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The main idea of this information is about the book of Romans and the culture of eternity that it promotes. The book discusses the contrast between the earthly culture and the eternal culture, emphasizing that our identity is a matter of legality, spirituality, and eternity. It also talks about how living according to the culture of eternity can make us feel out of place in the earthly culture. The information concludes by discussing the diagnosis of the human condition without Christ and the need for a Savior. Overall, it emphasizes the importance of living the gospel from our identity and position, rather than our circumstances or condition. el libro de romanos, ¿OK? Voy a decir algunas cosas por causa de las personas que se van sumando y por los niños también que están, ¿No? Entre nosotros. Roma, Roma fue no solamente, no solamente cuando hablamos de Roma, hablamos de una ciudad italiana, ¿OK? De la capital de Roma. Roma se le llamaba a todo el imperio, todo el lugar donde el imperio reinaba, eso era Roma, ¿OK? Era un lugar geográfico, ¿Verdad? No ahora, no como ahora que se resume a una a un lugar muy reducido que es una ciudad, ¿OK? La capital, en este caso. Roma también se le llamaba a toda la cultura, ¿OK? A la justicia, a los códigos de gobierno, Roma se le llamaba la al poder eclesiástico, o sea, Roma era la fusión de varios factores. Pablo con este libro, con esta carta, él trata de establecer la cultura, diga conmigo la cultura de lo eterno, en medio de gente que tenían una cultura terrenal. El evangelio, el evangelio trata de remover nuestra cultura terrenal para establecer la cultura de lo eterno, ¿OK? El libro de Romano tiene tres aspectos importantes, que es, bueno, el libro de Romano, el evangelio que Pablo expresa aquí, ¿Verdad? Tiene tres contrastes importantes que tienes que tenerlo en mente, diga conmigo lo eterno, el evangelio es eterno, el evangelio es espiritual, y es legal, es una cuestión de legalidad, ¿OK? Cuando una persona tiene la ciudadanía española por origen, por nacimiento, los delitos que esa persona pueda cometer, nunca van a poder arrebatarle su ciudadanía, porque es una cuestión de legalidad, ¿OK? Las personas que critican la gracia, la enseñanza de la gracia, dicen sí, porque ustedes le enseñan a la gente a que vivan como quieren, que pueden pecar, pueden hacer, no, Pablo, más adelante lo vas a ver, lo vamos a ver, ¿pecaremos? No, de ninguna manera, ¿OK? No, esto no se trata de eso, pero sí se trata de que entiendas que tu identidad es una cuestión legal, ¿OK? No hay ley que te pueda arrebatar, no hay absolutamente nada que te pueda mover, pero también es una posición espiritual, ¿OK? Y también es una cuestión eterna. Entonces diga conmigo, legal, espiritual y eterno, son tres culturas que usted debe amar o debe abrazar, porque desde la cultura terrenal no se puede honrar el evangelio. Yo le voy a hacer algunos ejemplos, ¿OK? Nosotros aquí, en la congregación, celebrábamos o hemos celebrado algo que se llama la fiesta de las naciones, ¿OK? ¿Cómo te llamas, hermano? ¿Cuál es tu nombre? Christopher, ¿OK? Imagínate que Christopher, que es originario de Colombia, con Iliana y los hermanos de Colombia, dice, bueno, ahora van a escuchar una presentación de Colombia. ¡Guau! Ellos se animan y sale un hermano a ser vestido de charro, ¿OK? Vestido como un mariachi. Y, hermano, Dios le bendiga aquí. Yo soy el aventurero. El mundo me importa poco. Tú vas a decir, no, no, espérate, eso no tiene nada que ver con mi cultura. Y entonces después en la mesa gastronómica hay enchiladas, hay, bueno, los tamales son de ellos. No, no, hay enchiladas, hay tacos, hay pizzas. Bueno, las arepas, hay un mensaje subliminal. ¿Ya quieres rivalizar? No, ese tema no. ¿No? Entonces, ¿qué ocurre? Que los hermanos van a decir, no, espera, espera. Esto, esto no me representa. Hermano, a veces Dios ve a su iglesia y la ve como el hermano ve la presentación de Colombia. Esto no me representa, esto no contiene eternidad. Mi reino no es de este mundo. Mi reino no es de este mundo. Otra cosa es que no tiene legalidad, no te paras en una posición. Yo he hecho muchas veces ejemplos, pero el primero que se me viene a la mente es cuando uno llega en el aeropuerto de Barajas hay dos desvíos, los nacionales y los extranjeros. Usted viene por los extranjeros y le pregunta, ¿cuánto tiempo va a estar en España? Tiene una carta de invitación, tiene dinero, ¿dónde se va a quedar? Y el funcionario decide si usted entra o no, bajo los criterios que él hable. A los nacionales, usted tiene que ir muy tranquilito, porque una mala respuesta o una mala actitud te tiran para atrás. Y uno viene así como que, no. El nacional, no, porque ese funcionario no tiene autoridad sobre su ciudadanía, porque es que es legal, su ciudadanía es una cuestión de legalidad. Él viene confiado, pisa fuerte. Y si tiene un mal día, dice, o sea, no me hagas esperar, es que tengo los niños aquí. Y el funcionario dice, sí, sí, perdone, disculpe, claro, va. No quiero que se quede con la imagen de la arrogancia, sino de la seguridad. Cuando yo sé que mi posición es una posición legal, que yo, diga conmigo que yo no pertenezco a este reino por lástima, diga fue por el puro afecto de su amor, por el puro afecto de su voluntad, por amor nos trasladó al reino, entonces tus pasos son firmes, seguros. Pablo eso lo trata, dice, el yelmo de la salvación. El yelmo es un caso que los soldados romanos tenían, y él dice, la salvación es como un yelmo. Si usted le tira dardos, le da con una espada al soldado, el yelmo le protege la parte más vital que es la cabeza. Pero ahí está hablando de los pensamientos, de la mentalidad, de la seguridad. Entonces, él dice que la salvación es lo que protege tu forma de pensar. ¿Amén? Entonces, cuando tú piensas en él, tú estás armado, por eso se llama la armadura de Dios, que la armadura de Dios no es algo exterior, es algo interior. Entonces, el apóstol intenta, o el trabajo del evangelio es llevarnos a la cultura de lo eterno. Pero, ¿qué desafío, Crístofer? Vivimos en una cultura de temporalidad, terrenal, y entonces cuando nos exponemos al reino somos un poco, nos sentimos un poco como raros. En el hábitat que es natural, porque nuestra ciudadanía es celestial, ¿ok? Él dice que si llevamos la imagen del terrenal, 1 Corintios 11 dice, también llevaremos la imagen del celestial. ¿Amén? Ok, ya vamos a leer. Avanzamos, creo que fue hasta Romanos 2, 5, nos quedamos la semana antepasadas en el 2, 5. De ahí para adelante vamos a continuar. ¿Qué es lo que quiero afirmar en ti? ¿Qué es lo que quiero estimularte? Que escuches desde una identidad que tiene legalidad. Hermano, vive el evangelio desde tu identidad, no desde tus circunstancias personales. Vive el evangelio desde tu posición, no desde tu condición. Vive el evangelio, no estés pensando, yo les voy a decir como yo pensaba cuando tenía 16, 17 años. Dios mío, como a mí me pillen, como Cristo venga en el momento que yo estoy con una novia, para el infierno. Como Cristo venga en el momento que yo me he discutido con mi mamá, para el infierno. Y uno, claro, uno no se arrepiente por amor al Señor, sino por miedo al infierno. Y lo que no es nacido del amor, hermano, eso es efímero, es fugaz. Me acuerdo que mi mamá dice, yo recibí al Señor por miedo al infierno, no por amor al Rey. De hoy, la cultura de lo celestial, la cultura de lo eterno, tiene que absorber nuestras vidas. Tiene que anular toda cultura y todo rasgo y toda secuela terrenal en nuestras mentes. ¿Alguien dice amén? Levante su mano y diga, Padre, enséñame a honrar la cultura de lo eterno, la cultura que proviene del cielo, la celestial, en el nombre de Cristo Jesús. Amén. OK, vamos a leer desde esa posición gloriosa que Dios nos ha dado. OK. Pero por tu dureza y por tu corazón no has arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios. Lo que vamos a continuar leyendo es Pablo haciendo un análisis, un veredicto, un diagnóstico del corazón de las personas sin Cristo. OK. Luego pasará con los judíos. Pero en la medicina, la enfermedad, diga conmigo, la enfermedad, determina el medicamento. O sea, es necesario que se haga un diagnóstico correcto porque si a una persona le duele la cabeza y le dicen paracetamol y mucha agua y es un tumor, entonces ya usted me dirá cuál será el desenlace o el estado final. Entonces Pablo lo que está haciendo es un diagnóstico. La vez que usted escuche la palabra y usted escuche, por ejemplo, cuando tú miras, cuando juzgas a otro, te juzgas, te condenas a ti mismo, cuando dice sin santidad nadie verá al Señor, cuando dice Dios es fuego consumidor, cuando dice sed santo, estamos diagnosticando o identificando. La palabra no está condenando a los hijos. Diga conmigo porque nuestra posición es legal. O sea, él no puede levantar una cosa por aquí y destruirla por aquí. Por eso cuando es imperativo que usted escuche el evangelio desde la legalidad. ¿Alguien dice amén? Creo que es uno de los grandes avances de nosotros y de la seguridad de los hijos cuando escuchas el evangelio desde la legalidad. Ok, vamos allá. Dice, el cual pagará a cada uno conforme sus obras vida eterna a los que perseverando en bienhacer buscan gloria, honra e inmortalidad, pero ira y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia. Tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo. ¿Dónde están los seres humanos que hacen lo malo? Estamos antideagnósticos, estamos identificando. Es necesario que nosotros sepamos que somos seres humanos que hacemos cosas malas porque eso es lo que va a decir necesito un salvador. Eso es lo que va a determinar necesito una medicina y se llama gracia. ¿En cápsula o en spray? Ok, pero es gracia. Ok. Entonces, los síntomas es tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo. Al judío primeramente y también al griego. Ok, pero gloria y honra y paz a todo el que hace lo bueno. Al judío primeramente y también al griego. Porque no hay acepción de personas para con Dios. O sea, Dios no sabe diferenciar judíos, griegos, libres, esclavos, no. Para él es, algo es bueno, diga conmigo, para Dios, algo es bueno cuando colabora con su propósito. El domingo voy a estar compartiendo una enseñanza, desde ya te lo digo, que es ser representativa. O sea, el propósito para el que Dios te salvó es equiparte con una vida. Él, si quedan dudas, estamos en un aula de clase, ¿ok? Si quedan dudas, alguien levanta su mano y me pregunta. Jesús equipó a un judío de 30 años. Bueno, se manifestó, ¿ok? Pero Jesús ocupó, equipó a un judío con la vida de Cristo. Y ese judío se llamaba Jesús, en quien habitó Cristo. Por eso, él le pregunta a los discípulos, ¿ustedes quién dicen que soy? Y él dijo, si yo me paro aquí, si Moisés se para aquí y dice, ¿quién soy yo? Moisés, el esposo de Carmen, el papá de Helen, ¿ok? No, de los padres, de los padres nuevos. Pero si él te dice en su identidad espiritual, ¿quién decís vosotros que soy? Tú eres el Cristo que vive en Jesús. Es una realidad eterna. Y entonces Jesús lo mira y le dice, bienaventurado eres, porque no te lo reveló carne ni sangre. Diga, las cosas espirituales se acceden por revelación. ¿Amén? Gloria a Dios. Ahora, amados, Dios equipó con esa vida a Jesús para que él los representara en la tierra. Jesús dijo, ustedes mayores cosas que yo harán. En mi nombre ustedes harán mayores cosas. ¿Por qué? Porque Cristo habitó en uno. Pero hoy está en Cristo, en Darwin, en Emma, en Liz, en Liz, en cada uno. Por eso, mayores cosas harán en mi nombre, ¿ok? De eso vamos a estar hablando el domingo, de la fe representativa. O sea, de cuando somos equipados con una vida para que representemos la cultura de lo eterno en esta tierra. OK. Porque todos, aquí viene cuando dice, porque no haya excepción de personas para con Dios. Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también perecerán. Y todos los que bajo la ley han pecado, por la ley serán juzgados. Porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino los hacedores de la ley serán justificados. Porque cuando los gentiles, que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la ley, estos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos. Escuchen. Hay tres grupos de personas, bajo este contexto, hay tres grupos de personas. Los judíos, los gentiles, ¿qué son los gentiles? Todos los que no son judíos. Y la iglesia del Señor. Que diga conmigo, judíos, gentiles y la iglesia. Son tres grupos que tenemos que conocer, ¿OK? Porque nosotros somos la iglesia. Diga conmigo, nosotros somos la iglesia. Y él volverá por su iglesia. Amén. Por su cuerpo. Entonces, él está diciendo cómo Dios juzga a los que son gentiles. Pues, oye, si no viven por la ley, por la ley de su conciencia serán juzgados. O sea, todo esto es un diagnóstico, no es el juicio definitivo, ¿no? Porque cuando los gentiles, que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de ley, estos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos. Mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia y acusándoles o defendiéndoles su razonamiento en el día en que Dios juzgará a Jesucristo los secretos de los hombres conforme a mi evangelio. Aquí Pablo habla de la conciencia. La conciencia está por encima del conocimiento. Póngale cuidado. Esto es importante que ustedes lo entiendan. La conciencia está por encima del conocimiento. Hay personas que nacen en una tribu donde hacen hablaciones, donde hacen juicios, donde apedrean, y ellos no participan de eso. Nacieron allí, crecieron viéndolo como su cultura, pero dicen, yo no participo de eso. ¿Por qué no participan? Porque su conciencia les dice, eso no está bien, eso no es justo. Diga conmigo, la conciencia es el distintivo que Dios puso en todo ser humano. O sea, la conciencia es una parte que Dios le da a los hombres para juzgar y es mayor que el conocimiento. ¿Por qué? Porque hay personas que conocen, ¿verdad? Pero su conciencia les dice, no, no lo hagas. Hay personas que participan de un juicio y la ley dice esto, esto, esto, pero su conciencia les dice, y ellos escuchan. Eso a veces hay personas que dicen, escucha tu corazón, porque no tienen la capacidad de identificar lo que es la conciencia. Pablo está diciendo que en usted hay algo que se llama conciencia y la conciencia siempre te va a hablar. Ayúdenme, ¿cómo saben ustedes? David, ¿cómo sabes tú que la conciencia te está corrigiendo? ¿Cuántos? Ajá. ¿Ustedes saben que por encima de la ley está la conciencia? ¿Por encima de la ley está la conciencia? ¿Por encima de la ley está la conciencia? ¿Por encima de la ley está la conciencia? ¿Por encima de la ley está la conciencia? ¿Por encima de la ley está la conciencia? Ajá. ¿Ustedes saben que por encima de la ley está la conciencia? Hermano, cuando decía David, nos incomoda, ¿no? Nos inquieta. Hay alguien dentro de ti que patalea un poco. Está diciendo, por ahí no, por ahí no. ¿Y eso se llama qué? Los niños la tienen. Yo tengo un hermano, David, los que no lo conocen, ¿no? Yo tengo un hermano que se llama David y cuando él estaba pequeñito, él se trajo un perrito y lo escondió por allá en la casa, lo escondió en un baño, ¿no? En un baño que había fuera de la casa y que no se utilizaba. Y él escondió el perrito y empezó a llover y llueve y llueve y llueve y él estaba durmiendo. Cuando él se levanta, que ve ese diluvio, empieza a decirle, mami, ¿puedo salir? Pero, claro, el patio estaba anegado. ¿Puedo salir? ¿Puedo salir? Mami, necesito salir. Pero, David, ¿qué pasa? Necesito salir. Presiento que hay un perrito. Presiento. Es que es algo que me incomoda. Presiento que hay un perrito. Y se va a ahogar. Se va a ahogar si no me deja salir. Dime, mamá, ¿qué perrito? ¿Y qué presiento? Vaya a dormir. Digo, mami, hay un perrito. Si no hay un perrito, me das una paliza. Es como decir, ese es, en un niño, la conciencia. Se va a ahogar el perrito donde lo dejaste y se va a ahogar por ti. La conciencia en un niño. Es como cuando uno hace algo y se pone... Y ese es el distintivo que Dios tiene en nosotros. ¿Cuántos dicen amén? Aprender a escuchar la conciencia, a leer la conciencia, es una de las maneras como Dios te preserva a ti. Ahora, Pablo está diciendo, Pablo está diciendo, los que no conocen la ley de Dios tienen conciencia. Y yo los voy a juzgar por la conciencia. No es que, ay, yo no sabía. Usted sabe que si uno llega en un país o en una ciudad, en un lugar, y uno no conoce la ley, por ejemplo, que se puede comer chicle. Por ejemplo, hay lugares, creo que en Singapur no se puede comer chicle. ¿Por qué no se puede comer chicle? Porque el gobierno gastaba mucho dinero despegando los chicles del suelo, de los parques, de aquí, no sé, se dañaban los trajes, alguien se sentó en un chicle y se le dañó. Entonces prohibieron el chicle. Y usted es un turista, usted se baja del aeropuerto y va comiendo su chicle, ahí está comiendo chicle. Y el policía llega y le dice, ¿qué está comiendo? Chicles. Deme su identificación. Ay, pero es que yo no sabía, yo soy de Valencia y allá se come chicle. El desconocimiento no te absuelve de la responsabilidad. ¿Qué es lo que el apóstol está diciendo? No conoces la ley de Dios, pero tú tienes conciencia. Tú tienes conciencia. Por eso, ahora, no escuches esto de que todos estamos perdidos. No, porque él lo que está haciendo es un diagnóstico. Él está encerrando todo bajo una circunstancia que necesitamos. Un salvador. Escuche esto, hermano. El engaño más grande que una persona puede tener en el Evangelio, es decir, mi rectitud, me preserva. Mi oración me hace un hombre justo. Mi ayuno me hace digno. Por ejemplo, cuando nosotros no entendíamos esta palabra, nosotros le decíamos a la iglesia, cada uno pruébese a sí mismo para tomar la cena del Señor, entonces la gente cerraba los ojos y hacía un escáner, ¿no? Dice, a ver cómo estuve esta semana. Uy. Ah, no la tomo. Y se sentaban. No tomaban la cena del Señor. Pero la presión de grupo, dice, está sentada Jenny, mírala hermanita, mírala como… y por algo no estará tomando, ¿no? Entonces se volvía un juicio y se volvía… Bueno, no santo. Un juicio carnal, totalmente carnal y de autojusticia. Entonces la hermana Jenny aprendía. Entonces le decía a la presión, a ver, no me pillan. A mí no me pillan. Yo soy maestra y yo me paro y la tomo este como este. ¿Por qué? Porque me van a ver que yo, el pastor va a ver que yo no… Y todo giraba ante una presión de grupo, todo completamente carnal, todoterrenal. Ahí el Señor no tenía nada que ver. Ahí era mi reputación. Claro, ahí era mi juicio. Era, yo soy pastor, imagínate que algo le habrá hecho a la pastora, ¿no? Que no quiere tomar. Entonces cada uno pruébese a sí mismo. Entonces Pablo dice, porque hay muchos que por comer sin discernir… Te puedes caer, cuidado. Muchos están enfermos y aún duermen. O sea, duermen es que murieron, que lo mandaron a recoger, ¿no? Ahora, todo aquello forma parte de lo que el Señor mira y dice, como el hermano, viendo la representación de Colombia, eso no tiene nada que ver conmigo. ¿Qué es tomar la cena del Señor indignamente? ¿Alguien es digno de tomar la cena del Señor? ¿Alguien es digno? ¡Ah! Escuche, escuche. Escuche. ¿Alguien es digno? Hermano, los que participamos de la cena, lo hacemos confiando. ¿Tú sabes que es indigno que alguien diga, yo tengo la capacidad de tomar la cena? Hice el escáner aprobado de 10. Ese es indigno, porque está diciendo, no necesito la sangre que se derramó en la cruz, no necesito la gracia, no la necesito, a ver, estoy bien. Ese es indigno. Es que busco el error y no hallo. Ese es indigno. ¿Sabes por qué es indigno? Porque le está diciendo al Señor, si era por mí, no tenía que ir a la cruz. Con lo que yo oro, leo, me consagro, ayuno, velo. Pero todos, levanten su mano, digan, si hay algo digno en mí, si hay algo bueno, si hay algo puro, si hay algo que disfruto, es por causa de la vida que me han dado, del espíritu que obra en mí, de la sangre que se derramó. Esa es, diga, esa es mi seguridad. Esa es mi seguridad. Amados, cuando nosotros confiamos en Él, hacemos un hombre grande. No hay mayor gozo para un padre. ¿Te imaginas el gozo que tú sientes cuando tu hijo necesita una computadora, tu hija necesita esto y aquí está, aquí está, y vienen a ti? Si es la mayor satisfacción, la independencia de un padre, honra al padre. El tema está en que te digan, y esos zapatos me los compré. ¿Acaso yo necesito que tú me…? Eso es demoledor para un padre. Eso es demoledor para un padre. Hermanos, cuando un hombre conoce a Dios, mientras mayor conocimiento, mayor dependencia. Mientras mayor entendimiento, mayor temor. Mientras mayor creencia, mayor humillación. Porque eso es lo que provoca el entender la causa del Señor, es dependencia. Aleluya. Por eso el apóstol aquí está encerrando todo, diciendo, necesitamos, necesitamos un Salvador. Ya vino con los gentiles, ahora va con los judíos. Ahora va con los judíos, porque ellos pensaban que por ser hijos de Abraham, ellos tenían derecho a todo. ¿Se acuerdan cuando aquellos diez leprosos fueron sanados? Diez leprosos, solo uno vino a agradecer. ¿Y era de dónde? ¡Samaritano! Un samaritano, yo sé que a veces esto es un poco desagradable, pero es un poco así como un gitano. Eran desechados, tenían conflictos raciales los judíos. Ellos se creían que eran guao. Incluso le dijeron a Jesús, Él les dijo que el pecado, el pecado era la esclavitud para ellos. Nosotros nadie somos esclavos, somos hijos de Abraham. Y Jesús le dijo, si fuerais hijos de Abraham, las obras de Abraham hiciera, y vosotros sois hijos de vuestro padre el diablo. O sea, porque intentas pensar, o sea, lo que está diciendo es, estás en una oscuridad, cuando tú piensas que por tu identidad racial, mereces el reino. Y hay personas que les gusta bautizarse en el Jordán, porque allá es donde se van a salvar. Hay personas que le dicen, ¿cuál es tu apellido? Para buscarte en las tribus perdidas de Israel. Cuando realmente nosotros estamos en Cristo. ¡Aleluya! ¡Aplaudan esa verdad! ¡Estamos en Cristo! Ahora, ahora póngale cuidado, ahora Pablo se va a dirigir a los judíos. ¿Ok? Y dice, he aquí, tú tienes el sobrenombre de judío, y te apoyas en la ley, y te glorías en Dios, y conoces su voluntad, e instruido por la ley, apruebas lo mejor, y confías en que eres el guía de los ciegos. Ellos decían, todo el mundo es segato ante la justicia, nosotros les guiamos a los ciegos. Y confía en que eres guía de los ciegos, luz de los que están en tinieblas. O sea, apelando a que eran judíos, ¿no? Instructor de los inductos, maestros de niños. Hermano, mira, hay una cosa, cuando Pablo está diciendo eso, él los conoce, porque salió de entre ellos. Él salió de su escuela. ¿Ok? Y todo esto, lo que él está diciendo, es la seguridad en sí mismo. La seguridad en sí mismo, ese es el diagnóstico. Ustedes creen que son guías de ciegos, maestros de los inductos, maestros de niños, que tienen en la ley la forma de la ciencia y de la verdad. Ustedes tienen, creen que la ley, ¿verdad?, en la que opera, es la ciencia y la verdad. ¿Tú pues que enseñas a otro? ¿No te enseñas a ti mismo? ¿Tú que predicas que no se ha de hurtar hurtas? ¿Tú que dices que no se ha de adulterar adulteras? ¿Tú que abominas de los ídolos, cometes sacrilegio? ¿Tú que te jactas de la ley con infracción de la ley, deshonras a Dios? Porque como está escrito, el nombre de Dios es blasfemado entre los que no son judíos, entre los gentiles, por causa de vosotros. Pues en verdad, la circuncisión aprovecha, vamos a leer todos este texto, por favor. Pues en verdad, la circuncisión aprovecha si guardas la ley. Para ahí. La circuncisión era el distintivo de que ellos pertenecían a un pacto. Pablo más adelante dice, escucha, la circuncisión hecha en la carne no es la que vale, sino la que el Espíritu hace en el corazón de nosotros. ¿Cuántos? Pablo dice, nosotros somos la verdadera circuncisión. La iglesia es la verdadera circuncisión. Porque fuimos circuncidados no en la carne, sino en el corazón. ¡Aleluya! Apláudele al Rey de Gloria. ¿Qué estamos viendo aquí? Diga un contraste entre la cultura terrenal y la cultura celestial o la cultura eterna. Ah. Los judíos, antes de que apareciera nuestro Señor Jesucristo, ellos eran la imagen de lo que Dios manifestaba en las naciones. Pero cuando vino el Hijo, Hebreos 1, por favor, David, ayúdame a leer Hebreos 1.1. De ahí en adelante te vamos a leer un par de textos. Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días, díganos, ha hablado por el Hijo. ¿Por quién nos habla? A quien constituyó esa palabra ahí es, viene de la palabra constitución, es legalidad. A quien constituyó el heredero de todo y por quien asimismo hizo el universo. El cual siendo el resplandor de su gloria, diga conmigo, Cristo es el resplandor de su gloria, es la imagen de su sustancia y quien sostiene todas las cosas con la palabra de su poder. Amén. Él es la realidad, diga conmigo, Cristo es la realidad del reino. Antes de, antes de la cruz, antes de que Jesús pasara por la cruz, había el tiempo, por ejemplo, usted dice, he escuchado, cuando dice, Él envía la lluvia primera y la postrera. O sea, en Israel, para que ustedes tengan una idea, en Israel llovía un poquito en esta región, un poquito en esta región, un poquito en esta región, un poquito en esta región, en las épocas del año y después venía una lluvia general. Ellos le llamaban la lluvia postrera, ¿no? Ellos descubrieron, en esta región se siembra patatas, en esta se siendan frijoles, en esta se siembra legumbres, en esta frutas, en esta esto, porque la lluvia cae en esta época del año y luego venía la lluvia postrera. ¿Ok? O la gloria postrera. ¿Han escuchado ustedes cuando dice, la gloria de esta casa, la postrera será mayor? Hermano, Cristo es la gloria postrera. Cristo es la gloria postrera. Y la casa, y la casa es donde Él vive. ¿Dónde vive Él? Diga, Cristo en nosotros, la esperanza de gloria. Nosotros somos la casa de Él. Él no vive en templo hecho de manos de hombre. Diga conmigo, Él no habita lugares, Él habita corazones. Aleluya, aplaudan al Señor. Wow, yo me gozo. Ahora, ¿qué ocurre? Por favor, entendamos que Él es la plenitud. ¿Qué es la plenitud? Es algo que Dios no tiene. Diga conmigo, Dios no tiene nada fuera de su Hijo. Hermano, ¿sabes qué es salvación? Diga conmigo, salvación es estar en Cristo. ¿Sabes qué es? Muerte, todo lo que está fuera de Él. Dios le dio todo el juicio a su Hijo. Por favor, ya vamos a volver, hermano, vaya a Juan, hecho de los, Juan, el Evangelio de Juan. Capítulo 5. Yo les voy a dar, a ver, ¿quieres? Creo que vamos a terminar con esto, pero la semana que viene vamos a continuar, pero lo que quiero ver, lo que quiero que veamos es la plenitud del Hijo, la plenitud de Cristo. Amén. Amados, Dios, póngale cuidado, cuando Cristo no es el centro de un mensaje, el Padre dice, no me representa, ese mensajero no me representa. Yo tengo un mensaje para el mundo y es mi Hijo. Yo no reparo yo no reparo lo viejo, yo no reparo lo roto, yo no vine a mejorar la vida de nadie, yo vine a hacerlo por medio de mi Hijo todo nuevo. Él no vino... David, ayúdame, Juan 5, desde el 19, ¿ok? Escuchen, ¿por qué es importante? Porque lo que vamos a ver luego de los judíos, ellos tenían puros símbolos, o sea, Israel vivía bajo criterios que eran símbolos del Hijo, símbolos de Cristo. El maná que ellos comieron en el desierto era el pan con que Dios los alimentaría. Jesús dijo yo soy el pan de vida. O sea, ellos vivieron adorando en un monte, ¿verdad? Pero cuando Jesús vino y habló con la mujer samaritana le dijo viene la hora y ahora es cuando los verdaderos adoraró, adoradores adorarán al Padre. Ni en este monte, ni en allá, ni aquí, sino, ¿dónde? En espíritu, en espíritu y en verdad, o sea, en el interior. Adoración tiene que ver con obediencia. Adoración no tiene que ver con cantuar suavecito. No se entra en tiempo de adoración. La adoración es un modo de vida. Ha escuchado usted vamos a entrar en un tiempo de comunión. Bueno, y antes, ¿dónde estabas? Si vas a entrar en un tiempo de comunión, estabas en división, ¿no? Y ahora vamos a entrar en un tiempo de comunión. Normalmente el pianista hay que ir suavecito para producir la comunión. No, hermano. La comunión es cuando tú amas lo que Dios ama. Tienes en común unión unos mismos intereses. Tienes en común unión un mismo propósito. Amas a tu hermano porque Dios lo ama. Entonces tienes un amor en común porque tú amas lo que Él ama. Eso es comunión. No música suavecita y yo lloro y levanto las manos y... No, no, no. Todo eso es exterior. El tiempo de los símbolos, de las imágenes, de lo simbólico ha pasado. Ha pasado. Lamentablemente cuando la Iglesia no conoce la realidad del Hijo tocan shofar porque el shofar, hermano, es el pitido final, es el mensaje final. El shofar tenía un mensaje ¿Ok? Pero Dios nos dio el mensaje y es Su Hijo porque de tal manera Él amó al mundo para que todo aquel que crea en el Hijo no se pierda, no esté fuera del Hijo sino que tenga vida eterna. ¡Aleluya! Ahora yo quiero que veamos por favor la autoridad del Hijo. ¿Saben por qué? Porque cuando Dios ¿Saben por qué? Porque cuando la Iglesia no predica al Hijo hermano el Señor dice no me representa. Diga predicamos Cristo vivimos Cristo somos en Él en Él vivimos en Él nos movemos diga Cristo es mi realidad Cristo es mi realidad Cristo es mi paz diga Cristo es mi seguridad Cristo es mi justicia Cristo es mi santidad Él lo es todo nada quiero fuera de Él no quiero nada fuera de Él. Creo que era Spurgeon creo que era Spurgeon que decía hermano si usted ve algo bueno en mí es Cristo si ve algo malo que bueno no es hermano Dios te usa tremendamente aleluya santo es que yo oro si ve diga conmigo llévate su mano diga si hay algo bueno en mí es Cristo en mí si hay algo malo es parte de mí soy yo que aún estoy en un proceso de perfeccionamiento de transformación de crecimiento permanente vamos a ver la autoridad del hijo ¿ok? una autoridad es una vida representativa y de eso quiero bueno el domingo vamos a hablar de esto ¿ok? respondió entonces Jesús y les dijo de cierto os digo antes les quiero contar una anécdota mi papá mi papá él decía que Jesús era el maestro ¿ok? antes de conocer la plenitud del Señor él decía que el Padre y decía yo y mi Padre y mi Padre y mi Padre Jesús es mi hermano mayor decía y le digo escúchame un día yo le dije mira y cuando le le yo esto me dijo estamos mal estamos mal y no necesita un teólogo que te lo explique vamos a leerlo respondió entonces Jesús y les dijo de cierto os digo no puede el hijo hacer nada por sí mismo sino lo que ve hacer al Padre porque todo lo que el Padre hace también lo hace el Hijo igualmente con mayúscula ¿ok? eso es importante porque nosotros somos Hijo él es el Hijo con mayúscula ¿ok? porque el Padre ama al Hijo y le muestra todas las cosas que él hace y mayores obras que estas le mostrará de modo que vosotros os maravilléis le está hablando a los judíos ¿verdad? los fariseos los maestros porque como el Padre levanta a los muertos y les da vida así también el Hijo a los que quiere da vida porque el Padre a nadie por favor dígale usted escúcheme cuando usted se encuentra en un testigo de Jehová le dice esperate espera, espera, espera Juan 5.22 un día todos estaremos delante del juicio ¿y quién preside el juicio? porque el Padre a nadie juzga todo el juicio se los dio ¿sabe que está diciendo? solo por la fe en Cristo solo por la confianza en la obra que el Hijo llevó a cabo se viene al reino amén así que los hermanos los hermanos judíos que no reconocen a Jesús tienen un problema aquí no se entra por ser judío aquí se entra por la fe en el Hijo primera de Juan 5.20 si no me equivoco el que tiene al Hijo tiene la vida el que no tiene al Hijo si no es el texto David me lo ayuda a buscar por favor buscame ese texto primera de Juan 5 y volvemos luego aquí que estamos leyendo no estamos perdiendo este texto ok pero sabemos vamos a leerlo todos no, no, no, no ese no es David ayúdame a buscar David ayúdame a buscar el que tiene al Hijo tiene la vida 12 ok y luego también leemos el 20 primero de Juan 5.20 que estamos leyendo ahora Juan y ahora Juan Juan fue el apóstol que más escribió acerca del Hijo la revelación del Hijo vamos a leer todos juntos este texto dos, tres el que tiene al Hijo tiene la vida el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida a muertecito si el 20 el 20 por favor David y volvemos a Juan 5 vamos a vamos a todos todos a leer este texto pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado paren ahí, paren ahí ¿qué nos ha dado? entendimiento ¿qué nos ha dado? entendimiento usted sabe que tú ves en el reino se ve por medio del entendimiento no por los ojos Pablo dice porque por fe andamos no por vista ¿tú sabes qué es la fe? lo que ve el que entiende los ojos del entendimiento porque diga conmigo porque el entendimiento tiene ojos Efesios no habla de eso entonces diga conmigo la fe ve por medio de lo que entiende a nosotros nos decía hermano usted todo lo quiere entender ese es el espíritu de Grecia todo pensando pensando no la fe la fe que no entiende es esclava porque es disfuncional hay hay un término que se llama fe inteligente porque hermano ¿cuál ¿cuál sólida es la fe que no entiende? yo no sé yo no entiendo nada pero amén ¿a dónde vamos con yo? a un hombre ¿tú sabes qué es lo que te cautiva a ti cuando una verdad te toma por dentro y se hace vida en ti? hermano tú no vuelves atrás escuché una vez de Billy Graham que en Camboya cuando el comunismo se empezó a predicar el evangelio le metían estillas de madera en los en los dedos a las mujeres a los niños para que negaran para que negaran a Jesús y ellos decían es que no podemos negarlo conocemos a uno que lo negó y lloró amargamente ¿cómo vamos a negar al Cristo? si es que ¿qué sería de nuestra vida si lo negáramos? si ya vimos que Pedro lloró con amargura por haber negado a su Señor ¿sabes por qué? porque cuando una verdad se hace vida en ti no puedes retroceder aunque tú quieras bendita verdad que nos absorbe bendita vida que nos gobierna bendita realidad que se metió en nosotros y nos cautivó aleluya la semana que viene cuando leamos el análisis a nuestros hermanos judíos es necesario que tengamos en conciencia la plenitud del Hijo para que entendamos para que vayamos entendiendo amén ok dos, tres pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero y estamos en el verdadero en su Hijo Jesucristo este es el verdadero Dios y la vida eterna diga conmigo la vida eterna es Cristo aleluya por eso cuando dice porque de tal manera amó Dios para que tengan que vida eterna este es el verdadero Dios y la vida eterna volvamos a Juan 5 ya vamos a ir terminando amados ok porque el Padre a nadie juzga sino que todo el juicio dio dio al Hijo para que todos honren al Hijo como honra al Padre el que no honra al Hijo no honra al Padre que le envió eso yo me acuerdo que cuando yo le dije a mi papá vamos al texto anterior por favor no al otro el otro texto al ver al 22 porque como el Padre no el 22 yo me acuerdo que cuando leímos el 22 y el 23 mi papá dijo pero en el instante me dijo claro hemos entendido mal yo le dije papi no hay nada de Dios fuera de la vida de su Hijo produce en nosotros yo puedo tomar la iniciativa de hacer algo bueno y digo voy a hacer esto para Dios y el Señor solo certifica como Suyo solo glorifica si está en el Hijo si nació del Hijo Él no quiere nada fuera de su Hijo a Él a Él por eso hermano cuando tú das una ofrenda es el Hijo manifestando generosidad en ti cuando tú sirves es el Hijo manifestando servicio cuando tú abrazas es el Hijo abrazando a través de ti cuando tú amas Aleluya cuando tú tienes misericordia es el Hijo manifestando misericordia y como no haya resistencia en ti ama abraza sirve da presa glorifica ora Aleluya wow ni siquiera ni siquiera podemos orar por nosotros mismos Pablo dice pedir como conviene que no sabemos pero pero que el Hijo hecho Espíritu en nosotros intercede por nosotros en nosotros desde nosotros Aleluya y nos guía a toda verdad wow yo podría ser un poco extremo Albert peca hasta cuando ora escucha yo peco cuando oro Pastor que está diciendo si no es el Espíritu si no es el Hijo a través de mí eso no es otra cosa que ruido ruido por eso la dependencia de Dios wow glorifica el Padre dependencia bendita dependencia ¿sabes por qué? ¿sabes por qué no dependemos del Señor? porque en la cultura de lo terrenal la dependencia es debilidad porque nosotros los hombres la dependencia o seguir instrucciones o la obediencia eso está visto en la cultura de lo terrenal como que ¿tú eres un sometido? imagínate que tú digas sí, sí yo soy un sometido yo me someto a la vida que me gobierna a la vida que me impartió te van a decir ¿pero qué dice? yo soy autónomo yo hago lo que quiero yo entro cuando quiero salgo cuando quiero porque allí no está el Hijo por eso no dependemos de Dios muchas veces por eso somos autónomos porque tiene que la cultura de lo eterno la cultura celestial tiene que absorbernos levante su mano levante sus dos manos y diga Padre absorbe en mí todo lo terrenal todo lo humano todo lo corrupto y que tu Hijo sea gobernando y reinando que nada resista la vida de tu Hijo en mí en el nombre de Jesucristo denle un aplauso al Rey ok porque el Padre en nada juzga sino que todo el juicio se lo dio al Hijo para que todos honren al Hijo como honran al Padre el que no honra al Hijo no honra al Padre que le envió de cierto os digo de cierto, de cierto os digo cuando el dice de cierto, de cierto es de sin lugar a duda sin espacio para la duda les digo el que oye mi palabra y cree al que me envió tiene vida eterna y no vendrá a condenación Aleluya cuantos han creído en el diga conmigo no vendré a condenación porque he puesto mi confianza en el Hijo he puesto mi confianza en el Hijo Aleluya mas ha diga y he pasado levante su voz diga y he pasado de muerte a vida a vida de cierto, de cierto os digo viene la hora y ahora es cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios y los que la oyeren vivirán como puede un muerto oír porque para Dios el que no tiene su Hijo está muerto porque Dios no Dios no ve la vida biológica Dios es Espíritu Dios Dios es Espíritu y el ve vivo a todo lo que tiene su Espíritu amén porque como el Padre tiene vida en sí mismo así también ha dado al Hijo el tener vida en sí mismo y también le dio autoridad de hacer juicio por cuanto es el Hijo del Hombre con H mayúscula también no os maravilléis de esto porque vendrá la hora vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán la voz y los que hicieron lo bueno saldrán a resurrección de vida más los que hicieron lo malo a resurrección de condenación no puedo yo hacer nada por mí mismo hermano vamos a declarar esto nosotros mismos Cristo oferece cuando tú digas yo nada puedo hacer por mí mismo yo nada puedo hacer por mí mismo yo tengo dependencia del Señor amén vamos a leerlo no puedo yo hacer nada por mí mismo según oigo así juzgo en mi juicio es justo porque no busco mi voluntad sino la voluntad del que me envió la del Padre aleluya si yo doy testimonio acerca de mí mismo mi testimonio no es verdadero otro es el que da testimonio acerca de mí y sé que el testimonio de mí es verdadero aleluya vosotros enviaste mensajeros a Juan y él dio testimonio de la verdad pero no recibo yo no recibo testimonio de hombre alguno mas digo esto para que vosotros seáis salvos yo soy el testimonio de la palabra Jesús les dijo póngase sobre sus pies por favor Jesús les dijo ustedes escudriñan las escrituras porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida pero ellas dan testimonio es de mí y me tienes delante y me quieres matar o sea ustedes wow ustedes saben que es el gozo de ellos leer la reverencia de leer la escritura wow esto no lo podía leer se tenían que consagrar para leer pero después estaban ante la vida de la palabra y lo querían apedrear a Jesús hermano diga conmigo nada hay de Dios fuera de su Hijo con esto en mente cuando la semana que viene leamos lo que Pablo le dice a los judíos ustedes se van a dar cuenta que es parte del diagnóstico amén cerremos nuestros ojos por favor para no distraernos dígale Padre gracias por haberme escondido en tu Hijo gracias por haberme hecho parte de su cuerpo gracias por haberme dado vida en él diga gracias porque él es mi realidad si lo tengo a él lo tengo todo fuera de él nada deseo fuera de él nada deseo diga Señor no busco mi propia justicia no busco mi propia rectitud no busco agradarte desde lo que hago sino desde lo que soy diga Señor gracias por haberme cambiado esta realidad y por haberme trasladado a tu reino desde hoy soy consciente de la vida que tú me has hecho participar y te agradezco en el nombre de Cristo Jesús amén amén y amén apláudale al Señor amén
