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The speaker reflects on various verses from Psalm 19 and Psalm 119. They highlight passages that call for obedience to God's commands, cherishing His words, and recognizing their status as strangers on Earth. The speaker prays for the ability to obey God's commands, treasure His words, and learn from affliction. They express gratitude for God's word and pray in the name of Jesus. Día 150, Tierra Espiritual del miércoles 29 de mayo del año 2024, basado en Salmo capítulo 19, versículos 1 al 88. Los pasajes que me llaman la atención son los siguientes. Salmo capítulo 119, versículos 2 al 3, 11, 19, 44, 56, 71 y 75, que dicen así. Versículos 2 y 3. Dichosos los que obedecen sus mandatos y de todo corazón lo buscan. Jamás hacen nada malo, sino que siguen los caminos de Dios. Versículo 11. De mi corazón atesoro tus dichos para no pecar contra ti. Versículo 19. En esta tierra soy un extranjero. No esconda de mí tus mandamientos. Versículo 44. Por toda la eternidad obedeceré fielmente tu ley. Versículo 56. Lo que me corresponde es obedecer tus preceptos. Versículo 71. Me hizo bien haber sido afligido porque así pude emprender tus estatutos. Versículo 75. Señor, yo sé que tus leyes son justas y que por tu fidelidad me afliges. Meditando en Salmo capítulo 119, versículos 2 y 3, Dios el Señor dice y quiere que obedezca sus mandatos y de todo corazón lo busque, y que jamás haré nada malo, sino que seguiré los caminos de Él para que sea dichoso. Meditando en Salmo 119, versículo 11, Dios el Señor dice y quiere que mi corazón atesore sus dichos para no pecar contra Él. Meditando en Salmo 119, versículo 19, Dios el Señor dice que en esta tierra soy un extranjero y quiere que le pida que no esconda de mí sus mandamientos. Meditando en Salmo 119, versículos 44 y 56, Dios el Señor dice y quiere que por la eternidad obedezca fielmente su ley, porque lo que a mí me corresponde es obedecer sus preceptos. Y meditando en Salmo 119, versículos 71 y 75, Dios el Señor dice y quiere que reconozca que me hizo bien haber sido afligido, porque así pude aprender sus estatutos, porque sus leyes son justas y por su fidelidad me aflige. Por eso mi oración es basada en Salmo 119, versículos 2 al 3, de Salmo 119, versículos 44, 56, 71 y 75, son, Padre nuestro que estás en los cielos, hoy me dispongo y ayúdame a obedecer tus mandatos y de todo corazón buscarte, y ayúdame a jamás hacer nada malo sino seguir tus caminos, Dios, seguir la forma en la que Tú haces las cosas para ser dichoso. Padre santo, también me dispongo y ayúdame a atesorar en mi corazón tus dichos para no pecar contra Ti. Padre eterno, hoy recibo, confieso creer, y ayúdame a estar consciente y a enseñar que en esta tierra soy un extranjero. Por tanto hoy te pido que no escondas de mí tus mandamientos, para que por la eternidad obedezca fielmente tu ley, porque también recibo, confieso creer, y ayúdame a estar consciente y a enseñar que lo que a nosotros nos corresponde es obedecer tus preceptos. Padre justo, hoy reconozco que me hizo bien haber sido afligido, porque así logré aprender tus estatutos, porque tus leyes son justas y por tu fidelidad me afliges. Gracias, Padre, por Tu palabra, porque conforme a ella puedo orar a Ti, gracias porque creo que tienes el poder para poder hacer lo que te pido, y gracias porque oro a Ti estas peticiones en el nombre de Tu malo Hijo, mi Señor, Rey, Salvador y Dios, Cristo Jesús, confiando que así lo harás. Amén y Amén.