Rom 13 del 8 al 10 Sem 69 La Ley de la vida Dom 31 marzo 2024

Olivo Verde, a community in Costa Rica focused on studying and respecting the word of God, produces content based on biblical texts. In their study of the Book of Romans, they discuss the importance of paying debts and respecting authorities. They emphasize that the only authority a pastor has over the church is through the word of God, and any other form of authority is abuse and manipulation. They also highlight the dangers of debt and the need to love one another as the main responsibility in relationships. They stress the importance of prioritizing love in all relationships and following the commandments, which can be summarized as loving one's neighbor as oneself. They also mention the rule of personal equity, which means loving others as we love ourselves. The transcript emphasizes the need to prioritize love and responsibility in all relationships. La siguiente es una producción de la comunidad Olivo Verde, Costa Rica. Olivo Verde es una comunidad enfocada en el estudio sistemático y respetuoso de la palabra de Dios. El contenido de su producción se basa en el trabajo verso a verso del texto bíblico. Somos Olivo Verde, Costa Rica. Olivo Verde, Costa Rica. En el orden que llevamos, en el orden de lo que estamos siguiendo en nuestro seguimiento del Libro de Romanos, Pablo viene hablando sobre no deberle a nadie nada. De hecho, el versículo 7 dice, ustedes den a cada uno lo que deben. Pablo está claramente hablando de dinero. El capítulo 13, dijimos la semana pasada, tiene que ver con las autoridades. Y la semana pasada, a manera de repaso, les dije que hay un orden de Dios para la autoridad. Y Dios dice, respetemos las autoridades, las autoridades están puestas por Dios, haga caso, pague los impuestos, pague las cosas. Y analizamos un poco algunos de los temas con relación a las autoridades. Eso lo vimos la semana pasada. Vimos el asunto en casa de la esposa debe estar sujeta al esposo. Vimos también como la palabra dice que nos sujetemos los unos a los otros. También vimos la semana pasada un texto que es muy polémico, más en este tiempo, más cuando usted encuentra pastores que quieren que les digan papá y ese tipo de cosas extrañas. Y de alguna manera, lo que también dice el texto es, sujetese a la autoridad de sus pastores. Yo les expliqué que es un texto muy delicado, porque Dave... Bueno, injusticias siempre se van a cometer de muchos casos, pero ha habido cosas de cosas espantosas. Y no se me olvida un caso de alguien que lo hicieron vender un lote para que diera una plata a la iglesia. Bueno, la única autoridad que un pastor puede tener con los hermanos de la iglesia está en función de que la palabra los vincule a los dos, es la única autoridad. Lo demás es abuso y manipulación. En el versículo 7, como ya lo mencioné, Pablo está tratando de hacernos entender que paguemos las cosas, que no le debamos a nadie nada. La gente inclusive, hay gente que dice que hacer un préstamo es pecado. No, pecado es tener cuatro tarjetas de crédito, y de ver un ojo y el hígado, y de ver el páncreas al Credomatic y al Banco de San José es lo mismo ya. Una cosa es un compromiso financiero, una deuda, y otra cosa es... Una cosa es un compromiso financiero, una deuda, y otra cosa es... y otra cosa es... una deuda. Y algunos de algunos estamos esclavizados por la deuda. Y la deuda no es sano. Jamás puede ser sano. Sin embargo, la palabra lo que dice es, si usted está haciendo algo que obedece a la lógica de la utilización de sus recursos, en donde usted sabe que puede comprometer un porcentaje de su sueldo... Hace unos días estábamos hablando con alguien, y oyendo la conversación, esta persona tiene 50 años, y debe 450 millones de pesos. Y es empleado de un lugar, empleado de otro lugar, de un lugar que... Usted se imagina lo que es con 50 años de ver 450 millones de pesos. Hablar de la deuda siempre va a ser un problema. Algunos nos embejucamos en unas estupideces, no me digan amén. Algunos nos embejucamos... la palabra embejucar está en el diccionario, no me digan feo. Algunos nos metemos en unas deudas de cosas tan raras. A mí cuando una pareja se va a casar y me dice, vamos a hacer un préstamo para casarse. ¡No, no, no! No, uno no hace un préstamo para casarse. Es que nos vamos a casar hasta que tengamos todo. Nunca, nunca nadie se puede casar con todo. Porque cuando cree que ya tiene todo lo que cree que tiene, le falta todo. Todo, todo, todo. La deuda es complicada, y la deuda lógicamente es un Dios. Y algunos vivimos para pagar deudas. Ese no es el propósito de Dios para su vida. Y más ahora, ¿vieron que uno de los lugares en Costa Rica donde más... donde más gente enredada con los goteros hay es San Ramón? ¿Saben que somos goteros, verdad? Los colombianos que cobran gota a gota. Paguemos, dice Pablo. Dice, ustedes den a cada uno lo que deben. Páguenle a cada uno lo que deben. Versículo 7, paguen los impuestos y demás aranceles a quien corresponda. Y den respeto y honra a los que están en autoridad. Así terminamos la semana pasada. Entramos al versículo 8, y viene Pablo y hace un cambio, y en el cambio que hace... utiliza los 10 mandamientos, utiliza los 10 mandamientos para que ustedes entendamos... que todos tenemos una deuda. Que todos, por definición, la única deuda que todos tenemos es a la cual tenemos que hacerle frente. No deban a nadie nada. Allá viene la aclaración, ahora sí, no le debamos a nadie nada, pague. Los puertorriqueños o los cubanos tienen un dicho que dice, cuando usted debe, o paga, o ruega. Pero haga algo. Y los hermanos que trabajan cobrando, Alonso, Mauren, que están aquí, saben lo difícil, que algunos son duros de pagar, duros, duros, duros, duros. Pero inmediatamente, lo que se dice es, la deuda que todos tenemos es amarnos los unos a los otros. Y claro, leer esto es lo más fácil del mundo, excepto el deber de amarse unos a otros. Facilísimo. ¿Cuánto duré leyendo eso? No duré ni medio segundo, excepto el deber de amarse unos a otros. Usted no se imagina la profundidad y el nivel de sabiduría que hay detrás de esa afirmación. Pablo está diciendo, en cualquier relación que usted tenga con quien sea en esta tierra, su responsabilidad es entrar en esa relación. Y lo primero que usted va a hacer con esa persona es amarla. Si aman a su prójimo, cumplen con las exigencias de la ley de Dios. Si aman a su prójimo, cumplen con las exigencias de la ley de Dios. Si amamos a la gente, cumplimos con las exigencias de la ley de Dios. Pues, sigue Pablo aclarando, acuérdese que en el original no hay números, pues, los mandamientos dicen, y viene Pablo, acuérdese que son dos tablas de la ley, agarró una de las tablas, la puso por aquí, y agarró la segunda tabla, pues, los mandamientos dicen, no cometas adulterio, no cometas asesinato, no robes, no codicies. Estos y otros mandamientos semejantes se resumen en uno solo, ama a tu prójimo como a ti mismo. Y viene y hace la segunda afirmación. La primera es, cada vez que usted esté en una relación con quien sea, cada vez que usted esté en una relación con quien sea, usted tiene la responsabilidad de que esa relación, usted ve, en esa relación, todo. Ya le explico. Lo segundo que Pablo dice es, ama a tu prójimo como a ti mismo. Y claro, los psicólogos les encanta decir a ti mismo, ¿verdad? Porque no les pagan para que uno les diga cómo amarse a uno mismo. Verso 10. Eso sí, tenga claro que una persona que ama no hace daño. El amor no hace mal a otros. Por eso el amor cumple con las exigencias de la ley. Mira, estoy perdido yo aquí. Aquí hay tres principios, o tres reglas, que es bueno que usted sepa que son las reglas de la vida. Así funciona la vida, no la cultura. La cultura funciona por desecho. La cultura funciona por desecho. ¿Qué significa por desecho? Por desecho significa que yo tengo algo, una relación o algo, mientras me sirva para algo. Y va desde sexo hasta lo que sea. Y va desde plata hasta lo que sea. La primera cosa que Dios quiere que usted esta mañana entienda a partir de estos textos, es que la regla de la responsabilidad sana de la relación es yo primero. Y claro, eso cuesta mucho entenderlo, porque lo que el texto dice, no le debo a nadie nada, excepto el deber de amarse unos a otros. Claro, la deuda no es con una persona, la deuda la tengo yo con Ronald, no por causa de que Ronald me dé a mí algo, sino por causa del Señor, por causa del que el Señor me rescató a mí, y me salvó, y mi corazón está siendo procesado por el Espíritu Santo. Yo le debo a Ronald, le debo a Quique, le debo a Don Jorge, le debo a Paula, el poderlas amar, el amarlas, simplemente porque... Es que no me gusta usar esa palabra, pero la voy a usar. ¿Está listo? No le quiero caer mal a nadie. El inteligente es usted, el sabio es usted, el que tiene a Dios es usted, el que tiene la luz es usted, el que sabe cómo hacer las cosas es usted, el que tiene la capacidad de ver a Dios en su vida es usted, por lo tanto es usted quien toma la iniciativa, véalo. Se lo pongo así, hay una obligación absoluta de imponer, oiga, imponer intencionalmente y prioritariamente el amor como base de todas nuestras relaciones. La carta de presentación es activa. La carta de presentación es activa. No entendí eso de la carta de presentación es activa, no entendí. De ahí que... Cuando yo estaba chiquillo, decían que uno de los mitos del amor era, uno ama si lo ama, uno ama si lo ama. No. Usted ama, lo amen o no. ¡Qué bárbaros! ¡Qué bárbaros! Sector A. Sector E. ¿Qué dice el texto? Nos toca, ¿nos toca qué? Número uno, amar primero, por favor dígame a mí, por favor dígame a mí, nos toca amar primero, servir primero y sufrir primero. ¡Qué bárbaros! Es convencidísimo. Es que no entiendo, es que a mí me... No, no, es que no entiendo, no se preocupe, no hay nada que entender. Pablo le está diciendo... Se lo voy a decir, Pablo está ordenando que esto sea de esta manera, es una orden. Nos está diciendo no le deban a nadie nada excepto el deber de amarse unos a otros y nos dice, nos dice, hay una obligación absoluta de imponer intencionalmente y prioritariamente el amor como base de todas nuestras relaciones. Pero no el amor de la cultura. Porque ahí nos sacamos del estadio. No estamos hablando de eso. Yo no estoy hablando del sentimiento que la gente llama amor, de eso yo no estoy hablando porque no lo es. Lo que usted siente está en un quinto plano en función de lo que Dios quiere hacer con su vida. Número dos, segunda ley, segunda cosa, la regla de la equidad personal. Dice la Biblia, dice la Biblia que ame a su prójimo como usted se ama. Perdón hermano, no está viendo que usted no le puede pagar al psicólogo para que le diga lo que la Biblia dice. La Biblia dice que de por sí Dios sabe que todos nos amamos a nosotros mismos. Miren, hasta la gente que se suicida, se suicida pensando que va a estar mejor allá que aquí. ¿En quién está pensando? ¿En quién está pensando? Cuando la Biblia dice, como usted mismo, es porque usted y yo nos amamos. O sea, no nos engañemos, usted no necesita que le... A mí me hace mucha gracia porque a la gente le encanta. Vea lo que dice el texto, amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo recojo diarios, recojo diarios, un diario. Y me traen papel higiénico Zuli. ¿Un día viste usted que usted usa papel higiénico Zuli? A mí no me importa que usted traiga papel higiénico Zuli, no importa. El problema es que usted lo ha usado, no es que sea más barato. ¿Usted lo usaría? No está loco, se me quema. Dios libre no... ¿Y por qué usted? Porque usted sí sabe que usted no usaría algo para que lo compra, para que se lo queme el otro. Pregúntale a doña Roxana, o no me acuerdo a quién fue, que hicimos unos diarios y llegaron como unas bolsas de atún. Eran como no sé cuánto, eran como 18 atunes y decía, 18 atunes, 1200 pesos. ¿Quién sabe qué clase de atún pagato es ahora? La pregunta es, se lo pongo en fácil. Si usted no se pondría o se comería algo, no se lo ponga y ni se lo dé a nadie. No sea cochino. Pero a la gente le encanta esto, vea. A la gente le encanta que le digan esto. Esto es fascinante. Usted no puede amar a nadie si usted no se ama primero a sí mismo. Y entonces le pagan a la gente, le pagan a los psicólogos para que usted le enseñe a amarse a sí mismo. Y yo tengo que aprender a amarme a mí mismo. Y yo tengo que aprender a amarme a mí mismo. Perdóneme, la Biblia dice claramente que ya nos amamos a nosotros mismos. Eso es un mito. Eso que usted tiene en pantalla es un mito. Usted no puede creer eso jamás. Porque la palabra de Dios dice que todo lo que usted hace, lo hace, perdón, por usted. Segundo mito. Primero mis dientes y después mis parientes. Mito. Pero así es. Una de las cosas que he aprendido y me ha golpeado montones estos años trabajando en este oficio, tratando de servir en este lugar, ha sido cuando me doy cuenta de que alguien se muere. Alguien se muere. Y dejó aunque sea un nicho cementerio. ¿Usted me entiende? Algo dejó. Ay Dios mío. Ahí no hay hermano, ni primo, ni nada, ni mi amor, ni te amo, ni papa. Y lo que hay es cuando vendemos esa cochinada. Mito. Primero piensen ustedes. Y claro, a la gente mayor se los digo porque esto lo oye uno en buen día y en cuanta cosa inventan. Esto lo oye uno. ¡Viva su vida! Sonia Murillo, usted ya vivió la vida de sus hijas. Usted ya vio a sus nietos. Usted ya hizo aquí. A usted ahora sí le toca vivir su vida. Aquí están los mitos de los que vive la gente. Y algunos de nosotros llenamos la boca diciendo que yo ya no puedo vivir mi vida por ninguna otra persona porque yo ya me he dado a la gente y la gente sí que es ingrata, por Dios. Yo siempre digo para qué se metió en estas, por Dios. Para qué se metió en estas. Vea. La palabra dice lo que sea que se haga, lo que sea que se haga. Vea. La palabra dice lo que sea que se haga, lo que sea que se haga. O diga, hágalo con la misma convicción, interés y valor como si fuera para usted. Lo que sea que usted haga o diga, hágalo con la misma convicción, interés y valor como si fuera para usted. Si no, o no se involucre o no haga nada. ¿Cuál es el punto de referencia? Use mi ejemplo del papel higiénico. Use el ejemplo que usted quiera. Si usted no se toma un... Si ahora como hay ochocientos tipos de leche, hay gente que no toma leche y que tiene que ser de almendra, de almendra soltera y esas cosas. Y entonces la gente, en serio, en serio. La verdad si no tengo el ejemplo. Pero lo que la Biblia dice es que cualquier cosa que haga para otra persona, hágalo al mismo nivel, como si lo hiciera para usted. Porque Dios dice que de por sí, lo primero que usted va a hacer es amarse a usted mismo. Sigue el texto. La tercera regla que nos enseña, la primera regla, la primera regla que nos enseña es cuando nos dice... Cuando nos dice... Usted tiene que servir primero, usted tiene que amar primero, usted tiene que llevar la batuta de eso. La segunda regla es a su mismo nivel, la tercera regla de esos textos, tercera regla. Su identidad. El amor no lo define un psicólogo. El amor no lo define, el amor no lo inventó la psicología. La psicología tiene doscientos años. El amor es Dios, Dios es amor. Y todo aquel que ama, conoce a Dios. Y el que no ama, no conoce a Dios, porque Dios es amor. La esencia de la realidad de su ser es el amor. Y el amor es la capacidad que usted desarrolla en su vida para poderse enfrentar a la vida, porque la vida es muy dura. El amor es lo único que queda cuando ya no se siente absolutamente nada. Y aquí me dicen amén por las buenas. Se lo vuelvo a repetir, el amor es lo único que queda cuando ya no se siente absolutamente nada. Si es amor. Entonces dice el texto que el amor tiene esta característica, si es amor no le hace daño a nadie. Y que es el cumplimiento. El cumplimiento. De la ley. Entonces, ¿qué nos está explicando? Solo hay dos formas. La de Dios. Y todas las demás. Solo hay dos formas de amar, solo hay dos formas de ser, solo hay dos formas de que esto funcione. Cuando usted entiende lo de Dios y todo lo demás. Y dice la palabra, lo de Dios es benigno. Siempre. Lo que nosotros somos y damos. Es muy cuestionable. Yo les conté, en algún momento les conté, en algún momento les conté que yo hablé con alguien. Y ese alguien tenía mucho dinero y le puso a su señora en la casa, le puso un gimnasio con las últimas máquinas, con las mejores máquinas, los mejores espejos, los mejores, todo con tal de que la mujer no saliera de la casa a meterse un gimnasio. Cuando la gente lo veía a él, decía, qué gran marido y qué hombre más especial. Pero lo que la gente no sabe es que de fondo muchas de las cosas las hacemos, las hacemos porque necesitamos tener control, porque somos dominantes, porque queremos tener controlada a la gente, porque queremos ser tóxicos, porque queremos que la gente haga lo que nosotros decimos, o hacemos. Y dice la palabra que el amor es benigno, que el amor no le hace mal a nadie. Entonces, montón de tonteras del tiempo, de nosotros, yo te celo porque te amo. No seas tan bárbaro, y la mató, la mató. Horror por Dios. Viene Pablo y hace las conclusiones, y entra Pablo en su primera conclusión de una forma espectacular. La primera conclusión de Pablo es, a ver, atención, aprovechemos el tiempo. Hermanos, yo no sé si el mundo se va a acabar el 8 de abril, nadie lo sabe. Deje de estar viendo tonteras en YouTube porque el mundo, solamente Dios sabe cuándo se va a acabar. Pero Pablo empieza haciendo sus conclusiones en el verso 12. La noche está avanzada y se acerca el día. Desechemos pues las obras de las tinieblas y vistámonos las armas de la luz. Verso 13. Ya que nosotros pertenecemos al día, vivamos con decencia a la vista de todos. Vean qué belleza. Vivamos con decencia a la vista de todos. No participen en la oscuridad de las fiestas desenfrenadas y de las borracheras. Ni vivan en promiscuidad sexual e inmoralidad. Ni se metan en peleas, ni tengan envidia. Perdón, vean el nivel donde está la envidia con el resto de las cosas. Hablar de un borracho es muy fácil. Hablar de un adúltero es muy fácil. Hablar de un inmoral es muy fácil. De un pleitero es muy fácil. Pero vean la clasificación que Pablo hace. Pone la envidia al mismo nivel que el resto de cosas que socialmente son bien feas. Pero que tal vez de una u otra forma en algún momento las hemos vivido. Verso 14. Conclusiones de Pablo. Más bien, vistámonos con la presencia del Señor Jesucristo. Y no permitamos pensar en formas de complacer los malos deseos. Y por eso es que Pablo empieza diciendo. No deban a nadie nada, excepto el deber de amarse unos a otros. Excepto el deber de amarse unos a otros. Si aman a su prójimo, cumplen las exigencias de la ley de Dios. Usted escoge la ley por la cual vive. Pero los hijos de Dios esto lo tienen que atesorar. Lo tenemos que atesorar. Capítulo 13, terminamos. Dios mediante, iniciamos el maravilloso capítulo 14 del libro de Romanos de la próxima semana. Entonces, ¿qué nos queda? Entender que nos toca amar. La responsabilidad de amar es nuestra. Que yo me quiero a mí mismo, me quiero mucho. Me quiero mucho. ¿Por qué a usted le cuesta comprometerse y congregarse? ¿Es un problema y le cueste aquí que allá? Porque usted es demasiado egoísta. Se quiere estar bien. No necesita un proceso. Y Dios es proceso. No momento. Hay lugares donde usted vive momentos. Y lo hacen brincar y sudar. Y vivió el momento. Aquí no. Aquí la palabra tiene que ir haciendo lo que tiene que ir haciendo en cada uno de nosotros. Que Dios nos ayude a todos. Empezando por los que más hablamos. A que la ley que escojamos sea la ley que sirve, que es la ley de Dios. Que al final lo que Dios está buscando no es que nos veamos bonitos, sino que verdaderamente seamos benignos a este mundo. Señor, te doy gracias.