Details
Nothing to say, yet
Details
Nothing to say, yet
Comment
Nothing to say, yet
Daniel Cartagena is a pastry chef and cake decorator based in New Jersey. He started his career as a dishwasher in a famous bakery and eventually became fascinated with cake decorating. Despite not having formal training, Daniel learned by being curious and asking questions. He took a break from pastry for about 10 years but found his way back to it and has been doing it for about 25 years now. Daniel is not only a pastry chef but also teaches pastry classes and sells pastry products. He believes in constantly reinventing himself and exploring new opportunities. He values being curious and not being afraid to try new things. His goal is to continue growing and expanding his skills in the pastry industry. Bienvenidos amigos, bienvenidos a este nuevo episodio, a un episodio más de Rambler Podcast. En esta ocasión estamos en el segmento La Historia Detrás del Emprendedor. Y pues bueno, me da mucho gusto poderles saludar de nuevo. Estoy muy contento el día de hoy ya que tengo a un invitado, a una persona que conozco ya hace bastante tiempo y que pues conozco parte de su vida, pero el día de hoy vamos a tratar de que nos platique a qué se dedica, de qué manera empezó a emprender y bueno, cosas aparte de su negocio, algunas cosillas personales, así que le voy a dar la bienvenida a mi amigo Daniel. Daniel, adelante, no te pongas nervioso porque yo estoy nervioso. Solamente te voy a pedir que por favor te presentes, que le digas a la audiencia quién eres, a qué te dedicas, si tienes redes sociales, en qué redes sociales pueden encontrar tu trabajo para que la gente te siga. Cuando publiquemos este video de todas maneras vamos a poner tus enlaces ahí de todas tus redes sociales para que te encuentre fácilmente, pero pues rápidamente invita a la gente, dile en qué redes sociales te pueden encontrar y cómo para que puedan ver tu trabajo. Adelante. Sí, gracias Popular, gracias por esta invitación. Se me hace como medio raro estar aquí en un podcast, algo que nunca pensé estar, pero te lo agradezco, como ya dijiste, nos conocemos de hace tiempo y muy bonita amistad, muy bonita amistad que hemos llevado. Mi nombre es Daniel, soy repostero, decorador de pasteles y trabajo aquí en el área de Nueva Jersey, de Asbury, Long Branch y todo eso, el centro de Nueva Jersey. ¿Redes sociales donde te pueden encontrar? Redes sociales me pueden encontrar en Facebook como DanielJRZCartagena o en Instagram como Cartagena10. Cartagena10, así como se oye. ¿Estás en alguna otra red social? Pues tengo TikTok, pero todavía no he hecho ningún TikTok porque no sé cómo hacerlo. No, está bien, está bien. Bueno, normalmente, básicamente las aplicaciones o las redes sociales más comunes son Facebook e Instagram, entonces ahí está gente para que vayan a buscar a Daniel Cartagena, Cartagena10 en Instagram para que lo sigan y puedan checar su trabajo, ya que en lo personal, pues yo puedo decirle que he probado sus pasteles, ¿verdad? Conozco parte de su trabajo, pues hace un buen trabajo. ¿Verdad? Entonces, pues nuevamente bienvenido, Popu, Dani, te voy a decir Popu porque estamos en confianza, sabes que te estimo mucho y me da mucho gusto que hayas aceptado la invitación a Ramble Podcast. Como ya sabes, este segmento se trata de la historia detrás del emprendedor y pues como tal eres un emprendedor, ¿verdad? Desde que te conozco, pues he visto que tienes algunos talentos para diferentes trabajos, para diferentes, tienes diferentes habilidades, pero el día de hoy yo me imagino que nos vamos a enfocar en lo que estás haciendo actualmente, que es la repostería, así que te vamos a dejar el micrófono para que nos cuentes cómo empieza este emprendimiento, no sé si para ti es un sueño, es un simple trabajo, de qué manera tú ves lo que estás haciendo hoy en día y cómo fue que empezó y cómo fue que llegaste o cómo es que has llegado hasta este momento. Pues gracias otra vez por la invitación y pues yo llegué por casualidad, llegué a hacer reposteros, decorados de pasteles más bien, porque yo llegué como cualquier emigrante a este país, llegué de lavaplatos, mi familia trabajaba en una pastelería muy famosa que se llamaba el Ritz Bakery y ahí trabajaban todos los reposteros, ya cuando hubo trabajo para meterme ahí, pues me metieron ahí, también empecé lavando charolas y todo eso, y cuando pasaba por el cuartito donde decoraban pasteles, a mí se me hacía como, se me hacía increíble así como hacían las rosas de crema, como los pasteles los encimaban todos, y yo pasaba con mi trapeador y así veía y me quedaba enlevado, me quedaba enlevado, y una vez me dijo la dueña de ahí que si quería trabajar ahí, que si me gustaba, y yo le dije que sí, y de ahí empecé, perdón, de ahí empecé y me gustaría decirte que he ido a la escuela, ok, he hecho todas esas cosas, pero pues no, sinceramente no, pero lo he aprendido a como es, o sea por metiche, por preguntón, por a lo mejor mi ego de decir, ay, yo sé hacer eso, o sea yo lo hago, y ya me ponían a hacerlo y ya estaba así como mi cabeza como signos de, cuando no sabes qué está pasando, qué vas a hacer, pero al final del día lo hacía, al final del día lo hacía y me quedaba bien, y pues me empezó a gustar, me empecé a agarrar un gusto, me empecé a agarrar un gusto hasta ahorita que estoy intentando otra vez poner el negocio otra vez, porque ya lo había intentado poner hace como dos años, pero pues algo pasó y ni modo, no era mi época, no era el tiempo para ponerlo. Ok, pero más o menos para que la gente sepa, ¿cuánto tiempo llevas haciendo pasteles? O sea independientemente de que el negocio tal vez lo estés empezando, o sea que como tal estás empezando el emprendimiento, no un negocio, pero o sea, ¿vienes siendo pastelero desde más o menos, hace cuántos años? Bueno, yo diría que hace como unos, como unos veinticinco años yo creo. Wow, muchísimo tiempo. Sí, en el negocio de la repostería hace mucho, y gracias a Dios he aprendido mucho, o sea, se me ha estado, se me ha pegado, o sea, no he sido de los que, ¿cómo diría? En los trabajos no he sido de esas personas de que me decían, ay, ponte a hacer esto, y yo, no, ese no es mi trabajo, yo, sí, vamos, chingue su madre, yo le atoro, no hay pedo. Es lo chido, ¿no? Yo pienso que tú eres esa persona que se avienta. Metiche. Sí, es que fíjate que, o sea, rápidamente a mí mi papá siempre me decía, o sea, tú eres muy metiche, entonces cuando seas grande posiblemente vas a terminar metido en muchos problemas, vas a terminar siendo una persona importante, ¿por qué? Por metiche, porque, bueno, yo creo que es bueno ser metiche, pero también hay que ver de qué manera uno lo es, ¿no? Entonces, pues sí, ahí es bastante tiempo, güey, ¿no? 25 años, yo todavía no nacía, no, yo tenía como 10 años, y qué chingón, papú, además de ser pastelero, yo sé que eres bueno para hacer bebidas, o eras bueno para hacer bebidas, tenías diferentes habilidades, ¿no? Pero yo creo que el pastel es como lo que más te gusta hacer, o es lo que mejor te sale, o cómo es, ¿no? Cuéntale a la gente. Bueno, pues fue lo que aprendí, la repostería. En un tiempo sí me alejé de la repostería, como que me resentí con la repostería, no sé qué pasó por ahí atrás, y me fui de mesero, me iba muy bien de mesero, me fui de bartender, me iba muy bien de bartender, como te digo, aprendí por andar de metiche, como dices tú, decía tu papá, sí me metí en varios problemas por andar de metiche, pero también aprendí mucho, y sí dejé un tiempo, dejé como unos 10 años, yo creo, de la repostería, pero como dicen por ahí, lo que bien se aprende no se olvida, y yo soy muy incrédulo muchas veces de los dichos, pero ya cuando me volví a meter a hacer pasteles otra vez, pues igual, sabía, como si nada, tranquilo, y pues aquí sigo, me está gustando, me gusta, es un tipo de arte, me gusta hacerlo. Ahorita hay mucha competencia, fíjate que hay mucha competencia, bueno yo no le llamo competencia, hay muchas personas que hacen repostería, que hacen pasteles, desde la pandemia se dejó venir mucho, le salió su repostera que tienen dentro, a todas, a todas, y yo veo que hacen muy buenos trabajos, algunas, otras no tan buenos, y otras deberían dedicarse a otra cosa, pero venden, pero venden, pero uno tiene que seguir reinventándose, sacar otras cosas nuevas, hacer cosas nuevas, ahorita no me dedico nada más a la repostería de pasteles, o a la decoración de pasteles, o a la repostería, sino que también a vender productos de pastelería, me habías contado, sí, me dedico también a dar clases de repostería, puse este pequeño estudio, y doy clases de repostería, de pastelería, de primer nivel, segundo nivel, tercer nivel, estoy empezando, sí, estoy empezando a hacer varias cosas, sí, no me quiero estancar en algo nada más, no me quiero estancar en una sola cosa, sino que quiero seguirle buscando, o sea, siempre me ha gustado, siempre me ha gustado no quedarme estancado, como buscar algo más adelante, buscar lo que sigue, pues ahorita estoy en eso, en lo que sigue. Y también está la otra parte de que yo creo que si tú no experimentas, si tú no dices, bueno, a lo mejor yo por ejemplo empecé a hacer fotografía, y llega el momento en el cual digo, bueno, me gusta hacer la fotografía, pero hay cosas que no me gustan de la fotografía, o sea, cosas que conllevan, el trabajo que conlleva hacer todo lo que es la fotografía, entonces intento hacer algo más, y sé que en alguno de esos varios intentos por hacer diferentes cosas, voy a encontrar algo que me va a gustar, y lo voy a tomar, y tal vez lo demás ya no lo haga, pero me voy a sentir bien, yo creo que es válido poder conocer, explorar más que nada en diferentes aspectos, y darnos cuenta de que solamente así vamos a saber qué es lo que verdaderamente nos gusta. Y qué chingón, me habías contado de que estás haciendo todo eso de no solamente hacer pasteles, eso es verdaderamente emprender, bueno, en esta vida yo creo que si uno se queda haciendo una sola cosa, pues te vas a quedar ahí, no hay avance, y qué bueno Popo, qué bueno que estás haciendo todo eso, que por fin, bueno, yo te conozco como amigo, que por fin te estés decidiendo a hacer todo ese tipo de cosas, que no te quieras quedar, por lo menos para que la mente esté ocupada, que esté pensando, y que estás interesado por trabajo y no por tonterías. Sí, sí, es verdad, entonces qué chingón. Y más que me animé, porque digo, bueno, como yo te digo, siempre he sido curioso, siempre he buscado, no me he detenido, o sea, que me digan, es que no hay dónde comprar eso, o solamente aquí, o solamente acá. Me fui hasta Nueva York, me he ido en los años pasados, me he ido a buscar proveedores, he abierto cuentos con proveedores, conozco gente, conozco, este, conocí mucha gente por andar de curioso buscándole, y entonces pues me he hecho amigo, he ido a convenciones hasta Miami, este, conocí a mucha gente allá también, me dieron su número de teléfono, proveedores, o sea, para comprar cosas por mayoreo, y poderlas vender, y digo, si sé todo eso, porque al principio decía, no, o sea, no voy a, no le voy a decir a nadie dónde las compré, para mí solo, no le voy a decir a nadie dónde compré este producto, porque solamente yo lo quiero tener, pero dije, no, o sea, por qué, o sea, por qué no monetizarlo, o sea, por qué no, este, sacarle un provecho más grande, ¿no? Yo decía, mi receta no la voy a dar a nadie, pero si voy a dar clases, pues las voy a dar, o sea, no hay pedo, o sea, para todos sale el sol, y este, y qué más que monetizarlas, o sea, yo siento que, pues es algo, a mí, yo siento que es algo que, pues que me está funcionando hasta ahorita, espero que me funcione más mejor todavía, porque apenas voy empezando, pero... No, si es, a fin de cuentas es el propósito, no, uno busca, uno busca ciertas cosas y dices, bueno, esperando que te, que te funcione, si no te funciona, bueno, por lo menos ya sabes, ya hiciste el intento, este, pues qué chido, güey, qué chido que, este, estás haciendo más cosas, que de alguna manera tienen que ver con lo que te gusta hacer, pero que no estás, este, todo el tiempo, o sea, metiéndole, o sea, tanto, tanto, este, esfuerzo a una sola cosa, que es hacer pasteles, ¿no? Sí. Y es que es algo, y es que es algo bien cómodo, porque a mí me gusta, yo si, si había alguien que tenía la clase aquí de algo que yo no sé, pues yo, este, yo tomo la clase, o sea, yo pago por tomar la clase, no es, este, ningún problema, pago, he pagado clases para, en Nueva York, ya sabes que era Nueva York, está aquí cerquita, pero... Pero es, este, la manejada hasta allá, son los, el pagar, ya sabes que te cuesta como, solamente ir a Nueva York son como 100 dólares, o sea, ya vayas, ya vayas en carro, vayas en transporte público, y, este, y aparte las clases te cuestan como 500 dólares, 600 dólares, y, digo yo, si hubiera por aquí cerquita, yo sí las agarraba, o sea, no es así, no soy como, como envidioso ni nada de, de todo eso, digo, no, pues aquí les vendo el producto, aquí les vendo, este, les doy la clase, este, me pueden llamar, o sea, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, una vez que toman la clase, este, les doy mi nombre de teléfono, mi información personal, me pueden mandar mensaje, oye, ¿sabes qué?, me atoré en esto, este, ¿qué hago?, ¿me pasó esto?, ¿qué hago?, y ya las puedo seguir apoyando, o sea, si los puedo seguir apoyando, aunque ya, ya no están en la clase. Sí, les das como un seguimiento, ¿no?, a la gente que... Sí, un seguimiento, ajá, sí. A la gente que, este, que, que viene, pues, a... Sí, porque yo he tomado clases, y bien bonito ahí cuando lo estás tomando, pero ya cuando lo estás preparando, dices, ah, cabrón, ¿y ahora qué?, ¿qué ha sido?, ¿qué pasó?, ¿por qué no me salió?, o ¿qué pasó?, y ya si las puedes, este... Quieres preguntar, ¿no?, para... Ajá, pero pues ya no puedes preguntar, porque ya, ya la clase ya se acabó. Cierto, cierto. No, pues, ha sido, pues, ahí está, para toda la gente, antes de que, de que se nos, se nos pase, este, no solamente estás, este, ofreciendo tu trabajo como repostero, sino que también estás ofreciendo tus servicios como, eh, eh, como maestro, podríamos decir, este, o como, cómo le, cómo le quieres llamar a ese tipo de... Un instructor, o sea, o maestro, el maestro está allá arriba. Sí, sí, bueno, como un instructor, entonces, este, para la gente que, que, eh, que quiere hacer este tipo de trabajo, o que quiere, pues, este, desarrollar, porque es un talento, ¿no?, y quiere desarrollarlo, siempre hay oportunidad de hacerlo, y pues, bueno, este, eh, aquí, este, hay una persona que, que, este, puede hacerlo, se pueden acercar con él, eh, al principio te decía, vamos a dejar tu información de todas maneras para que la gente se pueda comunicar contigo. Y pues, este, seguir el popo, ¿no?, seguir echándole ganas, este, no detenerse, yo creo que, este, no importa lo que uno haga, lo importante es que uno, pues, se mantenga activo, ¿no? Y, bueno, algo que quería preguntarte, yo creo que eso, pues, cabe en diferentes tipos de emprendimiento, ¿no?, este, las experiencias que has vivido, güey, como pastelero, ¿no?, porque, este, fíjate que a mí me decía un, un, un amigo, bueno, lo considero amigo, este, un amigo fotógrafo que, que me ha echado la mano, este, cada vez que le pregunto, y me decía, ten cuidado, güey, porque, pues, va a haber gente que, que se te va a querer, o sea, no literalmente, pero me decía, se te va a querer trepar, ¿no? Se te va a subir encima, hay gente que es abusadora, güey, ¿no? Y, y yo entiendo esa parte porque yo como, como cliente, o sea, yo siempre quise, de alguna manera, encontrar cosas baratas, güey, ¿no? Y vas por ahí regateando, este, preguntando, y esto es el precio más bajo, o es lo menos que lo puedes dar, ¿no? Muy común esa, esa pregunta, y me decía, ten cuidado porque hay gente que, pues, este, va a querer abusar de tu, de tus servicios, este, entonces, yo creo que también en la repostería hay ese tipo de clientes, güey, ¿no?, o como en todo, güey, ¿no?, hay clientes buenos, hay clientes malos, este, y otros peores, güey, ¿no? Entonces, ¿qué tipo de experiencia has vivido, güey, con la clientela? Híjole. Dijera María Félix, tocaste la tecla negra. Yo creo que no a muchos les va a gustar eso, pero, este, hay que, hay que hablarlo, güey, no hay que preguntarlo. Sí, es que sí, o sea, como tú dices, hay gente muy abusadora, hay gente muy, ¿puedo decir maldiciones? Sí. Eh, sí, bueno. No, no hay, bueno. Son palabras que dice uno casi diario. Hay gente muy exagerada, o sea, para no decir más, y, este, bueno, primero que nada, o sea, decirle a la gente que el pastel bueno, bonito y barato no existe. No existe. No existe un pastel bueno, bonito y barato, no existe, o sea, quítese de la cabeza, este, porque, pues, cuesta mucho trabajo hacerlo, o sea, no es como que metes los pinches huevos, la harina al horno y ya sale el pinche pastel hecho. Y la gente muchas veces no entiende, y no entiende, uno entiende también, pero muchas veces no quieren pagar por tu trabajo. Yo tenía una señora que me pedía pasteles, y, este, y siempre me decía, me mandaba unas fotos de unos pasteles de fonda bien bonitos, profesionales, de, con brillos y hasta luces saliendo desde más de medio. Hoy quiero este pastel para, para fulana, para su hija, por decir, ¿en cuánto me lo haces? Es para 50 personas, y yo, no, pues, tanto, le daba el precio. Ok. Le decía, mira, las decoraciones que pides aquí, todas de fonda, son muchos brillos, son muchas decoraciones, son muchas flores hechas a mano y todo eso, te salen tanto. Ay, y si le quitas esas flores, bueno, te salen, y si le quitas esto, si le quitas esto de acá, y era de que al último día le quitabas todo y no estaba contenta también. Y una vez, este, me pidió un pastel su prima, y me decía, me dice, yo hice el trato con la prima, y ya cuando llegué ahí con el pastel, ahí estaba ella, y yo iba pasando con el pastel así, pues, presumiéndolo y todo. Y estaba ella en la pista de baile, y volteé y me dice, que caro se lo diste. Y yo así como de que, ay, señora, ya siéntese, por favor. No, macho, fíjate que es bien común que cuando uno es cliente, bueno, yo hablo de mi persona, porque yo la verdad, para qué voy a decir, no, yo sí me gusta pagar lo que es. No, la verdad siempre, este, de repente, pues me gusta andar buscando algo que sea económico, bueno, en este país, pues, este, para muchas de las veces cuesta ganar el dinero, entonces uno tratando de economizar en todo. Y, pues, a veces ando preguntando, bueno, qué es lo más barato y eso, así, güey, pero tienes razón, o sea, yo creo que no hay producto, no hay servicio, no hay trabajo, nada que sea bueno, bonito y barato, cabrón, no. Cuando eres cliente y quieres barato, ya cuando eres, este, emprendedor, te das cuenta, güey, ¿no? Te das cuenta de que, dices, no mames, con razón, este, la gente cuando yo pedía barato, pues, no, este, hacían su cara, güey, ¿no? Su cara de fuchi, porque, pues, este, en realidad todo el trabajo que conlleva hacer algo, por ejemplo, los pasteles, el tiempo, este, lo que hay que invertir y todo eso. Y, bueno, precisamente por eso el día de hoy, este, estamos en este podcast porque, este, para que la gente sepa, güey, ¿no? Yo sé que los que son pasteleros te van a entender, ¿no? Pero la gente que es cliente, que la clientela, este, los que no hacen este tipo de trabajo, este, que se enteren, güey, ¿no? Que se den cuenta un poco de cómo es, güey, ¿no? Para que para la próxima vez que te digan, este, oye, y, o sea, es lo menos que lo das, o sea, me lo puedes dar más barato, o sea, todo el esfuerzo que conlleva, este, hacer un pastel, el tiempo, la dedicación, más que nada, todo el proceso, güey, ¿no? No, y cualquier cosa, como dices tú, o sea, no nada más un pastel, o sea, cualquier, la fotografía, la, personas que se dedican a vender comida desde su casa, pequeños empresarios, pequeños negocios, apoyarlos, o sea, yo ahorita los apoyo, si voy a mandar a hacer, este, por decir una sudaderas con algo, hay una muchacha que conozco que lo hace desde su casa, Alma, búsquenla por ahí, este, muy buena, y, este, y yo le compro lo que ella hace, yo no le regateo, ¿crees? Yo no le regateo, créeme que no le regateo, yo le digo, ¿cuánto me haces tantas sudaderas?, ¿cuánto me haces esto?, y me dice cuánto, y órale, no le hace, si hay otra persona a la que yo pueda ayudar, como que, pequeños negocios, o sea, ahora sé de no regatearlas, o sea, porque me están cobrando por, no se van a ser ricos con lo que yo les voy a pagar, o con lo que me están vendiendo a mí, no se van a ser ricos, es el trabajo, y ellos saben lo que les cuesta, ya como te digo, ya sean las que venden comida, las que venden, las que hacen, este, playeras, impresiones, flores, a lo que se dediquen, o sea, estas cosas, o sea, ¿no? Están tratando de hacer algo, algo, algo derecho, algo bien, o sea, por lo menos, este, trabajando y haciendo algo, y ahora yo lo entiendo, también antes yo buscaba lo más barato, pero nunca me gustó comprar de tiendas de, ¿cómo se dice?, tiendas de, de, departamentales, pues donde venden pasteles, una media plancha te la dan por 20 dólares, o sea, Si, son baratos, si, por ejemplo, vas a Costco, vas a Costco, si, y en Costco los pasteles son baratos, pero bueno, también así es la calidad, ¿no?, del producto, del producto, si, pero ahora ya entiendo uno, y ahora yo, yo apoyo pequeños negocios, aunque a veces digo, ay, bueno, salió bien caro, pero pues no le hace, o sea, digo, no pasa nada, si, es lo chido, me regresa, hay mucha gente que está emprendiendo últimamente, mucha gente, demasiado, o sea, hablando, hablando, no, si, está chingón, hablando específicamente de los hispanos, los latinos, ¿no?, este, mucha paisanada, mexicanos que están, yo creo que después de la pandemia, este, vino como este, eh, esta ola de, de, de, de emprendedores, o sea, si, la necesidad, bueno, todos teníamos un trabajo tradicional, y de repente te ves en la necesidad de, pues, emprender, hacer algo para poder sacar un poco más de dinero, y hay un chingo de, de, de, de, de gente, un chingo de paisanos que están emprendiendo, ahorita lo decía, gente que hace playeras, gente que, este, o sea, yo, que empecé con la fotografía, tú que estás haciendo, este, los pasteles, o sea, gente que está vendiendo comida, y hay mucha gente que está haciendo, que está emprendiendo, Dani, y que está perdiendo porque no sabe, güey, no sabe cómo, entonces, fíjate, cuando a mí me nace la idea de hacer los podcasts, y específicamente eso, como la historia detrás del, del emprendedor, es para, para la gente que, que, que también está emprendiendo, ¿no?, por ejemplo, tú ahorita, este, puedes decirnos, eh, como alguien que va empezando, ¿cómo le puede hacer, güey, no?, este, para que, eh, pues, tu negocio, a principio yo sé que todos, todos, este, hay como pérdidas, ¿no?, no le sabemos, pero hay mucha gente que ya lleva un rato y sigue perdiendo, güey, ¿no?, y ahí se, como que te desilusionas, y dices, no, esto no funciona, y en realidad a veces sí funciona, el problema es que no sabes cómo trabajarlo, y por eso es, es la idea de este, de este podcast, de poder entrevistar a gente que está, este, emprendiendo para que la gente que quiere emprender también lo haga y que sepa de qué manera lo puede hacer, güey, ¿no?, o sea, tú qué le dirías a, a, a todos esos, este, independientemente si son pasteleros, güey, ¿no?, a toda la gente que viene queriendo o que está queriendo emprender, o sea, qué, qué, qué le podrías decir, güey, ¿no?, a esa gente. Yo, fíjate que, qué bueno que haces esa pregunta, yo creo que es una pregunta muy importante y muy, muy válida, y este, es este, a mi experiencia que tengo yo, o sea, es perder el miedo, es aventarse, es este, yo me salí de trabajar, yo estoy trabajando ahorita lunes, martes y miércoles porque tengo que seguir pagando el carro, la seguranza, todo lo que se tiene que pagar del día a día, pues, y este, yo sabía que no me iba a alcanzar, este, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros, con los primeros Empezando es negocio, porque no es ganancia, es invertir, es estar invirtiendo, es invertir, invertir, y no hay una ganancia, este, como si, para pagar empleados, para pagar lo que se necesita Tiene uno que meter dinero, yo creo que, yo les diría que no se den por vencidos, o sea, que pierdan el miedo, hace rato hablaba con un amigo que me decía que hay un miedo que te detiene y hay un miedo que te hace crecer Y esto de emprender, de hacer un negocio, es un miedo que te hace crecer, es un miedo que te va a hacer una mejor persona, un mejor emprendedor, y que no se den por vencidos a las primeras de cambios Yo intenté hacer el negocio hace varios años, dos, tres veces, y a las primeras de cambios, o sea, yo aventaba mi Barbie, y decía, ya no juego, esto no es para mí, o sea, ya no, pero no, o sea, hoy entiendo que es de seguirle dando Y que valoren su trabajo, que no lo regalen, porque eso me pasó a mí al principio, yo daba los pasteles bien baratos, y tenía mucha gente, y yo un trabajalali, y no me salía Sí, lo que te decía ahorita Y yo decía, no, pues es que esta Barbie no sirve, digo, ¿qué estoy haciendo? Mejor voy a trabajar para un patrono como siempre, pero no, o sea, después me di cuenta, investigando, conociendo a personas emprendedoras, de no regalar tu trabajo O sea, tu trabajo es tu trabajo, y tú véndelo como lo vendas, y ya habrá quien te lo compre, tu trabajo no es para todo el mundo, a mí me dijo una amiga, me dice, Dani, tu trabajo no es para todo el mundo, tu trabajo es para quien lo pueda pagar Que no lo pueda pagar, dice, no intentes bajar el precio, no intentes, este, nada más darle gusto por tu vender, dice, no Sí, yo creo que va a haber clientes para, para todos, ¿no? Hay clientela Fíjate que yo tengo clientes que, que nunca me la han puesto un pero a un precio del pastel, nunca, tengo clientes, tengo unas clientas, este, ahí en Asbury y en Neptune, y este, yo les llevo su pastel, y me pagan lo que les pedí Y aparte me dan 30 o 40 dólares de más, y muchas gracias, y me marcan, al día siguiente, estaba muy rico tu pastel, muchas gracias, como siempre, te lo hiciste, pero hay otras que, híjole No, sí, sí, como te decía Me duele la panza cuando veo que me llaman, y no qué sé, yo digo, y le contesto, no Sí, fíjate que, este, precisamente, estábamos platicando, estábamos platicando con Gucci, ¿no?, con Gustavo aquel día, de que todos los que estamos emprendiendo el día de hoy, lo estamos haciendo con un chingo de miedo, güey No, y hay una frase que dice, güey, no, este, si tienes miedo, hazlo con miedo, güey, no, porque, este, el miedo paraliza, cabrón, el miedo paraliza, y, este, y, bueno, el miedo es, nos detiene a hacer lo que podríamos llegar a hacer, llegar a ser grandes personas Sin embargo, este, pues no lo hacemos, por eso, por el miedo, porque nos ataca, nos paraliza, y nos quedamos viendo a que otra gente, que aunque sea con miedo, lo está haciendo, güey, no, y muchas de las veces, lo único que nos queda hacer es criticar, güey Y además, sé que no venimos, venimos de una cultura donde no venimos, donde no venimos con personas, no venimos con esa, esa, no venimos, ¿cómo se dice?, no crecimos con personas emprendedoras, sino con papás o mamás o familiares, que siempre nos decían, trabaja, trabaja, trabaja, pero nunca nos dijeron, tú puedes hacerlo, tú puedes, este, lograr lo que tú quieras, o, no, no crecimos con esa educación, o sea, crecimos con una educación de trabajar, trabajar, trabajar para toda la vida, porque así vimos a nuestros papás, a nuestros tíos, a los familiares, o sea, no, no crecimos, muchos, sí, crecieron con papás emprendedores, y, o sea, no, no crecimos con esa educación, o sea, crecimos con una educación de trabajar, trabajar, trabajar para toda la vida, porque así vimos a nuestros papás, a nuestros t y que échale ganas si tú puedes, pero la mayoría de nosotros, pues, no. Sí, es verdad. Vamos a hacer una pequeña pausa, Popo.