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The transcription is a spiritual diary entry discussing the birthday of the author's daughter, Deborah Abigail, and their prayers for her well-being and salvation. It also references passages from 2 Samuel 13:5, 21-22, and 32, which describe a story involving deception and violence within the family. The author reflects on the consequences of the sins committed by King David and their impact on his family. The entry ends with prayers for correction, mercy, and favor from God. Día 135, Diario Espiritual del martes 14 de mayo de 2024, basado en Segunda de Samuel capítulo 13 al versículo 15. Hoy es el cumpleaños de mi primera hija, Deborah Abigail. Le ruego al Señor que tenga de ella misericordia, que la guarde y la cuide del mal, que alce sus ojos sobre ella, le dé su salvación y la llene de su paz. Los pasajes que me llaman la atención son los siguientes. Segunda de Samuel capítulo 13 versículos 5, 21 al 22, y 32 que dicen así, versículo 5. Jonadab sugirió, acuéstate y finge que estás enfermo. Cuando tu padre vaya a verte, dile, por favor, que venga mi hermana Tamar a darme de comer. Quisiera verla preparar la comida aquí mismo y que ella me la sirva. Versículo 21. El rey David, al enterarse de todo lo que había pasado, se enfureció. Y 22. Absalón, por su parte, no le dirigía la palabra a Amnón, pues lo odiaba por haber violado a su hermana Tamar. Versículo 32. Pero Jonadab, el hijo de Simá y sobrino de David, intervino. No piense, mi señor, que todos los príncipes han sido asesinados, sólo Amnón. Absalón ya lo tenía decidido desde el día en que Amnón violó a su hermana Tamar. En Segunda de Samuel, capítulo 15, versículos 25 y 26, dice así. Luego dijo el rey al sacerdote Sadoc, devuelva el arca de Dios a la ciudad. Si cuento con el favor del Señor, Él hará que yo regrese y vuelva a ver el arca y el lugar donde Él reside. Pero si Él me hace saber que no le agrado, quedo a su merced y puede hacer conmigo lo que mejor le parezca. Meditando en Segunda de Samuel, capítulo 13, versículos 5, 21, 22 y 32. Así como la serpiente en el Edén, este personaje, Jonadab, sugirió maldad. Y el hijo de David le dio lugar. También como se movía entre el palacio, intervino y dijo al rey David cómo fue que todo sucedió y que en realidad fue lo que él planeó. El rey David no pudo ver que quien estaba detrás de todo esto era su sobrino Jonadab, impulsado por su envidia. Pero también esto fue consecuencia del pecado del rey David sobre su familia. El rey David solo se enfureció por lo que hizo su hijo Amnon, pero no lo corrigió. Tampoco corrigió a su hijo Absalón cuando asesinó a su hermano Amnon. Dios hizo que David no actuara para que sufriera de su familia las consecuencias de su pecado. Y meditando en Segunda de Samuel, capítulo 15, versículos 25 y 26. Dios el Señor dice que si contamos con su favor, Él hará que regresemos y volvamos a estar en donde reside su presencia. Pero si Él nos hace saber que no somos de su agrado, quedaremos a su merced y Él podrá hacer con nosotros lo mejor que le parezca. Por eso mis oraciones basadas en Segunda de Samuel, capítulo 13, versículos 5, 21 al 22, 32 y capítulo 15, versículos 25 al 26 son, Padre nuestro que estás en los cielos, sé que me corrigirás y mi familia tendrá consecuencias por pecados cometidos, porque no me dejarás sin corrección. Pero Padre, te ruego que tengas misericordia de mi familia, de mi esposa y de mis hijos, de mi descendencia, que al final ellos también puedan alcanzar la salvación. Padre Santo, te ruego que cuente yo con tu favor, haz que regresemos y volvamos a estar en donde reside tu presencia. Pero si no somos de tu agrado, estamos a tu merced, haz con nosotros lo mejor que te parezca. Te ruego a ti, Padre Celestial, dé misericordia de nosotros. Quieras tú tener misericordia de nosotros, te lo ruego porque creo que eres un Dios misericordioso y puedes tener misericordia si tú quieres. Y te lo ruego en el nombre de tu amado Hijo, Cristo Jesús, mi Señor, mi Rey, mi Salvador y mi Dios, rogando que así sea. Amén y Amén.