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Nothing to say, yet
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This is a very important question with eternal consequences. We cannot afford to be wrong about our salvation because eternity is permanent. Each of us will face judgment before God. Our feelings and personal beliefs are not reliable guides, but the Bible is. Many people's assumptions about salvation contradict what God says in his word. We must compare what is taught with what the Bible says. Our worship is in vain if it is based on man-made doctrines. We will be judged based on what the Lord says in the Bible, not what others say or what we personally believe. Our soul is worth more than the whole world, and we cannot afford to lose it and be eternally punished. Esta es una pregunta muy importante y que tendrá consecuencias eternas y duraderas. Si murieras hoy, Âżsabes con certeza que irĂas al cielo? Esta es una cuestiĂłn en la que no podemos darnos el lujo de equivocarnos, porque la eternidad es muy permanente. Un dĂa cada uno de nosotros habrá la verdadera respuesta a esta pregunta, porque todos compareceremos ante el Tribunal de Cristo, Romanos 14 10. Cada uno de nosotros tenemos dos citas que ya están hechas y que definitivamente cumpliremos, lo queramos o no. Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y despuĂ©s de esto el juicio, Hebreos 9 27. Estas dos citas, la muerte y el juicio, no pueden ser cancelados. La tragedia de lo ocurrido en la ciudad de Nueva York y el Pentágono en Washington, DC el 11 de septiembre de 2001 muestra la incertidumbre y la brevedad de la vida. Dios nos dice en Santiago 4 14, Cuando no sabĂ©is lo que será mañana. ÂżPor quĂ© que es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo y luego se desvanece. No debemos cometer un error respecto a nuestra salvaciĂłn al seguir lo que, nos parece correcto, o que, sentimos en nuestro corazĂłn que somos salvos. La Biblia dice en Proverbios 14 12, Hay camino que al hombre le parece derecho, pero su fin es camino de muerte. Nuestros sentimientos no son una guĂa segura, pero sĂłlo la Biblia lo es. ÂżQuĂ© suposiciones previas hemos hecho ya acerca de nuestra salvaciĂłn? Muchas de estas suposiciones que hace la gente contradicen lo que Dios nos dice en su palabra. Todo lo que tenemos que hacer es mirar a nuestro alrededor a las muchas doctrinas diferentes que se enseñan y luego compararlas con lo que Dios dice en la Biblia, y podremos ver una gran diferencia. Nuestro Señor dice en Marcos 7 7, Pues en vano me honran, enseñando como doctrinas mandamientos de hombres. Nuestra adoraciĂłn es vana si proviene de doctrinas de hombres y no de Dios. ÂżPodemos decir que todas estas doctrinas diferentes provienen de Dios? Yo creo que no. Primera de Corintios 14 33 dice que Dios no es Dios de confusiĂłn, sino de paz. ÂżO serán de hombres? ÂżDe dĂłnde más podrĂan haber venido si no vinieran de Dios? Esta se convierte en una pregunta muy seria. Nuestra adoraciĂłn se vuelve vana e inĂştil si nuestras doctrinas provienen de los hombres cuando se reĂşnen en sus convenciones y conferencias para decidir quĂ© deben creer y hacer. Como dijo el apĂłstol Pedro al concilio judĂo en Hechos 5 29, es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres. No crean nada de lo que les digo, porque no vamos a ser juzgados por lo que digo. No creas nada de lo que te diga otra persona, porque no vamos a ser juzgados por lo que diga otra persona. De hecho, no vamos a ser juzgados por lo que creemos personalmente. En el dĂa del juicio seremos juzgados Ăşnicamente por lo que el Señor dice en la Biblia. Ese será el Ăşnico estándar para el juicio, porque nuestro Señor dice en Juan 12 48, La palabra que he hablado, ella le juzgará en el dĂa postrero. Entonces, si yo o cualquier otra persona no podemos señalar lo que decimos en la misma palabra de Dios, entonces por favor no lo crea, porque hay mucho en juego, su alma. Nuestra alma vale más que el mundo entero y todo lo que hay en Ă©l. JesĂşs dice en Mateo 16 26, Âżporque quĂ© aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo y perdiere su alma? ÂżO quĂ© recompensa dará el hombre por su alma? Nuestra alma es la parte de nosotros que continuará viviendo para siempre por toda la eternidad. No podemos darnos el lujo de perder nuestra alma y ser castigados eternamente.