El NO de Dios

Jesus, in his human form, prayed fervently to be saved from death but was not. This reminds us that God hears our prayers even when the answer is not what we expect. Jesus was heard but still had to suffer and die for our sins. When God says no to our requests, it doesn't mean He hasn't listened. He has a greater plan that we may not understand. We can trust that in Christ, we are heard and loved by our Father. He is compassionate and gives us strength to persevere. Let this verse remind us to continue praying with confidence, knowing God has an eternal purpose. Let Jesus be our example and hope as we navigate this world. Cristo, en los días de su carne, habiendo ofrecido oraciones y súplicas con gran clamor y lágrimas, al que lo podía librar de la muerte, fue huido a causa de su temor reverente. Dice allí en Hebreos capítulo 5 versículo 7. Jesús, el hijo perfecto y obediente de Dios, no fue librado de la muerte que enfrentaba. A pesar de sus ruegos desesperados, a pesar de sus lágrimas y su agonía, Dios nos lo rescató de la cruz. ¿Cómo podemos entender esto? ¿Cómo es posible que el Padre celestial no respondiera a los clamores de su propio Hijo? Este versículo recuerda que Dios escucha nuestras oraciones, incluso cuando su respuesta no es la que esperamos. Jesús fue escuchado, pero eso no significó que fuera liberado. La voluntad del Padre era que Jesús sufriera y muriera por nuestros pecados, para que pudiéramos tener vida eterna con Él. Del mismo modo, cuando nosotros oramos y Dios parece decir no a nuestras peticiones, no debemos pensar que Él no nos ha escuchado. Él tiene un plan más grande, un propósito más alto, que a veces no logramos entender. Pero podemos estar seguros de que en Cristo somos escuchados, somos amados por nuestro Padre. Aunque no siempre recibamos la respuesta que deseamos, Dios siempre está orando para cumplir Su voluntad perfecta en nuestras vidas. Él no es sordo a nuestros gritos y súplicas, a nuestros clamores. Él los escucha con un corazón lleno de compasión. Y mientras seguimos confiando en Él, Él nos dará la gracia y la fuerza que necesitamos para perseverar, incluso en medio de la tormenta. Que este versículo nos recuerde que, así como Jesús fue escuchado por el Padre, también nosotros somos escuchados por Él. Que nos anime a continuar clamando a Dios con confianza, sabiendo que Él tiene un propósito eterno, incluso cuando Su respuesta no es la que nosotros esperamos. Que Él fortalezca nuestra fe y nos capacite para abrazar Su voluntad, aunque no siempre la comprendamos. Que Jesús sea nuestro ejemplo y nuestra esperanza mientras caminamos por este mundo. Dios te bendiga. Subtítulos realizados por la comunidad de Amara.org