mejor diario y nada más descansar los fines de semana. Esa es una de las cosas que hacen los hábitos atómicos, que es hacer pequeñas acciones para que al final tengas tu premio o, ¿cómo decirlo? Bueno, como un premio de todo ese pequeño esfuerzo que hiciste y al final resultó ser algo más grande de lo que te pensabas. Y pues sentirse bien con ese resultado. De hecho todos los hábitos atómicos siempre pasan por cuatro etapas que son una señal, un anhelo, una respuesta y una recompensa. Los pensamientos que nosotros tenemos cuando queremos lograr algo siempre son importantes porque a veces nosotros queremos resultados inmediatos cuando no va a ser así y de hecho creo que con nada es así, todo tiene su tiempo. Siempre la recompensa es la meta final en cada hábito y es la que más anhelamos. Sin embargo, conlleva muchísimo tiempo y muchas de estas veces si reducimos nuestro anhelo no tenemos la motivación suficiente para comenzar de nuevo. O sea, si nosotros perdemos la motivación constantemente, el querer volver a realizar esos hábitos nos va a volver a costar porque, por ejemplo, nosotros estamos teniendo una mentalidad baja en donde nosotros queremos tener resultados inmediatos y no se puede. Entonces, por ejemplo, si nosotros dejamos de tener estos hábitos que estamos construyendo poco a poco, volver a construirlos va a ser otra cosa. Y eso es pesado porque sabes que vas a empezar desde un inicio y se te va a dificultar de nuevo. Por eso es que siempre hay que tener nuestras motivaciones al 100% porque sabemos que los resultados no van a ser inmediatos. Muchas personas creen que les falta motivación cuando prácticamente no les dan el tiempo que deben o no hacen lo que deben. Para tener resultados necesitamos tener otro tipo de mentalidad y otro tipo de hábitos. De hecho, muchas veces de estos hábitos nos recomiendan que, por ejemplo, lo empecemos a incluir en nuestra vida. Por ejemplo, un ejemplo es que, por ejemplo, si dejas tu ropa siempre tirada en algún lugar, cuando tú te cambies o estés cambiándote así, supongas siempre, por ejemplo, si ya quieres cambiar, si quieres dejar de ser desordenada, lo que debes de hacer es cada vez que me cambio, luego acomodo la ropa que ya dejé y la pongo en un lugar. Y estarlo incluyendo en tu vida. O sea, por ejemplo, si te da flojera, o sea, sabes que es algo que tú quieres lograr, entonces debes de tomarle constancia. Y es por lo que muchas personas a veces nos dan flojera porque pues no podemos. Sí, es lo que quiere dar a entender lo que son los hábitos atómicos. Por ejemplo, hay uno que es un libro que fue escrito por James Clear y habla sobre las cuatro leyes principales para crear estos buenos hábitos. Que el primero es hacerlo obvio, que es lo que te digo como el ejemplo de poner un libro en tu mesita y ya recordar que, ah, es que tengo que leer. Esa es la primera ley. La otra es hacerlo atractivo. O sea, emparejar los comportamientos que quieres fomentar con los comportamientos que disfrutas. O sea, no sé, bueno, no sé como qué ejemplo podríamos poner. Por ejemplo, supongo, perdón, lo de hacerlo atractivo, pues sí, como lo del ejercicio. De hecho, que eso sería atractivo el hacer ejercicio. Por ejemplo, empiezas con poquito pero dices, ah, es que si logro hacer ejercicio diario, voy a estar bien fuerte y voy a ser muy guapo y así. Podría ser una. También el otro que es hacerlo fácil. O sea, un ejemplo de eso es como de, por ejemplo, como es, digamos que es un objeto que debemos comer saludable. Que puedes hacerlo más fácil preparando comidas saludables al inicio de la semana. O sea, de esta forma, reduces la aflicción de tener que cocinar o así. O sea, como cuando quieres, como la gente que no le gusta comer fruta. O sea, que a poco a poco vaya comiendo fruta, así que no se quiera una botana en lugar de un chetos o así. Quizás darle una manzana o así. Para que pues también no sea eso. Y también lo de la cuatro que es hacerlo satisfactorio. Que si estás intentando establecer una rutina de escritura diaria, puedes darte una pequeña, no sé, recompensa después de cada sesión de escritura. O como la de ejercicio, no sé, ya hice toda la semana ejercicio, pues me agarro un día de la semana que viene para, no sé, comer algo dulce o así. Como laditos que luego te ponen que una vez a la semana puedes comer dulces o chucherías o así. Para que tampoco te fatigues de tanta comida saludable o así. Porque pues al fin y al cabo, pues sí, es una recompensa de tu esfuerzo que hiciste. Sí, de hecho, muchas veces, como lo mencionaba, o sea, en el transcurso de querer lograr algo siempre nos desanimamos mucho. Y como no tenemos resultados inmediatos, pues dejamos de hacerlo. Sin embargo, de lo que se trata es no dejarlo. O sea, sí puedes tomar tus descansos, sin embargo, puedes retomarlo de nuevo, pero no dejarlo. Porque, por ejemplo, si nosotros nos tenemos una meta en especial y la dejamos ahorita, después que la queramos volver a retomar, nos va a costar lo mismo. Muchas veces, en vez de asociar nuestros hábitos, por ejemplo, en horas o días o lugares, debemos de hacerlo con actividades que nosotros ya hagamos. Por ejemplo, si yo me voy a bañar, pues hago ejercicio antes de bañarme. Si quiero revisar mi teléfono, aprovecho para leer un libro. Si quiero, no sé, meditar, medito y luego me vuelvo a dormir. O, por ejemplo, me duermo y luego vuelvo a meditar. O sea, tener estos hábitos con actividades diarias que nosotros hagamos para hacerlo más fácil y para que no nos cueste tanto. Bueno, en mi experiencia, yo que he querido hacer hábitos nuevos, sí cuesta mucho, pero tienes que seguir y seguir y seguir. Aunque no veamos resultados, aunque nos desanimemos o aunque luego a veces nos dé flojera, porque creo que muchas veces más que desanimarnos también es porque ya nos deja de dar flojera, siempre es estar en tu objetivo. También creo que nosotros nos podemos motivar a, si queremos lograr algo por medio de fotos o no sé, por ejemplo, tener una foto de tu objetivo en tu celular o ver videos de motivación. Creo que a veces ayuda mucho porque luego hay videos que sí te motivan. Los podemos ver siempre en nuestras redes sociales. O sea, cada vez que nos metemos, podemos motivarnos por medio de ahí y así no dejar de tener estos hábitos y no dejar nuestras metas que nosotros queremos lograr. Y así es como podemos nosotros tener unos resultados a largo plazo sin que lo dejemos. Al menos esa es mi humilde experiencia y la opinión que podemos tener. Sí, bueno, es que sí, eso es. Pues sí, esforzarse poco a poco y ya después tener esa recompensa al final de tu pequeño esfuerzo. Y pues también así te sientes bien. Empecé con poquito y terminé así. O sea, también es como que te sientes bien, no? Sentirse bien después de todo el esfuerzo que hiciste, aunque fue poquito a poquito, pero lo lograste y se siente satisfactorio. Sí, de hecho, bueno, algunas veces de las veces que nos podamos motivar nosotros puede ser, no sé, por ejemplo, si a ti te está costando. Obviamente a la persona que tú admiras que tiene ese objetivo, obviamente le costó. O sea, también esas personas también se desanimaron, también no quisieron dejar. Pero el secreto es la constancia que nosotros tengamos. Yo creo que una forma que nosotros nos podemos estar motivando en nuestro día a día para que podamos seguir nuestros objetivos. Bueno, así lo veo yo. Pues sí, bueno, eso es lo que se supone que es por los hábitos autómicos, que es eso de pues esforzarse poquito a poco y hacerlo como ya, y hacerlo ya rutina, de que día de oler un ratito, o hacer algo de ejercicio, o lo de comer saludable que te digo también. O sea, es eso, hacer un pequeño esfuerzo cada día y ya tener tu recompensa al final de ese pequeño esfuerzo que estuviste dando. Pero o sea, que fuiste constante haciéndolo, que por eso tuviste esa recompensa grande. Bueno, hay muchísimas formas de que nosotros podamos tener estos hábitos. Creo que las podemos buscar por medio de internet, por medio de las cosas que nosotros siempre estamos viendo. Y también nos podemos motivar porque, por ejemplo, hay personas que son muy productivas en su día a día. Bueno, ese es un punto en el que te puede motivar porque, por ejemplo, puedes ver a varias personas que siempre estudian, trabajan, no sé, cocinan, lavan y todo lo hacen solos. O sea, siempre son personas muy independientes. Entonces, también un consejo que se nos da en los hábitos autómicos es que te rodees de gente que sea productiva. Porque así, por ejemplo, si los demás son productivos, tú obviamente vas a tener este hábito de ser productivo. Se han creado varios estudios y, de hecho, se han visto en distintas ocasiones que si tú te juntas con personas que hacen estas actividades día a día, tú vas a ser una de ellas porque de alguna forma te motivan. Las personas a tu alrededor te motivan para hacer cosas que tú quieres lograr. De hecho, mucho de esto es que te juntes con personas que quieran lograr el mismo objetivo que tú. Porque, por ejemplo, es como al te digo, hay personas que estudian, trabajan, cocinan, lavan, no sé, hacen todo en su día a día y son personas que son muy independientes. Y luego te ves a ti mismo y dices, no estoy haciendo nada, ¿no? Es por eso que muchas veces te dicen que se recomienda en los hábitos atómicos que te rodees de gente que sea productiva para ti y para que tú seas el siguiente. Si, por ejemplo, tú te desanimas, mínimo lo que vas a hacer es que las personas a tu alrededor te motiven. Y eso, de hecho, es uno de los consejos que también se pueden aplicar para nuestro día a día y para que nosotros tengamos siempre estas motivaciones y para que podamos lograr nuestros objetivos. Siempre es difícil, pero también a las demás personas les está costando. Y también hay que saber que también muchas personas logran muchas cosas, pero siempre se están esforzando. Por ejemplo, ahorita muchos empresarios, muchas personas que están teniendo exámenes de admisión, ellos realmente están estudiando ahorita, mientras nosotros a veces ni siquiera hacemos algo. Y es por eso que nos debemos de motivar, porque de alguna forma hacer actividades y lograr objetivos que nosotros queremos, todo requiere de un pequeño esfuerzo y nosotros siempre debemos de estar al tanto, porque si no, no vamos a lograr nada y al final no vamos a terminar en nada y vamos a tener este círculo en el que hacemos y luego ya no. Y volvemos y luego otra vez ya no. Entonces, estos son algunos ejemplos y algunos consejos que tienen los hábitos atómicos para que tú logres tus objetivos de una mejor manera. Sí, eso de lo que te juntas con gente que sí quiere lograr sus objetivos, por eso es muy recomendable. Y también eso de lo que dices, que tampoco está bien que inicias, no sé, cuando te digo de la lectura y lo dejes ahí y tres días después ya no vuelvas a leerlo o ya no quieras… bueno, dejes ese hábito y empiezas un nuevo hábito, pero nunca lo terminas, lo dejas a medias y entonces eso es lo que ya no está bien, porque ya no estás haciendo un esfuerzo, ya no haces como de… pues lo hago un tiempo y después ya no lo hago, así jamás vas a tener una recompensa. Por eso tiene que ser constante, no hace nada más, ah, es que se ve divertido eso, vamos a intentarlo, pero si intentarlo de verdad, no, pues intentarlo y ya después, no sé, en uno o dos días ya me aburrió, ya no lo hago, nada más porque no me gustó dos días. Ajá, entonces, de hecho aquí entra el mucho de, pero hay que hacerlo, no solo decirlo, hay que hacerlo. Sí, sí, sí, de que no solo hay que decirlo, hay que hacerlo, porque también muchas veces decimos, no, voy a poner a hacer ejercicio el siguiente año y pues nunca lo hacemos. No, no lo hacemos, siempre lo dejamos. O de voy a mejorar mi personalidad para tener, no sé, una mejor pareja y pues nunca lo hacen y siguen siendo igual. Sí. Bien tóxicos, ¿no? Ah, sí. Nos conocidos, ¿no? Sí. Bueno, eso sería todo por nuestra parte, este fue nuestro podcast de hábitos atómicos y eso sería todo. Hasta luego.