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SERIE ENSEÑANZAS DEL REINO - EL FRUTO DEL ESPIRITU - EL GOZO

SERIE ENSEÑANZAS DEL REINO - EL FRUTO DEL ESPIRITU - EL GOZO

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El Gozo que produce Dios, no lo puede quitar en este mundo.

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In this message, Stanley Morales talks about the teaching of the kingdom of God. He explains that when Jesus said "the kingdom of heaven is near," he meant that everything inside the church belongs to those who are part of it. He emphasizes that joy is a part of the fruit of the Spirit and can only be experienced by those who belong to the kingdom. He encourages listeners to find joy in their relationship with Christ, as worldly circumstances can steal their joy. A continuación, escucharemos un mensaje de la Palabra de Dios con Stanley Morales. Prepare su corazón. Comenzamos. Estamos hablando acerca de enseñanza sobre el reino. ¿A qué se refiere, hermano? Bueno, Jesús, cuando anduvo caminando en este mundo, le decía a las personas, arrepentidos, el reino de los cielos se ha acercado a vosotros. ¿Y a qué se refiere Jesús cuando dice el reino de los cielos? Bueno, aquí estamos en el templo. Este lugar se convierte en templo a partir del momento en el que lo dedicamos a una iglesia. Todo lo que está aquí adentro le pertenece a todo lo que estamos aquí adentro. ¿Qué significa? Aquí adentro no solo hay instrumentos, no solo hay servidores, aquí adentro por fe lo creemos. Jesús dijo, donde dos o más estén, ahí estaré yo. Aquí está Jesús. Y si aquí está Jesús, todo lo que Jesús tiene, todo lo que Jesús da, también es de nosotros. Y con cariño. Pero los que están allá afuera, a excepción de sus hijos porque están allá afuera, los que están allá afuera no pueden participar de lo que está aquí adentro. ¿Me explico? Es su casa. Yo no voy a llegar a su casa y simplemente emanar. Wendy, haga un favor, denme una llave, por favor, de su casa. Yo no puedo decirle eso. Mamá Lupe, denme una llave, aunque me la quiera dar, pero no me la va a dar. Y este maitre dice, ¿qué onda? Nosotros por cariño le decimos, esta es su casa. Por cariño le decimos a la gente. Siéntase como en casa. No, yo no puedo. En algunas casas sí. Llevo algunas casas y llevo pan, llevo cosas así. Pero yo no puedo llegar a una casa y decir, vaya, sáquese de mi cuarto, que aquí voy a dormir yo. En cambio, sus hijos, los que pertenecen a esa familia, sí, pueden hacerlo. A eso se refiere cuando hablamos del reino. Entonces, hay cosas que en el reino solo pueden ser disfrutadas por los que pertenecen al reino. Y una de esas cosas es el tema de esta mañana. El tema de esta mañana es el gozo como parte del fruto del Espíritu, pero como parte de lo que el Espíritu Santo quiere hacer en nosotros. El tema de esta mañana es el gozo como parte del fruto del Espíritu. Vamos a hablar del gozo, pero ¿a qué se refiere con esto del gozo? Primero leamos una porción. Filipenses capítulo 4, versículos del 11 al 13. Filipenses capítulo 4, versículos del 11 al 13. Abra su Biblia, mantenga su Biblia abierta, y sería tan buenísimo que usted tuviera una libreta donde anotar todo lo que el hombre oye, a los días se le olvida, pero todo lo que el hombre anota, lo puede recordar. Filipenses capítulo 4, versículos del 11 al 13. En pantalla es proyectado, pero tenga su Biblia abierta, hermanos, para una mejor comprensión de la palabra. ¿Lo tenemos? ¿Cómo dice la Biblia? Filipenses capítulo 4, versos del 11 al 13. El gozo como parte del fruto del Espíritu. Dice así, no lo digo porque tenga, pues he aprendido a cualquiera que sea mi situación. Sé vivir humildemente y sé tener, en todo y por todo estoy enseñado, así para estar como para tener, así para tener abundancia, como para padecer necesidad. Y vean lo que dice, por favor, el verso 13. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Así se está refiriendo el apóstol Pablo. Ahora, quiero que recuerde esto, el gozo es algo que el mundo no puede conocer. En el mundo la gente habla de alegría, felicidad. Hermanos, ¿y a quién no le da alegría que le regalen visto? A usted no, a mí sí, hermano. ¡Qué bendición que a usted no le da alegría! Sabe que íbamos a regalar unas cosas hoy, pero ya vi que a ustedes eso no les da alegría. ¿Cuántos se alegran que les regalen algo? ¡Qué poquitos! ¡Qué bendición! Allá atrás tengo unas cosas, hoy me trajeron unos pachones, unas gorras, unas tazas de la iglesia, con nuestro eslogan somos familia, pero ustedes no quieren nada de eso. A la gente le da alegría, la gente le da felicidad, uno lo ve. Bueno, por ejemplo, mire qué linda la presentación que tuvimos esta mañana. La gente se llena de alegría cuando ve estas cosas. Vamos a una salida, vemos alegría. Yo este viernes y sábado, por eso ando un poco dañado de la garganta. En el colegio donde trabajamos, fue la salida de fin de año de la promoción, y fuimos a portesuelos, helado, estaba lloviendo, me mojé y el niño tierno fue enferma. Y más que ya de naturaleza, hoy lo ando el doble. Vi alegría, venían en el bus con alegría, pero yo venía meditando en el mensaje, y el Señor me hacía ver esto, cómo la gente se alegra con cosas, pero cuando no las tiene, no tiene alegría. Cuando la gente no tiene lo que anhela, lo que espera, lo que sueña, su vida no tiene felicidad. Vive sin felicidad, sin alegría. ¿Qué le provoca alegría? Salud, familia. Si a usted el buen comer, le alegra cuando le dicen, hermana, cree que después del culto vamos a comer. Eso da alegría, da gozo. Cuando alguien se acerca, los que están ya un poco ablandecidos, acuérdense cuando sus abuelitas se acercaban y le daban la mano a mi niño, y en medio de la malita su abuelita llevaba un billete enrollado, no le daba alegría a usted. Eso es gozo, hermanos. Si a veces cuando los hermanos me dan la mano y siento un papel, digo, padre, y después veo una petición de oración. También me da alegría. No da alegría, hermanos. Mire, si nosotros nos alegramos por muchas cosas. Si está en familia, si dicen algo jocoso, usted goza. Siempre en la familia hay un chistoso. Y siempre en la familia hay uno que lo agarra un debate. Entonces da alegría. Siempre da alegría. Pero... si rápido usted nota al verte el rostro a alguien y se le puede acercar y se le puede decir, hermana Lexi Carmen Carmen Lexi, ¿qué tiene? ¿Por qué uno le ve el rostro y dice algo le pasa? Hermano Fede, ¿qué le pasa? Bueno, no sé si vieron algún video de uno de estos días que andaban regalando unos chocolates. Miren, el vlog estaba así. Pero cuando me lo hecho para usted. Gente, cuando la hacen me cambio la vida. ¿Qué pasa? Miren, el rostro, nuestro rostro es fácil. Bueno, hay jóvenes que tienen unos rostros como que fueran viejitos, marcado. Y hay unos ancianos que tienen un rostro como que fueran hipotequinciañeros. A veces hay contraste y uno llega a entender qué es lo que puede hacer que alguien tenga alegría. Ah, que hay tal problema, hermanos. Los que estamos en el reino es difícil que tengamos alegría. Oiga lo que estoy diciendo. Los que estamos en el reino es difícil que tengamos alegría. ¿Ya les explico por qué? Es difícil. Hermanos, si es de que viene a la iglesia más problemas son, dificultades. Es que el diablo no anda viendo por dónde le mete el colazo. Ay, se le va la tranquilidad, se le va la paz. Ay, en el trabajo, en todas las áreas. Por eso el Espíritu Santo no dice y oiga por favor, aquí hay una palabra que se la van a proyectar. En Gálatas la palabra cuando dicen más el fruto del Espíritu es amor, gozo, esa palabra, gozo, ¿sabe qué significa en el griego gozo? Sí se la puse. ¿Sabe qué significa? Como han dicho, ¿cómo se escribe gozo en el griego? Chara. Diga conmigo chara. Ahí está, chara. ¿Cómo es? Chara. En el original dice más el fruto del Espíritu, oiga, se va a prender, más el fruto del Espíritu es agapeo. ¿Cómo? Porque agapeo es amor. Chara. ¿Cómo es? Chara. Y cuando usa la palabra chara está diciendo esa palabra en su traducción algo que sólo Dios puede producir. Oiga, algo que sólo Dios puede producir. El piso produce gozo. No, el piso produce alegría, hermano. Yo le digo a la gente con la que trabajo, para mí hay días felices. Día de Pablo Hidalgo, papá. Porque eso produce alegría. ¿A quién no, hermano? Si usted de repente se mete a su, hermano. Uy, todo mi poder, papá. Se mete a su a del banco, siempre le aparecen los cinco centavos. Pero de repente cinco con cinco. ¿De dónde brinca con los cinco pesos? Porque esos cinco dolaritos han producido alegría. Oiga, los cinco pesos producieron alegría. Quiere decir que si no hay cinco pesos, usted no tiene alegría. Triste lo voy a decir. Pero algunas esposas cuando llegan a casa y ven que no está su marido, les produce alegría. Hay hijos, tristemente, llegan a casa y no están los papás. Quieren una alegría, men. Fiesta hacen. Y los papás, el papá quiere estar de romántico, le dice a la esposita, mira, tengamos una noche vos y yo vayamos a comer. Ay, no. Y los niños, ay, hermana, los niños dan alegría cuando usted se va. Brincan cuando usted no está. ¿Qué pasa? Bueno, trabajadores, empleados, cuando no está su jefe, no hay alegría, pues. ¿Cuántos dicen amén conmigo? Todos aquellos que les sale una frase en el gobierno, viven con alegría toda la vida. Porque no trabajan. Se produce alegría. Un gozo. Y la mamá no entiende. Mamá, me está haciendo trabajo. ¿A dónde? Ya le dice, ¿a dónde vas? Ay, mi amor, ¿por qué estás tan alegre? Porque nunca voy a trabajar, mamá. Dios bendiga los de la asamblea. Bueno, fijaos. Piense, por favor, ¿qué cosas le produce a usted alegría? Oiga la palabra. Alegría. ¿Qué cosas? Quiere decir que si eso está, usted está alegre. A mí me gusta manejar. Me fascina. Puedo andar muy cansado. Por ejemplo, ayer venía bien cansado y mi esposa me fue a traer y ya le dije como, no, no, no. Voy a manejar yo. Me gusta manejar. Y hay pasajes que me producen alegría. Quiere decir que cuando no paso por ahí, no me va a producir alegría. Por eso la palabra chara significa algo que solamente Dios puede producirlo. Por eso dice el escritor sagrado, mas el fruto del Espíritu es agapeo, amor, chara, gozo, algo que solo Dios puede producir en nosotros. Y oiganme por favor esto. El gozo, no la alegría. El gozo es una cualidad que solamente la tienen los que viven en una relación personal con Cristo. Te lo voy a volver a decir. El gozo es una cualidad que solo los que tienen una relación personal con Cristo la tienen. Por eso la gente, y aquí voy a lo medular de la enseñanza, los problemas les roban el gozo. ¿Sabe por qué? Porque, o les roban alegría. ¿Sabe por qué? Porque el mundo está ligado, su estado de ánimo, feliz, contento, a lo que tienen o a lo que ven. Usted tiene un carro, va a un centro comercial, lo estacionan. Si son de los que se desolvíen y se pierden, hasta foto le toman. Y usted va a buscar el estacionamiento, hermano, y nota su carro. Eso le produce gozo. ¡Ay, Señor, gracias! No sé si alguien así, hermano, sinceramente. ¿Por qué? Porque a usted ver el carro le da tranquilidad indirecta, que no se lo robaron, ahí está. ¿Pero qué pasa si no estuviese? ¡Todo su estado de ánimo fuera cambiante! ¿A qué se está refiriendo el apóstol Pablo entonces? Bueno, Pablo dice esto, metiendo todo lo que la Escritura dice. En este mundo, usted mejor que nadie lo sabe, estamos propensos a tener problemas, dificultades, necesidades. Hermano, mire, este volado de Guatemala que bloqueó la frontera, yo no sé si en algún momento de estos días fue al super, había un producto que no estaba. Pero ni en la época de la pandemia. La bulla que está pasando en Israel de la guerra, es de estar pendientes, orando, de todo de todo lo que está pasando en Israel, de todo lo que está sucediendo a nivel del mundo, es de estar orando. Pero óigame, todas esas cosas, todo, absolutamente todo lo que está pasando, todito. Hay personas que los tienen en zozobra, los tiene con miedo, los tiene ahí, y qué va a pasar, y qué va a suceder. Los tienen en una aflicción grande. Pero, cuando usted permite que el Espíritu Santo produzca en usted esta parte llamada gozo, usted entiende. Yo, y óigame por favor, no sé si me ayuda otra vez Federico, no se lo di así en ese orden, pero, mire los versículos lo que dijo Pablo, en el verso 11, no lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a hay una palabrita ahí, cuál es la palabra del verso 11, he aprendido a contentarme, y sabe qué significa la palabra contentarme, viene de contentamiento, y sabe qué es el contentamiento, el gozo no es andar como que cuastón, viéndose todo el día, ese no es gozo hermano, ese no es gozo hermano, el gozo no es hola, ¿qué tal? sí, que aquí bien mal, ya dos días me quedan de vida, no, no, no, ese no es gozo hermano, el gozo no es ¿y por qué andas alejé? no vas a creer, me acaban de despedir, ¡qué bendición! no hermano, el gozo no es ser masoquista, sabe qué es el gozo, el gozo es aunque usted no tenga una sonrisa, usted como permite que el Espíritu Santo lo produzca en usted, ese fruto, el gozo es dejar que el Señor, dejar que el Espíritu Santo me haga recordar en cualquier momento y en cualquier circunstancia, mi vida está totalmente segura en Cristo Jesús, y las cosas que me pasan, si usted lo va a dar al Señor déselo fuerte, y las cosas que me pasan, no me va a cambiar, no me va a quitar la paz, oiga por favor, si no tiene pisto la muerte, pero cuando tiene gozo, aunque no tenga pisto, usted va a recordar una cosa, mi vida depende totalmente de Cristo, que yo no tenga pisto, no quiere decir que no pueda, ¿por qué?, porque yo no dependo del pisto, yo dependo de Cristo Jesús, yo no dependo del dinero, dependo de Cristo Jesús, ¿por qué cree que la Biblia dice, comprarán sin dinero?, no está diciendo, vaya al super y dígale, soy miedo de este papa Francisco que Jesús se lo pague, y va a tener la cola ya, no, yo tampoco, y se lo digo de una forma personal, yo tampoco, bueno, si yo pudiera poder decirle a usted, y pieza por pieza, le digo algo, todo lo que ando puesto, no lo he comprado yo, ni tampoco mi esposa, sabe que el Señor me lo ha regalado, sabe que este saco, me lo regalaron, este pantalón, me lo regalaron, todo lo demás, imagínese, me lo regalaron, esta camisa que ando aquí, me la regalaron, me ha escuchado muchas veces una etapa, donde no tenía para comprarme nada, nada, los de la vieja escuela se van a acordar de estos zapatos frijolitos, ¿se acuerdan de los frijolitos?, zapatos maseiro, y eran en forma de frijol, y sabe que hoy los iba a traer, pero muy pesados los animales, todavía los tengo, yo no tenía para comprarme zapatos, ya se lo he dicho, tenía un pantalón que era negro, pero se volvió gris rata, tanto lavarlo, tenía una camisa que era blanca, pero se volvió amarilla, tatushke, tanto lavarla, y tenía un saco, como mi papá decía, de reír y llorar, era el único hermanos, para todo evento lo usaba el saco, la camisa estaba tan gastada que un día levanté la mano y atrás, pero como andaba el saco nadie vio, no tenía hermanos, literal, ni para comer, ni para eso, y estábamos trabajando, levantando una obra en Zulután, donde conocí a esta mujer, visto, no tenía el nombre, pero... ya me he oído contar de la etapa que pasé seis meses comiendo mangos, porque eso era lo único que había, desayuno, almuerzo y cena hermanos, ya cuando se estaba acabando la temporada de las vacas flacas, llegó la que se convirtió en mi suegra, sabe que Dios le puso a mi suegra, es que siempre, un día platicando con mi esposa, todo lo que Dios nos ha dado es porque Dios se lo ha puesto a alguien en el corazón, llegó mi suegra ese día, yo tenía ya casi los seis meses de no, o sea, hermanos, literal, yo no sabía que era volver a comer huevos en ese lugar, primor, eran mangos, yo me levantaba a las cuatro de la mañana a pelear con el chucho que cuidaba, para que no le comiera al chucho los mangos, arríase, pero vieron que yo no le reiría, yo en la noche dormía donde el chucho pataba en el día, por eso, a veces le hago, o me raspa, sí, ya me quedó la maña, hoy se lo cuento así, hermanos, pero recién pasado todo esto, créanme que yo me acostaba, muchas veces llorando y le decía, y esto es a lo que me ha llamado Dios, terrible, no crea que era así, y me dormía, no, dándole vuelta a la cabeza, de verdad, ser pastor es esto, Señor, y saber que al día siguiente tenía que levantarme a cuatro de la mañana para pelear con Canelo los mangos, diga que Dios me puso una capa protectora en el estómago, comer tanto mango da desintería, hermano, gracias a Dios que yo, mal de mayo, no pasé, pues ahí estaba, terminé de predicar ese servicio, y vi que se acercó la hermana Carmen, y así llamaba mi abuela, y así llamaba mi mamá también, se acercó la hermana Carmen con una bolsa, con unos tamales, nunca vuelve a los tamales, no era mi suegra, y me dijo esas palabras, yo sé que no necesita, pero fíjese que sentí traerme esos tamales, ay hermanos, sabe que los tamales me duraron bastante, y después me di cuenta de algo, la que terminó siendo mi esposa, le dijo, y para qué le vas a llevar quien no necesita, Dios mío, yo sigo orando por mi esposa, la que se hicieron, miren, esos tamales que me comí fueron los más ricos, y no crean que a partir de ahí, no, hermanos, a mí mi papá me enseñó que guarda piel, sabe que esos tamales, me comí la mitad del tamal, porque dije, esto me van a durar tres días, al día siguiente desayuné tamal, y sabe que por una semana, por una o dos semanas, mi suegra siempre me llevaba comida, no era mi suegra, y siempre me llevaba comida, y el señor comenzó a enseñarme a decirme, ¿sabes qué pasa?, que el gozo, el contentamiento no es tener aquí, el gozo, el contentamiento es saber que lo tengo a Él, y que Él tiene cuidado de todo, hasta de lo más mínimo, que se lo a Cristo, que aplauso, por favor, el gozo no depende de las circunstancias, ¿por qué?, porque, díganme, ¿quién de ustedes no tiene problemas?, papás, ¿quién de ustedes no tiene problemas con sus hijos?, si a veces los bichos ya están grandes, ya andan más rebeldes, y usted dice, Señor, ¿qué hago con ellos?, y ustedes me roban la paz, con cariño, ¿por qué usted se deja?, con cariño, ¿sabe por qué?, porque cuando usted tiene gozo del Señor, usted entiende, aunque sus hijos estén perdiéndose, estén rebeldes, pero usted tiene una buena comunión con el Señor, el gozo que tiene por dentro le va a hacer recordar, en el tiempo del Señor, estos bichos van a venir al Señor, ¿por qué?, porque así lo dice la Biblia, tú y tu casa serán salvos, no pierda el gozo, ¿sabe qué gozo?, no es andarse riendo, te vas a reventar los dientes, pero el Señor te va a traer, pero ese no es gozo, eso es tener mal corazón, ese no es gozo, el gozo no es que usted le diga a su pareja, jajaja, corazón no te va a ir mal, ya vas a ver, no, el gozo es estar tranquilo, no permitir que nos roben la tranquilidad, no permitir que nos roben la paz, y estar seguro de algo, hermana, no se deje robar el gozo, hay gente experta que estudian para robarle el gozo a las demás personas, hay gente que está propensa todos los días para verle a usted cómo hacerle sentir mal, pero como usted es alguien que tiene una buena relación personal con Dios, usted entiende, las circunstancias no me producen gozo, me lo produce el Señor, pero para eso usted tiene que tener comunión con el Señor, para eso usted tiene que orar, leer la Biblia, congregarse, por eso usted que está ahí en línea, con amor, aquí hay un lugar esperándolo, tiene su nombre, tiene su nombre, no somos los que estamos aquí esta mañana, ¿le puedo preguntar algo? ¿y a usted qué le roba el gozo, hermanos? hay algo que esta mañana quiero mostrarle ahí, porque hay gente que dice, no, pero hermano, mire, ¿sabe qué es lo que pasa? yo no tengo motivos para estar con gozo, si, mirá los grandes líos que yo tengo, me va a decir, tiene razón, hay problemas, hay deudas, hay enfermedades, los hijos no quieren nada con el Señor, tiene problemas en su matrimonio, su pareja ahí anda, no sé, perdido, usted me va a decir, yo no tengo motivos, es que ese es el problema, cuando usted quiere ver cosas tangibles que le produzcan gozo, no lo encuentra, yo voy a mostrarle esta mañana cuatro cosas, hay más, pero solo voy a mostrarle cuatro cosas, la primera, por la cual usted debería de tener gozo, es la salvación, ¿qué es? la salvación, ¿a qué se refiere con esto de la salvación? ah, que ya le entregué mi vida, ahí está, que ya le entregué mi vida a Cristo, si, tiene razón, pero va más allá, es el hecho de entender algo, por favor, escuche bien esto, estamos en una época en la que el mundo está pasando por tantas situaciones, políticas, económicas, sociales, pero usted, Dios, le está dando la oportunidad de entender, tu vida tiene una ventaja con relación a los demás, si tú murieras hoy, por garantía del Señor, va a estar en la eternidad con Él, ¿qué debe de producirme gozo? el hecho de saber que a pesar de que yo he sido una mala persona, porque las personas muchas veces dicen, no, es que yo no merezco esto, porque me he portado mal, he andado caminando lejos del Señor, no, quiero un motivo para tener gozo, para tener contentamiento, que a pesar de quien es usted, de todas las regadas que usted ha hecho, Cristo no le ha dejado de amar, Él murió por usted en la cruz, ¿para qué? para que pudiera tener salvación y vida eterna, quiero un motivo para estar lleno de gozo, el hecho de saber que hay alguien que peleó por usted, y ese alguien es Cristo, y Él peleó por sus enemigos, contra sus enemigos, cuando usted no valora la salvación, cuando usted no valore el recibir perdón por sus pecados, es por eso que el diablo le roba el gozo, se lo traduzco de otra forma, piense por favor que fue lo último que Cristo le perdonó, eso tiene que producirle gozo, que a pesar de lo malo que usted haga, el Señor le ha perdonado a usted, otra razón, quiero otra razón para saber por qué puede tener gozo, por el poder de Dios, piense eso, primero la salvación, y segundo el poder de Dios, y cuando habla acerca del poder de Dios, está diciendo, ¿quiere tener una razón por la cual usted puede estar gozoso? mire todo lo que Dios ha hecho en su vida pues, cuente por favor las maravillas que Dios ha hecho, cuéntenas, aquí es primera vez que voy a contar esto, muchas veces usé este ejemplo, unos amigos tenían una gran deuda, pero gran deuda, pero deuda, en la casa de esta persona hacíamos nuestra reunión, y una vez le dije, mire me va a trazar a su casa para hacer la reunión, como estaban bien endeudados, y estaban bien mal, se me queda viendo brava, ella no suele ser así, pero se me queda viendo brava, y me dice, si pero es la última vez que se la préstame, ¿por qué? le digo, porque esta casa la vamos a perder, estaba frito de un lado, frito, y hoy por hoy pueden dar testimonio de algo, que una gran deuda, Dios hizo que se las perdonaran, ¿no cree que es un motivo para darle gracias a Dios, para estar contento? hermanos, ¿cuántas veces a usted Dios le ha echado la mano cuando usted ya estaba perdido? ¿en cuántas ocasiones Dios le ha ayudado a usted en medio de sus circunstancias? eso debe de producir gozo, ¿por qué? porque Dios no es un Dios de ocasiones, Dios es un Dios eterno, siempre está dispuesto a ayudarle a sus hijos, sea cual sea la circunstancia que esté pasando, ¿a usted Dios le ha ayudado o no le ha ayudado? a mí Dios me ha ayudado, Dios nos ayuda todos los días, piensa esta mañana, por favor, ¿por qué deja que el enemigo le robe el gozo cuando Dios ya le ha mostrado su gran poder? si Dios ya lo hizo una vez, lo va a volver a hacer, si Dios ya le proveyó, lo va a volver a hacer, si Dios ya sanó, lo va a volver a hacer, si Dios ya ha sostenido, lo va a seguir haciendo, es un motivo para tener gozo, ¿por qué? porque yo sé que las cosas no se han arreglado, pero conmigo está el que arregla todas las cosas, sé que la situación no ha cambiado, pero conmigo está el que cambia todas las cosas, sé que la familia no se ha convertido totalmente, pero conmigo está el que convierte todos los corazones, ¿no cree que fue un motivo para tener gozo? la salvación, el poder de Dios, el poder que Dios le ha mostrado, pero en tercer lugar, el Espíritu Santo, y cuando se refiere el hermano al Espíritu Santo como tercer motivo que produce gozo en nosotros, es el hecho de saber que hay alguien que se va a acercar, me voy a mover de aquí, oye, me voy a mover de aquí, voy para allá, para que no perdamos esta señal, ¿sabe quién es el Espíritu Santo? ¿a qué se refiere la vida cuando Dios es el Espíritu Santo? Dios nos formó a profundidad a cada uno de ustedes, ¿saben quién es el Espíritu Santo? ¿saben lo que es lo que está pasando? y como saben lo que está pasando, le dicen cuanta palabra con la que uno levanta, no me importa, yo te voy a ayudar, te ha costado mucho el trabajo, pero yo te voy a ayudar, ¿saben quién es el Espíritu Santo? el Espíritu Santo es cuando usted se está tocando, en algún lugar está ahí cargado y se ataca a usted que le dice que pueda ayudarme, que voy a dar paz, todos los problemas que usted está patando, yo te voy a dar paz, no te voy a perder, ¿no creen que es un motivo para tener ojo? cuando el Espíritu Santo se acerca a las personas, ellos conocen tan bien qué tal por lo que estamos patando y ahí está en un momento que usted le dice, yo voy a morir, usted me ayuda, yo voy a morir, ¿no creen? el Espíritu Santo me conoce, por eso dice que es un motivo para tener gozo, ¿por qué? me da alegría, ¿saben qué es lo que van a quitar de mi casa? ruidas, no, eso es patoquismo, gozo, ¿saben qué es gozo? gozo es saber que aunque las cosas se han perdido, los agentes del control de mis manos, el Espíritu Santo me recuerda, pero donde han salido, él tiene el control de todo, si usted lo cree, denle un aplauso al señor, por favor, esta mañana, bien, por favor, la palabra de Dios, no está diciendo, Willy, ya no tengas problemas, no, al contrario, le está diciendo, tienes problemas, pero el Espíritu Santo te va a hablar y te va a enseñar que aunque tengas problemas, él tiene el control de todo, ¿por qué le ha traído esta mañana? porque el Espíritu Santo le ha traído, ¿y por qué le ha traído el Espíritu Santo esta mañana? para decirle personalmente, yo soy el único que puede darle sentido a tu vida, la salvación, el poder de Dios, el Espíritu Santo, pero mire en cuarto lugar, ¿qué me tiene que dar gozo? la presencia de Dios, ¿qué dice ahí? la presencia de Dios, la Biblia dice que en su presencia hay plenitud de gozo, ¿a qué se refiere, hermano, con esto? mire, yo me encerraba en ese cuarto donde dormía y oraba y le decía, Señor, ¿y cuándo vas a abrir la luz? y me levantaba al día siguiente, Señor, ¿y cuándo vas a abrir la luz? llegaba el momento del servicio y los hermanos se acercaban y me decían, ay, Pastor, perdón, venimos tarde, ¿por qué va a creer que nos fuimos a comer o no está mal ello? no, porque en el momentito no crea que yo decía, va, no, y a veces decía, Señor, ya estoy comiendo, le pones que me invite, le abro mi corazón, le abro mi corazón, una de las cosas que espero que usted vaya aprendiendo de nosotros como familia es, nos gusta ser transparentes, es lo que somos, hermano. Yo le decía al Señor cuando ya terminaba el servicio, ¿y por qué no los tocaste? ¿no le ha dicho usted al Señor así? Sí, ¿y por qué no tocas a fulano que me bendiga? Porque a veces ponemos nuestra mirada, el gozo no lo produce fulano, ni me engaño, el gozo lo produce el Señor, y años después, estoy hablándole hace más de 25 años esto, hermanos, y 25 años después puedo decirle algo, así como Pablo lo dijo, he aprendido a estar contento tenga o no, tenga, y no crea que los problemas no vienen, no, buen hombre, a medida que avancemos en esta vida, usted va a escuchar testimonios recientes, donde no teníamos para pagar en la época de la pandemia, y le dije a mi esposa, bendamos este carrito que Dios nos dio, y ni modo, a pie, o me pongo en una esquina a ver si me compran, le digo, pero algo tenemos que hacer. Yo le pregunté, yo le dije que a mi me compran, algo tenemos que hacer. Pero cuando oramos, Dios nos consuela, y nos hace recordar verdades tan grandes como, por ejemplo, ¿por qué cree que la Biblia dice, el Señor es tu pastor, y nada te faltará? ¿por qué cree que la Biblia dice, vengan a mí, los que están trabajados y cargados, que yo los haré descansar? En la presencia de Dios, se produce el gozo. Mira el versículo 4, se lo van a proyectar, Filipenses 4.4 ¿Qué dice? Filipenses 4.4 ¿Qué dice 4.4? Revisitamos el Señor siempre. Otra vez, digo, ¿qué dice? ¿Dónde cree que estaba Pablo escribiendo esto? En una cárcel. Estaba preso. Dígame, ¿qué motivo de alegría, de gozo, puede tener alguien en una cárcel? Ninguna, hermanos. Hubo una época que anduve, en esa misma época, solo que un poquito más adelante, iba al penal de Berlín. Íbamos a predicar, hermanos, si usted ha estado en una cárcel de mi cita, si usted ha estado en una cárcel de mi cita, es molado, es feo, hermanos, no feo, feo. Unas tinieblas se sienten ahí, terrible. Dígame, ¿qué motivo tendría Pablo en una cárcel? Y óigame, una cárcel donde estaba esperando que lo llamaran para colgarlo, para matarlo. Y él dice, regocijaos en el Señor siempre. Otra vez, os digo, regocijaos. ¿Qué motivo habrá? Hermano, pregúntele a alguien que tiene problemas económicos pero que ha entendido que una relación con el Señor es mejor que cualquier otra cosa, le va a decir lo mismo. Mire, no tengo para pagar, pero en esta vida he entendido algo. Dios tiene total control de todo. Cuando Pablo dijo otra vez, digo, regocijaos, ¿sabe qué estaba diciendo? ¡Ya, que me maten! ¡No! Si Dios quiere que yo pase por esto, es porque Él tiene una bendición para mi vida. Si Dios quiere que usted pase por lo que está pasando, es porque Dios tiene una bendición para su vida. En el nombre del Señor se lo repito, lo que tú estás pasando está dentro del plan de Dios. ¿Sabe por qué? Porque te va a bendecir. Él lo va a usar para bendecirte. Él va a usar tus problemas para bendecirte. Pero eso sí, tienes que estar cerquita del Señor. Es sencillo, hermanos. El desaliento, la duda, las deudas, las malas actitudes, el mal carácter, son cosas que roban el gozo. Mírenlas, por favor, otra vez, estas cuatro rosas, que pueden a usted ayudarle a tener gozo, salvación, el poder de Dios, el Espíritu Santo, y la presencia de Dios. ¿Y cómo se va a notar que yo tengo gozo? Con tres cosas sencillas, te las digo rápido, si quieres póngame las tres de un solo. En estas tres cosas, se va a notar que de verdad, usted tiene el gozo del Señor. Número uno, rostro alegre. Miren que está la par suya, por favor. Mírenlo, mírenlo. Sabe que hay gente que no tiene rostro alegre. ¡Ojo! Estamos preocupados. Con cariño, con cariño le voy a preguntar eso esta mañana. Sinceramente, sinceramente, ¿cuántos tienen problemas ecológicos? Gracias, ¿cuántos tienen problemas de salud? Voy a cambiarle la pregunta, ¿cuántos están llenos de problemas, hermano? Alguien me va a decir, si yo le cuento, no tendría motivo para tener gozo, tiene razón. Pero déjeme contarle algo en esta mañana. Hay alguien que se llama Cristo Jesús que puede ayudarte con todos tus problemas. Eso puede cambiarte el rostro. Hay alguien que se llama Cristo Jesús y ha dicho pelear por ti todas tus necesidades. Eso tiene que cambiarte el rostro. Hermano, hermano, amigo, amiga, sale esta mañana de este lugar con una idea en tu corazón y en tu mente. No soy la persona perfecta, pero tengo un Dios perfecto. No tengo fuerza, pero tengo un Dios fuerte. ¡Déselo al Señor, por favor! Cambie su rostro. Cambie su actitud. Permita que la gente pueda entender, usted y yo en esta tierra jamás vamos a ser perfectos. Pero tenemos a un Dios perfecto con nosotros. Cambie ese rostro. Permita que la gente pueda ver que en su corazón hay promesas que reflejan que Dios tiene el control. Y miren los segundos, cantan los osos. Y no nos pusimos de acuerdo con Jonathan. Jonathan dijo algo hoy en la mañana. Están cantando, pero como que no lo creen. Ay, pero que no la vayan a poner en la bala, porque... Ay, que viene la alegría. ¡Ja! Hermano, ¿cómo es eso? Cantándole, miren, con cariño. En enero en enero viene el sol. Y llama y manda a alguno de ustedes. Luis, I love you. Y esta mañana le estoy pidiendo. Me diste reflexiones. ¿Viste por qué amaneció vivo hoy? Ah, porque me cuido. Porque Dios tiene cuidado de ti. ¿Viste por qué vine a la iglesia? Porque me trajeron. Porque Dios tiene cuidado de ti. ¡Tienes trabajo! Tú eres papá. Pero el día que Dios no quiera, tú no tienes trabajo, papá. ¿No crees qué motivo para decirle al Señor gracias? Cantar con alegría. Hermano, cante con alegría. Alegre. Alegre yo estoy. Ay, Dios. Este gozo que siento yo. El mundo no me lo odio. El mundo no me lo odio. Y como no me lo odio, no me lo puede evitar. Sonríe, que sale por suyo, hermano. Sí, está lleno de gozo, hermano. ¡Qué gozo! El mundo allá afuera tiene que meterse cosas al cuerpo para estar alegre. Si hasta en las mesas no se asume, ¡Woo! Y usted dice, señora, que no te vas con un reúma. El reúma se le va. Pero cuando nosotros entendemos, yo no necesito meterme en nada para estar gozoso, porque el que me produce gozo es Cristo Jesús. Yo puedo comprender al momento de cantar. ¿Sabe por qué canto con gozo? Porque Dios tiene control de mi vida. ¿Sabe por qué canto con gozo? Porque aunque no tenga para comer, Él ha dicho que tiene cuidado de mí. ¿Sabe por qué canto con gozo? Porque aunque estoy lleno de problemas, Dios me ha dicho otra vez, porque aunque estoy lleno de problemas, Dios me ha dicho, tranquilo, tranquila, yo tengo la respuesta que tú necesitas. Cambie la forma de adorar al Señor. Y en tercer lugar dice, va a sentir una fortaleza divina. ¿A qué se refiere con eso? Bueno, Filipenses 4.13, el último versículo dice, todo lo puedo en Cristo, que me fortalece. ¿Sabe a qué se refiere con fortaleza divina? Yo sin fuerza no puedo. Ya no tengo ánimos para seguir. Es muy difícil lo que estoy pasando. Es muy difícil lo que estoy viviendo. Pero como yo permanezco cerca del Señor, Dios me hace entender. Hija, hijo, no es de tus fuerzas, es de las fuerzas del Señor. Usted ya no puede. Ha venido esta mañana al mejor lugar. ¿Sabe por qué? Porque hay gente que ya no puede. Está lleno de gente imperfecta. ¿Pero qué hemos entendido? El Dios perfecto sí puede con todo lo que yo no puedo. Dice la Biblia que al que cree, todo es posible. Un aplauso más fuerte al Señor, por favor. El gozo como parte del fruto del Espíritu, no lo produce la circunstancia. No lo produce que yo esté bien en toda la tarea. El gozo que yo tengo lo produce que el Señor tiene control de todas las cosas. ¿Pudiera cerrar sus ojos, por favor, en esta mañana?

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