Una Verdad Generacional - Pr

In this transcription, the speaker discusses the importance of surrounding oneself with good news and the negative effects of consuming negative news. They emphasize that the truth of God is the only truth that matters and that it is crucial to pass this truth down to future generations. They also mention how the truth can protect and strengthen individuals, while deception can lead to depression and fear. The speaker concludes by emphasizing the power of truth in combating societal decay and the need for the church to uphold and administer this truth. Buongiorno. ¿Estamos transmitiendo ya? ¡Wow! Vamos a recibir con un aplauso a la Iglesia que en otras naciones se conectan. ¡Dale un aplauso al Señor! ¡Amén! Si hay alguien que nos visita por primera vez... Ok, aquí hay un amigo que nos visita. ¡Bienvenido, bienvenidos! En una oportunidad escuché a un nutricionista decir que comer y nutrirse no es lo mismo. Usted puede ir a un restaurante de comida rápida y usted come y el hambre se le va, pero los nutrientes son muy pobres. Ahora, cuando uno come, cuando uno se sienta en la mesa a comer, el peor error que una persona puede hacer es escuchar noticias mientras come. Y hay personas que llegan a la hora de comer y prenden las noticias para comer. Las noticias... Dese cuenta que las noticias buenas son un ejercicio. Coja un papel y cuando se siente a escuchar las noticias, haga un ejercicio para que usted vea que el 98% son malas y tienen un impacto negativo en nosotros. Las noticias negativas trabajan en nuestro subconsciente mostrándonos un porvenir negro, nublado, gris. Y hay gente que les gusta ver noticias antes de dormir. Dígalo, dígalo. Lo último que haga en el día afectará lo primero que haga el siguiente día. Si uno mira las noticias antes de dormir, no espere dormir bien. El cansancio no tumbe, pero la mente está ahí procesando los efectos negativos. Una noticia mala puede provocar un infarto, depresión, temor, ansiedad. Por lo tanto, ¿sabe qué significa la palabra evangelio? Buenas, diga buenas noticias. La palabra noticia es notificación. Es cuando le notifican a tu hombro interior que hay cosas buenas para ti. Que en medio de este mundo sombrío hay cosas buenas de Dios para ti. Aleluya. Aleluya. Ok. Quiero compartir con ustedes una palabra que le he puesto una verdad generacional. ¿Cómo se llama la prédica? Una verdad generacional. Amados, lo que aprendemos en nuestros hogares caminará con nosotros toda nuestra existencia en esta tierra. Y por eso la arepa tiene cientos de años formando parte de la gastronomía de Colombia y de Venezuela. Es generacional. Y el engaño también. Amén. Amén. Yo oro que nuestros corazones estén abiertos. En multimedia, por favor, me ayudan con Hechos de los Apóstoles 17.6. Pero búsquelo usted también, ¿ok? Amados, lo mejor... Levantemos nuestras manos. Digamos, lo mejor que podemos dejarle a nuestros hijos es una medida de verdad codificada en su interior. Si no le dejamos... Ok. Es importante que apunte esto que voy a decir. La verdad de la que estamos hablando es la verdad de Dios. ¿Ok? Diga, no se trata de nosotros, sino de la verdad de Dios que está en nosotros. Porque hay muchas verdades, ¿ok? Hay muchas verdades. Hay personas que su verdad es que el Real Madrid es el mejor equipo del mundo. El Señor tenga misericordia de ellos, ¿no? Pero ¿qué ocurre? Esa es su verdad. Pero el pueblo más pequeñito de España tiene un equipo y ese es su mejor equipo. Entonces, son verdades, verdad relativa. Pero no estamos hablando de la verdad de Dios que opera en nosotros. ¿Ok? Tampoco es la verdad de mí. Tampoco es la verdad de mí. Tampoco es la verdad de mi organización. Es la verdad de Dios. ¿Ok? La verdad de Dios. Ahora, la verdad según Juan 14,6 es alguien y no algo. Juan 14,6 usted lo conoce, ¿no? Jesús Cristo dijo, yo soy el camino, yo soy la verdad. Por lo tanto, la verdad de la que vamos a hablar no es algo. No es la información fidedigna, es alguien que vive en usted. ¿Amén? Dígale al que está a su lado, tú eres verdadero, verdad vive en ti. Ok, no porque cuentas las cosas como son, sino porque la verdad vive en ti. Ahora, nosotros le dejamos una medida de verdad a nuestros hijos. Estamos garantizando que ellos sean efectivos, trascendentes, relevantes, feroces. Diga conmigo, la manera de garantizar que mis hijos sean trascendentes es dejar una medida de verdad en ellos. Escúcheme, si no le dejamos una medida de verdad de Dios a nuestros hijos, ellos van a tener problemas. Ellos van a tener problemas. La verdad fortalece inmunológicamente a las personas. La verdad fortalece inmunológicamente a una, a las personas. El engaño es como una, imagínate un chubasquero, ¿no? Una capucha impermeable, en la lluvia no puede penetrar. Cuando la verdad de Dios opera en nosotros, el engaño lo repelemos, no opera en nosotros. Usted sabe que las personas dan por el engaño que hay, que ha conquistado sus corazones. Que ha conquistado sus corazones. Las personas se deprimen por una medida de engaño. Tú no fuiste deseado, tú no fuiste deseada, tú no tienes futuro. No tienes sentido, tú estás y empieza a resaltar una serie de cosas y cuando eso constantemente está, penetra al interior y esa persona es conquistada por el engaño. La verdad que es Cristo en nosotros, amén, es lo que nos preserva. ¿Cuántos aman esa verdad? Aleluya, dele un aplauso al Señor. Amados, si el mal va a retroceder en nuestros días, es por una medida de verdad revelada en nuestros corazones. Cuando el imperio romano llenaba los coliseos, llenaba los estadios, los juegos, donde la gente pedía sangre, como pirañas, sangre, muerte, muerte, muerte, muerte. Cuando el evangelio comenzó a conquistar los corazones, las fiestas se vinieron abajo. Y el emperador Constantino, para que no cayera el imperio, dijo, ya sé, tuve un sueño y Dios me ha dicho que el cristianismo va a ser la religión oficial del imperio, pero todo lo hizo con engaño. Por eso, el engaño mata, escúcheme, el propósito del engaño no es herir, no es engañar, es matar. El propósito del engaño no es engañar, es matar, matar la fe, matar la pasión por Dios, matar el fervor, matar la reverencia, matar la visión. El mal va, si como generación hacemos retroceder al mal, será por una medida de verdad que opera en nosotros, como hijos. Ah, la verdad que opera en nosotros, sin ninguna duda operará en nuestros hijos. Pablo le dice a Timoteo que se acuerde que la fe que hay en él operó en su abuela Loida primero, después operó en su madre Eunice y ahora en él. Diga conmigo una verdad generacional. Aleluya, apláudale al Señor. Escuche esto. Amados, si nosotros abrazamos la verdad que es en Cristo, tus hijos no van a ser conquistados por ideologías, sutilezas, por engaños, pero si nosotros vacilamos con la verdad, nuestros hijos no van a tener una plataforma sólida que los sostenga. Y la verdad generacional de la que hoy vamos a hablar es la única garantía que puede hacerte dejar este plano terrenal en paz. Jesús dijo, les conviene que yo me vaya. Oiga, imagínate un padre que diga a los hijos, les conviene que yo me vaya. Porque se supone que si el papá está las cosas funcionan, ¿no? Les conviene que yo me vaya. ¿Sabe por qué? Porque él se hacía espíritu y el espíritu los guiaría a toda verdad. Aleluya. Cuando Dios ama a un hombre, cuando Dios ama a una nación, Dios les habla verdad, les revela verdad. O sea, la liberación que Jesús habló es el conocimiento de la verdad. ¿Cuántos dicen amén? Amén. Vamos a leer, por favor, Hechos 17, 6. Hechos 17, 6. ¿Están allí? Dice, pero no hallándolos trajeron a Jason y algunos hermanos ante las autoridades de la ciudad gritando. ¿Qué gritaban? Estos que trastornan el mundo entero también han venido a ver cuál es Jason ha recibido y todos estos contravienen los decretos del rey, Jesús. Diga, hay otro rey. Y es Cristo Jesús. Amén. Apláudanle a él. Amén. Amados. Estos que trastornan al mundo, me paré en esa palabra. Trastornar es desarreglar, confundir, alterar, trastocar. Estos que trastocan, estos que desarreglan, porque la palabra confusión, ¿cuántos se han sentido confundidos en algún momento para tomar una decisión? La palabra confusión, con, significa junto a, fusión, es la fusión de dos pensamientos. Diga conmigo, confundir es fusionar dos ideas. ¿Fusionaste el chocolate con la fresa o el café con la leche? Eso se llama fusionar. Y la confusión es la fusión de dos pensamientos. Ahora, estos que trastornan al mundo, ¿por qué trastornaban al mundo? ¿Por qué desestabilizaban? Porque eran portadores de la verdad. Entonces, trataban de traer testigos falsos para atestiguar contra los discípulos, desestabilizar la forma en que la gente vivía. Porque mientras más engaño haya en una sociedad, mayor desprecio por quienes fomentan esa verdad. Otra vez, una nación, una sociedad, detecta la verdad y a quienes pregonan la verdad, motivados por la medida de engaño que hay en ellos. Por lo tanto, diga conmigo, toda decadencia es la ausencia de la verdad de Dios. Otra vez, toda decadencia es la ausencia de la verdad de Dios. Hay personas que tienen otras verdades porque todas las personas tienen una verdad. Y a nosotros, el sistema de educación, a los jóvenes, les enseña que la verdad es relativa. Bueno, esa es tu verdad, hay que respetarle. Y tú, ¿cuál tienes tu verdad? Y en un salón de 20 alumnos hay 20 verdades. Pero la verdad no es para quien piense. Dos más dos es cuatro. Es la única verdad que hay. No importa quién piensa. Dos más dos es cuatro. Es la única verdad que hay. No importa quién piense que sea tres con nueve, no cuatro con uno. A mí me gusta, es que yo pienso que, ¿verdad? Y como vivimos en una sociedad donde la gente, el sentir, lo avalan, yo me siento así. Hermanos, yo puedo sentir que el sol no va a salir, pero al sol le da igual lo que yo sienta. Porque es natural. Entonces, la verdad que hay en nosotros es la verdad que nos libera. Es decir, mientras menos verdad haya en una persona, más esclavo es de sí mismo. Esclavo de sus razones. Pero diga conmigo, a libertad nos ha llamado el Señor. Amados, la verdad se trabaja. La verdad se diseña. La verdad es la naturaleza que Dios le da a la iglesia para que administre lo que es de Dios. Dios nunca privará a una iglesia de peritos, de ministros que le hablen verdad. ¿Sabe qué ocurre? Que en nosotros, por la naturaleza de pecado que mora en nuestros cuerpos, la verdad nos ofende. La ofensa es como la naturaleza de pecado reacciona contra la verdad. Cuando a una persona tú le hablas verdad, escúcheme, estamos hablando de la verdad de Dios. ¿Ok? Porque no estamos hablando de la verdad mía. Cuando tú expones el Evangelio sustentado en Cristo, siempre va a haber resistencia. Y va a haber resistencia es porque el rechazo, diga el rechazo, es el reconocimiento del mundo a todo lo que nace de Dios. Apunte eso, que eso es la verdad. Apunte a todo lo que nace de Dios. Apunte eso, que eso es buenísimo por ahí. Porque a usted lo van a rechazar. Jesús dijo, si a mí me rechazaron, a ustedes no les van a aplaudir. O sea, si al Señor los rechazaron, deberíamos preocuparnos cuando el sistema nos aplaude. Porque no estamos inquietándolo. Él se siente cómodo, nos celebra. Pero, ¿por qué le bajaron la cabeza a Juan el Bautista? Porque le dijo a Herodes, le dijo, escúchame, esa mujer no te es lícito tenerla. Decía, mi abuela siempre decía, por haber visto. Hay predicadores que han dicho, dijeron una frase, es mejor herir con una verdad que matar con la mentira. Amados, créame, tu espíritu no se incomoda con la verdad. Porque tu espíritu es perfecto, porque tú eres un hijo. Pero el alma de nosotros se inquieta y mucho, se pone nerviosa. Se siente ofendida. Cuando uno se sienta, imagínate que una persona vaya a un médico y se haga un TAC y le sale un tumor en la cabeza. Y al doctor le da cosita, dañarle el día. Dice, no, bebe paracetamol y mucha agua. Y mientras se esconde la verdad porque es dura, porque le vas a arruinar la mañana a la señora, el tumor avanza. Mientras que si se identifica lo que hay que hacer, probablemente tenga más posibilidades. Amados, la verdad nos incomodará siempre. Pero es una incomodidad. Usted sabe que las águilas, cuando tienen sus aguiluchos, preparan el nido, primero con púas, es como palos incómodos. Y después va poniendo monte, paja, grama, y lo hace acolchadito para que nazca ahí. En la medida que va creciendo, le va quitando hasta que cuando se va, se quiere sentar, es púa por todos lados. Y es que porque se tiene que lanzar ya la vida. Entonces lo lleva, cuando lleva tres noches sin dormir, ya está entendiendo el mensaje, ¿no? Se tiene que lanzar, y si ve que se va a reventar contra las piedras, se le mete por debajo y lo eleva otra vez, y lo vuelve a soltar. La verdad que hoy te pueda incomodar a ti, va a ser natural para tus hijos. ¿Cuántos aman a sus hijos, a sus generaciones? Diga conmigo, ¿es mejor que me incomode a mí? ¿Para que sea natural en él? La verdad como herencia es lo mayor que podemos dejarle a nuestros hijos. Estos que trastornan al mundo, estos que desestabilizan. Escuche, cuando Pablo llegó en Éfeso, Éfeso era una ciudad donde habían exorcistas ambulantes. Te lo saco a veinte. Y por aquí, dos por dieciocho. Y las liberaciones eran así. Yo me reí porque cuando yo llegué a España, uno pasaba por los locutores y decía, liberación cinco euros. Era que liberaban el móvil, ¿no? Pero era gracioso porque decía, liberación siete euros. Pablo llegó en Éfeso y cuando comenzó a disertar el Evangelio, dice que los hechiceros y los brujos traían los libros y hacían fogatas, hermano. Y dice que cuando se calculaba el precio de los libros que habían quemado, cincuenta mil piezas de plata. ¡Guau! Imagínese cincuenta mil euros en libros. Ahí hay libros, ¿eh? Porque lo primero que una persona hace cuando la verdad entra a operar en su vida es identificar todos los reajustes. Diga conmigo, en mi vida hay reajustes que debo hacer. Eso se llama reajustes por crecimiento. Como usted se reajusta la ropa, cuando va creciendo, ¿verdad? Un niño, ah, ya no le quedan esos zapaticos. Tíralos. Ya esos chores no le quedan. Eran largos y ahora son pequeños. Tíralos. Y va dejando cosas, porque el crecimiento va cerrando etapas. En tu vida, crecer te llevará a cerrar ciclos. ¿Alguien dice amén? Si nosotros sabemos que estamos operando en la verdad porque vamos cerrando y vamos dejando cosas atrás, vamos a hacer esa proclamación. Levante su mano. Diga, mis hijos, mis nietos, mis bisnietos, serán poderosos en esta tierra. Si nosotros sabemos que estamos operando en la verdad porque vamos cerrando y vamos dejando cosas atrás, amados nuestros hijos serán, vamos a hacer esa proclamación, levante su mano. Diga, serán influyentes, serán trascendentes y serán inmunológicamente fuertes contra el engaño. ¡Aleluya! ¡Apláudale al Señor! Porque, diga, porque para ellos, dígalo, porque para ellos la verdad será natural. Dígalo. Cuando una persona nace en una dictadura, cuando una persona nace en una dictadura no ve mal al dictador porque es lo único que conoce. Los que nacieron en otro tiempo lo ven mal porque comparan. Comparan esto con esto. Pero el que nace bajo la dictadura, ¿con qué lo va a comparar? El que nace bajo la verdad no le incomoda la verdad. El que nace bajo la realidad de la verdad, la verdad como una naturaleza, no le incomoda. A nosotros nos ofende, nos incomoda, nos irrita. Pero cuando nosotros sufrimos el costo de abrazar la verdad. ¿Por qué, pastor, sufrimos el costo? Porque es así, tenemos que reconocerlo. Pero cuando nosotros asumimos el costo de la verdad, la verdad, nuestros hijos naturalmente caminan. Y lo que a ti te costó crisis, años, lloros, ofensa, me voy de aquí, tu hijo lo va a ver natural. La verdad que es en Cristo nos hace inofendibles. Porque la verdad es el espíritu. Dice conmigo, la verdad es del espíritu, nunca lo podrá ofender el alma. La mente, la mente del hombre, a Pedro le decía, Satanás. Póngase a pensar que a usted, su pastor, no se recupera de eso. Si Pedro era Jesús, el primero de ellos que se le apareció fue a Pedro. Lo abrazó porque sabía que no lo iba a mandar para el psicólogo. Porque estaba atormentada y el Señor le responda, no está bien darle el pan de los hijos a los perros. No está bien darle el pan de los hijos a los perros. La mujer le responde, sí señor, pero aún los perros comen de las migajas. Y la mesa de su señor y Jesús dijo, guau, guau, guau. ¿Por qué Jesús le habló así? ¿Él ya conoce previamente nuestros corazones? Si Él le habla así, es porque le va a dar de comer a los que están oyendo. Aleluya. Si Él le habla así, es porque va a animar a los hermanos que dicen, sacándolos de su realidad. Dijo, espérate, ven para acá. Personas que rechazan su cuerpo por algo, por lo que sea. No me gustan mis pies, no me gustan mis uñas, mi cabello. Un día Dios te lleva a una mujer que tiene un paño por quimioterapia. Es que mis pies son así, mis uñas se levantan. Un día Dios te va a llevar. ¿Sabes cómo Dios te leva? Entonces usted dice, hermosos son los pies de los que anuncian la paz. Empiezas a amar tus pies, porque la vanidad de la hermosura, porque la hermosura dura muy poco tiempo, muy poquito tiempo, 15 años o 20. En el mejor de los casos 30, pero vas a vivir 90. ¿Es mejor o no? Es cuando Dios nos muestra, nos libera, hermano. Antes, para que evitemos las rotondas de la vida. Una rotonda es que tiene cuatro salidas y a ver cuál es. Le ha pasado a usted que el GPS se tarda en decirle cuál es, ¿no? Y lo normal es que uno dé otra vuelta. Y a Israel se le pasaron 40 años en una rotonda, hermano. En el desierto, 40 años, dando vueltas. Dando vueltas. Amados, la verdad siempre será identificada en entornos esclavizantes como un peligro. Porque cuando Pablo estaba en Éfeso, empezó a predicar y la gente, Demetrio, que era uno de los que vendía templecillos de la diosa Diana, comenzó a decir, hombre, por donde va quiebra los negocios. Los trabajadores ambulantes ya no se liberan más. ¿Por qué? Porque la educación nutricional quita pacientes de la seguridad social. No se le enseña a un niño. ¿Por qué se le machaca a un estudiante con la tabla periódica, con un montón de cosas? ¿Por qué no se le entrega educación financiera a los muchachos? Porque son los que van a atender los negocios de los ricos. ¿Por qué no se les enseña educación financiera a los muchachos y se les pone la tabla periódica? Que uno se traumatiza estudiando. ¿Por qué? ¿Para qué sirve? Es saturar una mente, fatigarla, hacer que renuncie. Te enseñan lo práctico de la vida, tú te sales del circo. Y no conviene. Por eso la verdad siempre será una amenaza en los esclavizantes. Uno empieza a pensar, deja de ser paciente, cliente o rehén. Lamentablemente, tengo que decir esto con dolor, pero lamentablemente hay congregaciones donde hay hijos reprimidos, en lugar de que se les quita la cobertura. La verdad... ¿Alguien dice amén? Diga conmigo la verdad. No es opinable. Otra vez, dígalo. La verdad de Dios no es opinable. Yo opino que... No, no es opinable. Cuando Él dijo sea la luz, ¿qué pasó? Porque hay un orden y hay un diseño. Amados, que un asunto sea aprobado por la mayoría, llegando a un consuelo, no avala que sea verdadero. Dígalo. Diga conmigo, la verdad es verdad, aunque no tenga apoyo público. Diga, la verdad es verdad, aunque... Aunque todos digan, crucifíquenlo, Él es el verdadero. Aunque toda la multitud griten, y con el falso que hacemos, libérenlo. Y con el grupo, aplaudo una cosa, no significa que sea verdad. Nosotros no tomamos decisiones... No, la Biblia dice que el hombre espiritual, y Él no es juzgado por nadie. Juzgar es discernir. Cuando un juez va a un juicio y le traen al acusado, está el fiscal, que es la parte que acusa, está el abogado, que es el que defiende, está el acusado... El fiscal dice, sí, esta persona... Lo acusa. El abogado lo defiende. Y tiene una coartada, ¿no? Dice, estaba en tal sitio... Y el otro dice, estaba en tal sitio... Y el juez oyendo... Espere, siga. Hable, hable. Ok, cállese. Hable. Sí, sí. Y el juez, cuando oye el acusado, por la ley, para juzgar, ¿quién está diciendo la verdad? Y él, si es inocencial, escucha, lee, tiene una habilidad, lee lenguaje corporal, si le tiembla el ojo, si se le cierra, si parpadea, el lenguaje, porque el lenguaje corporal es la expresión Cuando las lenguas se callan, habla el cuerpo, la posición, cómo habla. Y el juez es una eminencia. Usted se ve que los jueces, la mayoría, para estar ahí, son gente mayores. Han escuchado cantaletas, se las saben todas. Nadie le viene a decir a un juez, lo que pasa es que yo... Y se le viene a jugar. Asesinos, violadores, estafadores... Cuando Dios dice que usted tiene que juzgar, se está viendo como alguien equipado con la verdad. Y usted tiene la capacidad de discernir. Levante su mano y diga, porque me ha dado la capacidad de juzgar, porque el Espíritu de Dios está en mí, y puedo discernir lo que es de Dios y lo que no es de Dios. Cuando alguien sabe juzgar, va a tener un puesto de preeminencia, y no va a ser rehén de nadie, porque sabe juzgar. ¿Pastor, cómo es eso? Defienden un engaño de ellos, sabiendo que es mentira. Eso es autoestafarse. Eso es estafar a una generación. Eso es privar a sus hijos. Porque cuando una persona se defiende un error suyo, está marcando el camino de lo que van a ser sus hijos. Porque uno siempre se reproduce, uno sabe. ¿El gato qué produce? Claro. Un hombre sabio engendra... ¿Qué nace? Un niño. ¿Qué nace? Un niño o una niña. ¿Y el ignorante? ¿Un niño o una niña? Porque uno se reproduce en lo que uno es, no en lo que uno sabe. Un sabio no engendra a un sabio niño, ignorante de todo. ¿Qué? Amados, cuando Jesús le dijo a Pilato que él vino a dar testimonio de la verdad, Pilato se impactó. Y dijo, ¿qué es la verdad? Ah, que no ha escuchado esa palabra. Eso no existe en tu dieta, ¿no? Y él no venía, yo digo las cosas como son. ¿Se ha escuchado eso de hermanos? No, a mí me gusta hablar las cosas como son. O sea, que yo las hablo como no son. Pero esa no es la verdad que trasciende. Ah, cuando David estaba huyendo de Saúl, Saúl tenía ataques de pánico y de celo, porque los celos son indecifrables. Hay gente que dice, yo te celo porque... No, no, no. El amor no hace nada indebido. David, un día estaba cenando, hizo una lanza en medio de la hora de cenar. En medio de la hora de cenar. Y... David le dijo amén y abrió. Se esquivó y la lanza quedó en la pared. La lanza quedó, y se fue. Y Saúl lo perseguía, lo perseguía, y por allá estaba en una cueva. Y el escudero de David le dijo, porque políticamente Saúl era el rey, pero espiritualmente Dios lo había desechado y había ungido a David. ¿Quién era entonces el rey verdadero? Entonces el escudero de David le dijo, señor, están ahí dormidos, eso ahí parece un concierto, los ronquidos, déjame que yo llego y lo traspaso con una lanza, ni se enteran de qué le pasó. Y él dijo, no. ¿Cómo voy a ser yo contra el ungido del Señor? O sea, a él ungió Dios, aunque él no es leal y coherente a la unción, pero se derramó aceite sobre él. Nunca yo haría eso. Él no es un peligro para mí, porque yo gozo del favor del Dios. ¿Qué? Si fuera un peligro, si yo no gozara del favor de Dios, tendría que resolverlo yo con mis medios. Pero eso es asunto del Señor. Y vino David y le cortó la boca. Real. Y cuando Saúl se despertó, porque estaba en manga corta ya, David lo miró y le dijo, Señor, ¿por qué me persigues? Mira cómo te tuve de cerca. Y le enseñó el borde y él se vio. Se vio en chores. Dijo, mira, yo no te quiero hacer nada. Deja de... Hermano, la integridad, la integridad de un hombre es lo que, aun pudiendo hacer algo, no lo haces por amor a Dios. David no necesitaba resolver un asunto con Saúl. Necesitaba asumir el costo de sus acciones. David era un hombre que Dios dio testimonio de él. Hermano, del pastor Albert, ustedes pueden dar testimonio. No, si yo lo conozco desde hace años. Pero realmente, realmente eso es importante. Pero realmente, si Dios no da testimonio de mí, no importa que ustedes me den diplomas, me honren. Si Dios no da a mí los aplausos suyos o la honra suya, no importa. Y Dios dijo de David, David es un hombre conforme a mi corazón. Levante su mano. Cierra sus ojos y deja la mano levantada. Y diga, Padre, quiero vivir de tal manera que tú puedas dar testimonio de mí. No quiero vivir por los aplausos de los hombres. No quiero vivir por el testimonio de los hombres. Quiero que tú denle un aplauso a Dios. Amados, cuando Jesús le dijo a Pilatos, yo soy la verdad. Guau, aquel hombre se vio con la etiaron porque él era la cabeza del imperio, del engaño que operaba. Está equipado con una medida de verdad para que engendres personas con esa misma verdad. Acuérdate, acuérdate, podemos enseñar lo que somos. Diga, podemos enseñar lo que somos, pero nos reproducimos en lo que somos. Podemos enseñar lo que sabemos, perdón, pero nos reproducimos en lo que somos. Por lo tanto, amados, la verdad de Dios no es opinable. Cuando David lo persiguió, llegó a un lugar y tenía mucha hambre y el sacerdote le salió al encuentro. El sacerdote sabía que espiritualmente David era el rey. Pero ¿sabes qué pasa? Que normalmente pero el que es verdadero identifica la verdad. Cuando David le dijo, ¿tienes alguna espada por ahí? Y le dijo, tengo la espada con que tú le cortaste la cabeza a Goliat. ¡Ah! Ninguna más idónea que esa. ¡Dámela! ¿Tienes comida? Tengo los panes de la proposición. Hermano, solo era lícito comerlo a los sacerdotes. David dijo, yo sé la causa en la que yo vivo y conozco el corazón del padre. Dame el pan. ¡Wow! ¡Wow! ¡Wow! ¡Wow! David está tan seguro de conocer a Dios que dice, ¡dame el pan! Aquel hombre se estremeció, dice. Saúl me quita la cabeza si se da cuenta de esto. Pero el que opera en la verdad no teme. No teme. No teme. David comió él pero dice la Biblia que le dio a los hombres que con él estaban porque su corazón se representaba a todos los hombres que con él estaban. Ellos representaban la... Amados, esto es glorioso. Esto es poderoso. ¡Jaleluya! La palabra de verdad nos trae soberanía. Por favor, ponte sobre tus pies. ¿Cómo podemos ver generacionalmente el avance del reino de Dios? Diga, reproduciendo la verdad que está en Cristo. Quiero leer para terminar. Por favor, vaya a Tercera de Juan. Tercera de Juan es una hojita que está que está que es otra hojita pero vaya a Tercera de Juan, por favor. ¡Jaleluya! Amados, no estamos solo llamados a hablar verdad sino a ser verdaderos. Sin ser verdaderos pero cuando uno es verdadero van a hacerlo de forma natural. Tú puedes pelear. Tú puedes pelear. ¿Se acuerdan de aquel hombre? Mire, hermano, hay enseñanzas en la Escritura tremendas. Dice que David después que él reinó le vinieron a dar una noticia de la muerte de Saúl y llegó un muchacho y David de caballo y se le atravesó y, oh, señor ¿quién eres? ¿De dónde vienes? Le dijo, no, yo soy tu siervo. ¿Y tú sabes que ha muerto? Porque y me llamó ¿Quién eres tú? Antes que me maten los enemigos a la casa. Bueno, yo le obedecí. Me bajó la cabeza. Eso era mentira. ¿Por qué era mentira? Porque Saúl él mismo se tiró sobre su espada. Pero aquel hombre como sabía que Saúl buscaba matar a David dijo, cuando yo le diga que yo ya lo maté ministro de defensa seguro me van a poner vamos y la mentira sin necesidad acabó con su vida. Dice el anciano Juan al hermano gallo el amado Amado yo deseo que tú seas cosas de buena salud tu alma pues mucho me regocijé cuando vinieron los hermanos que dice y dieron testimonio de tu verdad de cómo andas en la verdad no tengo yo mayor gozo el oír que mis hijos andan en la verdad Aleluya Aleluya levantamos nuestras manos al señor quiero orar por ti en esta mañana quiero orar por ti porque no solo a ti te irá bien a tus hijos le irá bien a tus nietos le irá bien a todas tus generaciones le irá bien porque la verdad en la que tú caminas será una plataforma para ellos míreme un momento míreme un momento ustedes saben que Jacob Jacob era un hombre que les robó a su hermano lo engañó a su papá lo engañó a su suegro lo engañó Jacob era una persona una persona no muy correcto pero cuando Labán su suegro cuenta mira este no solamente me quitó el ganado cogió una expedición de 40 hombres y salieron al galope a buscarlo donde lo encontró y el iba Jacob iba con su ganado con sus mujeres con su todo poquito a poco Labán tuvo una visión en la noche Dios se le apareció en sueño el hijo fue Jacob yo sé que él no es muy correcto pero yo soy el Dios de su padre Abraham y su padre Abraham caminó en rectitud y en justicia delante de mí él no es muy correcto pero yo soy el Dios de su padre Aleluya y todos sabemos y todos sabemos que Abraham era el abuelo de Jacob porque Abraham tuvo un hijo era Isaac Isaac tuvo a Jacob y Jacob a los 12 patriarcas por lo tanto Dios invocó apeló perdón a la rectitud del abuelo para decirle al enemigo de su nieto cuidado levante su mano y diga en el transitar de mis nietos de mis bisnietos de mis hijos de mis hijos de mis hijos Dios se acordará que he caminado en su verdad y los preservará y los defenderá Aleluya y será excluido alrededor de ellos Aleluya diga conmigo una verdad generacional que lo diga una verdad generacional no es una verdad momentánea no es una verdad puntual es una verdad que la heredarán mis hijos mis nietos mis bisnietos y caminarán naturalmente en esa verdad adiós la gloria dele un aplauso dele un aplauso a él él es bueno él es bueno en gran manera él es bueno en gran manera diga no solo yo mis hijos mis nietos mis bisnietos caminarán naturalmente en la verdad en el nombre de Jesús diga Padre gracias porque me has hablado y porque me has hecho ser consciente del peso que hay en mí de la labor que me has encomendado la medida de verdad que opera en mí diga Cristo es mi única verdad diga Él es mi única verdad no tengo verdad fuera de Él fuera de Él si lo tengo a Él lo tengo todo y no quiero nada fuera de Él Él es mi plenitud Él es mi vida fuera de Él Él es el todo de mí Él es mi vida Él es mi plenitud a Él la gloria a Él la alabanza a Él el honor dele un aplauso