#6 Permítete ser

In this podcast, the speaker invites listeners to reflect on their lives and embrace self-discovery. They emphasize the importance of embracing a more secure, empowered, and free version of oneself. The speaker encourages listeners to let go of past judgments and start building a new self-esteem and personality. They discuss the desire to feel loved, fulfilled, and happy, and how our feelings shape our perception of life. The speaker emphasizes the need to break free from limiting beliefs and start living authentically. They also discuss the importance of setting boundaries, knowing oneself, and surrounding oneself with supportive people. The speaker encourages listeners to define how they want to feel in different areas of their lives and to prioritize their own success and happiness. They conclude by urging listeners to let go of what no longer serves them and to start embracing a new way of living. Bienvenida a tu podcast, donde te invito a tomarte un café contigo misma. Un café lleno de reflexión, aprendizaje y autoconocimiento. En definitiva, un café que te ayuda a despertar. Te aseguro que con las herramientas que te voy a compartir, crearemos juntas la receta perfecta que te ayuda a desdramatizar tu vida, empoderarte y brillar de nuevo como solo tú sabes hacerlo. ¿Vamos? Hoy vengo a recordarte que hay una versión tuya mucho más segura, más empoderada y más libre. Hay una versión tuya mucho más conectada, calmada, más alegre. También existe una versión tuya que es mucho más dichosa, realizada y plena. Esa versión tuya sabe que está hecha para algo más grande y que tiene la certeza de que merece vivir una vida que se sienta mucho más expandida o mucho más fácil. Creo que una vida que fluya y que no se sienta como que está siempre en la lucha constante. Existe una vida ahí fuera para ti que se siente más ligera, más brillante. Además existe esa versión de una mujer más decidida, que inspira y que inspira a otras mujeres a verse y a sentirse como tú. Todo eso que ansías sentir está ahí fuera buscándote a ti también y esperando a que tomes las acciones necesarias para ser. Porque déjame preguntarte, ¿te estás permitiendo ser? ¿Te estás permitiendo liberarte? Hola chicas, bienvenidas una semana más. Contadme qué tal habéis vivido estas últimas semanas, estos últimos episodios. ¿Os habéis empezado a plantear cosas de vuestro pasado? ¿Habéis empezado a hacer algún tipo de limpieza? ¿O los mensajes que os voy contando empiezan a resonar un poco? No digo que hagáis todos los ejercicios. Ya solo con que empieces a cuestionarte y a replantearte ciertos aspectos ya es un paso importante. Así que esta semana voy a hacer más foco en qué tanto te crees que se puede cambiar. Sí, sabemos que hay mujeres muy seguras, bien empoderadas, vidas mejores. ¿Pero tú te lo crees? ¿De verdad creemos que podemos llegar a ser eso? ¿O que estas mujeres ya llegaron al mundo súper seguras, exitosas, viviendo unas vidas increíbles? No, al final fue cuestión de también, cada mujer se hace a sí misma. Y la vida no va a parar de ponerte a prueba y de ponerte situaciones y circunstancias que es lo que van a construir tu personalidad y lo que te van a construir como mujer. Hoy vengo a recordarte y a reforzarte el mensaje de permítete ser y empieza a liberarte de todo el juicio del pasado. Empieza a construir quien quieres ser, empieza a construir tu nueva autoestima, tu nueva personalidad. Cuando hablamos de cambiar, lo que realmente ansiamos es sentirnos de otra manera. Buscamos reconocimiento, parejas, amor. Pero lo que buscamos es realmente sentirnos amadas, sentirnos plenas, realizadas, dichosas. No estamos buscando algo material por buscarlo, sino el sentimiento que recibimos al obtenerlo. Al final los sentimientos es la manera en cómo vamos a percibir la vida. Y todas estas percepciones de la realidad nos informan cómo estás viviendo tu vida. ¿Te has preguntado cómo se siente tu vida? Según la fuerza con la que te ancles a tu pasado y juzgues tu pasado, va a ser la misma fuerza con la que tú estás cerrando esa jaula, esa caja que no te permite ser y no te permite liberar. Esa caja va a estar cerrada y siempre vas a estar ahí, en el mismo bucle. Pero tú has venido a brillar desde un lugar que se siente mucho más auténtico para ti. Y no se brilla desde las apariencias ni desde ese victimismo, no se brilla desde una caja. Tampoco se brilla desde la depresión ni desde la tristeza. Solo se brilla desde adentro cuando rompes esa caja, rompes esa jaula en la que tú sola te has metido y la has ido cerrando y cerrando y cerrando más fuerte con el paso de los años. Que hoy estés aquí escuchando este mensaje ya es una señal para indicarte que es hora de empezar a buscar, a buscar sentirte de otra manera. Haz de tu forma de sentir el propósito de tu vida y no un problema. Al final la forma como nos sentimos hacia la herida es tu brújula. Y esto es un regalo enorme porque muchas veces vemos ciertas situaciones como ¡Ay qué mala suerte! ¡Me ha pasado esto! ¡Ay siempre me pasa lo mismo! ¡Ay yo no elegí nacer en este sitio! ¡Ay yo no elegí esto! Pero al final eso es la herida mostrándote con tu brújula qué es lo que te gusta y qué es lo que no. Dónde te sientes tú conforme y dónde no. Si esta brújula estuviera rota nos gustaría todo, absolutamente todo. Un trabajo bueno como uno malo. Pero al final esta brújula te está diciendo dónde estás cómoda y dónde no. ¿Para qué? Para que salgas de ahí. No para que te quedes ahí 10 años atascada. Cuando consigues encaminar y entender la forma en la que te sientes aquí es donde empieza el balance y la expansión. Tienes que analizar cómo te sientes y ver si es normal sentirse de la misma manera 5 años, 3 años. No, no es normal. Es hora de tomar acción y de convertirte en esa mujer y en esa versión de ti misma que brilla y que sabe brillar desde adentro. Pero bueno, esto puede sonar cliché y yo sé que no es nada fácil. Pero claro, no es imposible. Y tampoco va a venir esa versión iluminada de ti, súper poderosa y súper atractiva, a tu puerta y de repente de la noche a la mañana ya eres súper segura. El trabajo debes hacerlo. Recuerda que todas estas historias que te han pasado en el pasado y todo el drama que estés viviendo ahora te refuerzan como mujer. Refuerzan tu personalidad. Ahora vas a tener más historias que contar. Has reforzado tu resiliencia, tu valentía. Pero ya es hora de que empieces a desdramatizar tu vida. Ya tienes que pasar a ese segundo nivel porque si no, de nuevo continuamos en el mismo bucle. La vida nos pone pruebas, circunstancias, cosas buenas y cosas malas para que aprendas, para que las analices y para que madures de una vez y dejes de restar victimismo. Recuerda, todo esto que te ha pasado no ha sido mala suerte. Es que la vida te está enseñando a aprender a gestionar y a autodominarte para que la próxima vez que te pase algo similar, sepas y cobres conciencia y aprendas a responsabilizarte y a salir rápido de lugares en los que no debes estar. Pero ¿qué hacemos? Vamos a ciegas en la vida sin analizar nada y eso es lo que seguimos recibiendo. Cuando por fin aprendes tus lecciones, empiezas a poner tus límites, asumir responsabilidades, la vida te manda a tu segundo y mayor reto, que es ir a por esta versión de mujer mucho más segura, auténtica, más consciente y más despierta. Aquí la vida nos está invitando a establecer nuestros propios valores y nuestros propios principios, tus límites y tus gustos. Para ser una mujer segura, mucho más brillante y más exitosa, una mujer tiene que aprender a conocerse a sí misma, a conocerse como nadie más. Y ahora se enfoca y se desvive por autoconocerse, por quererse, por perdonarse. Esta mujer respeta su castillo, defiende su castillo. Si es tu castillo, tu vida. Se respeta a sí misma por encima de todas las cosas y a partir de ahora deja de complacer a los demás para sentirse bien. Sabe alejarse de la gente que no le aporta y hace inventarios y sabe identificar los entornos que la hacen encogerse y los entornos que la hacen expandirse. Estoy segura que tienes cierto grupo de amigos o amigas con las que cada vez que vas sales peor o no te sientes tú misma o sientes que te juzgan de alguna manera. ¡Sal de ahí! ¿Quién te prohíbe dejar de hablarles? No tienes que generar una discusión, un drama si no te gusta discutir. Pero sí que es verdad que poco a poco puedes ir alejándote de ciertas personas. No te vas a quedar sola, siempre acabarás conociendo nuevas personas. Recuerda que antes de recibir cualquier cosa que tú quieres tenemos que estar preparadas y tenemos que ser mujeres listas de este siguiente nivel. Porque si tú quieres ser dueña de tu negocio y nunca has trabajado nada de ti, ¿qué te va a pasar cuando seas dueña de tu negocio? Pues que vas a estar viviendo y tomando decisiones desde el que dirán. ¿Qué van a pensar? ¿Qué pensarán? ¿Voy a hacer el ridículo si me grabo? ¿Si no me grabo? ¿Me hago un reel en un story? ¿Me subo en Instagram? Vas a estar solo pensando en qué pensarán los demás y no vas a ser auténtica. A la mínima que recibas una crítica, ¿te vas a hundir? ¿Te va a dar una vergüenza horrible? ¿O vas a estar pensando he hecho el ridículo? Por eso es muy importante reforzar nuestra autoestima y reforzarnos nuestra autenticidad. Es importante empezar a tomarnos los cafés necesarios con nosotras mismas para empezar a expandirnos. Te animo a que esta semana empieces a definir cómo te gustaría sentirte en cada una de las áreas de tu vida. Imagina que ya la estás viviendo, ¿cómo te gustaría sentirte? ¿Quién te gustaría ser? Pero antes de eso también pon y establece claridad en lo que no quieres y en lo que tienes que parar de hacer. Si acabó de estar demostrándole a los demás, si acabó de estar complaciendo al resto, ponte ahí en el pedestal y date prioridad tú. No establezcas tus nuevos objetivos en base al éxito que deberías tener, lo que esperan de ti tus padres, lo que esperan de ti tus amigos. Define tu propio éxito. Esto es un punto súper importante. Cuando yo deje mis trabajos, os voy a contar también mi historia profesional más adelante, pero esto fue fundamental. Todo el mundo esperaba de mí un éxito profesional en la carrera que había estudiado, que siguiera desarrollando esta carrera. Pero hubo un momento en el que yo no me sentí identificada con ese éxito. Yo quería tener mi propio éxito y sentirme exitosa por mí misma y me quería sentir exitosa yo, no que el resto me aplaudiera y me dijera que bien lo había hecho. Y decidí dejar todo, dejar ese tipo de trabajos y empezar mi carrera desde cero. Así que ahora pregúntate cómo se siente esa vida y qué estás dispuesta a dejar atrás para no seguir sintiéndote de esta misma manera. Empieza a analizar qué más puedes dejar atrás. Empieza a hacer limpieza de ropa, de gustos. A lo mejor ya no te gusta la misma música que hace 10 años. Empieza a conocerte. ¿Cuáles son tus gustos? ¿Qué es lo que no te gusta? Y empieza a diseñar la vida que deseas. No es de un punto de vista material, que también lo puedes hacer, pero ahora mismo diseña cómo te gustaría sentirte y déjate llevar. Algunos ejemplos podrían ser sentirme más dinámica, más atractiva, más sexy, empoderada, energizada, entusiasmada, conectada, vibrante, segura... Y una vez que tengas todos los sentimientos de cómo te gustaría sentirte, empecemos a mapear cuál es la vida de tus sueños. Permítete soñar. Empieza a analizar dentro de cada área de tu vida qué son las cosas que me van a ayudar a hacerme sentirme de esta manera. Te pongo un ejemplo. Yo quiero tener mi propia empresa porque esto me va a ayudar a sentirme realizada y plena. ¿Vale? ¿Perfecto? ¿De qué manera y qué tipo de empresa voy a realizar? Voy a empezar a establecer qué sé hacer, cuáles son mis talentos, cuáles son mis habilidades, capacidades... ¿Cómo puedo monetizar mis talentos? Empieza a mapear todo aquello que quieres conseguir porque si tú no te sientas a escribirlo y a soñarlo, esto nunca se va a materializar. Y puede parecer absurdo. Sí, son sueños, esto es muy difícil, ahora mismo no puedo, mi trabajo, mi situación... Sí, bueno, pero es que todo el mundo que empieza a construir un sueño empezó soñando. Y tienes que tener mucha claridad en qué quieres y qué es lo que vas a hacer para lograr sentirte de esta manera. Recuerda que todo gira en torno a cómo nos queremos sentir en el futuro. Que tú quieres sentirte amada, ¿vale? ¿Qué estás haciendo para primero amarte tú y para que otros te empiecen a amar a ti también? ¿Qué tipo de relación quieres y qué tipo de relación no quieres más en tu vida? ¿Has empezado a establecer esos límites? ¿Has empezado a analizar qué es lo que no te gustó de tu pasado y qué es lo que estás dispuesta a tolerar? Perfecto. En tu familia, ¿cómo te gustaría sentirte respecto a tu familia? ¿Qué es de lo que ya te estás cansando y crees que ya no te corresponde? Empieza a analizar. ¿Eres tú responsable de todos los problemas de tu familia? ¿Eres tú responsable o la salvadora que tiene que salvar a tu familia? Algo muy importante e interesante en este trabajo de mapeo es que mapees todo aquello que esté bajo tu control. Y bueno, que empieces a aceptar que tú no tienes el control sobre el cambio de otras personas. Si tú ahora mismo estás en una relación y no estás conforme con cómo te están tratando, cómo estás en la relación, cómo te sientes, tú no eres quien va a cambiar. Tú no vas a hacer un mapa de cómo cambiar a esta persona, cómo va a empezar a amar a mí de manera como a ti te gustaría. Tú no tienes el control de cambiar a tus familiares ciertas actitudes. Es hora de que empieces a soltar y a liberarte. A liberarte de responsabilidades que no son tuyas. Y también empezar a reprogramar cómo te sientes respecto a ciertas situaciones. Empieza a aceptar y deja de rechazar tanto, de rechazar situaciones. Tu familia es la que es y esto es lo que hay. Empieza a aceptarlo. Cuanto más tiempo rechazas una idea, más permanece y más duele. Recapitulando, para cambiar tu estado actual, cualquiera que sea tu situación, establezcamos un mapa y una dirección. Establezcamos hacia dónde queremos ir, cómo nos queremos sentir y qué es lo que no queremos repetir. Cómo no queremos sentirnos más y te tienes que hartar. Y te lo vengo repitiendo en todos los episodios. Pero es que hasta que tú no te hartes, no vas a tomar ningún tipo de acción. Y seguimos quejándonos. Y seguimos hablando con nuestros amigos. Y seguimos en esta posición de victimismo. No fue hasta que no me harté y hasta que no mandé todo a la mierda, en que no empecé a ver un cambio en alguna de las áreas de mi vida. Os espero la próxima semana con nuestro siguiente episodio. Cuéntame de qué te gustaría que habláramos y si te gustaría profundizar en algún tema concreto. Puedes contarme también qué es lo que más se te está dificultando. Qué es lo que más cuesta. Qué es lo que cuesta de cambiar. A qué miedos o a qué historias limitantes te estás aferrando. Ya sabes que me puedes escribir en Instagram, en el café pendiente contigo misma. Y me encanta recibir vuestros mensajes y también vuestro feedback de cómo vais en el proceso. Nos vemos la semana que viene. ¡Un abrazo!