Estudio biblico 30-6-2023 Albert Pabon

The speaker discusses the importance of focus and concentration in preserving the knowledge that God imparts to us. They emphasize the need to prioritize spiritual wealth over material possessions and the importance of passing on truth to future generations. They also discuss the different aspects of our being - spirit, soul, and body - and the need for alignment and submission to God's will. The speaker highlights the need to renounce our own desires and be willing to sacrifice for the sake of God's kingdom. They reference biblical passages and encourage listeners to prioritize God above all else. ¿Cómo está la iglesia? Es un disfrute, es un disfrute, la verdad, poder estar aquí para aprender. Ubíquese en Primera de Samuel, capítulo 15. Primera de Samuel, capítulo 15. Yo quiero, antes de compartir la palabra, quiero decirles que uno de los grandes capacidades que debemos desarrollar nosotros para preservar lo que Dios nos habla es el enfoque. Miren, les quiero hacer el ejemplo para que usted lo vea. Si usted pilla, como dicen aquí en España, si usted pilla el espíritu de esta ilustración que le voy a hacer, le va a hacer mucha edificación. Un fotógrafo, un fotógrafo es bueno y gana dinero en base al enfoque de su trabajo. Hay fotos históricas y los fotógrafos ganan dinero cuando tienen un enfoque que nadie más tiene. Hermano, cuando descubrimos el enfoque, la capacidad de estar enfocado, ustedes saben que una de las cosas que les roba las riquezas de manera silenciosa a las personas es la falta de concentración. La gente a veces no logra disciplinar su mente, someterla a un tiempo o a un espacio para aprender. Siempre tenemos cosas, siempre estamos pensando en cosas y el desenfoque es uno de los ladrones silenciosos de las riquezas de la palabra. El mundo donde vivimos llama riqueza a la acumulación de cosas, pero las riquezas no son la acumulación de cosas. La riqueza es la medida de verdad que usted tenga del reino. El sistema nos dice que le dejemos cosas a nuestros hijos, que trabajemos y que le dejemos un pisito, 50.000 euros abajo del colchón, que les vamos a solucionar la vida, pero si no hay una medida de verdad en nuestros hijos, la herencia, levante su mano y diga, fui trasladado al reino para que mis hijos hereden la verdad, una verdad generacional. La verdad es lo que va a preservar a tus hijos cuando tú no estés. Si tú te concentras y atiendes al Señor cuando te habla, nadie te va a agitar, nadie te va a agitar. Mi pueblo fue destruido porque le faltó conocimiento. No dice porque no oraban, porque no hacían, no. ¿Porque le faltó qué? Y para conocer, para conocer yo tengo que sentarme a aprender. ¿Amén? ¿Su corazón está preparado para aprender? Ok, vamos a orar, levante su mano y diga, gracias Señor porque tú siempre nos hablas. Gracias porque cada vez que nos convocamos en este espacio, tú siempre nos hablas Señor. Bendecimos tu nombre, disponemos nuestro corazón y este tiempo para aprender a Cristo. En el nombre de Jesús oramos, amén, amén y amén. Ok, primera vez Samuel capítulo 15. Estamos aprendiendo estas últimas cuatro semanas, la última semana estuvo Davey, pero tenemos una serie que lo estamos enfocando en lo que es el orden correcto en el reino, que es todo nuestro ser, diga, y todo nuestro ser, espíritu, alma y cuerpo es guardado irreprensiblemente para el Señor. Ok, estamos estudiando y aprendiendo que nosotros tenemos, hay tres partes en nosotros, somos tripartitos. ¿Qué significa eso? Que tenemos tres partes, espíritu, alma y cuerpo. Cuando vamos caminando y vamos aprendiendo, verdad, la gente, no sé si usted ha escuchado, lo importante es el espíritu, que estemos bien, lo importante es la Palabra de Dios, lo importante es lo que Dios dice. El alma no importa, el cuerpo no importa, el espíritu hermanos. Si vamos a otra denominación donde sea más bautista, el alma, el alma, el alma tiene que ser, el alma, el alma, guarde nuestra alma. Y si vamos, tal vez, y escuchamos a nuestros, a las personas que son del séptimo día, ellos cuidan mucho el cuerpo, cosa que admiro yo de ellos, que cuidan muchísimo la alimentación, se enfocan mucho en las cosas, pero todas esas tres partes a veces son incompatibles, pero delante de Dios es un error fragmentar lo que Dios unió, lo que Dios hizo una sola pieza, o han escuchado ustedes esa expresión, lo que Dios unió que no lo sé para el hombre, no solamente para las bodas, ¿ok? Ahora, eso es lo que estamos aprendiendo. Antes de leer Primera de Samuel 15, yo estoy en Segunda de Samuel, Primera de Samuel 15, vamos a hacer un repaso breve, ¿ok?, para que entremos en contexto. Amados, el cuerpo, el cuerpo de nosotros es el vehículo donde se mueve la riqueza de Dios en la tierra. La sabiduría de Dios se mueve en el cuerpo de la hermana Iris, los dones de Dios, la gracia de Dios están en Iris. Iris, lo que nosotros llamamos Iris, Dios no la llama Iris, Dios le dio un nuevo nombre cuando la trasladó al reino y ella responde en el espíritu a la nueva realidad en el Señor, pero nosotros seguimos llamando Iris, nació en Honduras. La hermana Iris es un vehículo donde Dios ha depositado sabiduría, gracia, favor, sabemos que es una mujer del reino a quien honramos, y entonces se mueve en el cuerpo, pero el cuerpo, el cuerpo es barro, solo es barro, hizo Dios al hombre, ¿de qué lo hizo? Del polvo de la tierra, ¿ok?, del polvo. Cuando digo barro es porque Pablo dice tenemos este tesoro, ¿cuál es el tesoro? La riqueza, todo lo que Dios impartió en Iris en un vaso de barro. A ella la llama vaso de barro Pablo, pero al principio el Señor la llamó polvo. Entonces Iris un día tenía la edad de Sara, ahora es mamá, un día será abuelita y un día su cuerpo se debilitará tanto que el polvo vuelve al polvo, pero Iris no muere, Iris es eterna. Levante su mano, Iris es eterna, o sea ahí ponga su nombre, ¿ok? Porque lo que Dios llama Iris no es el barro, sino la vida. Y sopló, Dios hizo al hombre, ¿de dónde? Del polvo, ¿y entonces qué hizo? ¿Qué sopló? Lo que se enferma es el polvo, no la vida. Lo que se deprime es el polvo, no la vida. Lo que teme es el polvo, no la vida. Mi hermana Carmen dice estamos un poquito nerviosos, es en el polvo, no la vida. La vida es inalterable, y es natural, los nervios son la evidencia de que no dependemos de nosotros, ¿ok? Ahora pasamos al otro aspecto. Luego está que el espíritu es la vida. Cuando las personas dicen yo soy un alma que tiene un cuerpo y que Dios le dio un espíritu, es un error, porque realmente nosotros morimos para ser uno con el Señor. ¿Y Dios qué es? Y si tú eres uno con Él, ¿qué? Entonces, ¿somos qué? Un espíritu que tiene un alma y vive en un cuerpo, se traslada en un cuerpo. El cuerpo no es lo menos importante porque no podemos caer en el error ¿de qué es más importante hermana? ¿Tu hija o tu hijo? ¿A papá o mamá? No, no, plenitud, diga plenitud. Tenemos que pensar desde la plenitud, vivir la plenitud, disfrutar la plenitud. No caer en el juego de esto es más importante, sino todo vuestro ser espiritual, mi cuerpo, ok. Ahora, el alma son emociones, decisiones, intelectos, voluntades. Y el alma, normalmente, hasta que no es convertida, transformada, habla otro lenguaje distinto a la vida que Dios nos dio, que es el espíritu. ¿Cuál es el orden de Dios? Que el alma se someta a la vida de Dios en nosotros, que es el espíritu, porque Dios es espíritu. Si fuésemos alma, cuando Dios se unió con nosotros, lo hicimos dual, se unió un alma y un espíritu. No, no, Dios no se absorbió, ok. Todo esto es una introducción, no estoy predicando todavía, pero es necesario recordarlo. Entonces, cuando comprendemos esto, entonces sabemos por qué antes leíamos textos como y cualquiera, pues, que no aborrezca padres, madres, hijos, hermanos, y nosotros decíamos, ¿pero cómo? Por mi causa no es digno de mí. Eso no hay, no hay. Es un poco injusto que el Señor me pida que aborrezca a mis hijas, a mi esposa, a mi mamá. Pero cuando por el espíritu entendemos lo que se nos está diciendo, de alguna manera está diciendo es, si un bombero se ama tanto para rescatar a una anciana que se está quemando, dice, yo tengo hijos, esa viejita ya vivió. Y si se ama tanto, entonces lo que está diciendo no me es útil para los bomberos. Eso es lo único que el Señor está diciendo. Si un soldado ama tanto a su esposa, a sus hijos, a su mamá, a su tía, para ir a defender un país y decir, voy a la guerra, yo voy a la guerra, voy a morir yo, y entonces allá estarán la gente de fiesta y yo morir aquí. No. Ese pensamiento no coopera para el ejército. Eso es lo que Jesús está diciendo. O sea, no me sirve un bombero que se ame tanto que diga, ¿qué es una viejita? Ay, pues ya yo la veo enferma. No. Tienes que renunciar a ti mismo para entrar al cuerpo, porque si no, no me eres útil. Tú no puedes tener en un incendio en mente a tu hija, porque no me eres útil. Si ustedes se aman tanto para yo mandarlos a una misión, no van a querer morir. Entonces no me eres útil. Albert, no usted. Albert, no me eres útil. O sea, hasta que no, separemos y entendamos. Porque si yo me amo mucho, Iris me ofende. Dije que era del Espíritu, ahora me ofende. Ella me ofende. Como yo tengo tanto amor por salto por los aires, los intereses del Señor, porque yo me amo tanto, el Señor dice, no me sirves, Albert, necesitas estar muerto. Por causa de mis intereses, por causa del servicio que tú haces al reino, tienes que asumir la agresión, callarte, eres muerto. Ya tú dijiste cuando entraste al cuerpo de los bomberos o del ejército, ya tú renunciaste a tu vida. Ahora es mía. Ustedes saben por qué la voluntad de Dios, el propósito de Dios no avanza porque hay gente viva. Hay bomberos que se aman mucho, hay soldados que se aman tanto que no están dispuestos a morir. Y si nosotros no renunciamos, no somos útiles al Señor. Otra vez, si no renunciamos a nuestras propias vidas, no somos útiles al Señor. A la tercera va la vencida. A la tercera va la vencida. Si no renunciamos, sí, sí. Porque, mire, hermano, lo más doloroso para una persona es decirle, tienes que morirte. Por eso la muerte reinó desde Adán hasta Moisés, hasta que no irrumpió la vida, reinaba la muerte. Porque la gente, dice Hebreos, que tenían miedo a morir y entonces se esclavizaban. Totalmente. Lo que parafraseamos en el versículo. Si no me amáis más a mí que a tu mamá, tu hijo, no me sirves. Ok, voy a parafrasear y ya leemos 1 Samuel 15. Hebreos 4.12, no lo busque que usted se lo sabe, dice, es porque la palabra de Dios es, ¿qué? Viva y eficaz. Y más cortante que toda espada de dos filos, que hasta partir el alma, hasta los tuétanos, pero dice hasta separar el alma del espíritu. Y disierne, ¿qué es disiernir? Decodificar, interpretar los pensamientos y las intenciones. Lo que yo pienso hacer el lunes, la palabra hoy viernes. Sí, sí, es que es la palabra, eso es infalible. Ok, la palabra separa. Si no nos exponemos a la palabra, el alma y el espíritu no serán separados, fusión y no somos útiles. Pero la palabra penetra ahí, separa. Yo creo que usted decía gloria a Dios al menos, porque lo que te está diciendo la palabra, ahora otra vez, póngale cuidado, como dicen los mexicanos, a ver si nos cae el 20. La palabra, diga la palabra. Otra cosa, Juan, el apóstol Juan nos enseñó que la palabra no es lo que hablamos. El apóstol Juan nos enseñó que en el principio era ¿qué? La palabra, y la palabra creó el universo y vimos su gloria, ¿verdad? ¿Gloria cómo? Entonces, ¿qué es la palabra? El verbo era ¿qué? Se hizo ¿qué? Y que habitó ¿dónde? Entre nosotros. Y vimos... Entonces, él nos enseñó que la palabra no es lo que el pastor dice, que la palabra es Cristo. Hebreo 4.12 Porque la palabra de Dios es viva, ¿y qué más? Y penetra hasta... ¿Separar qué? Lo que nos está diciendo es cuando Albert conoce la palabra, Albert sabe diferenciar la vida del alma y del espíritu, porque la palabra separa y penetra ¿hasta dónde? Los tuétanos, ¿qué son los tuétanos? ¿Cuántos han comido huesitos de pollo? Usted muerde el hueso de pollo y tiene un visito negro, esa es la sangre, que ya como lo cocinó queda negra. Los tuétanos es donde se genera la sangre y la sangre es la vida. Otra vez con Hebreo 4.12 Porque la palabra de Dios es viva, eficaz y más cortante que toda espada de dos filos hasta partir, partir que es separar ¿no? Partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos que es donde se genera la sangre y la sangre es la vida. Y entonces disierne, decodifica, interpreta ¿qué? Lo que vamos a hacer el lunes. Bendito sea el Señor. Ahora si vamos a empezar a predicar. Primera de Samuel 15 Si la palabra no separa el alma, emociones, voluntades, decisiones, intelecto no puede operar el espíritu. Hay personas, hay personas no. Yo y todos los que estamos aquí, el burro por delante digo yo porque tengo que hacer énfasis en eso. Normalmente nosotros santificamos nuestras ideas. Decimos ¡guau! Estas cosas que yo pienso son poderosas. Normalmente todos obedecemos a lo que creemos. Todos los hombres son obedientes a lo que piensan. Pero lo que piensan los hombres no es útil para extender el reino. ¿Otra vez? Diga, lo que piensan los hombres no es útil. Lo único que es útil es el pensamiento de Dios. Dígame hermana. Cualquiera. Que no deje. Dejar es renunciar. Acuérdense que el bombero no deshonra a su esposa. Lo que pasa es que ha abrazado una causa que está por encima de ella. El bombero no deshonra a su hija. O el militar. El sábado cumple años mi hija. Pero hay una guerra el jueves y él no va a estar en el cumpleaños de la hija. ¡Ay, pero es que es la única! También eso no me interesa. Cuando usted entró en el ejército, usted asumió una causa. Y cuando usted asumió esa causa, esa causa te absorbe y te anuló para siempre. ¿Ves que uno no puede decir verdad amen a eso? Porque duele. Pero es el soldado. El soldado renunció a su vida. El soldado renunció a su vida. Porque si no, no es útil para el ejército. Nadie puede estar un ataque y decir, cariño, mandame. ¡Ay, agua! Porque no es útil. Pero antes de leer, les pongo en contexto para los niños y, aunque yo creo que todos lo conocen, son estudiosos de la palabra. Dios, Dios decide cobrarle una factura a un pueblo que se llama Amalek. Porque cuando el pueblo de Israel venía subiendo de Egipto, Amalek fue hostil con el pueblo de Israel. Les robaba en los campos. Les contaminaba las cosechas. Era hostil. Les contaminaba el agua. Se les robaba la fruta, se les robaba el ganado. Y Dios decide, porque Él es un rey, dice, le voy a cobrar la factura que me debe Amalek. ¿Y cómo decidió Dios cobrar la factura? Diga, cobrar factura. ¿Cómo Dios decide cobrar? ¡Saúl, ahora que eres rey, mira! Vas a ir a Amalek y, con el ejército, vas a tomar la ciudad y vas a ejecutar, póngale cuidado, viejitas, niños de pecho, señoritas, abuelos, tías, vacas, pollitos, todo. No quiero que nada quiere vida. No quiero ir. Entonces yo veo a los hermanos que dicen, Victoria dice, no puede ser. ¿Qué es lo que está diciendo no puede ser? El alma de nosotros. La mente, los sentimientos. Ese es el estorbo de la justicia. Porque a nosotros nos puede eso. Imagínense que entonces yo llegue y diga, pero ¿cómo le voy a bajar la cabeza a una viejita? Cuando es la palabra de Dios, la orden de Dios, o la viejita, yo tengo, alguno de los dos tiene que morir. O muere la palabra, la orden del rey, o muere quien tiene que morir. Entonces, yo te constituí rey cuando estabas buscando cuatro burros en el monte, yo te hice rey. Ahora yo quiero, como yo cambié, saliste a buscar cuatro burros y te encontraste un reino. Ahora yo quiero que vos sirvas a mi causa. Vamos a leer. Después Samuel dijo a Saúl, Jehová me envió a que confiese por rey sobre el pueblo de Israel. Ahora pues está atento a las palabras de Jehová. ¿Está qué? Atento. Así ha dicho Jehová de los ejércitos, yo castigaré lo que hizo Malega a Israel, oponiéndosele en el camino cuando subía a Egipto. Ve pues y ere a Malek y destruye todo lo que tiene. ¿Alguien me puede decir qué significa todo? Todo. Ok. Y no, y no, mata hombres, mujeres, niños, aún los de pecho, vacas, ovejas, camellos y asnos. Saúl convocó al pueblo y les pasó a revistas doscientos mil de a pie y diez mil de judá. Y viniendo Saúl a la ciudad de Amalek, puso emboscada en el valle, dijo Saúl a los ceneos, idos, apartados y salid entre Amalek, para que nos destruya juntamente con ellos, porque vosotros mostrasteis misericordia con los hijos de Israel cuando subían de Egipto. Y se alejaron los ceneos entre los hijos de Amalek. Y Saúl derrotó a los amalecitas de Ávila hasta Segar Azur, que está al oriente de Egipto. Y tomó, y vino Agag y Amalek, tomó todo el pueblo, mató a filo de espada, y Saúl y el pueblo perdonaron a Agag, y a lo mejor de las vacas y del ganado mayor, de los animales, Agag era el rey, los carneros de todo lo bueno, y no lo quisieron destruir, mas todo lo que era vil, diga conmigo, para ellos, y despreciable, lo destruyeron. O sea, vino palabra de Jehová hasta ahí. Ok, ¿la orden cual era? Hasta los piojos de la cabeza de los soldados, todo tenía que morir. Pero Saúl vio al rey y le dio cosita, le dio cosita, hacerle cosa al rey. Entonces cuando se, cuando, ¿qué era? ¿dónde era? ¿dónde recibía la pena, la lástima o la idea de Saúl? ¿dónde? En la mente, el alma. Enseñanza, el alma, es un estorbo perjudicial para ejecutar el propósito de Dios. No se puede servir a Dios desde las emociones, porque las emociones no pueden. El alma ha vivido, al menos en mi caso, 38 o 39 años mandando. Y cuando escucho y entiendo que no es desde ahí donde sirve, por su gracia Dios me migra, ¿verdad? ¿Hasta dónde? Y cuando Dios nos traslada al espíritu, a esa realidad nos sometemos, entendemos el principio del soldado, del bombero y del policía, entonces uno lo que tiene es que morirse. Morirse. Diga morir. Si el grano de trigo no cae en la tierra. ¿Se acuerda, no? Hace tres semanas. Hermano, si estamos vivos no somos útiles, si Jesús, siendo el Hijo de Dios, el Padre dijo, no hay otra opción, tienes que morir, Él no va a negociar con Albert, porque si yo entregué a mi hijo, ¿cómo voy a hablar con vos y te voy a negociar? Señor, esperame dos meses más, estoy en un proceso, es otra temporada. No, no, no, no. Para esta hora, ¿para esta hora qué? He llegado. He llegado. Y sabiendo Jesús que había de glorificar al Padre, dijo, hermano, tu muerte, mi muerte glorifica a Dios. Es ofrenda a Dios. Cuando tú ves la cruz desde los ojos de Hollywood, del alma o de nosotros, de su pobrecito, ¿cómo pusieron a hacerle eso? Cuando usted lo ve desde el espíritu, dice, nadie me quita la vida, yo la puse por vosotros, tengo poder para ponerla y volverla a tomar. Ahora es importante, es importante, levante su mano, diga, Señor, enséñame a ver la obra de la cruz como el nivel de adoración más alto que se ha expresado en la tierra. Porque ¿qué es adoración? Obediencia. Obedeciendo. ¿Qué hizo Saúl? ¿Cantó? ¿Canciones suaves? Eso no es adorar. Podemos cantar muchas canciones suaves y nunca adorar. Porque si no morimos, si no nos rendimos al propósito del Padre, nuestra vida no será ofrenda y no será adoración. ¿Amén? ¿Saúl? Dios le dijo, escúchame, este hombre no ha hecho nada de lo que le he dicho. Y ahora escuche, hermano, lo que Dios dijo. Continuamos desde el 12. Perdón. 11. Me pesa. Perdón, desde el 10. Vino palabra de Jehová a Samuel diciendo, me pesa haber puesto por rey a Saúl porque se ha vuelto en pos de mí y no ha cumplido mis palabras. Y no ha cumplido mis palabras y se apesadumbró Samuel y clamó al Señor toda aquella noche. Ok, Samuel empezó a orar, como cualquier cristiano, Señor, ten misericordia. Escúchame, en el momento que desobedeció fue desechado. Espiritualmente ya no es rey. Políticamente sí. Pero yo me proveeré de un hombre conforme a mi corazón por el que yo pueda ejecutar justicia. Un hombre que yo no lo tenga que convencer. Mira, te voy a explicar para ver si me logras obedecer. Porque los reyes no dan explicaciones. Y no se llama soberbia. Se llama poder. Se llama autoridad. Hermanos, nosotros somos hijos amados. Nosotros somos hijos amados. Pero Dios nunca alterará su propósito porque un hijo no obedece. Sencillamente, sencillamente, con dolor, me pesa que Albert no me sea útil en Valencia. Me pesa porque porque cuando Albert iba a nacer yo lo pensé para mi causa. Pero ahora le da sentimiento, le da penita. El alma le puede. Entonces me pesa. Lea la historia en su casa. ¿Ok? Porque es hermosa. No podemos entrar porque si no, no nos da tiempo. Pero ahora quiero leer Hechos capítulo 26 versículo 9. Amados, uno de los grandes obstáculos, uno de los grandes obstáculos del propósito de Dios en la tierra es la mente humana. Satanás no es obstáculo para Dios porque ya Dios lo juzgó, lo sentenció. El problema está en una iglesia que no se rinde a la autoridad. El problema está en un pastor que Dios lo tiene que convencer para que obedezca. El problema está en que Dios me dice y entonces yo digo. Ese es el problema. La mente de nosotros cree cosas, juzga, pero la mente tiene que morir. Y le digo algo, lo más doloroso para nosotros es morir. No hay otra cosa más. La cruz es un símbolo del dolor de la muerte. Pero evidentemente Jesús pasó por la cruz y para los niños tal vez cuando escuchan al pastor decir morir significa renunciar a nuestras propias ideas. Es como que la hermana Carmen le dice vamos a comer vegetales. Mamá, yo estaba ilusionado con comer hamburguesa. No, no, pero he decidido. Eso es lo que más cuesta decir sí mamá. Ah, eso duele. Por eso los hombres somos el principal obstáculo, pero también la principal, los principales colaboradores de la causa del Señor en la tierra. O el obstáculo o los colaboradores somos siempre nosotros. La solución y el problema siempre está en nosotros. ¿Amén? Diga conmigo la solución y el problema siempre está en nosotros. Siempre. Siempre. Le dije que en la medida que comencemos a avanzar en esta serie vamos a ir profundizando, ¿ok? Saulo, Saulo era un judío y él escribe narrando su conversión, ¿no? En palabras evangélicas su proceso. Nosotros todo es proceso. Estamos en un proceso, estoy en un proceso, pero cuando entendemos, hermano, la muerte no es un proceso. Es o no es. Nadie puede estar medio vivo. ¿Está vivo o está muerto? Estoy muriendo. No, no, no. Él, cuando era fariseo, maestro en el judaísmo, ¿verdad? Él creía. Yo ciertamente. ¿Quién? Yo. El yo. El yo. ¿Qué es el yo? El alma. Yo. Emociones, intelectos, voluntades. Yo ciertamente había creído mi deber hacer cosas contra, muchas cosas, contra el nombre de Jesús de Nazaret. El diablo no lo había puesto en él. Él creía que su deber era perseguir a la iglesia, hacer cosas en nombre del Señor. Lo cual también hice en Jerusalén. Póngale cuidado. Yo ¿Quién lo hizo? Encerré en cárceles a muchos de los santos habiendo recibido poderes de los principales sacerdotes y cuando los mataron, yo di mi voto. ¿Quién era? El yo. Muchas veces castigándolos en toda la sinagoga los forcé. ¿Quién? Yo. A blasfemar. Y enfurecido. ¿Quién se enfurecía? Él. En sobremanera contra ellos. Los perseguí. ¿Quién los perseguía? En primera persona. Hasta las ciudades extranjeras. Ocupado en esto, iba yo a Damasco con poderes y en comisión de los principales sacerdotes cuando a mediodía os reí yendo por el camino vi una voz vi una luz del cielo que sobrepasaba el resplandor del sol. Hermano, dos de la tarde, una de la tarde y la luz sobrepasaba la del sol. Ok. La cual me rodeó a mí y a los que iban conmigo. Y habiendo caído todos nosotros en tierra oí una voz que me hablaba y decía en lengua hebrea Saulo Saulo, ¿por qué me persigues? Dura cosa te es dar coces contra el aguijón. ¿Quién perseguía? ¿Por qué? El yo. Muy bien. ¿Por qué? Por una creencia incorrecta porque yo creí. ¿Cuántos hemos creído incorrectamente? Todos. Pero bendita sea la hora. Levante su mano, diga bendita sea la hora. Que la luz de Cristo irrumpió. Irrumpió mi agenda, mi vida para trasladarme al reino. Ahora luego la luz que se le apareció ¿Sabes qué es luz? Cada vez que usted lea luz es entendimiento correcto. Eh cuando cuando este hombre la luz de Cristo irrumpió en su agenda entonces dejó de ser yo y dijo esto Señor ¿Sabes qué es Señor? Una autoridad. La Biblia dice que nadie puede llamar Señor si no es por el Espíritu. Nosotros decimos Señor ¿me da pan? Señor ¿dónde queda la farmacia? Pero para los judíos Señor solo se le puede decir a Dios. ¿Se acuerdan de aquel ciego que se encontró con Jesús y él le hizo ¿crees en el Hijo de Dios? ¿dónde está Señor para que le adore? El que habla contigo es se postró inmediatamente un judío no se postra ante nadie. Pedro y Juan le dijeron no, no te arrodilles delante de nosotros solo somos hombres. Pero cuando ellos recibían testimonio en el Espíritu de que era entonces la cultura la cultura y todo quedaba relegado a un segundo plano. Amados cuando la mente de nosotros es desde donde gestionamos el Evangelio estamos usando el órgano incorrecto. La mente humana la mente humana escuche no es mala esa es otra cosa la mente humana debe ser absorbida por la mente de Cristo cada vez que usted escuche tenemos la mente de Cristo ¿qué es la mente de Cristo? Las realidades del Reino gobiernan mi vida eso es la mente de Cristo yo me veo débil pero Él dice que yo soy fuerte entonces yo soy fuerte esa es la mente de Cristo yo me veo con tantos errores pero Él dice que yo he sido perfeccionado pues yo no lo veo pero si Él lo dice yo voy a creer a Él no a lo que yo veo porque ver son ojos ojos son sentidos sentidos es alma en cambio lo que Él dice es palabra palabra es vida barro o vida ¿cuántos dicen amén? entonces amados los hombres que entendieron las mujeres que entendieron la realidad del Reino fueron útiles a la causa eterna de Dios es que yo pienso ok Saúl muy bien es que yo creo ok Saúl es que yo ni pienso ni creo yo me dejo ok David estamos hablando de ese contexto porque hoy nosotros por el Espíritu somos hechos a imagen del Hijo ¿cuántos dicen amén? amados ustedes saben que es una crisis en una persona ver distinto a lo que Dios ve eso es lo que genera una crisis concluyo con una a testimonio mío no es muy honroso pero se los cuento porque si yo pagué una factura y te puedes privar tú de eso gloria a Dios yo por mucho tiempo el alma la mente me hicieron pensar que uno tenía que ser un luchador que si una puerta se te cierra la otra que yo soy tengo que buscar tengo que tocar si me dicen que no es el diablo si me dicen que si es Dios no hay nada más hermoso que los no de Dios amén entonces yo pensaba que yo era un luchador tanto que me admiraba a mí mismo ¿quién? yo un día el Señor me dijo Albert tú tienes que ser débil y casi lo reprendo ¿no? al Señor el Pastor sí porque cuando uno está ensimismado lo que no coopera con lo que uno piensa es del diablo y lo que avala es de Dios es una es muy fácil pero un día el Señor me dijo ¿sabes qué Albert? yo quiero que tú yo quiero que tú delante de mí seas débil no me sirven tus fuerzas mientras tú tengas fuerzas tú lo vas a hacer si tú eres débil yo lo hago a través de ti si tú lo haces porque tienes fuerzas es tu gloria pero si tú te sientes como Abraham anciano cien años y no puedes engendrar porque tu cuerpo está como muerto y la viejita se siente mareada y dice entonces tú sabes que no fuiste tú o sea yo necesito yo necesito Albert que en vez de pedirme Señor fortaléceme tú desde ahora ores y digas Señor debilítame porque en mi poder se perfecciona en tu debilidad no estoy hablando de la debilidad como persona estamos hablando delante de Dios no delante de las adversidades y de las situaciones eso es otra cosa yo creo que estamos hablando de asuntos de reino no quiero que sepas predicar quiero que dependas de mí es que si tú sabes predicar y no te pones nervioso como decía Carmen entonces por qué estás confiando en ti yo quiero que dependas de mí tú puedes escribir el bosquejo pero sólo lo lees si yo no estoy hablando ah Señor pero me costó tres días y a mí me costó la sangre de mi hijo o los tres días tuyos y la sangre de mi hijo los vamos a equiparar yo hoy apunté pero el Señor está hablando y yo tengo que renunciar a lo que escribí ¿por qué? porque Dios está diciendo muy bien lo que escribiste pero hoy predico yo y tú te sientas ¿quién se sienta? yo ¿quién predica? el Señor a través de es como cuando Moisés coge un micrófono a cantar ¿quién canta? ¿el micrófono o él? el micrófono puede costar miles de euros si Moisés no canta él no es nadie exactamente eso es lo que yo quiero Álvaro yo quiero que ahora tú te vuelvas dependiente de mí porque si tú no dependes de mí tú estás vivo y mientras estés vivo vas a tener que hacerlo tú y usted sabe que es duro hermano que un día el Señor diga estos 30 años has sido tú de ahora en adelante voy a ser yo y tú digas Dios mío ¿30 años? ¿Señor? ¿por qué? no, no, pero yo quiero que cuando tú me dices Señor Señor, Señor ¿por qué? ¿por qué me dices? eso es con Álvaro no, eso no se lo tengo que decir ¿por qué me dices Señor? Señor y no haces lo que yo te digo no me digas Señor si no me vas a obedecer si me dices Señor es porque te vas a someter a mí si no dime Chucho o lo que quieras pero no me llames Señor si no te somete dijo por medio del profeta Malaquías estoy harto estoy harto estoy harto Malaquías estoy harto Isaías dijo estoy harto de vuestros sacrificios no los quiero son fastidios para mí que canten cosas que luego yo les digo y entonces les da pena matar al rey o a las vacas porque a Saúl le dicen Saúl, ¿qué pasó? las vacas oye, ¿y qué pasó? ¿qué es eso? no, ¿qué pasa? es que las vi gorditas y eran para el sacrificio del Señor Aleluya no, no, no, no, no no, Saúl no no al Señor no necesitan las vacas de Amalek o es que el oro la plata a mí es la tierra y su plenitud se te olvidó Saúl yo te mandé a ti que ni el gatito ni el perrito ¿qué pasó? y primero Samuel 15, 22 eso para su casa porque el Señor se agrada ¿de qué? de la obediencia más que de los sacrificios yo no te pedí sacrificios te pedí ejecutar una orden delante de mí la desobediencia es rebeldía es como la hechicería entiéndeme, Saúl entiéndeme yo te veo cuando me desobedeces como un brujo así de despreciable ay Señor no, no hoy has sido cortado del reino escuche, hermano diga conmigo Dios perdona el diablo no Dios nos perdona porque nos ama cuando usted escuche autoridad de Dios no piense que es ni maldad ni no es autoridad la autoridad es para aquel que conoce autoridad ¿qué dijo el centurión? yo soy ¿qué? hombre de autoridad tú di la palabra porque yo sé cómo funciona la autoridad yo sé que Señor, yo soy indigno que vengas a mi casa imagínense una visita y la casa de Dios no está como está ¿no? no, no, no di la palabra porque yo sé cómo funciona la autoridad yo tengo siervos y digo tráeme aquello y me lo traen haz esto y esto sale y entra di la palabra yo sé que mis siervos sanarán y el Señor dijo ni los profetas me habían hablado así como me habló este que estaba en Israel no era de los israelíes es importante conocer esto porque claro, por eso que dicen los profetas o sea, aquí en Israel la gente que conoce la autoridad la defensa que se reúne todos los estados que guarda un shabbat que tal no me reconocen claro, porque porque no eran útiles hermano, póngase sobre sus pies yo quiero decirle algo a usted yo quiero decirle algo a usted mire la la riqueza con que Dios nos ha la riqueza con que Dios nos ha enriquecido es incalculable es de valor incalculable pero sabe una cosa nosotros tenemos nosotros tenemos que entender que no se trata de nosotros el evangelio se trata de él yo soy yo soy es una expresión yo soy es una expresión que Jesús que Dios dijo cuando llamó a Moisés yo digo, ajá todos los nombres todos los Dios tienen nombre si me preguntan que les digo que yo soy te envía la palabra yo soy es aquel que se sustenta a sí mismo ok ajá, pero sí yo llego delante del faraón y le digo yo soy yo soy yo soy pero ajá el apellido entonces yo soy el que soy yo soy el que soy como yo soy el que soy ajá, pero ya pero Moisés anda ahora yo soy fue la expresión la primera expresión como Dios se mostró a ese país yo soy escuche hermano renuncie a esa expresión porque solo le pertenece a Dios es que pastor yo soy no, no, no no, no tú no puedes ser Dios es tú eres en Él es que yo soy hay gente que dice yo soy sincera o sea, todo el mundo nadie es yo soy yo no renunciemos a esto diga conmigo Él en mí esa es más esa sí es útil diga Él en mí la esperanza de gloria amén que el Espíritu nos ayude como generación a abrazar esta gloriosa realidad hermanos porque si no haremos lo nuestro porque Filipenses 2 creo que no recuerdo el texto pero dice porque cada uno busca lo suyo propio y no lo que es de Cristo amén pero cuando aquel aquel ajá gracias wow el domingo ahí aquel que dijo yo había creído mi deber seguir después en Hechos dice porque en nada estimo preciosa mi vida para mí mismo creo que es bueno ahí está activo multimedia con tal que acabe mi carrera con gozo y el ministerio que recibí del Señor o sea nada estimo para mí mismo porque me voy a dar placer a mí mismo o voy a trabajar para que Dios tenga placer en lo que yo hago escuche el mismo llegó a decir mi vida la tengo por basura para ganar a Cristo lo que antes era yo ahora después escribió ese yo murió Gálatas 2.20 y ya no vivo qué yo había creído yo lo forcé yo pero ahora dice y ya no vivo sino que vive Cristo en mí aleluya Cristo en mí la historia de Saúl no es la historia de un hombre Dios la escribió para que nosotros por amor aprendiéramos qué es mejor aprender por sabiduría o por experiencia de error mejor la sabiduría la sabiduría el amor cuál es el amor tan grande de Dios con Iliana con los hermanos con nosotros que nos enseña con los errores de otros te dice Albert los tuyos no los voy a exponer porque mi hijo lo mandé a la cruz pero te voy a contar lo que pasó hace para enseñarte hoy eso es amor eso es amor porque el Señor no quiere nunca jamás nunca jamás expondrá a su hijo a sus hijos pero si quiere formarnos Dios no va a coger nuestras miserias para porque Dios nos preserva o sea nos ama tanto que nos cuida pero quiere formarnos porque Albert yo quiero sacar rentabilidad de ti si invertí la sangre de mi hijo en ti yo quiero que sea rentable esa inversión cuántos dicen amén y para eso que tenemos que hacer morir quién transicionar diga transicionar de la vida de sentidos a la vida del espíritu la vida de los sentidos no la demonicemos no es mala pero debe someterse al espíritu porque esa es otra cosa que nosotros cuando aprendemos una cosa lo otro lo maldecimos no el alma es gloriosa es de Dios la puso en nosotros como diseño pero no tiene la función de gobernar porque te turbas quién se turba el alma el espíritu es imperturbable pero eso es una para la semana siguiente amén dele un aplauso al señor vamos a darle gracias