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In this chapter, the author discusses the various definitions of learning and the challenges in defining it due to the complex processes involved. The construction and argumentation of theories using the scientific method are also described. The author explores the epistemology of learning and its inclusion in philosophy. Examples of learning include a baby playing with blocks, a child recognizing letters, and an adolescent finding strategies in a game. The difficulty in defining learning lies in the variety of actions that can be considered as such. The most accurate definitions state that learning is a relatively permanent change in behavior or mental representations as a result of experience. However, not all changes resulting from experience are considered learning, such as those induced by drugs or due to organic damage. Learning is important as it is a significant part of people's lives. Teorías del Aprendizaje en el Contexto Educativo Definición de Aprendizaje En este primer capítulo se presentan las definiciones de aprendizaje más aceptadas en la actualidad, de las cuales comenzará la lectora a tener un punto de partida para el posterior análisis del tema. Desde entonces y hasta la fecha han surgido un cincín de definiciones que han pretendido explicar el término en su totalidad. Sin embargo, debido a que el aprendizaje implica hacer innumerables procesos, definir el término ha sido y sigue siendo todo un reto. Por esta razón se han realizado enormes esfuerzos por explicar y describir, entre otras cosas, las condiciones en que ocurre y su permanencia. En este mismo capítulo se describe el proceso de construcción y argumentación de la teoría a través de los pasos del método científico. Finalmente se desarrolla el tema de la epistemología del aprendizaje, dándose a conocer las principales corrientes y la forma en que éstas se incluyen en el quehacer filosofía. ¿En fin qué es el aprendizaje? Para intentar dar respuesta a esta difícil pregunta es necesario observar alrededor y ver algunas acciones cotidianas. Entre ellas tenemos a un bebé jugando, un bebé que acomoda los cubos de su juguete para hacer una torre con varios de ellos. Desde ahí vemos que el niño tiene inteligencia y está aprendiendo. También tenemos a una niña que aprende a reconocer las letras por la forma de cada una, que cada una tiene y asocia un sonido con la grafía o la forma de la letra. También un adolescente que juega a jengibre encuentra nuevas estrategias para el juego. Son varios de los ejemplos del aprendizaje. Y son todos ellos ejemplos de acciones que han implicado que las personas realicen ciertas conductas observables y operaciones mentales no observables. Una de las dificultades que conlleva a la definición del aprendizaje es la gran variedad de acciones que pueden ser catalogadas como tal, lo que plantea la necesidad de una definición muy amplia que le dé cabida a todas estas acciones. Por muchas décadas cada escuela psicológica ha dado su propia definición para el término. No obstante, las definiciones más acertadas dicen que el aprendizaje es 1. Un cambio relativamente permanente en la conducta como resultado de la experiencia. Y 2. Un cambio relativamente permanente en las asociaciones o representaciones mentales como resultado de la experiencia. Las dos definiciones hacen alusión a un cambio, aunque no se especifica cuántos tiempos toma lograr, ni cuánto se mantiene, ni si después de éste hay otros cambios. Por otro lado, las dos definiciones atribuyen la transformación a la experiencia de los dos donos, esto es, el cambio se presenta después de uno o varios acontecimientos en la vida del niño. Por ejemplo, tenemos desde que un bebé nace, está constantemente sometido a experiencias que estimulan su capacidad para aprender el lenguaje, las voces de su alrededor, las canciones, la televisión, la radio. Todos estos estímulos van sensibilizando al bebé en los sonidos de su lengua. Aunado a esto, normalmente los encargados de su cuidado enseñan el lenguaje de manera intencional. Es típico de una madre repetir muchas veces durante el día, di mamá, mamá, o también puede ser di papá, papá, teta, teta. Todas estas diferencias hacen que el evaluante un infante pueda hablar y comunicarse adecuadamente. Sin embargo, no todas las experiencias que producen cambios se consideran aprendizajes. Por ejemplo, una persona que se droga presenta cambios en su colectivo, los cuales no son voluntarios, sino más bien inducidos por el karma. Por lo tanto, este no es un caso de aprendizaje. Otros cambios en este sentido serían los debidos a la maduración, daños orgánicos o a estados del organismo homofágico. En este punto quiero hacer una breve pausa y dar mis propias palabras respecto al tema. Así es, las personas que consumen drogas no se pueden considerar como naturalizantes, puesto que ellos, sus neuronas, partes de sus neuronas mueren, entonces ellos no están actuando bien y tienen una conducta que no es buena de aprender. Importancia del aprendizaje. Se puede decir que una gran parte de la vida de las personas transcurre aprendiendo y aprendiendo.