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Cantuña, an indigenous man in Quito, was given a task by the Franciscan Fathers to build a church in 6 months. He accepted the challenge but faced difficulties completing it on time. Lucifer offered to help him finish the construction before dawn in exchange for Cantuña's soul. Cantuña agreed but made a condition that every stone must be placed in the building. Lucifer and his demons started the construction, but Cantuña secretly removed one stone, causing Lucifer to lose the bet and leave empty-handed. Hace un tiempo atrás, unos meses, en la ciudad de Quito, un indígena llamado Cantuña, el cual habitaba en la ciudad, le llevó una encomienda de los Padres Franciscanos y el padre Juan Felipe se encargó de darle a conocer aquella propuesta a Cantuña. Cantuña, Cantuña, mis más gratos saludos para ti. Vengo en representación de los Padres Franciscanos, en el cual tenemos una encomienda para ti, la construcción de la iglesia, aquí, en Quito. Buenas tardes Padre Felipe, que gusto el verlo, claro que acepto con todo el placer esta encomienda, pero dígame, ¿cuál es el plazo de esta obra? Bueno Cantuña, el plazo aproximado es de 6 meses. Oh, y casi lo olvido, a cambio, serás muy recompensado. Bueno, ha sido muy agradable hablar contigo, pero me tengo que retirar, buena suerte mi estimado Cantuña. Así dicho, Cantuña puso manos a la obra, aunque parecía una hazaña imposible de lograr terminarla en 6 meses, puso su mayor esfuerzo y empeño en terminarla. Reunió un equipo de indígenas y propuso terminar la edificación, sin embargo, no avanzaba con la rapidez que él esperaba, y en esos momentos de gran angustia se le presenta Lucifer, y le dice... Cantuña, aquí estoy para ayudarte, conozco tu angustia, te ayudaré a construir esta obra antes de que aparezca el nuevo día, a cambio, te pagarás con tu alma. Cantuña decidió terminar la edificación, acepta el trato, solo le pido una condición a cambio a Lucifer. Trato hecho Lucifer, pero mi única condición es que logres terminar la construcción de esta iglesia lo más pronto posible y sean colocadas absolutamente cada una de estas piedras en esta edificación. Dicho y hecho, el diablo junto con sus diablillos empezaron la construcción, y rápidamente la angustia retornó nuevamente a Cantuña a ver que la obra se culminaría antes de la mirenoche, de tal manera que Lucifer tomaría su parte del trato, el alma de Cantuña. Así que Cantuña pide un plan para evitar el robo del suelo. Esta obra está avanzando muy rápidamente, y muy pronto será terminada, así Lucifer tomará mi alma, piensa, piensa. De tal manera Cantuña toma la piedra sigilosamente, pero al paso de las horas, la obra fue terminada, y Lucifer al momento de ir ante Cantuña, al llevarse sus diablos, Fue un momento, el trato ha sido incumplido, me ofreciste colocar hasta la última piedra de la construcción, y no fue así, falta una piedra, por lo tanto tu parte del trato no será cobrada. Y así fue como Lucifer, asombrado, bien como un simple mortal, lo había engañado, y gracias a la astucia de Cantuña, salió de la piedra. Y así fue como Lucifer, asombrado, bien como un simple mortal, lo había engañado, y gracias a la astucia de Cantuña, salió de la piedra. Y así fue como Lucifer, asombrado, bien como un simple mortal, lo había engañado, y gracias a la astucia de Cantuña, salió de la piedra. Y Lucifer sintiéndose burlado, se refugió en los infiernos, sin llevarse su gran palo.
