Rom 12 del 1 al 2 Sem 63 No se puede ser Hijo de Dios sin ser Cuerpo de Cristo Sab 3 Febrero 2024

Olivo Verde es una comunidad enfocada en el estudio sistemático y respetuoso de la Palabra de Dios. El contenido de su producción se basa en el trabajo verso a verso del texto bíblico. La Palabra de Dios es la palabra de Dios. La Palabra de Dios es la palabra de Dios. La Palabra de Dios es la palabra de Dios. La Palabra de Dios es la palabra de Dios. Llegamos a uno de los pasajes más fascinantes del Libro de Romanos. Por excelencia, uno de los pasajes más fascinantes que hay. El capítulo 12, versículos 1 y 2 del Libro de Romanos son sencillamente fascinantes. Son de los textos bíblicos más utilizados, más trabajados que hay. Hay cosas supremas. Hoy tuve la oportunidad de escuchar a un hermano. Bueno, sencillamente me quedé con la boca abierta de la belleza, de la forma por donde entró al texto, como también he escuchado cualquier cantidad de tonteras, como todo lo que hay, mucho de lo que hay en estos días. Pero necesito asociar un poquito lo que vimos la semana pasada, lo que pasó la semana pasada con esta semana, porque estoy trabajando en el capítulo 12, versículo 1, versículo 2 de la semana 63. Esta es la semana 63. Y la semana pasada lo que hicimos fue hacer un resumen de los primeros 11 capítulos que ya hemos estudiado, del capítulo 1 al 11 hicimos un resumen y lo hicimos encontrando el mensaje principal de ese capítulo y usando el versículo más clave o significativo o más importante de ese capítulo. Eso es lo que vimos la semana pasada. Tal vez una de las cosas que hay que tratar de entender es que, en teoría, cada texto está hecho para que el Espíritu Santo trabaje en el corazón de cada uno de nosotros como Él le plazca en función de lo que nos está enseñando y nos muestre lo que podemos decir, no solamente lo que necesitamos, sino lo que está usando para equiparnos. Y por favor, pónganle atención a la palabra equipar, porque yo no estoy pensando en nadie, no estoy pensando en que Néstor... ¿Qué dice que Néstor vino? ¿Por qué ahora sí le voy a entrar? Porque estaba pensando en Néstor cuando estaba escribiendo esto, porque Néstor me cae mal o me cae bien, entonces voy a hacerlo. No, yo simplemente trato de organizar el asunto de manera tal que sea el texto que nos hable y nos muestre qué es lo que Dios está tratando de decirnos. Entonces, ¿qué pasó la semana pasada? La semana pasada entramos al versículo 1 y Pablo entra diciendo... Bueno, debido a estos... Claro, lógicamente, cuando Pablo escribió, no escribió capítulo 1, Pablo escribió una sola carta, fue corrido, y en la estructura, pues lógicamente estamos entendiendo que lo que había era un punto y aparte... Mirad, el capítulo 11, 24, 26, no importa, dice... Por lo tanto, hermanos... Y Pablo utiliza una frase que en griego tiene como tres acepciones. Una de ellas, Pablo dice... Les urjo, por favor, esto es urgente que lo hagan. La otra frase que utiliza Pablo es imperante, es imperante que lo hagan. Y luego la tercera frase que utiliza es... Les ruego. La traducción del texto en griego podría interpretarse de esas dos maneras. O sea, es importante. Pero noten que Pablo basa lo que va a decir en lo que Dios ha hecho. ¿Lo están viendo? Pablo basa lo que va a decir en lo que Dios ha hecho. ¿Están conmigo? Sí, los veo medio distraídos y hoy hay que ponerle... Cuando está hablando de lo que Dios ha hecho, se está refiriendo, está diciendo... O Pablo lo está planteando como misericordias. Yo les dije hace ocho días que para mí es muy fácil pararme aquí y decirles... A ver, ¿cuántos de ustedes tuvieron comida en el mes de enero? ¿Cuántos de ustedes Dios los sacó adelante en una situación financiera? Se anotan que todos tenemos un punto de referencia donde podemos decir... Yo he visto la misericordia de Dios en mi vida durante el mes de enero. Todo lo podemos decir. Pero Pablo se está refiriendo a las misericordias de Dios de las cuales él viene hablando del capítulo 1 al capítulo 11. ¿Están conmigo? Ok. Entonces, ¿a qué se estaba refiriendo Pablo? Y lógicamente lo estoy haciendo así para que... Ya el repaso de la semana pasada no lo vamos a... No lo voy a hacer otra vez porque es bastante largo. Sin embargo, lo hicimos bien simplificado. Me di cuenta que el orden no lo mantuve. Entonces, vamos a decirlo que en el capítulo 1 el tema fundamental fue salvación. ¿Cuál fue la misericordia que Pablo nos mostró en el capítulo 1? La salvación. ¿Cuál fue la misericordia de Dios para con nosotros en el capítulo 2? Paciencia. En el 3, justicia. En el 4, elección. En el 5, oportunidad. Noten que estoy citando lo que vimos la semana pasada, el repaso de la semana pasada. 5, oportunidad. 6, precisión, mucha precisión. 7, la estrategia de Dios con Israel. 8, el amor. 9, todo está planificado. 10, la gracia de Dios y lógicamente en el capítulo 11 de Romanos nos habla sobre misericordia. Entonces, lo que yo traté de hacer la semana pasada, damas y caballeros, fue decirles a ustedes que aquí están, por lo menos, lógicamente un extracto de 11 misericordias que representan cada uno el capítulo que ya vimos. ¿Sí me estoy comunicando? Ok. Pero note que el texto lo que dice es esto. Por lo tanto, hermanos, les ruego, por las misericordias de Dios, puntos suspensivos. Entonces, la semana pasada hicimos un énfasis en buscar esas misericordias y hablar de qué son esas misericordias que están ahí mismo y qué es lo que Pablo está rogando. Pablo está rogando que hagamos esto. Dice, Romanos 12, note que lo que estoy haciendo simplemente es tomando la segunda parte del versículo 1 y dice así, que presentemos nuestros cuerpos como sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es nuestro verdadero culto. Por lo tanto, hermanos, les ruego por las misericordias de Dios. ¿Ok? Lo vimos la semana pasada, entramos a la segunda parte del versículo, que presenten sus cuerpos como sacrificio vivo, santo, agradable a Dios. Entonces, gente, no nos desviemos. Y esto hay que entenderlo. Y esto es clave. Y esto nos tiene a todos que hacernos entender que todos queremos de Dios todo, pero estamos dispuestos a pagar el precio de la forma mínima. Todos queremos que Dios nos proteja, nos cuide, nos bendiga, nos... de todo, pero conmigo como que no cuenten todavía. Todos queremos esto. Todos queremos estas misericordias de Dios. Pablo está pasando la factura, no sé si me están entendiendo, pero Pablo está pasando la factura. Debido a que Dios nos ha salvado, nos ha tenido paciencia, ha sido justo con usted y conmigo, nos ha elegido, nos ha dado una y mil oportunidades, ha sido preciso nuestras vidas. Eso es lo que Pablo está diciendo. Y perdónenme, no quiero ser grosero, pero yo sé que es muy lindo cuando uno va por el perico y el perico se salva. O el perro está vomitando sangre y uno va por el perro y el perro deja vomitar sangre y ahí está el zaguate, lleva ya 18 años después de la vomita de sangre. Sí me estoy dando a entender que todos damos a Dios todos los días en nuestra vida, sin excepción. Sí me estoy dando a entender. Ok, yo no estoy hablando de una regularidad de Dios, la presencia de Dios en nuestra vida. Yo no estoy hablando de eso porque yo no dudo de eso. Yo estoy hablando de lo que le estamos debiendo nosotros a Dios. ¿Sí me están siguiendo? Entonces dice Pablo que nos presentemos. Presenten sus cuerpos. Y claro, esencialmente aquí no hay que hacerle muchas cosas. El texto está diciendo que lo que hagamos con nuestro cuerpo determina en qué planeta estamos. Está claro. O sea, aquí no hay que hacerle mucho griego, ni chino, ni alemán, ni nada. O sea, donde usted esté, donde está su tesoro, ahí está su corazón. Donde usted está, usted está presente. Eso es lo que a usted le interesa. Lo que usted se presente, o lo que presente de usted, es lo que esencialmente determina. Aquí lo tengo escrito, por cierto. Pero noten que la palabra que utiliza es presentar. Esa palabra presentar... Saquémosle una enseñanza rápida ahí. Cuando Pablo está diciendo que se presenten, o se está diciendo a todos, hagamos iglesia. Dos, no se puede hacer iglesia si usted no está. Ah, díganle a mí. Ok, yo... Díganme algo. O sea, la palabra presentar se tiene que ver con el hecho de que... A ver, no voy a hacerlo muy extenso, no me interesa volverlos locos, pero claro, cuando el texto está diciendo que se presente, le está diciendo a Federico y le está diciendo a Toño Ávila que también se presente con la lectura de la palabra. Que se presente en oración. Que se presente buscando a Dios. Sí me estoy comunicando. O sea, cuando el texto está diciendo, preséntese con Dios... Apple sacó ayer el nuevo chunche, ¿verdad? El nuevo chunche de Apple es una... Es una máscara, unos anteojos especiales, valen en colones cuatro millones de colones. Ya no se necesita pantalla computadora, no se necesita teclado, no se necesita pantalla de nada, todo está aquí. Usted si quiere, bota la computadora, la regala, porque todo está aquí. Pero yo necesito que usted me entienda que cuando la Biblia dice, la primera enseñanza que yo estoy entendiendo, ¿por qué yo estoy entendiendo eso? Porque está diciendo, por lo demás hermanos, sí, por lo demás, ¿a quién? Hermanos, ¿a quién? A los hermanos. A la congregación de romanos. Me están siguiendo. Entonces la primera recomendación es a la iglesia. Pero Óscar necesita orar más. Entonces Óscar tiene que entender y Giovanni tiene que entender que necesita orar. Y Óscar y Federico y Giovanni tienen que entender que el presenten, presentense, tiene que ver con el hecho de que tengamos claros que tenemos que presentar nuestros cuerpos. Y todo el texto, a la hora de plantearlo, está diciendo, hágase presente, sepárense, no que se separe la mujer ni el marido, sepárense es que saque el tiempo para hacer las cosas, hágase una rutina. Sinceramente, sinceramente, si ustedes me permiten decirles, yo creo que eso es suficiente. O sea, yo no sé si ustedes me están captando, pero eso sería suficiente, hermanos, para que usted esta noche se lleve algo para su corazón y usted entienda que no se puede servir a Dios dejando de servir a Dios, de que no se puede adorar a Dios adorándome a mí mismo. Señor, yo necesito estar. O sea, note que el texto nos dice ahí, o sea, presenten sus cuerpos, hágase presente, o sea, hay que estar, hay que ser parte de, esté, sea, esté, hazte. La palabra separarse es que usted tiene que tomar la iniciativa de dejar de hacer algo para poder hacer lo que la palabra le está diciendo que haga, separarse. Es que no quiero usar la palabra que debería usar para que me entiendan, pero la palabra es santificarse. ¿Le están escuchando? La palabra es santifiquémonos. Pero si digo santifiquémonos, seguramente a Angélica se le cae el mensaje. Pero si yo le digo a Angélica y también le digo a Obed, papi, si usted no saca tiempo de su vida para Dios, usted no está entendiendo en qué planeta está viviendo. ¿Me están siguiendo? Entonces noten que hay como una enseñanza básica, hermanos, por favor, que hay una enseñanza básica que no dejemos dejar pasar en la expresión sencilla de Pablo, presenten sus cuerpos, haga iglesia, hágase presente, esté, sepárese, hágase una rutina. ¿Por qué? ¿Por qué? Porque quien dice que es hijo de Dios, a ver, ¿quiénes son hijos de Dios? Bueno, no existen hijos de Dios que no sean cuerpo de Cristo. Sí me estoy comunicando, no existen. O sea, quien diga que es hijo de Dios y no necesita el cuerpo de Cristo, es hijo del diablo, porque eso es lo que la Biblia dice. O sea, no existe una figura, a ver, no existe una figura intermedia, no existe. Quien diga que es hijo de Dios, es cuerpo de Cristo. El capítulo, el versículo 4, hacia el que vamos, de alguna forma, lo dice claramente. Así como nuestro cuerpo tiene muchas partes, y cada parte tiene una... ¿Pero cómo hace usted? Pues a ver, ¿cómo funciona si nunca está? No es conmigo, es que no es conmigo. O sea, yo llego, oigo la palabra y me voy. O sea, te equivocaste, no es este lugar. El Club Parrita se pone más chiva los domingos en la tarde. ¿Me voy a entender? Es que, entiéndame, no es entretenimiento. Vean, el verso 5 dice, ve el 4, ve el 4, como nuestro cuerpo tiene muchas partes, y cada parte tiene una función específica, el 5, el cuerpo de Cristo, también, nosotros, nosotros, nosotros, somos las diversas partes de un solo cuerpo, nos pertenecemos unos a otros, lo cual me parece sencillamente fascinante, ¡fascinante que eso diga ahí! ¡Nos pertenecemos unos a otros! Aquí me dicen amén por las buenas. ¡Qué bárbaro! O sea, es que bueno. Nos pertenecemos unos a otros. Eso está demasiado potente, eso es demasiado fuerte, eso es demasiado revelador, ¡muy, muy revelador! Claro, esta versión dice, nos pertenecemos unos a otros, porque lógicamente, porque lógicamente, pues lo que está hablando es de qué, ¿de qué? De ahí, del cuerpo. Y de ahí, un cuerpo tiene algunas características, como que el hecho de que podamos entender, y me gustó esa figura, porque se ve que está como, parece como por partes, ¿no ve? Y si yo quito el pecho de ahí, y como que se desarma toda la figura, ¿qué me estoy entendiendo? De ahí, el pecho, sin el pecho no hay forma de que el asunto arranque, porque el pecho nunca está. ¡Sí me estoy comunicando! No arranca el asunto, porque la parte de arriba de la pierna no está. Entonces, amigos y amigas, definitivamente Pablo, lo primero que nos hace, porque claro, ahora sí, la pone, la pone así, la explica bien, les ruego por las misericordia, debido a las once cosas que les acabo de decir, la factura es esta, lo que usted le debe a Dios, es tiempo, presencia, compromiso, como usted cuenta. Aquí han pasado, les voy a poner un ejemplo tontísimo, tontísimo, pero han pasado. Aquí hay gente que ha venido, una noche, y vieron a fulano y a Mengana que iban caminando, y los recogieron, los llevaron a la casa, no me consta, pero alguien los iba a asaltar ahí a cien metros, los iban a asaltar, los recogió y se los llevaron, no pasó absolutamente nada. Tal vez usted no estuvo aquí el día que el equipo estuvo trabajando, y limpiando, y acomodando, y haciendo todo, tal vez usted no esté trabajando con la música, tal vez usted no esté involucrado en otras cosas, pero es que hay que querer, escúcheme, hay que querer ser cuerpo, si me estoy comunicando, para que sea Dios quien le permita a usted servir, por favor escúcheme, porque su vida es miserable, hasta que usted no le sirva a Dios, y porque es miserable, porque se ocupa solamente en usted mismo, y eso es ser miserable. Mi papá tenía un dicho, cochino, decía mi papá, es un viejo cochino, por decir que era un viejo agarrado, por decir que era una persona que solamente para ella, para él. Esto de cuerpo, se las trae, entendiendo bien, que el asunto no es una selectividad, de cuando usted quiera o no quiera, porque tengo que hacerlo, tengo que entender que existe en mi el criterio de la selectividad, de querer o no, de decir, pues es que hoy puedo, hoy no puedo, yo lo entiendo hermanos, yo mismo les he dicho, que me he tenido que levantar en la mañana, y he dicho, eso me quiero levantar, más es yo, que llego a la temperatura, como que a 18 grados, bajé los ojos, hice así, y sigo durmiendo, no se puede, estoy siendo demasiado frío, y me acuerdo que soy el pastor, tengo que venir. Por aquello de las excusas, cuando estamos hablando de cuerpo, siempre que se habla de cuerpo, tenga muy claro, que el corazón está en el cuerpo, y me refiero en los dos sentidos, el corazón, la bomba, la bomba que hace, la función sistólica, diastólica, lo dije bien, más o menos, sí, el corazón está en el cuerpo, pero yo necesito que usted entienda, que cuando estoy hablando de corazón, me estoy definiendo al corazón, a su alma, está en el cuerpo, la gente piensa que el alma es espiritual, yo quiero que usted me entienda esta noche, que el alma está en el cuerpo, que el corazón está en el cuerpo, alma y corazón es lo mismo, es lo mismo, quien diga corazón y diga alma, está diciendo exactamente lo mismo, cuando estamos hablando de corazón, repaso, repaso de años anteriores, estamos hablando de que el corazón, tiene tres motores, el corazón tiene tres ejes, tres pilares, la razón, la voluntad, y las emociones, sí, entonces yo quiero que usted, ya le explique la primera parte, y cuando dije algunas cosas, algunos hicieron así, ahí, pero yo también quiero que usted me entienda, que cuando la palabra de Dios dice, que presente su cuerpo, se está refiriendo a que también lleva el corazón, que lo traiga, que lo traiga, la palabra está diciendo, que usted y yo claramente, entendamos, entendamos, que la razón, las emociones, y la voluntad, son su corazón, y que algunos de ustedes, piensan, que su corazón, es únicamente esto, lo que siente, entonces, ¿por qué razón cuesta tanto arrear gatos?, los gatos cuesta arrearlos, porque los gatos viven de lo que sienten, y si el gato no tiene ganas, no va a hacer lo que usted puede decir, no tengo ganas, hoy no me siento con ganas, ¿y a quien le importa que usted no sienta ganas?, ¿usted cree que si Dios sintiera ganas, por el último que sintiera ganas, sería por nosotros?, no es por ganas hermanos, yo quisiera que usted me entienda, que si Dios no es el Señor de su corazón, sus emociones, son el Dios de su corazón, me devuelvo, va de nuevo, Pablo, nos está hablando, de que somos un cuerpo, y que la necesidad de que estemos, va a hacer que, el Espíritu Santo, trabaje a partir de todos nosotros, y habrá únicamente experiencias, habrá únicamente situaciones, que se van a poder resolver, a partir de la vivencia, de la relación entre nosotros, entre nosotros, únicamente, ¿Dios me habla a través de la palabra?, si claro que si, pero Dios va a utilizar a algún hermano, a alguna hermana, Dios va a hacer lo que sea, para hacer que el cuerpo funcione, no se lo olvide, ninguno de nosotros, le va a decir adiós, ninguno de nosotros, le va a decir adiós, como Dios tiene que, procesarlo, usted ha de procesarlo, somos parte, somos parte de un cuerpo, les dije que también, también, no solamente estamos hablando, de que físicamente, usted se haga una rutina, usted se comprometa con usted, usted se disponga a servir, que usted esté presente, sino también, por aquellas excusas dije, también es importante, que usted se dé cuenta, de que, el cuerpo, su cuerpo, hablando de usted, de forma personal, usted tiene un corazón, y el corazón, me referí a la bomba, me referí también a su corazón, y su corazón es su alma, y le dije que su alma, tiene tres, grandes motores, la mente, las emociones, y la voluntad, y que es un porcentaje altísimo, superior al 95% de la gente, depende de lo que siente, y yo estoy convencido, de que no es fácil, no es fácil, no es fácil, porque las emociones son reales hermanos, las emociones son químicas, las emociones son, realmente, muy poderosas en el cuerpo humano, al menos con empezar a darse cuenta de esto, ya es un paso, de poder entender, sobre qué estamos hablando, las emociones pueden causarles, cualquier cantidad, de experiencias de todo tipo, y estamos hablando del cerebro hermanos, estamos hablando, del cerebro humano, a ver, cuando los cristianos, cuando los cristianos dicen corazón, se pone la mano aquí, aquí, y está bien, lo están diciendo, con todo el corazón, cuando un judío dice corazón, se pone la mano aquí, porque el corazón está aquí, el corazón es este hermanos, la bomba es esta, es que no entendí, como no entendió, que no entendió, no entendió que si usted no, gobierna su vida, y usted no pone su vida, rendida al Señor, su vida, usted mismo, usted es víctima de usted mismo, que es lo que no entiende, estoy tratando de decir, que una de las cosas, de las cuales, tenemos que darle gracias, por las misericordias de Dios, es que ya no dependemos, de nuestro cuerpo, no se acuerda, no se acuerda, que en el momento preciso, en que Dios se pone a buscar a Adán, en el huerto del Edén, y le dice, Adán, Adán, no aparece, no aparece, y, Adán, eh, sí, sí, sí, ¿qué le pasa? ¿por qué está escondido? es que ando chingo, y me dio vergüenza, pues no, no lo ha leído, eso fue lo que le contestó, ando chingo, y me dio vergüenza, ¿y desde cuándo a usted le contaron, que andaba chingo? ¿quién le dijo a usted, que andaba chingo? ¿de dónde usted sacó la idea, de dónde usted sacó, la idea, de vergüenza, de sus, que son producto de sus, alma? Ah, ¿quiere decir, que ahora lo importante, no soy yo, si no es, su corazón? Mmm, mira vos, mire que hizo Dios, mató a un animalito, hizo un sacrificio, y le puso, un traje, a don Adán, y lo vistió, ¿por qué lo vistió? porque a partir de ese día, las emociones, el corazón del ser humano, iba a ser su, líder, su Dios, su, todo. Dice casualmente Néstor, que, que la palabra dice, ante toda cosa guardada, guarda, guarda, tu, porque dice, guárdalo, es que, dice, ante toda cosa guardada, usted póngase, póngale el pecho a las manos, la Biblia dice, no le ponga el pecho, escóndalo, guárdelo, porque dé el mano, usted sabe por qué dice, cuídelo, porque ninguno de nosotros, conoce su propio corazón, usted sabe por qué dice, cuídelo, porque ninguno de nosotros, va a morirse, conociéndose, usted sabe por qué Dios, tuvo que mandar a Cristo, morir por nosotros, porque Dios sabe, el corazón que nos puso a todos, Dios sabe, lo que nos puso, y Dios sabe, que si nosotros, tuviéramos que depender, de nuestro corazón, para ser salvos, o para salvar la gente, ni salvamos a nadie, ni nos amamos nosotros, yo creo, que casi todos los aspectos, que tienen que ver con la vida, y con las cosas, están de alguna forma, están de alguna forma, reflejados en la ley judía, hermanos, están reflejados, y no se logró, no se logró, no se logró, entonces noten, que esta conversación, de esta noche de Pablo, con respecto al corazón, con respecto a presentarse, y Pablo, lo que nos está haciendo entender, es presente en sus cuerpos, ahora si, la parte física, es la que le expliqué, le comenté, le hice ver, amados hermanos, todos somos, de alguna forma, somos iglesia, cuando estamos aquí, somos parte del cuerpo del Señor, somos iglesia, necesitamos ser iglesia, pero lo más importante, es que usted necesita ser iglesia, usted necesita ser iglesia, porque si no, su vida va a ser miserable, escúcheme, agréguele a la parte de presentar su cuerpo, agréguele, si usted quiere, concéntrese, dedíquese, sométase, aplíquelo, como usted quiera, yo lo puse así, porque necesitaba acomodarle, una parte operativa, como dice la gente, una parte operativa, a la parte del corazón, pero la verdad, es lo que la Biblia está diciendo, es en donde esté, y que hace, determina, lo que usted adora, o a que usted sirve, me voy a entender, en donde usted esté, o lo que usted hace, determina, a que usted adora, o a que usted sirve, Biblia para probarlo, 13, 15 Hebreos, así que, ofrezcamos, vean que pesado, así que, ofrezcamos, siempre a Dios, por medio de, siempre a Dios, por medio de el, sacrificio de alabanza, alabanza, es decir, fruto de labios, que confiesan su nombre, usted puede entender, que esto es otro nivel, porque una gran mayoría de personas, personas, venimos a la iglesia, venimos a engregarnos, ay Señor bendito, ay sí, ay Dios mío, que me ayude, porque, ay, y era cantar hoy, ay no Señor, yo pensé que no iba a llegar, si hay gente que viene, perdón, no está mal, no está mal, necesitar de Dios, pero también la Biblia dice, que Dios espera de usted, que ofrezca algo, y algunos ni del cuerpo damos, me voy a entender, es un estreñimiento espiritual, perdónenme, se llama estreñimiento espiritual, no hay forma, entonces le digo a Angélica, y le digo a Mariana, párense ahí, párense ahí, ahí, párense ahí, no hagan nada, párense ahí, viendo para acá, si alguien llega, le dicen que este por el otro lado, me llaman dos días después, y me dicen, es que, no me aguanto Angélica, no me la aguanto, pero les dije que se pararan ahí, paradas ahí, quietas ahí, paradas, no tenían que hablar, nada más, si alguien llegaba, le decían, este por el otro lado, y que es lo que no aguanto, no lo soporto, perdón, usted no está entendiendo que el hecho de que usted no se aguante a Angélica, o se aguante a Pancha, o se aguante a Lola, es su proceso con Dios en la iglesia, me estoy dando a entender, alguien me está escuchando, pero lo que Dios está haciendo es procesándolos de a mí, lo que pasa es que hay un orden, y una sola regla, no es lo que el pastor diga, es lo que la palabra dice, vea, primera de Corintios 6.20, Pablo a los Corintios, porque Dios los compró a un alto precio, si usted no me entendió en las misericordias, entienda el asunto del concepto del precio, Dios los compró a un alto precio, por lo tanto, anteriormente, ¿qué dijo?, ¿qué dijo?, ¿qué dice anteriormente?, ofrezca, ¿qué dice?, ofrezca, siempre, ¿qué dice el Corintios?, ¿qué dice el Corintios?, honre, a Dios con su cuerpo, pero este que viene es de muerte lenta, es de muerte lenta, eso es de otro planeta, es algo, pero véalo, primera de Pedro 2.55, Pedro, Pedro en un lanzado, bocón, hasta decir basta, vea a Pedro hablando por medio del Espíritu Santo, y usted son las piedras vivas con las cuales Dios edifica su templo espiritual, Dios, además, son, vení, vení, por favor, ahí nos dice, son pobrecitos que fueron sacados, es cierto, sí lo somos, hemos sido sacados del fango, hemos sido sacados de un montón de cosas, todo, sí, sí, sí lo dice, pero Pablo dice, Pedro dice, desde la inspiración del Espíritu Santo, además, son sacerdotes santos, por la mediación de Jesucristo, ustedes ofrecen sacrificios espirituales que agradan a Dios. Los espero de hoy noche para explicar cómo se presenta el cuerpo, qué mal le vamos a entrar a eso, Dios libre, nos matamos, tenemos que digerir esto, hermanos, tenemos que digerirlo, ¿por qué tenemos que digerirlo? Porque Dios cuenta con nosotros, y Dios está esperando, a ver, a ver, ¿cuál parte de ofrecer no estamos entendiendo? ¿Cuál parte del sueño de sacerdote no estamos entendiendo? O es que, perdón, ustedes piensan que yo, yo soy psicólogo, pero en mi tiempo libre yo soy pastor, perdón, ¿qué es lo que he hecho en mi vida? Es esto. Perdón, si es tienen que estar sentado aquí y me dicen, yo soy un abogado, que los fines de semana, porque las series empiezan a las nueve de la noche, voy a algún lugar a ir. No, no, perdónenme, además son sacerdotes santos por la mediación de Jesucristo. Ustedes ofrecen sacrificios, cuando oí esa palabra yo dije, mi hombre, seas bárbaro, ofrecen, ¿qué ofrecemos? Si casi que llegamos a veces en estado de catatónico, de Señor. Claro, el texto, les voy a hacer un adelanto así rápido, dice, parte C presenta en sus cuerpos como sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es el verdadero culto, lo vemos hoy en noche, si se portan bien y vienen. Bendito Dios, te damos gracias en esta noche.