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The transcription is about a controversial movement in Mexico that took place in 2002-2003. It was driven by the Front Campo No Aguanta Más and brought together various peasant organizations. The movement was a response to the decline in domestic prices and lack of markets for native products, leading to the ruin of farmers and small businesses. In November 2002, the movement released a manifesto for the salvation and revaluation of the Mexican countryside. They conducted consultations and mobilizations to draw attention to the issue. After months of struggle, several organizations signed the National Agreement for the Countryside. The movement had a significant impact on Mexican society, highlighting the challenges and needs of the rural sector. It aimed to protect the rights of farmers and their work. ¿Cómo están? Espero que estén bien, bastante bien. Otra vez con ustedes se reporta su servidora María Fernanda Hernández López, estudiante de pedagogía en el Instituto de Educación Digital del Estado de Puebla, mejor conocido por sus figras y edep. Hoy les hablaré de un tema bastante controversial que tuvo lugar en México, un acontecimiento social que surgió a finales de 2002 e inicios de 2003. Este movimiento fue impulsado por el Frente Campo No Aguanta Más y aglutinó al grueso de las organizaciones campesinas. Pero ustedes se preguntarán, ¿cómo comenzó todo esto? Bien, yo les diré que todo surgió a partir de 1994, gracias a la firma de TLCAN y la apertura de las fronteras, trajo consigo el declive de los precios internos, la carencia de mercados para los productos nativos de la nación y la ruina generalizada no solamente de los campesinos, sino de los pequeños y medianos empresarios que sembraban bienes básicos como maíz y frijol para el mercado nacional, ya que las industrias alimentarias subordinan a los productores rurales y les compraban a precios por debajo del costo, literalmente en centavos, extrayéndoles un gran excedente de millones de pesos de parte del equivalente a su salario. Y pues todo esto desató el gran enojo de los campesinos y pequeños empresarios. Es por eso que en el transcurso de 2002 se agruparon 12 organizaciones campesinas y conformaron el movimiento El Campo No Aguanta Más, integrado por las AMUCSS, ANS, CEPOC, CNOC, CNPA, FDCCH, CIOAC, CODUC, RDMOCAS, UNFOC, FNBM y por último UNORSA, quienes lanzaron el 2 de noviembre de 2002 un gran manifiesto para la salvación y revaloración del campo mexicano. Claro que sí, el 19 y 20 de noviembre este movimiento realizó una consulta a diferentes agrícolas sobre las prioridades nacionales que el gobierno federal debería atenderles. Y pues posteriormente en diciembre se organizó una semana de movilizaciones regionales en la capital para llamar la atención del poder legislativo y ejecutivo en resolver la problemática del campo mexicano. El 23 de abril, después de 5 arduos y largos meses de lucha ininterrumpida, 9 de las 12 organizaciones del Frente El Campo No Aguanta Más, el Barzón, el Congreso Agrario Permanente y las CNC, se sentaron en la mesa del gobierno para firmar el Acuerdo Nacional para el Campo y el Movimiento El Campo No Aguanta Más. Bueno amigos, ¿qué les puedo decir? En mi opinión y como conclusión, este movimiento tuvo un gran impacto para la sociedad mexicana, ya que el Movimiento El Campo No Aguanta Más en México ha tenido un impacto para mí bastante significativo en el ámbito agrícola y también rural, porque ha provocado la atención sobre el desmantelamiento de los programas de fenómeno agropecuario y la baja productividad de los productores rurales, también como la necesidad de una política pública influyente para México rural. Además, el movimiento logró, en pocas palabras, conservar en gran medida ciertos aspectos importantes. Después de la firma del Acuerdo Nacional para el Campo, fue algo bastante controversial. En resumen, este movimiento ha sido un acontecimiento social relevante que ha puesto de manifiesto los desafíos y las necesidades del campo mexicano. ¿Y qué les puedo decir? Este movimiento fue un movimiento hecho para respetar más que nada los derechos de los agricultores y de su trabajo. El Campo No Aguanta Más, para mí, es uno de los movimientos más importantes que ha tenido México. Sin más que decir, por el momento me despido. ¡Hasta la próxima! ¡Adiós!