The key principle for auditors is independence to ensure impartiality and objectivity. Auditors, whether internal or external, should strive to be as independent as possible from the activity being audited. They must avoid bias and conflicts of interest, maintaining objectivity based solely on evidence. While challenging for small organizations, efforts should be made to eliminate bias and promote objectivity in audits. It is crucial for audits to be independent, impartial, and free from internal influences. Auditors should be distant from the audited activity whenever feasible to uphold these standards.
El principio de la independencia es clave para que el auditor pueda comportarse de la forma más imparcial posible y objetivo durante la auditorÃa. La base para la imparcialidad de la auditorÃa y la objetividad de las conclusiones de la auditorÃa se basa en este principio. Los auditores deberÃan ser, en cuanto se pueda, lo más independiente posible de la actividad que se está auditando, sean estos auditores internos o auditores externos. Pero, como decÃamos anteriormente, no deberÃa ser juez y parte.
Y en todos estos casos deberÃa actuar de una manera libre de sesgo y conflicto de interés. Para la auditorÃa interna, esto es realizado por personal de la propia empresa, los auditores deberÃan ser independientes de la función que se audita, si es posible, que no sean de la misma área, que no sean del mismo proceso, que sean de otro proceso, de otra área, de manera que puedan mantener esa independencia. Los auditores deberÃan mantener la objetividad a lo largo del proceso de auditorÃa para asegurarse de que los hallazgos y las conclusiones de la auditorÃa están basados sólo en la evidencia objetiva de la auditorÃa, no en juicios, no en percepciones, no en apreciaciones personales.
Para las organizaciones pequeñas puede que esto no sea posible, que sea un poco más complejo, que no haya tanta gente como para que puedan venir de otra área a realizarle, por ejemplo, una auditorÃa interna. Y que sea más complicado que los auditorios internos sean completamente independientes de la actividad que se audita. Pero deberÃan hacerse todos los esfuerzos para eliminar el sesgo y fomentar la objetividad. Aquà no es que perder de vista, de mirada, la importancia que tiene que la auditorÃa sea independiente, que la auditorÃa sea imparcial, que la auditorÃa tenga una base suficiente para no emitir juicios ni esté influenciada o influida por cualquier tipo de situación que se vea en el interior de la organización.
Asà que, mientras se pueda, realizar y obtener auditores lo más alejados del proceso de la actividad que se está auditando, mucho mejor.