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Rom 14 Sem 70 Lo que cayan las Iglesias Dom 07 Abril 2024

Rom 14 Sem 70 Lo que cayan las Iglesias Dom 07 Abril 2024

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The speaker is discussing the importance of respecting others and not judging them based on personal beliefs or actions. They emphasize the need for maturity and understanding in interpreting biblical teachings. The speaker also addresses issues such as tattoos and double standards within the church. They emphasize the importance of serving God and respecting authority. Overall, the message is about acceptance and avoiding hypocrisy in one's faith. La siguiente es una producción de la Comunidad Olivo Verde, Costa Rica. Adoraré, adoraré a mi Señor, yo entraré en tu santo sede para adorar. Romanos 14, Damas y Caballeros, es el texto bíblico que le deja callada, le deja cerrada la boca a la gente religiosa. Romanos 14 es el texto bíblico que nos tiene que enseñar a respetar a otras personas. Ahora, para empezar, como veo gente nueva, tengo que decir que en este lugar nosotros vamos predicando la palabra versículo a versículo y estamos en la Semana Setenta, Romanos 14, versículo 1. Vamos verso a verso durante todo el libro de Romanos, esta es la Semana Setenta, y obviamente cada semana, a pesar de que es una serie del mismo libro, no es una serie que yo me invento para que ustedes se sientan bien, ni cómo ser el marido del año, ni cómo ser el mejor negocio, sino que es algo que la misma palabra nos está tratando de mostrar, yo necesito que usted entienda que cada semana hay una enseñanza para todos nosotros del mismo libro, en el mismo orden en que el Espíritu Santo enseñó la palabra cuando la palabra fue enseñada. ¿Me doy a entender? Y eso es muy necesario. Pero el capítulo 14 de Romanos, señoras y señores, es muy delicado porque todos tenemos cosas que de alguna forma son muy nuestras. No quiero usar la palabra, pero la voy a usar para hacerlo más fácil. Secretitos. Y entonces oímos ahí a fulano que dijo una palabrota, y entonces hay variedad, Dios mío, ¿cómo es posible? Por Dios, ¿qué es ese muchacho con esa boca? O vemos al pastor que se le quedó viendo a una muchacha así, el pantalón, ¡el pantalón! Y, uy, ¿cómo es posible, señor? Ya no hay nada bueno, no hay en dónde persinarse. Me doy a entender, damas y caballeros, de que hemos sido de doble moral por muchos años, de que las cosas las hemos visto y las hemos tomado de una forma en donde algunos de nosotros decimos lo que está bien y lo que está mal. No se me olvida una de las anécdotas que me contaron de una cosa que pasó aquí hace muchos años. Andaron a trabajar un hermano fuera del país por mucho tiempo, y cuando él vino, de regreso, el aeropuerto o donde fuera que fue, se trajo un montón de muñequitos de Mickey Mouse y de Pat O'Donnell, se trajo la camiseta de Mickey Mouse y se trajo las cosas de Disney, se trajo todas esas cosas, y adivinen qué. Cuando llegó aquí, el pastor le dijo que eso era del demonio, que eso era satánico, que eso era malo. Tenía tres hijas, chiquititas, y delante de las hijas lo hicieron quemar todas las cosas. Y eso me parece a mí terrorismo evangélico, eso me parece a mí una cosa terrible. Pero sí yo quisiera que usted entienda que esta mañana, al entrar al capítulo 14, tenemos que tener mucho cuidado en lo que vamos a analizar, porque todos, por ejemplo, por ejemplo, ¿me puedo hacer un tatuaje? Si es un tatuaje con un versículo bíblico, si es un tatuaje con un versículo bíblico y es en una nalga para que no se le vea, y el tatuaje tiene que decir, Olivo Verde, Costa Rica. Hermanos, la Biblia no habla nada de hacerse tatuajes o no hacerse tatuajes, eso no es cierto. Hay un texto que dice que no te vas a imprimir, que no te vas a marcar la piel por los muertos. Eso es todo lo que dice la Biblia sobre eso. Pero perdón, si un tatuaje vale, si un tatuaje costara 10 pesos, uno dice, déjalo de los que quiera, al final 10 pesos, 10 pesos, pero un tatuaje no baja de 50.000 pesos. El pecado del tatuaje es pagar los 50.000 pesos por el tatuaje, y usted ni siquiera ha terminado el colegio. ¿Me voy a entender? O sea, que usted tenga familiares con hambre, hermanos en la casa, primos, su mamá, y usted no sea capaz de darle a su mamá 20.000 pesos por semana, simplemente porque está ahorrando, para hacerse semejante vagabundería. Eso es un gran pecado. Tiene que ver con la babosada, la tontera que se ponga. Porque al final uno dice, no ve qué bendición, me dice aquí el Salmo 119, lo empiezo aquí y termino aquí, en la parte de abajo, y dice, por favor. Sí, pero es que la gente no entiende que cuando se dan el tema de los tatuajes, quienes hacían eso eran la gente pagana. Y yo lo que le pregunto a la gente a veces es, ¿qué tendrán la jupa para estar pensando en esas cosas? Azerrín. Un hijo de Dios está pensando no en sí mismo, no en ella, está pensando en ser de bendición para otra persona. Y hay gente en la congregación que come dos veces al día. Y usted se va a hacer un tatuaje, y digo tatuaje por no decir bótox. O sea, la verdad es que la doble moral es muy evidente en medio nuestro. Somos muy hipócritas en muchas cosas. Todos, yo también. Yo no estoy hablando aquí de Adrúbal y de Giselle y de Judy. Yo estoy hablando que todos se nos mete el agua y se nos ocurre decir, vemos malísimo, ¿cómo es posible? Acabo de ver aquel hermano hablando con fulano de tal. Perdón, don Jorge, que lo use de ejemplo. Don Jorge Espinosa viene de Esparza. Don Jorge técnicamente lo han excomulgado. Está en el infierno. Porque se divorció. Hermanos, Romanos 14 es para gente madura. Romanos 14 es para personas que genuinamente entienden que la palabra es algo serio. No para estar en ese jueguito jugando a la iglesita y jugando brinquitos y jugando lloradera y tírense al suelo. Perdón, si fuera que después de que cambiamos y somos de verdad con otro corazón y en nosotros sucede algo de Dios, orínense si quiere. Pero es mentira, hermanos. Llevamos años tirando a la gente al suelo y escupiendo gente. Y lo único que vemos es personas que siguen siendo gente inmadura, que no pueden enfrentarse a la vida y a las cosas. Estamos llenos de rencor, estamos llenos de un montón de cosas feas. No somos capaces de sacar adelante a la familia siquiera. Buscando quién es el culpable. Y claro, eso es importante. Romanos 12 ubica a la persona, Romanos 12 nos ubica a todos y nos dice, mire, ubíquese. Usted no puede tener más alto concepto de sí mismo que el que debe tener porque usted está hecho para servir a Dios. Y usted va a servir a Dios hasta aquí. El día que se muera, aunque sea una vez en su vida, lo va a servir. Téngalo por seguro. Y ese día usted va a saber que va a servir a Dios aunque sea una vez en su vida, como es el caso de varias gentes en la palabra. Entonces viene y arma la iglesia en Romanos 12 y en Romanos 12 nos dice, somos todos parte de un cuerpo. Aquí no hay que el pastor es el importante y el siervo. No, no, todos estamos sirviendo. Todos estamos sirviendo. Los músicos están sirviendo, el equipo de audiovisuales está sirviendo. Somos servidores. Y viene el 13 y nos dice cómo ser ciudadanos. Como hijos de Dios, cómo ser ciudadanos. Versículo 13, cómo ser ciudadanos. Y nos dice, miren, háganle caso a las autoridades. Ese loco que está ahí o esa loca que está ahí el presidente, sea como sea, entiéndalo, es su autoridad, es su jefe. Y claro, a nosotros los ticos, el tema de la autoridad no nos gusta. No nos gusta. No nos gusta la autoridad. Estuve en un taller el pasado viernes con un equipo de médicos y de profesionales en el área de salud por una organización que están haciendo. Miren qué cosa más terrible. ¿Y cuál es el problema? Se llama, yo soy la autoridad, a mí nadie me tiene que estar diciendo lo que yo tengo que hacer, usted está loco. Todos tenemos a alguien, una autoridad, y esa autoridad tenemos que respetarla. Y si enseñamos a nuestros hijos a respetar la autoridad, a mí me han despedido de un trabajo por Bocón. No digan amén porque entonces sí que... El capítulo 13, Pablo se esmera por ordenar las cosas y cuando llega el 14, Pablo le dice, eso sí, acomódense. Acomódense porque no todo va a salir, no todo va a estar en el mismo orden, no todo siempre va a estar como usted espera que esté. Primero, no todo el mundo se convierte al mismo tiempo. Para decirlo de forma jocosa o vacilona, a no todo el mundo lo matriculan en el libro de la vida el mismo día. ¿Sí me estoy dando a entender? Hay gente que en los últimos años de su vida le entrega su vida al Señor. Hay gente que es jovencita. Hay gente que cree que es salva. Hay gente que cree que es hija de Dios y no lo es. No porque yo lo diga, no porque a mí no me gustan las enaguas, a mí no se me olvida. Hace muchos años venía aquí una muchacha y se sentaba por allá atrás y venía muy chingueleta y muy corta y todo el asunto. Y entonces se me arrimó una señora y me dice, perdone pastor, mira que a mí no me gusta como viene esa muchacha a la iglesia. Le digo, ah. Me parece que ella está incitando a los hombres porque viene muy pelada. Lo que la señora no sabía, lo que la señora no sabía es que esa muchacha tenía pocos días de haber empezado a venir a una congregación. Punto número uno. Que producto de la experiencia de conocer al Señor la despidieron del trabajo porque trabajaba en hookers o en dukers o en enseñe todo lo que pueda. La despidieron. Ella le pidió al jefe que ya no quería trabajar sin blusa y esas cosas y la despidieron. ¿Y adivine qué? No tenía plata para comprarse más ropa. Y yo tuve que decirle, yo tuve que decirle a la señora, señora, no se meta. Usted no conoce las circunstancias de esa muchacha. Y si, y si, y si a, y si a Adolfo, a Tao y a Federico se le tuercen los ojos, el problema no es ella, el problema somos nosotros. Perdón, no es un invento mío. Cuando me dicen abran los ojos por una mujer, la Biblia no dice que se me están yendo porque la mujer anda chinga. La Biblia dice que lo malo del corazón sale del corazón, sale de adentro. Porque yo alimento un pensamiento. Sí, pero es que los hombres, y bueno, ya no sé qué, pero se ha ido la vieja chismosa a decirle. ¿Por qué? Porque esa señora no conoce Romanos 14. Acepten. Me busqué la versión, no la traducción viviente, me la busqué para que fuera bien sencilla, porque es pesado. Acepten a los creyentes que son débiles en la fe. Claro, cuando la palabra dice acepten a los creyentes que son débiles en la fe, Víctor, Jorge Espinosa, Adrúbal Zamora, le sacamos pecho. Porque, ¿qué decimos nosotros? Los débiles en la fe, ¿y nosotros somos los fuertes? Acepten a los creyentes que son débiles en la fe y no discutan acerca de lo que ellos consideran bueno o malo. Noten que el apóstol empieza diciéndonos algo que es claro, hermanos, que es que hay un proceso con todos nosotros, hay un proceso con todos en un lugar donde la gente se está sometiendo a la palabra de Dios, no a los inventos de un loco que se dice pastor, se está sometiendo a lo que Dios dice, a su palabra, de forma humilde, de forma sencilla. Hay un proceso de Dios y dice la Biblia que hay personas que son débiles en la fe y otras personas que son los fuertes en la fe. No discutamos acerca de lo que ellos consideran bueno o malo. Ahora, yo quiero hacer aquí una salvedad, atención, yo quiero hacer una salvedad aquí. A ver, hermanos, el pecado es pecado siempre, ¿está claro? No hay tipos de pecados, no hay, no existe pecado suavecito, pecado es pecado, y el pecado no se suaviza. Lo que la palabra de Dios dice que es pecado, es pecado y se acabó. Y hay que procesarlo como pecado y mucho de lo que hemos hablado, a partir del proceso en el libro de Romanos, es que algunos de nosotros pensamos que no pecamos. Tuve la oportunidad de estar en una reunión hace 15 días con un grupo de pastores y me llamó la atención que estaban hablando de una congregación que la van a cerrar porque están aburridos, están aburridos. Es más, la recomendación que dio la congregación fue vendamos esto y repartamos la plata. A ver, si usted hace algo que está en contra de lo que el Señor dice, el Señor no está buscando un revólver para perseguirlo y para matarlo. Dios está tratando de que usted entienda que el pecado nos embrutece a todos y que Dios quiere que aprendamos a procesar el pecado por causa, escúcheme, por causa de la necesidad de la inteligencia de Dios en esta tierra. ¿Me entendió? ¿Vio qué diferencia que yo le diga? Es que Dios quiere que usted sea un santico y que usted ande por la vida. Hermanos, todos tenemos mil situaciones y circunstancias. Tenemos que tratar de dar un testimonio de lo que creemos en nuestra vida siempre que podamos en cualquier lugar que estemos, pero no siempre lo vamos a lograr. Porque algunos de ustedes no dicen, pero ni ni juepuña. Ay, no, ¿qué fue, qué fue, qué fue? Qué feo, Dios libre. Miren, algunos de ustedes son gente realmente muy correcta y yo no dudo de eso. No llegan ni tarde, pero ni al... nada, todo eso... Ves, la Biblia dice que cuando uno piensa que todo lo que hace está haciéndolo siendo bien despecado. La palabra dice que hay más gente en el cielo, en el infierno, por no hacer nada que la gente que sí hace cosas. Entonces noten que Pablo nos está mostrando que hay gente débil en la fe y que estamos conviviendo con ellos. Y que esa es una realidad que siempre la vamos a tener que estar conociendo. Verso 2. Por ejemplo, un creyente piensa que está bien comiendo de todo. Fui a la... había un turno de San Ramón y me estaba muriendo de hambre y me metí a la parroquia a comerme unas costillas. ¡Ay, no! Parecía misión a Gaza. Sí, sí, parecía misión a Gaza. Gorra, lentes oscuros, camiseta con una cosa rara ahí. Porque un famoso pastor aquí en el pueblo le dijo a la gente que quien iba a comer ahí le estaba comiendo comida al demonio. No se vaya, tío, porque las costillas estaban muy ricas, tranquilo. Oigan, hermanos, miren qué cosa más terrible. A ver, el apóstol Pablo no es ningún tonto. Pablo sabía que muchas de las cosas que se encontraban en el mercado romano sí eran sacrificadas a los idolos. ¡Claro que sí! Por eso Pablo está diciendo, por ejemplo, un creyente piensa que está bien comer de todo, pero otro creyente con una conciencia sensible come solamente verduras. ¡Claro! O sea, Pablo no está mencionando esto por mencionarlo, por decir, es que a Jorge Espinoza le agarra esa cosa de estar comiendo pura lechuga y matas. No, no, no, que coman, no, no, no. Realmente Pablo está haciendo la diferenciación de que hay personas que sabían que mucho que estaba vendiéndose había sido sacrificado a los demonios, a los dioses romanos, a los demonios. Tiene su lógica, hermanos. Pero Pablo reconoce esto y está diciendo si uno piensa que no tiene que comer comida de cerdo o comer carne o comer esto por las razones que sea. No se preocupe, por ejemplo, un creyente piensa que está bien comer de todo, pero otro creyente con una conciencia sensible come solamente verduras. ¿Alguno de ustedes les gusta bailar? ¡Sí! ¿Y algunos de ustedes bailan? ¿Porque son o babosos? Porque en Facebook sale todo. Perdón. ¿Qué es que la música, que es que lo otro, que aquí, que allá? ¿El ambiente? Estamos de acuerdo, hermanos. De esto estamos hablando. De esto estamos hablando. Pero hubieran que yo prefiero mil veces una pareja que disfruta su tiempo, disfrutan su tiempo juntos, ellos, como esposos. Prefiero una familia que compartan juntos. Hermanos, lo que la Biblia censura terriblemente es el exceso, la borrachera, la sinvergonzada. Eso es lo que la Biblia censura, hermanos. Ah, usted está dando permiso para beber guaro. Yo no le puedo dar permiso a nadie. Cada uno dará cuentas a Dios de lo que hace en su vida. Y si usted se tragó la cuota de guaro mía y la suya, yo le recomiendo que no vuelva a tocar el guaro nunca más en su vida. Eso no tiene nada que ver. Eso no tiene nada que ver con lo que estoy hablando. Yo estoy hablando de que si usted está llegando a un lugar y solamente vende una cerveza y se la toma, le prometo que no se va a ir al infierno ni va a perder la salvación. Pero si le gustó y se va a tomar 63 cervezas y se va a gastar 40 mil pesos en cervezas, hay como 15 pecados juntos. Por eso Pablo está haciendo la aclaración, hermanos y hermanas, Pablo está haciendo la aclaración de que tenga mucho cuidado de cómo usted está emitiendo un juicio, no lo haga, véalo, dice, no juzgue. Los que se sienten libres para comer de todo, en la partecita roja, los que se sienten libres para comer de todo, está diciendo que coman. No deben menospreciar a los que no sienten la misma libertad. Y los que no comen determinados alimentos no deben juzgar a los que sí comen. Y noten que el 3 dice porque a esos hermanos, a esos hermanos, Dios los ha aceptado. El versículo 4, que otra vez me lo brinqué, el versículo 4 dice claramente cada amo tiene a sus siervos como Él quiere tenerlos. Eso es lo que dice el 4, se lo leo. Me lo pueden... No hay audiovisuales, no hay nadie. ¿Puedes abrirme el versículo 4? Romanos 13, 4, papá. Romanos 14, 4, por favor. ¿Quién eres tú para juzgar a los sirvientes de otro? Su amo dirá, si quedan en pie o caen, y con la ayuda del Señor quedarán en pie y recibirán la aprobación de Él. Vamos. Conclusiones. Señoras y señores, débil en la fe no es fe débil. No confunda. Débil en la fe no es fe débil. Una persona que es débil en la fe es una persona cuya fe se fundamenta en otra cosa ahora. Cuando la gente está empezando a dar sus primeros pasos en el Señor y fue muy religiosa y tenía imágenes y le rezaba a las vírgenes y le rezaba cuánta cosa había y hacía cuánta cosa rara extraña había tanta cosa extraña que hay la gente tiende a creer que el hecho de tener algún tipo de cercanía con eso es traicionar esa fe. Pero la Biblia dice que débil en la fe no es fe débil. No lo es. Es simplemente que el fundamento de la fe de esta persona está basado en otra cosa. Segunda conclusión. Cualquier medida de fe es necesaria porque la palabra dice que sin fe es imposible agradar a Dios. Por lo tanto esa persona con su medida de fe, con su forma de ver la vida, con su forma de ver las cosas hermanos, está agradando a Dios por la fe porque está caminando en una dirección opuesta. Tercera conclusión y ojalá me la entiendan porque cuesta entender esto. Si existe gente débil en la fe, bien, entonces existe gente fuerte en la fe. Y los fuertes en la fe somos nosotros en teoría. Fuerte en la fe es el que sólo depende de su fe bíblica para vivir y dar fruto. Vuelvame a ver. La fe no se fundamenta en experiencias. La fe no se fundamenta en todas las cosas bellas que Dios ha hecho por mi. La fe se fundamenta en la palabra de Dios porque es lo único, la fe es lo único en nuestra vida que nos hace y nos sostiene. Todos tenemos experiencias, todos tenemos vivencias. Algunos de ustedes han tenido experiencias impresionantes con el Señor. Bellísimas. Pero son experiencias personales. Su fe debe de fundamentarse en la Biblia, en la palabra de Dios y por eso usted cree en la palabra de Dios. Y cuando una persona no cree en la fe, no cree en la Biblia como la base de su fe, ¿por qué dice la palabra? El justo por la fe vivirá. El justo por la fe vivirá. Entonces me puedo meter en el negocio que yo quiera, porque puedo hacer el negocio que yo quiera, la forma que quiera, porque si yo tengo fe me va a salir, ¿no? Si está dentro de la voluntad de Dios, si no, no. Dios no tiene por qué bendecirte. ¿Pero en qué estoy fundamentando lo que estoy diciendo? En la Biblia, en la palabra. Y la Biblia dice que vamos a sufrir. La Biblia dice que nos van a pasar cosas. ¿Adivinen qué dice la Biblia? Que todos nos vamos a morir. ¿Sí? ¿Saben qué dice la Biblia? Que Dios nos sana todos los días. Que todos los días las células gliales pasan por el cerebro limpiando el cuerpo todos los días. Que ir a la farmacia, que le den a uno una medicina donde la doctora Karen, y Karen le diga a usted, vea, mejor tómese esto. Es sanidad divina. Porque está en la voluntad de Dios que los médicos aprendan la ciencia para que usted sea sano por medio de la medicina. ¿Sabía usted que Dios lo sana de cosas y usted nunca se dio cuenta que lo tuvo? Número tres. No todo el mundo está al mismo nivel. Esto es cierto. Pero el error que tenemos es pensar que como yo me convertí el 15 de julio de 1975 cuente el año entrante cumplo 500 años de salvo. No todo el mundo está al mismo nivel. Pero la gente piensa que el tiempo me hace mejor. Que el conocimiento me hace mejor y que lo disciplinado me hace mejor. La Biblia dice el nivel lo determina la misericordia, el amor y el servicio. ¿Adivinen qué? Algunos de nosotros tenemos 800 años de andar en esto y no salimos para nada. Y somos repugnantes y la muchacha no volvió. La muchacha se sentaba y no volvió nunca más porque la vieja metida esa le dijo lo que no tenía que decirle. Roy está en un proceso de Dios que yo desconozco. China está en un proceso de Dios que yo desconozco. Yo quisiera que Adolfo baje esa panza que tiene tan terrible. Pero él está en un proceso de Dios que yo desconozco. Pero vieron que fácil fue tirarle a Adolfo con la panzota que me tengo yo. Vean, se los digo con mucho cariño. Estamos en tiempos donde cualquier cosa se le llama iglesia, a cualquier payaso que se para aquí adelante se le llama pastor, a cualquier recinto se le llama congregación. Es cierto, estamos en tiempos de eso. Pero muchas veces hasta esas cosas Dios usa por una persona que verdaderamente está necesitada. Quiere que se lo pruebe de nosotros. No hemos pasado por todo eso, Adrual. Gracias por venir. Gracias por ponerle atención a la Biblia. Gracias por dejarse la oportunidad de reflexionar en lo que la Biblia está diciendo. Y nos enseña a tratar de respetar a las personas que seguramente algún día ya no se van a hacer ningún tatuaje más. Algunos juzgamos a Jeffrey porque Jeffrey le dijo homaje a Adolfo y no estamos viendo que nosotros tenemos otras cosas. De hecho yo no estoy hablando de pecado. Estoy hablando de respetar el proceso de Dios. El capítulo 14 de Romanos es un capítulo que nos tiene que hacer madurar a todos. Y nos tiene que enseñar ¿saben qué nos tiene que enseñar? Que por lo menos yo tengo que aprender a decir las cosas con misericordia. Es más, la Biblia lo dice. Si usted se encuentra atado haciendo algo que no está bien, dígaselo. Pero usted llega a decirle atado, con los tacos de frente que usted está bien y él está mal, de una vez se lo va a echar encima. Que Dios nos ayude a ser iglesia. Porque somos iglesia en el momento en que nos acercamos a alguien que está vestido de una forma... Anoche para mí fue incomodísimo. Había una señora con el pelo azul. Yo no quisiera que las señoras vean con el pelo azul o con el pelo rojo, en minifalda o todo lo demás, por todas las razones que hay. Yo no estoy hablando de todas las cosas. Pero hermanos, yo les voy a decir algo. Yo le entregué mi vida al Señor en el año 1975. Y todo el montón de religión y todo el montón de cosas que le dijimos a la gente que no hiciera, número uno la gente las hizo, número dos perdimos la gente y número tres no logramos hacer nada bueno con las personas. Hay más gente fuera de las iglesias que adentro de las iglesias. Y dado que el mundo se acaba mañana, vámonos, oremos.

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