Don MartÃn Torres, a war veteran with declining mental health, is living in a humble home and receiving assistance. He is dissatisfied with the food and feels neglected by his caretaker, Violeta. Don MartÃn insists on using an electronic device for studying, causing tension between him and Violeta. Later, Don MartÃn asks Violeta to check if the door is closed properly as he feels it has been opening at night. Despite Violeta's reassurances, Don MartÃn remains concerned. Eventually, Don MartÃn's heart stops beating, and Violeta calls for help.
Todo se devuelve en esta vida. Todas las acciones que realizamos serán nuestra sentencia después. Este es el hilo de la historia que verán a continuación. Se desarrolla en la vivienda humilde de Don MartÃn Torres, un veterano de guerra que ha necesitado de asistencia debido a que poco a poco su mente ha ido desvariando producto de lo vivido en los campos de batalla. Ok. Vamos a ver, Don MartÃn. Ya estamos casi listos para almorzar. Por favor, con cuidado, vamos a la mesa.
No tengo hambre. Aquà siempre es la misma comida. Estoy harto. Pues esa es la comida que le hace bien. Pero no se preocupe. Le tengo un premio para después del almuerzo. Pero solo para después del almuerzo. ¡Oh! Ya llegó. Hola, Violeta. ¿Qué más? ¿Ya comió el viejo? Don MartÃn, sÃ. Ya está comiendo. No sé por qué lo tratas asÃ. ¿Acaso tú no vas a llegar a viejo? Todo se devuelve. SÃ, sÃ. Tu charla moral. Dejémosla para otro momento.
Listo, Don MartÃn. Llegó Violeta. Por favor, cómase todo. Y ya sabe, el premio es solo para después del almuerzo. El premio es solo para después del almuerzo. ¡Dame el pan! ¡El pan, muchacho! ¡El pan! ¡Dame el pan! ¡El pan, muchacho! ¡El pan! Ese aparato nomás te hace un inútil. Ahà estás poniendo atención a esa pantalla y no a mis necesidades. Ya, ya. Disculpe. Estaba investigando algo para mi tarea. Aquà tienes. ¿Cuál tarea? Tu única tarea es cuidarme.
Y que para eso te pago. SÃ, pero mis horas libres estudio. Ya le expliqué que estudio a través de este aparato. Pues ahora no es tu hora libre. Asà que apágalo. Cuando ya sea la hora de dormir, me llevas a mi cama y haces lo que se te antoje. Ya me quiero acostar. Llévame a mi cama. Ya, a ver, párese. Ten cuidado que después si se cae es un problema para mÃ. Cierre bien la puerta. Hace dos noches que no me siento bien y se abre.
Pero con este ojo no puedo ver bien y menos en la oscuridad. No sé si se abre o son figuraciones mÃas. De nuevo. Tienes que acercarte. De lejos no se escucha. Cierre bien la puerta. Hace dos noches que siento que se abre. Pero con este ojo no puedo ver bien y menos en la oscuridad. No sé si se abre o son figuraciones mÃas. SÃ, señor. La cerré bien. Aparte, yo no he escuchado nada. Porque seguramente estás dormidota.
AsÃ, ¿cómo me vas a ayudar si me pasa algo, eh? Ya, ya. Buenas noches. Que descansen. Ya, ya, ya. Fatigada. Dale. Dos, tres. Ya, ya. Exacto. Dos, tres. Ya, ya. No. Dos. Dos, tres. Ya, ya. Buenas noches. Que descansen. A mà ponme. Ya. Dos, tres. Ya, ya. Buenas noches. Que descansen. De nuevo. Dos, tres. Ya, ya. Ya, ya. Estás fastidiada. Vamos. Ya, ya. Ya, ya. Exacto. AsÃ. Ya, ya. No. Última oportunidad. Ya, ya. Buenas noches. Que descansen.
Dos, tres. Su corazón, su corazón dejó de latir. ¡Su corazón! ¡Su corazón dejó de latir! Dos, tres. ¡Su corazón! ¡Su corazón dejó de latir!