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El deleite de escuchar la voz del Padre / Ptor. Albert Pabon

El deleite de escuchar la voz del Padre / Ptor. Albert Pabon

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The speaker greets people from different nations and talks about the joy of participating in God's work. They discuss the difference between hearing and listening to God's voice, emphasizing the importance of intentional listening. The speaker uses Exodus 20:18 and Hebrews 12:18 to illustrate the fear and awe associated with hearing God's voice in the past, but now, as children of God, they can approach His throne with confidence. They highlight the significance of listening to God's voice and how it shapes our lives and decisions. The speaker also mentions the temptation of Eve and the importance of being cautious about who we listen to. Buenos días a todas las personas que se conectan. Siempre vemos que de otras naciones nos siguen saludos. Pastor desde Colombia, Honduras, Estados Unidos, México, Ecuador, Venezuela. Siempre es un deleite, un disfrute poder participar de lo que Dios está haciendo en otras naciones desde aquí, desde Valencia, la hermosa. Valencia, gloria a Dios por esta ciudad que nos recibió hace muchos años y que Dios nos ha dado el privilegio de hacer su obra en esta ciudad. Gloria a Dios. ¿Cuántos quieren oír la palabra de Dios? Levante su mano, dice Señor he venido a escucharte a ti. Háblame, háblame por tu espíritu, háblame por tu palabra en el nombre de Cristo Jesús. Y todos decimos, ¿cuántos se atreven a dar gracias aún por lo que no han recibido? Eso es fe. Usted sabe que las personas damos gracias cuando recibimos algo, pero a veces la fe, Señor gracias, aún no lo tengo, pero yo sé que tú estás en el asunto. Amén. Vamos a levantar la mano y vamos a decirle gracias Señor por la palabra que hoy me vas a hablar. Yo sé que será de gran riqueza. He dispuesto la tierra de mi corazón para que sea sembrada tu palabra. Con sencillez, sin prejuicios, sin preocupaciones, sin mal humor, estoy aquí sentado porque quiero ser enseñado. Y la iglesia de Dios dice, Amén. Gloria a Dios. Amén. Voy a estar inicialmente, voy a estar usando dos textos, lo digo para multimedia para que me ayuden por favor. Éxodo 20.18, voy a usar ese texto. Hebreos 12.18. Éxodo 20.18 y Hebreos 12.18. Mejor dicho, esos textos me van a usar a mí, yo no los voy a usar a ellos. Es que es verdad, el predicador tiene que ser usado por la palabra y no el predicador usar la palabra. Es muy distinto cuando Dios usa un nombre o cuando un hombre usa lo de Dios. No tiene nada que ver. Ok, la palabra que hoy quiero compartirles le he puesto el deleite de escuchar la voz del Padre. El deleite de escuchar la voz del Padre. Amados, nuestra vida es de una manera cuando escuchamos a Dios y de otra manera cuando no lo escuchamos. Parece sencillo, pero no, tiene lo suyo esa frase. Cuando escuchas, porque la diferencia de oír, la diferencia de oír y de escuchar es muy grande. Si usted va por un mercadillo, ¿verdad? y alguien está enamorando a una muchacha, mira qué bonita es, qué guapa, y tú vas pasando y oyes lo que están diciendo, pero como eso no es contigo, tú sigues. Pero escuchar significa, es un acto intencional. Oír, usted oye la pista, pero me está prestando atenciones a mí, creo yo, ¿no? Entonces, yo oigo involuntariamente, pero escucho implicándome, prestando atención, abrazando, reflexionando, juzgando lo que estoy escuchando, ¿ok? Por eso le he puesto el deleite de escuchar al Padre. Amén, y eso es lo que hoy vamos a hablar. La identidad desde la que escuchemos, la identidad desde la que escuchemos determina el efecto de lo que oímos. La Biblia dice, porque todos sin duda estaréis ante el tribunal de Cristo, ¿ok? Gloria a Dios, ¿cuántos se gozan de pasar por el tribunal de Cristo? La identidad con la que vayas al tribunal determina, si tú eres hijo, ¿verdad? porque Dios es fuego consumidor, ¡ay Dios mío, qué miedo! No, no, no, la identidad con que tú oigas que Él es fuego, determina lo que es para ti. Si Él es fuego, ¿es para consumir qué? El pecado, el adversario, el enemigo, lo impuro, pero la identidad desde la que yo escucho determina lo que produce en mí, porque sin duda todos estaréis ante el tribunal de Cristo. La identidad con que usted vaya al tribunal determina cómo será todo aquello. Por lo tanto, escuchar es uno de los grandes beneficios que tienen los hijos de Dios. Vamos a leer Éxodo 20.18. Éxodo 20.18. Diga conmigo, el pacto donde estoy parado determina, no, no, iglesia, diga, el pacto donde estoy parado determina la esencia de lo que escucho. Ahora usted va a escuchar por qué estoy diciendo eso. Todo el pueblo observaba el estruendo y los relámpagos y el sonido de la bocina y el monte que humeaba, y viéndolo el pueblo, ¿qué? Perilaron y se pusieron lejos. ¿Avanzamos, por favor? Y dijeron a Moisés, habla tú con nosotros y nosotros oiremos, no escucharemos, nosotros oiremos. Pero no hable Dios con nosotros para que no muramos. No puedo leer mucho porque, pero usted puede ver en Éxodo 33 también, el pueblo le dijo a Moisés, escúchame, no, no, no, no, que ya Dios ha dicho que si una bestia, un camello, un burro, una vaca tocaba el monte donde él iba a hablar, moriría. No, no, no, yo no quiero ir para allá. ¿Qué producía aquello? Pavor, miedo, temblaba. No, no, no, vaya, anda tú, oyes a Dios y luego vienes y nos dices lo que Dios te dijo. Y lamentablemente, muchas, muchos hijos de Dios siguen pensando así, o usted nunca escuchó al pastor, ore usted por mí, que a usted Dios lo oye más, usted está más cerca. No porque sea más alto, sino que es que usted, Dios trata con usted distinto. ¿Qué? Eso no es verdad. Mire lo que producía. Avanzamos el texto, por favor, el 20, y Moisés respondió al pueblo, no temáis, porque para probaros vino Dios, y para que su temor esté delante de vosotros para que no pequeís. Amados, hablamos que desde donde nosotros, desde donde nosotros escuchamos, el pueblo tenía temor, pavor de oír. ¿Verdad? Pero ahora nosotros vamos a ver, Hebreos capítulo 12, versículo 18. Hebreos capítulo 12, versículo 18. ¿Cuántos son hijos amados por el Padre? Diga, yo soy hijo altamente amado. Diga, esa es mi identidad, soy una hija altamente amada por el Padre. Ahora mire, después de la cruz, hermano, Dios cambió el orden de relacionarse con el pueblo, con la gente. Ya Dios no le habla a terceros, ve a decirle a Anelia que la quiero. Entonces venía un profeta y le decía, Anelia, dice Dios que te quiere. Hermano, Dios hizo morada en nosotros, en los hijos. Dios hizo morada en nosotros, y nos dio su Espíritu, y el Espíritu le da testimonio a nuestro Espíritu de que somos hijos de Dios. Aleluya. Quiero abordar esta temática, pero quiero afirmar en usted la posición desde donde vas a escuchar lo que Dios te va a hablar. Hebreos 12, 18 dice, porque no os habéis acercado después de la cruz. Diga conmigo, después de la sangre que se derramó, después del pacto hecho en la cruz del Calvario, porque no os habéis acercado al monte que se podía palpar y que ardía en fuego, a la oscuridad, a las tinieblas y a la tempestad, al sonido de la trompeta, a la voz del que hablaba. No os habéis acercado a la voz del que hablaba, la cual los que la oyeron rogaron que no se les hablase más, porque no podían soportar lo que se ordenaba, si aun una bestia tocar el monte sería apedreada o pasada con dardos. Y tan terrible era lo que se veía que Moisés dijo, estoy espantado y temblando. Si no, vamos a leer todos juntos, si no que os habéis acercado al monte de Sion, a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén y la celestial, a la compañía de muchos millares de ángeles, a la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos, al Dios, el juez de todos, a los espíritus de los justos, hechos perfectos, a Jesús, el mediador del nuevo pacto y a la sangre rociada que habla mejor, diga que habla mejor que la de Abel. No os habéis acercado al monte que producía temor, sino que se habéis acercado como hijos a la sangre derramada del nuevo pacto. Esto es lo que marca la diferencia del que quiere oír al padre y el que dice, no, no, vaya usted pastor y hable por mí. Hermanos, los hijos, el Señor dice, acercaos confiadamente, no a la montaña que humea y que si una vaca inocente está pastando y toca el monte, es atravesada, sino acercaos al trono de la gracia. Hermanos, escúcheme, todo, por favor, hermano Antonio, dame un poquito de retorno y si puedes me das un poquito de volumen, así no levanto las manos. Tu vida la determina lo que escuchas, póngale cuidado a esto. Las personas sacamos nuestras conclusiones, nuestras decisiones, nuestra conducta, nuestra manera de ver basado en lo que escuchamos, no en lo que oímos, en lo que escuchamos. Todo lo que se suma a tu interior, que tú escuchas, viene a generar una influencia en tu modo de pensar, de ver, de hablar, de entender, de tomar decisiones. Por eso es necesario que nosotros tengamos deleite en escuchar al Padre. Como hijos de un Padre amoroso, tenemos que tener seguridad, deleite y anhelo de oír al Padre. Póngale cuidado a esto. Dios dijo, Dios dijo a Dan, el día que comáis de este árbol, ciertamente moriréis. Todo, puedes comer de todo lo que hay en el huerto. El día que comas. ¿Quién dijo eso? Dios. La serpiente se acercó por el huerto y dijo otra cosa. Dijo, no moriréis. ¿Qué dijo Dios? La serpiente, ¿qué dijo? Está contradiciendo a Dios. Le dijo, no moriréis. Dios sabe que el día que comas, al contrario, Él te dijo que moriréis, pero te vas a revitalizar, porque vas a ser como Dios. Y el hombre que siempre ha querido más, cayó en el engaño porque la serpiente, diga conmigo, la serpiente lo tentó con lo que ya ellos eran. Porque le dijo, seréis como Dios. ¿Y cómo hizo Dios al hombre? Con su selejanza. Lo tentó con lo que ya eran, pero desconocían. Entonces la serpiente le dijo, no, no moriréis, sino que seréis como Dios. Entonces, Eva, diga conmigo, escuchó, no oyó a la serpiente, la escuchó porque incorporó a su interior la palabra que la serpiente le dijo. ¿Y sabe qué es escuchar? Es sumar al interior, ¿verdad? Y ajustar mis decisiones a aquello. Por eso le dije que el éxito de un hombre, de un matrimonio, de una familia, el éxito o los problemas lo determina a quién escuchamos. Porque escuchar no es un acto, siempre escuchará el pastor, decir, escuchar no es un acto pasivo, inocente. Si yo llego a un lugar y mi esposa está hablando con un hombre, yo le digo, oye, ¿qué hablas tú? Dice, te estoy viendo, como veinte minutos. No, solo estamos hablando. Hay que preocuparse, ¿no? Veinte minutos hablando, solo hablamos. Tú no sabes que las palabras, diga conmigo, las palabras no son inocentes. La palabra que la serpiente le dijo tenía una naturaleza. Las palabras tienen una naturaleza. La naturaleza determina el querer. La naturaleza de la palabra. La palabra de la serpiente tenía un propósito, tenía una intención. O sea, yo les he explicado, miren, les hago una ilustración. Esto es una cabeza y aquello es una cabeza. ¿Cómo hago yo para pasar un pensamiento de esta cabeza a aquella cabeza? Hay un vehículo, diga conmigo, las palabras son el vehículo donde se mueven las ideas. Entonces, en esta cabeza, yo si la pego así, a un sabio no se me pega nada, pero si lo escucho, aprendo sabiduría. Entonces, las palabras son el vehículo donde se mueven las ideas. Las ideas tienen naturaleza, propósito, intención. Quiero enseñarte lo que es la importancia de escuchar al padre. La seguridad de un hijo lo determina a quién escucha. Usted ¿no ve que cuando uno pasa una racha negativa, difícil, empieza a hablar quién? La conciencia es que estoy salado, mira todo lo que me pasa, es que no pego una, es que no salgo de una para entrar. ¿Y a quién estás oyendo? ¿Quién alimenta los pensamientos? Porque la Biblia dice que la boca, diga la boca, habla lo que abunda en el corazón. O sea, en el corazón pueden haber muchas cosas, pero la boca solo habla lo que abunda. Lo que abunda, no un poquito de sabiduría, un poquito de consejo, no, la boca no va a hablar los poquitos. Proverbios dice que solo va a hablar lo que abunda. Por eso el apóstol Pablo dice todos los días, desead como niños la leche espiritual no adulterada para que por ella crezcáis. Os ruego pues por las misericordias de Dios que habléis todos una misma cosa. O sea, esto es una realidad. Amado, tu vida, las decisiones que tomamos no son inocentes, están influenciados por lo que oímos. Estoy gracias a Dios por tu vida que estás oyendo en esta mañana, escuchando en esta mañana la palabra de Dios. Creo que estás en el lugar correcto. Ahora, ahora, la serpiente comenzó a decirle y Eva comenzó a considerar, no se le movía de la cabeza aquella idea. Bueno, ya ustedes saben cómo terminó todo, engañados, porque el engaño, el engaño cuando tú le abres un lápiz, se mete por ahí, se cuela. Y el engaño, diga conmigo el engaño, su función primaria no es engañar, pero dígalo, dígalo. No es engañar, es matar. ¿Matar qué? Tu visión, matar tu fe, matar tu propósito, matar la riqueza, matar el propósito de vida que Dios te ha dado, matar. Él no vino a herir, Él vino a robar, a matar y a destruir. Por eso cuando usted oye y pone los sentidos, la palabra empieza a trabajar en ti. Ahora, la serpiente los engañó y ellos murieron y Dios se le apareció en el huerto. Adán, y Adán por allá, porque nadie quiere enfrentar las consecuencias. Adán, ¿dónde estás? Señor, es que estoy desnudo. Escuche, estoy desnudo. Y Dios le dice, pero Adán, ¿a quién estás? ¿Quién te dijo? Estabas desnudo. ¿Quién te lo dijo? ¿A quién estás oyendo? ¿Quién te dijo? ¿Quién te mandó una idea en el vehículo de la palabra y te dijo que estabas desnudo? ¿Quién? Amados, usted sabe que una de las cosas más determinantes, más determinantes en toda la Biblia son las palabras. No es cuestión de sólo palabras. Las palabras se las lleva el viento. Eso no es verdad. Es una mentira. Yo le voy a hacer el ejemplo para que usted vea cómo cambia una nación por sólo el poder y la vida de las palabras. Había un gigante, había un gigante que salía delante del ejército de Israel y decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía, decía Hasta ahí seguía, la conversación seguía, era un choque frontal de realidades. Y cuando David Goliad empezó a andar para acá, David vení para acá. Y venía con escoltas y demás. Y le tiró. Hermano, es inocencia de nosotros. Para la vida de los sentidos, a Goliad lo mató la piedra. Pero espiritualmente, cuando tú hablas posicionado, tu palabra es como una daga que hiere a la mentira, al engaño, al enemigo. No puedes soportar que tú hables verdad. Porque la mentira es herida cuando tú hablas verdad. El orgullo es herido cuando tú te humillas delante de Dios. La humildad hiere a la soberbia, la zahetea. Pero para yo hablar, yo tengo que tener un depósito de haber escuchado. Efectivo, se le incrustó la piedra y cayó para delante y se la terminó de enterrar. Cuando vieron que esa tonelada había caído, echaron a correr y David corrió, le sacó, le cogió su misma espada, le cortó la cabeza, la cogió por el pelo y dice, ¿qué era lo que le daban al que mataron al gigante? Hermanos, nosotros caminamos en fe, en la medida que nuestros oídos se agudizan oyendo la palabra de Dios. Un hombre, una mujer vive en seguridad. ¿Quién determina la seguridad en la que vivimos? ¿A quién oímos? ¿A quién oímos? Los ojos hablan. ¿No ves que uno ve y dice, este es ingeniero? No, pero estáis viendo y los ojos hablando. Esta es de acuerdo a lo que uno vea. Por eso David cuando fue visto por el gigante lo tuvo en poco. El Evangelio El Evangelio, hermano, es el depósito de oír al Padre y entonces la influencia de oír a alguien te va a manifestarse lo que hablamos. Una iglesia, un hombre, una generación es poderosa en la medida que escucha correctamente. Escucha, hijo mío, atentamente a las palabras que yo te hablo hoy. Decía el Salmo 119, dice la exposición, Salmo 119, 130, la exposición de tus palabras alumbra, la exposición de tus palabras alumbra, hace entender a lo simple. El versículo 160, ahí, el mismo capítulo, versículo 160. Vamos a leerlo todos juntos. La suma de tu palabra es verdad y eterno es todo juicio de tu justicia. Aleluya. Oí. Amados, la modificación de las palabras, la modificación de las palabras que hoy se está haciendo, la ingeniería social que hoy se está llevando tiene una intención. ¿Sabes que se usan eufemismos? ¿Qué es un eufemismo? Cuando tú no quieres decir que Iñaki y la infanta se divorciaron. Fue la televisión para no hablar de divorcio porque están en contra, ¿verdad? Y hay que preservar la imagen. Dicen el cese temporal de la convivencia. Y la gente dice, ¿qué dijeron? Nadie. Ellos dijeron cese temporal de convivencia. La interrupción del embarazo. No, no, la vida no se puede interrumpir. Si la final de la Copa del Mundo se interrumpe por nieve, ¿qué significa la palabra que se interrumpió la final? Que luego se retoma, ¿no? El embarazo no se puede retomar. Por lo tanto, no se puede interrumpir la vida. Tiene dos fases. El origen, que es la vida, la concepción de la vida, y la muerte, que es la interrupción. O sea, cuando... ya termina. Entonces el sistema lo que hace es modificar lo que oímos porque ellos sí han estudiado y ellos sí saben y lamentablemente, como Jesús dijo, que los hijos de la tiniebla son más sagaces. El sistema sí sabe que lo que usted oye tiene un peso importante. Escúchenme, hermano. Les voy a hacer una ilustración estadística. El subconsciente de usted, el subconsciente, el subconsciente, sub es por debajo de la conciencia y el consciente es las decisiones conscientes que usted toma. Son una a cuatro. El subconsciente toma cuatro decisiones y el consciente uno. Otra vez. O sea, por cada decisión consciente que usted toma, donde usted participa y dice, me voy a cortar el cabello el lunes, han habido cuatro decisiones subinconsciente, perdón, que usted ha tomado y no se han dado cuenta. El subconsciente, el combustible que alimenta el subconsciente es lo que oímos. Usted oye, oye, oye, oye, oye oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye, oye El apóstol Juan, perdón, el apóstol Pablo en 2 Corintios 4, 13 dice Pero teniendo el mismo espíritu de fe ¿De dónde viene la fe? El oír, el oír, ¿y el oír qué? La palabra Pero teniendo el mismo espíritu de fe conforme a lo que está escrito, creí por lo cual hablé Hermano, los hombres hablan lo que creen aunque ellos no sepan que lo que están hablando es lo que creen porque le dije que ese es el subconsciente Una persona ve de acuerdo a lo que oye Cuando oyes que andan por ahí unos violadores, unos hombres un poco y pasan dos camionetas negras ¿Entiendes? Claro, yo oí, ahora veo, y ahora... ¡Claro! Cuando tú oyes, escuchas al Padre y Él te dice Antes de que se formara el mundo, te amé Antes que te formara en el vientre de tu madre, te santifiqué y te preparé y di naciones y reyes por ti Las tinieblas, cuando el Padre habla así Las tinieblas cubrirán las naciones pero tú andarás a mi luz Las tinieblas andarán sobre las... Las naciones andarán sobre las tinieblas pero la luz perpetua mía resplandecerá sobre ti Y el Padre, ¿y cómo habla el Padre? ¿y cómo habla el Padre? Yo soy tu Hacedor Yo soy tu Formador Cuando pases por las aguas no te anegarás No te está diciendo que te va a evitar pasar por las aguas Que eso es una de las afrentas más grandes que se le ha hecho el Evangelio Enseñarle a la gente que Dios quiere privarte de pasar por las aguas No, Él dice, cuando pases por las aguas no te anegarás Y si pasas por el fuego la llama no arderá contra ti O sea, escúcheme, no te vayas a meter en el fuego Que el Padre lo que te está es ilustrando la magnitud del compromiso que tiene en tu cuidado y en la preservación de tu vida Por eso los apóstoles, los hombres que oían, escucharon, prestaron el corazón a Dios caminaron en seguridad ¿De dónde viene la palabra? Porque yo sé en quién he creído O Pablo cuando dice una de las preguntas más poderosas que hay en la Biblia Una, Pastor, ¿cuál es esa pregunta? ¿Quién nos separará del amor de Dios? Para mí es una de las preguntas más poderosas que hay en la Escritura Y Pablo dice, peligro, hambre, desnudez, frío, persecución ¿Quién nos separará del amor de Dios? Hermano, cuando un hombre llega a la conclusión que ni la vida, ni la muerte, ni principados ni potestades, ni ángeles, ni la vida, ni la muerte ni ninguna cosa creada lo puede separar del amor de Dios que es en Cristo, es porque ha escuchado la voz del Padre para llegar a esa conclusión Porque si no, es una imaginación ¡Aleluya! Ahora no es lo mismo oírnos a nosotros mismos ¡Guau! Amados Las creencias de una persona son resultado de lo que oyen Lo que creo, por eso dice creí Por lo cual hablé Caín mató a Abel por una creencia incorrecta Saul perseguía a David por una creencia incorrecta Día conmigo una creencia incorrecta Genera una vida incorrecta Una creencia correcta Genera una vida correcta Por eso el escritor en Proverbios dice Como un hombre piensa en su corazón Así es el hombre, así está el hombre O sea, lo que está diciendo es como piensas Es la huella digital, dactilar, el distintivo de lo que eres ¿Cuántos quieren ser mejor hombre y mejores mujeres? Elija escuchar al Padre ¡Ojo con esto! Luego voy a leer Hechos 26.9, por favor Présteme atención, Iglesia No todo lo que se dice en este lugar Con un micrófono y con una Biblia es palabra de Dios Aquí a veces enseñan muchas... No estoy hablando de este lugar físico Estoy hablando de que usted tiene que sentarse Con la capacidad de juzgar lo que usted escucha Porque usted no puede incorporar una realidad a tu interior que es incorrecta ¿Cuántos han escuchado que tus lágrimas mueven la mano de Dios? ¿Han escuchado o no? Porque decían, hermano, ora ¿Cuántos han escuchado que tu oración mueve la mano de Dios? No hermano, usted puede orar seis meses por algo que Dios no quiere Y eso no va a mover la mano de Dios Usted sabe lo que mueve la mano de Dios Cuando el que ora conoce lo que Dios quiere Y se alinea su vida a lo que el Padre quiere Ahí si se mueve la mano de Dios Pero si yo te enseño a ti Si yo te enseño a ti Que tus lágrimas o tu oración mueven la mano de Dios Te estoy diciendo, Dios es manipulable Ora, ora por la camioneta Ora por eso, no importa si Dios quiere o no quiere Tu ora, acumula, acumula Llegará un momento que el se tendrá que ver obligado a darte la camioneta No hermano, eso es una blasfemia Eso no es la palabra de Dios La oración no mueve la mano de Dios Dios se mueve por propósito Y cuando una mujer es sabia, un hombre sabio Se alinea con el propósito de Dios Y se vuelve en uno Ahí si hay poder en la oración Pues yo no puedo torcer, obligar a que Dios haga algo Porque tengo tres meses de ayuno O peor, la ignorancia que es atrevida Le dice a Dios, hasta que no se levante no suelto el ayuno Y ahí el sistema colapsando No, que no lo suelto Y gente se muere compadre Gente en la palma Porque Dios dice, no Cuando eras niño Yo te complacía, por amor No porque yo fuera así Pero ahora no, tú tienes que alcanzar madurez Si yo no te he hablado acerca de ese asunto No me insistas Hay que oír, hay que escuchar al Padre Para orar, hay que Diga conmigo la parte más importante De la oración Es lo que Dios dice Si, si, si Usted y yo podemos orar Y orar Y la madrugada aún estaba oscura Y yo buscaba No, no, no A las tres, a las dos, a la hora que sea Si usted no hace Lo primero es Espíritu Santo de Dios Tú dices Que pedir lo que conviene, yo no lo sé O sea, tú me estás diciendo que yo no sé ni orar Ayúdame, ayúdame Señor Para no ir a la derecha Cuando el Señor quiere ir a la izquierda Porque la palabra dice Caminará, una pregunta Sabia Escuche ¿Caminarán dos juntos sin estar de acuerdo? Es una pregunta No, no, no ¿Caminarán dos juntos sin estar de acuerdo? Es Dios y yo Vos no puedes Y Dios no se puede someter a lo que yo oro Porque yo ayuno No, no, la sabiduría Diga conmigo la sabiduría Está en escuchar al Padre En escuchar al Padre En escuchar al Padre En escuchar al Padre Cuando tú escuchas, tu vida es enriquecida Cuando tú escuchas, Dios te afirma ¿Sabes qué? Cuando escuchar al Padre La palabra empieza a hacer reajustes dentro de ti Cuando tú escuchas La palabra empieza a trabajar A producir paz Orden Una manera sabia de ver las cosas ¿Alguien puede decir amén? Acuérdense No habéis acercado Al monte que humeaba Y que daba temor Sois hijos Acercados confiadamente Al trono de la gracia Amados Los problemas de un padre De un pastor O de un novio Empiezan cuando no escuchamos al Padre Así es Ahora la seguridad Vea conmigo la seguridad La firmeza El crecimiento La sabiduría Es resultado de escuchar al Padre Te dije que una creencia equivocada Llevó a Caín a matar a su hermano Claro Dijo, llegará Esaú Esaú dijo Llegarán los días Del luto de mi padre Y yo voy a acabar con Jacob Y cada vez esa voz era más fuerte dentro Hermano ¿Usted sabe cuál es el hombre Que le ha aportado más al avance del reino A nivel de la escritura? Pablo Y a Pablo Dios lo libró De una creencia incorrecta Si Dios no nos libra De las creencias incorrectas Ellas acaban con nosotros Hechos 26.9 Póngale cuidado Yo ciertamente Está hablando Pablo Yo ciertamente Había creído Mi deber Hacer muchas cosas Contra el nombre de Jesús Eso era lo que él creía Que su deber era Hacer Luchar contra Jesús Pero de ahí Diga, de ahí lo rescató el Señor Gloria a Dios Porque si no nos hubiésemos perdido Al gran apóstol Pablo Yo ciertamente Había creído mi deber Hacer muchas cosas Contra el nombre de Jesús Y ahora Dese cuenta lo que producen Las creencias incorrectas Avanzamos Lo cual también hice en Jerusalén Yo encerré en cárceles A muchos de los santos Habiendo recibido Poderes de los principales Diría Que pensaban lo mismo que yo Y cuando los mataron Yo dijo Levantar el pulgar Bien hecho Yo di mi voto Y en muchas veces Y muchas veces Castigándolos en todas No en algunas En todas las sinagogas Los force a blasfemar O sea, le pegaba a los ancianitos A las mujeres A los niños Blasfema contra el nombre de Jesús Y los golpeaban Los force a blasfemar Y enfurecido Enfurecido hermano Era una furia Sustentada en el engaño No hay nadie No hay nadie más peligroso Que un hombre apasionado Pero legalista Pablo habla en Romanos El celo que no es conforme a ciencia Porque el celo que es conforme a ciencia Es el celo que es resultado De conocer la vida de Cristo Pero como va a reproducir muerte Si el que está reproduciendo Defendiendo es vida El celo que no es conforme a ciencia Es los que se forjan en bombas Y vuelan en un metro Muchas veces castigándolos En todas las sinagogas Los force a blasfemar Y enfurecido en sobremanera Contra ellos Los perseguí Hasta las ciudades extranjeras Ocupado en esto Iba yo a Damasco Con poderes Y en comisión De los principales sacerdotes Cuando a mediodía Diga conmigo A mediodía Porque el Espíritu Intencionalmente Quiso Registrar la hora A mediodía Oh rey Yendo por el camino Vi una luz del cielo Que sobrepasaba El resplandor del sol Lo cual me rodeó a mí Y a los que iban conmigo Y habiendo caído Todos nosotros en tierra Oí una voz que me hablaba Y decía en lengua hebrea Saulo Saulo ¿Por qué me persigues? Dura cosa Te es dar coces Contra el aguijón Entonces yo dije ¿Quién eres? Señor Y él me dijo Yo soy Jesús A quien tú persigues Hermano mira Hasta donde Nos puede llevar Oír A la persona incorrecta El Padre nos habla El Padre nos habla Cuando dice a mediodía Vi una luz ¿Sabes qué significa luz? Entendimiento Por eso el Padre De las tinieblas Ha cegado Los ojos de qué? Del entendimiento Para que no les resplandezca ¿La luz de qué? La luz del Evangelio De Jesucristo En una oportunidad Un sabio llamado Gamaliel Le dijo a los que azotaban A los apóstoles Escuchen Yo les aconsejo Que dejen de estar golpeando A esta gente Porque si Esto fuera una obra de De hombres Se termina en cualquier momento Pero si es Dios Y ustedes se encuentran Peleando contra Dios Creo que no les va a ir muy bien Pero hermano Cuando el hombre no escucha Levante su mano Diga El consejo Ordena los pensamientos Diga conmigo El consejo Es Dios Hablándole a mis orejas Cuando no haciendo en el espíritu Dígalo, dígalo No se quede ahí Dígalo Porque Dios te habla Sabes que hermano Dios es espíritu Hay predicadores que a veces Forman un misterio Para decir cómo escuchar a Dios Cómo escuchar Lea la Biblia en altavoz Léala Las cartas paulinas Lea y usted escucha a Dios Los predicadores No son gente tocada Como una vara Ni nada hermano Son gente que Dios Por amor A la iglesia Nos da sensibilidad Para que enseñemos sabiduría Pero no es que seamos Vamos Cuando Dios te habla Diga conmigo Dios habla A mi interior Porque Dios es espíritu Y Él habla a tu interior Todos sabemos Que Dios nos habla Todos Todas las personas Un borrachito Dios le habla Le habla ¿Dónde? A través de la conciencia Porque eso tiene el espíritu Para oír Pero los hijos de Dios Dios nos habla Hermano Escuchar al Padre Es la mayor El mayor acto de sabiduría Que podemos hacer Y no escucharlo Es el mayor acto De error Que podemos hacer Levante su mano Diga Dios sana Hablando Diga conmigo Dios lidera Hablando Dios provee Hablando Dios abre puerta Hablando Dios cierra puerta Hablando Dios vence una enfermedad Hablando Él dijo Sea la luz Y fue la luz Él dijo Sea la luz Y fue la luz Él dijo Sepárense de las aguas De los habitos Y así fue Culmino con esto Mano a pon ¿Y me puede ayudar Con el piano, por favor? Ezequiel 37 dice Que Dios llevó al profeta A Ezequiel Dios lo llevó A un valle De huesos Secos Y estaban secos En gran manera Secos en gran manera Es que tenían No sé, 20 años secos Y él Dios Para alimentar La fe del profeta Le dice Hijo mío ¿Vivirán estos huesos? Tú lo sabes Mi señor Pues háblales Háblales Así Así Ha dicho Antes El texto anterior Me dijo entonces Profetiza Sobre estos huesos Y diles Huesos secos Oí Palabra de Jehová ¿Qué pasa cuando A los huesos secos Se les habla? Se les habla Me dijo Así ha dicho Jehová Él Él Háblales Así ha dicho Jehová el Señor A estos huesos He aquí Yo hago entrar Espíritu en vosotros Y viviréis Y pondré Tendones sobre vosotros Y haré subir Sobre vosotros carne Y os cubriré de piel Y pondré en vosotros Espíritu Y viviréis Y sabréis que yo soy Jehová Aleluya Profeticé pues Como me fue mandado Y hubo un ruido Mientras yo Profetizaba Y ha aquí un temblor Y los huesos Se juntaron Cada hueso Con su hueso Y miré Y ha aquí tendones Sobre ellos Y la carne subió Y la piel cubrió Por encima de ellos Pero no había En ellos Espíritu Y me dijo Profetiza al Espíritu Profetiza Hijo de hombre Y di al Espíritu Así ha dicho Jehová El Señor Espíritu Vende los cuatro vientos Y sopla Sobre estos Muertos Y vivirán Aleluya Y profeticé Como me había mandado Y entró Espíritu En ellos Y vivieron Y estuvieron Sobre sus pies Un ejército Grande En extremo Lo que está Muerto Que oye Que atiende A la voz de Dios Cobra vida Aplauda el Señor Aplauda su palabra Aplauda el Rey de Gloria Dígale Padre Gracias Porque Tú me hablas Cuando Dios quiere Liberar a una mujer Le habla Cuando Dios quiere Inspirar a una mujer Le habla Cuando Dios quiere Usar a una mujer Le habla Cuando Dios la quiere Llevar a otra dimensión Le habla Dios todo lo hace Hablar Cuando Dios ama Un hombre Le habla Cuando Dios ama A una nación Le habla Y cuando Dios decide Juzgar a una nación ¿Sabe qué hace? No le habla Cuando Israel no conoció El tiempo de su visitación Dios le dijo Ustedes Los griegos piden señales Ustedes piden Ellos piden sabiduría Ustedes señales Pero no No Porque yo he hablado Y ustedes no me han escuchado Y las señales Y la sabiduría Están en mi palabra Y quien Escúcheme Escúcheme La manera Como honremos La palabra de Dios Determina como será Nuestra siguiente temporada Y cuando Dios Desea Un hombre Le habla La manera Como honremos La palabra Determina como será Nuestra vida Es un deleite Oír al Padre Usted sabe Que es lo más terrible Que le puede pasar A la iglesia De pastores vanidosos Que se la mantengan Hoy les voy a enseñar A como rugir El león que llevas por dentro Hoy lo vas a hacer rugir Eso es alimentar La vanidad Que corrompe a una generación El siguiente domingo ¿Cuál es el mensaje de hoy? Siete pasos para el éxito Y esta semana Que hay pastor Esta le voy a enseñar Nadie podrá contra ti Alimentando Hermanos Oír a Dios Oír a Dios Produce en nosotros Una medida de verdad Escuchemos Escuchar su palabra Deleitarse en la palabra Cuando Él me está hablando Yo le digo Si Padre Si, si, si, si, si Si, si, si, si, si Hermanos Cuando Dios hizo al hombre Cuando Dios hizo al hombre Vio Que no era bueno Que el hombre estuviera solo ¿Sabe por qué? ¿Sabe qué llama Dios bueno? ¿Sabe cuando algo es bueno para Dios? Cuando colabora con su propósito Cuando colabora con su propósito Es algo bueno A Jesús Le dijeron Maestro bueno Y le dijo No me llaméis bueno ¿Por qué? No era que Él no era bueno ¿Sabe por qué Jesús Le dijo No me llames bueno Porque Él no había pasado por la cruz Y la medida Cuando algo es bueno para Dios Es porque coopera con su propósito Así que no es lo mismo Un padre bueno Que un buen padre No es lo mismo Iglesia póngase sobre sus pies por favor Aleluya Te glorificamos Señor Oh te damos gracias Qué privilegio que tú nos hables

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