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In a post-nuclear war world, a bus driver navigates a dangerous desert filled with mutant vampires. The bus is a lifeline for passengers seeking connection with civilization. The driver encounters various characters, including a prostitute, a wanderer, a missionary, and a bounty hunter. They face threats from vampires but manage to reach the city of Alba safely. The journey ends with a bittersweet farewell as the driver continues on to an unknown destination. El desierto, una carretera cruza hacia eso la inmensidad, inmensidad plana y recta como el mastil de una guitarra muy muy grande, solo que de cemento y con una linea recta amarilla en medio. Pocos se atreven a aventurarse por aquí, pues en los años transcurridos desde la guerra nuclear, esto se ha convertido en el territorio de los vampiros mutantes. Esos tíos tan macabros con grandes y dientes afilados. En el territorio de los vampiros mutantes, que esos tíos tan macabros con grandes y afilados dientes. Es un mundo cruel, es un mundo solitario. Es un mundo cruel, cruel. Tú tienes que pensar que mientras dices cruel, la palabra, el sonido tiene que transmitir crueldad. ¿Vale? Cruel. ¿Vale? ¿Vale? Venga. Empieza, o sea, empieza. El desierto, una carretera cruza hasta eso, la inmensidad plana y recta como el mastil de una guitarra muy muy grande, solo que de cemento y con una linea recta amarilla en medio. Pocos se atreven a aventurarse por aquí, pues en los años transcurridos desde la guerra nuclear, esto se ha convertido en el territorio de los vampiros mutantes. Esos tíos tan macabros con grandes y afilados dientes. Es un mundo muy cruel, un mundo solitario, un mundo muy peligroso y en cada rincón acechan todo tipo de espantos. Pero es mi mundo. Para muchos de mis pasajeros, el autobús es su única conexión con la civilización, el último hilo de los destrozados del tejido social. Pero más que todo lo hago porque es muy enrollado. ¿A dónde, amigo? ¿A la ciudad, compañera? Espero que esto le suponga una... ¿Qué? Y con tranquilidad. Empieza de nuevo. ¿A dónde, amigo? ¿A la ciudad, compañera? Espero que esto le suponga una conversación adecuada. Es un buen comienzo, pero no le aviento de dinero, ¿sabes? Muy bien, enséñale lo otro que le podemos ofrecer. ¡Wow! ¿Por qué no le... ¿Puedo empezar? ¡Wow! ¡Wow! ¿Por qué no lo dijo antes a bordo tíos? Los nuevos pasajeros se dirigen a la parte trasera del autobús, uniéndose a los demás pasajeros. La golfa, que fue expulsada de la última ciudad en la que paró el autobús. El veodo, que no recuerda a dónde se dirige. La dama misionera, que va a reunirse con su marido para predicar los paganos de la ciudad. El cazador de recompensas, que dice que tiene negocios en la ciudad. Después de una largo viaje siempre paraba en el mismo lugar de comidas. Bajé del autobús para comprar comidas a mis pasajeros cuando... Hola, ¿es tuyo el autobús que hay afuera? La inventé a un trago y me contó su historia. ¿La qué? La inventé. Invité. La invité. ¿La invité? La invité a un trago y me contó su historia. Vale, enséñame de nuevo. ¿La invité a un trago? La invité a un trago y me contó su historia. ¿Dónde te diriges? A cualquier parte, menos aquí. Llegué hasta donde me alcanzó la pasta. El propietario del último lugar en el que actué quiso pasarse de modo y le rompió las cabezas. Tranquila, no hay problemas. Los colegas músicos viajan gratis. Tal vez pueden repararte la guitarra en la ciudad. Tranquila, no hay problemas. Los colegas músicos viajan gratis. Tal vez puedan repararte la guitarra en la ciudad. Tranquila, no hay problemas. Los colegas músicos viajan gratis. Tal vez pueden... ¿Repararte? Repararte la guitarra en la ciudad. Gracias. Reemprendimos el viaje al crepúsculo. Los vampiros saldrían pronto en busca de sangre fresca. Mientras contemplaba la puesta del sol a través del retrovisor pensé que estaríamos a salvo siempre. Que no... Mientras contemplaba la puesta del sol a través del retrovisor pensé que estaríamos a salvo siempre. Y que no nos detuviéramos. Cuando veo que un zombi entra por la ventana. El primero tenía la mandíbula de cristal. Otro intentó colarse por la puerta lateral. Pero le convencí de que no lo hiciera. Mientras otro atacaba a los pasajeros no pude llegar a tiempo. Pero en ocasiones llevar a una misionera a bordo resulta útil. Le traigo un paquete de sangre fresca. Pero en ocasiones llevar a una misionera a bordo resulta útil. Le eché fuera de una patada. Después consideré que había que volver a ponerme al volante del autobús. Pero el último era un tío duro. Las cosas se estaban poniendo feas. Cuando... Aguanta, busman. El resto de la noche transcurrió tranquilamente. Aunque ese cazador de recompensas roncaba demasiado fuerte. Llegamos a la ciudad de Alba. A causa de los lazos que nos habían unido durante nuestra lucha por la supervivencia. La despedida fue agridulce. Hasta otra, amigos. No le de propina a... No. No le de propina a ese... Rufián. Smither. No, señor. Y... ¿A dónde irás ahora? Bien, digamos que a donde vayas tú. Sea donde sea. A donde vayas tú. A donde vayas tú. A donde vayas tú. A donde vayas tú. A donde vayas tú. A donde vayas tú. A donde vayas tú. A donde vayas tú. A donde vayas tú. A donde vayas tú. A donde vayas tú. Sea donde sea. Por cierto, ¿cómo te llamas? Puedes llamarme Bus Baby. Ya.