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The speaker shares a reflection on leaving a marital legacy for future generations. They emphasize the importance of setting a positive example in marriage for children and relatives. They mention that the behavior of spouses towards each other can leave a lasting impact, either positive or negative. They encourage couples to establish a strong relationship that children can imitate, creating stable and harmonious marriages. They also mention that even if someone didn't have a good marital model, they can still make positive changes for their own marriage and future generations. The speaker concludes by emphasizing the importance of following Christ's example in marriage and leaving a legacy worth imitating. They encourage listeners to start or improve their marital relationships and leave a positive legacy for their children. Hoy, quiero compartir esta reflexión, la he tomado del devocionar los lenguajes del amor de Gary, y la he considerado muy interesante, por eso quiero hoy limitarme a compartir esta reflexión que está buenísima y sé que va a administrar tu vida, y tenemos como base ese versículo hermosísimo de la Biblia que está en la primera carta a los Corintios, capítulo 11, versículo 1, abra su Biblia conmigo, primera carta a los Corintios, capítulo 11, versículo 1, y dice así, sed imitadores de mí, así como yo de Cristo, aleluya, bendito sea el nombre del Señor, qué bueno, qué bueno que cada cónyuge pueda decir, como dijo el apóstol Pablo, sed imitadores de mí, como yo de Cristo, podríamos decir parafraseando, ustedes deberían imitarme a mí, así como yo imito a Cristo, qué palabras tan contundentes, qué palabras tan poderosas, ojalá que cada pareja, cada cónyuge que está ahí, que nos está escuchando, pueda decir esas palabras, dejando un legado hermoso a su familia y a sus generaciones. Vamos a nuestra reflexión, y dice así, perdón, entre las cosas que usted dejará atrás cuando muera, que son muchas, se encuentra su legado conyugal, ¿alguna vez has pensado en eso? En dejar un legado conyugal a tus hijos, a tus sobrinos, a tus nietos, a tus generaciones, aleluya, que ellos como cónyuges, como familias, puedan pisar, caminar donde tú has pisado como cónyuge, su ejemplo, mi amigo, mi hermano, ejercerá una influencia poderosa en la vida de sus hijos, y en otros que les observan, los sobrinos, los nietos, pocas cosas tienen tanta importancia, mis amados, como construir un tipo de matrimonio que le gustaría que sus hijos imiten, wow, eso es maravilloso, eso es hermoso, que cada pareja de cónyuges pues decida establecer una relación de tal modo que los hijos al ir al matrimonio puedan imitar ese tipo de relación, es como marcarlos para que tengan matrimonios estables, funcionales y armoniosos, dice cuando les pregunto a padres ya mayores que desean para sus hijos adultos con frecuencia responden, quiero que mis hijos establezcan matrimonios y que críen hijos como personas afectuosas, como ciudadanos responsables y afables que traten de buen modo al prójimo, esa es una meta que, que vale mucho, pero podríamos preguntarnos hoy qué estamos haciendo a favor de esa meta, cómo es nuestro comportamiento como cónyuges delante de los hijos, delante de los sobrinos, algunos todavía no tienen hijos pero sí que tienen sobrinos, aleluya, qué podrían decir, cómo podrían nuestros pequeños que nos rodean, cómo podrían imitar nuestras actitudes y ser de bendición para sus cónyuges, para su matrimonio, sostengo que el modelo de su propio matrimonio es el factor más importante para ayudar a que sus hijos tengan un buen matrimonio, o sea la manera en que los esposos se llevan unos con otros, la manera en que los esposos, los cónyuges se tratan entre sí, eso podría ser un legado positivo o negativo, eso podría dejar una marca de bien, de bendición o de maldición, ¿cuál es la que le estamos dejando a nuestros hijos?, ¿cuál es el legado que le estamos dejando al respeto a nuestros hijos?, la pregunta es ¿dejarán ustedes como pareja, dejaremos nosotros como pareja un legado positivo o un legado negativo?, ¿podrán nuestros hijos, sobrinos, nietos, imitarnos y tener matrimonios estables que modelen el reino de Dios?, oh bendito sea el nombre del Señor, muchos adultos jóvenes tienen conflictos en gran medida, por causa de la influencia del ejemplo negativo que le dejaron los padres, los tíos, los abuelos, ¿a quién estás tú marcando?, ¿a quién le estás tú dejando un legado?, ¿a los sobrinos, a los hijos, a los nietos?, es digno de imitar, es digna de imitar la conducta que emite, en cuanto al matrimonio se refiere, aleluya, bendito sea el nombre del Señor, así es, otros tienen la bendición de haber tenido un buen modelo, hay quienes no contaron con un matrimonio modelo, un matrimonio digno de imitar, no obstante decidieron tomar decisiones acertadas para que su matrimonio, su relación conyugal no corra el mismo riesgo catastrófico que corrió la de sus padres, se ha visto que han marcado la diferencia, o sea matrimonios que a veces fueron un caos, a veces tienen hijos que cuando entran en matrimonio deciden mi matrimonio no será como el de mi papá y el de mi mamá, nosotros estableceremos normas y reglas en nuestro hogar, en nuestra familia para no caer en el mismo caos que cayeron nuestros padres, y eso es digno de elogiar, alabado sea el nombre del Señor, cuando los hijos tienen esa capacidad de lidiar, de enmendar, de desechar lo negativo que se dio en su casa paterna y establecer normas y principios mejores como reglas de vida en el hogar, como regla de convivencia, pero generalmente los hijos que han tenido una pareja digna de imitar generalmente establecen matrimonios funcionales y estables, alabado sea el nombre del Señor. Si ha sido tu caso que a lo mejor eres el producto de un matrimonio desigual, de un matrimonio caótico, hoy quiero decirte que nunca es tarde, nunca es demasiado tarde para iniciar, para reiniciar y reestablecer relaciones de bien, mientras tenga vida usted tiene tiempo para trabajar un legado conyugal, lo mejor que puede hacer es lo que hizo Pablo, el apóstol Pablo siguió el ejemplo de Cristo, tanto así que se atrevió a decir esas palabras, creo que en la Biblia es el único que se atrevió a traer esa expresión, ser imitadores de mí como yo de Cristo, que bueno que podamos decirle a nuestros hijos al levantarse y formar familia, que podamos decirle, vivan los lineamientos establecidos por Dios para el matrimonio como nosotros lo hemos vivido, si usted puede decirlo, congratulations, si les felicito, y si es que no puede decirlo, hoy usted puede decidir enmendar su relación conyugal, hacerse de la Biblia la palabra de Dios y estudiar el diseño que Dios ha establecido para el hombre como esposo, para el hombre como padre o estudiar el diseño que Dios ha establecido para la mujer y seguro que puede superar cambios de vida para hacer de bendición a tus pequeños al momento que ya decidan formar matrimonio. Cuando más cerca seguimos a Cristo es cuando mejor legado podemos dejar a nuestros hijos concerniente a la relación conyugal, si, cuando seguimos a Cristo de cerca podemos recibir de Él esa capacidad para amar, esa capacidad para perdonar y esa sabiduría para actuar con tacto en cada circunstancia y en cada momento dado, ¿por qué? Porque Jesucristo será nuestro compañero fiel y en cada circunstancia podremos esperar de Él su dirección y su guíanza, alabado sea el nombre del Señor. Decidamos hoy dejar un legado a nuestros hijos digno de vivir, digno de imitar.
